Capítulo 1: Desde un inicio.
La sangre, el lugar olía aquella sustancia... a sangre humana fresca y la habitación no está muy bien que digamos. Teñida de aquel color carmesí nada de aquel pequeña habitación se salvaba de aquel color, en el piso se veía muchos cuerpos ya sin vida hasta el punto en que había algunos sin alguna extremidad del cuerpo. Todo y cada uno de los cuerpos tenia graves heridas dando a entender que antes de morir tuvieron mucho sufrimiento y agonía, todo era tapado por el negro de la oscuridad ya era de noche lo sabias al ver aquella luna que era la única testigo de esa masacre total como a la vez en el centro del lugar se podía ver un persona de pie con una katana en su mano tenida también del color de la sangre, esa persona era un simple niño entre todo cuerpo muerto sus cabellos celestes con la mezcla del rojo carmesí como todo su cuerpo lo estaba y sus ojos se veían maravillados al ver todo esto adornado con una sonrisa tétrica. Miro todo su alrededor para después irse por la única puerta que existía de aquel lugar, sin mirar atrás el salió.
*Días después··-·-·-·*
"Hoy en las noticias se ha encontrado el lugar donde experimentado drogas con niños pero lo más impactante que se vio en la habitación de donde estaban encerrados los menores encontrando muertos a todos, nadie sabe quién lo hiso...aún no se sabe quién es el culpable hasta ahora están haciendo las investigaciones"
Decía las noticias en un pequeño restaurante, la dueña veía como se llevaba los cuerpos muertos de los criminales hasta que escucho una melodiosa voz, dirigió su mirada enfrente encontrándose con un dulce niño de pelos celestes y ojos del mismo color con ropas algo rasgadas.
-¿Necesita algo jovencito?.-dijo amablemente.
-Q...quisiera una malteada de vainilla y un pastel.-apunto donde estaba lo dicho y la joven lo hiso, al entregarlo el niño le dio dinero para el instante irse.
-Que niño más extraño pero es lindo.
A lo lejos el niño sonrió al ver que la joven decía, se dispuso a comer lo comprado pero antes buscar su arma no muy lejos de allí, para su suerte escucho una conversación ya decidiendo donde iba a vivir; sin que ellos se diera cuenta los siguió en todo su camino memorizando todo el camino hasta encontrar una casa de dos pisos muy bonita. Agarro bien su arma y la oculto, se alejó no mucho para comer y pensando en un plan para matarlos dentro de la casa; todo listo decidió atacar en la noche siempre mirando por todos los lados pero una voz escucho.
[Jajaja falta poco lo sabes Tetsuya]
-Cállate.-dijo el ahora identificado Tetsuya.
[Vamos no digas que no te gusto matar a los desgraciados]
Ante aquella voz en su cabeza sonrió divertido.-Tú sabes que sí.
[Ahora tendremos un hogar? Los mataras?]
-No debe haber testigos.-le dijo al aire.
[Je~ vamos a divertirnos con ellos]
-No, no quiero que la casa se ensucie con esa sangre después tendré que limpiar.-se llevó su mano a la cabeza y se tomó su cabeza tratando de bajar un punzante dolor.-Maldición aún duele.
[Teniendo en cuenta que ese bastardo te golpeo con un bastón es de entender]
-Sabes que, déjame pensar la gente me está mirando al hablar solo.-dijo en susurro.
[Está bien, está bien como quieras]
Al no escuchar aquella voz en su cabeza suspiro para luego cerrar los ojos y pensar en cómo lograda su cometido, sintió un escalofrío dando entender de que ya se estaba haciendo de noche, sorprendiéndose por aquello porque no si dio cuenta de cuánto tiempo pasó sin darse cuenta. Se levantó del suelo y escondió su arma para luego irse hacia su pronto hogar, se desordenó más su cabello y toco la puerta; abrieron la puerta después de segundos siendo una mujer castaña y ojos negros.
-Oh un niño muy lindo ¿Que necesitas?.-le pregunto la mujer.
-L..Lo siento p..pero ¿P..puedo hacer una llamada a casa? N...No sé dónde estoy y quiero a mis padres.-dijo con voz lastimera, triste y con ojos acuosos actuando como un niño perdido y asustado.
-Claro, pasa.-se hiso a un lado para dejarlo pasar.-Amor mira el niño está perdido ¿Por qué no le dejamos hasta que sus padres vuelvan?.
-Eh?.-se acercó un hombre de cabellos negros y ojos verdes.-Por supuesto ¿Cómo te llamas pequeño?.
-Ehm me llaman Tetsuya.-dijo tímido y se sonrojo.-Puedo ir al baño?.
-Si ven te llevo.-la mujer tomo la mano del menor y lo dirigió al baño y sin nunca darse cuenta de lo que pronto le pasaría a ella y a su esposo.
-G..Gracias.-cerro para luego abrir la ventana de aquel cuarto sacando de allí su katana sonrió divertido, abrió esperando que no hubiera nadie y no estarlo sale con sigilo hacia la cocina donde se oía la voz de la mujer.
Con cuidado de no ser sorprendido llego viendo a la mujer dándole la espalda "Perfecto" pensó para sí y sin dudar en ningún momento entierra su arma justo en el corazón de la joven que no pudo gritar por la sorpresa y cada vez Tetsuya enterrado más y más su espada haciendo que segundos después muriera la mujer, sin cuidado saca la katana para luego escucharse que algo caía; tenia sangre en la ropa pero no le importa con una sonrisa loca se dirigió hacia la sala principal donde está el hombre viendo televisión sin darse cuenta de lo que pronto le sucedería a él, Tetsuya enterró la katana en la cabeza haciendo su muerte inmediata. Dos cuerpos muertos y solo una persona lo hiso, y aquella persona maravillado empieza a cantar a lo que venía a su mente mientras con un cuchillo descuartizaba el cuerpo muerto de la mujer y de vez en cuando reía como un maniático disfrutando cada momento.
[Hay que borrar evidencia]
-Lo sé~ jajajajaja fueron una presa fácil.-puso un puchero al hacerlo dejo los órganos de la mujer al lado.-Ah al final igual debo limpiar que mal.
[Pero tenemos un hogar]
-Cállense.-escucho otra voz en su cabeza.
Luego escuchaba solo 'descuartiza' de muchas voces y sonrió tétricamente haciéndole caso a las voces en su cabeza al ver que ya tenía listo todo el cuerpo de la mujer busco bolsas estaba empapado de sangre tibia pero no le importaba al contrario lo disfrutaba, hecho lo que supuestamente fue un cuerpo en hace momentos atrás y hacer lo mismo con del hombre, con esfuerzo los saco y los tiro al bote de basura, regreso y limpio donde había ensuciado con ese rojo carmesí. Después de limpiar aquel piso decidió ir al baño nuevamente a darse una ducha disfrutando de aquello y reía de vez en cuando.
[Jejejeje por fin saliste vivo mocoso]
-Cállate.-dijo el pequeño frustrado.-No quiero oírlos no por hoy.
Luego de ponerse sus manos en los oídos como si quisiera callar aquellas voces, al tener un buen rato en silencio se tranquilizó para luego suspirar y volvió a concentrarse en su baño, estuvo un buen rato en aquella tina hasta que el agua se volvía fría, tomo una de las toallas y ponérsela en la cintura para salir e investigar en las cosas de la parejita para encontrar algo de ropa para él y para su buena suerte entre los cajones ropa de niño se puso unos short y una camiseta, feliz por eso se dirigió hacia la cocina, busco comida pero verifico que tendría comida hasta terminar el mes y eso era buena, saco unas galletas. Se fue a sentar en el sofá tranquilamente a ver televisión un buen esto.
-Ahora necesitó dinero.-se dijo.-Al buscar encontré mucho y al parecer esos dos trabajaban podría sacar su cuenta con sus firmas.-sonrió un poco.-Tengo que buscarme un apellido, ¿Cuáles eran las de estas personas?.
Se levantó del sofá para ir a buscar los mismos papeles que había visto sobre un mueble, revisó todo hasta que sonrió.
-Así que se llamaban Kuroko Sara y Kuroko Enríquez, su hijo murió en un accidente hace poco y eran millonarios.-leía en voz alta, busco el nombre de aquel niño para sonreír irónico.-Las cosas van a mi favor, tengo suerte de que su hijo se llamaba Tetsuya. Creo que ya sé que hacer.
[La suerte que tienes mocoso]
[Jajajaja]
Frunció un poco el ceño al volver a oírlos, suspiro y bostezo cansado por aquel día, con pereza hacia la cama de sus víctimas, cómodamente se acostó y se durmió rápidamente. Con los rayos del sol entrando por las ventanas dando a la cama donde estaba un pequeño peli celeste muy cómodo como muy bien dormido pero con aquellos rayos de sol tuvo que abrir con pesares sus bellos ojos celestes para bostezar y sentarse en la cama y estirar sus brazos.
-Que flojera.-dijo adormilado para luego salir de la cómoda cama e ir a la cocina.
[Sangre~ Sangre~]
Oía aquellas voces de nuevo que desde hace bastante tiempo oía tenía solo 7 años ya y las oía desde que querían experimentar en él no se acordaba si antes o después de eso, suspiro al recordar aquello, comía su desayuno tranquilamente hasta que escucho como alguien tocaba la puerta, sorprendido agarró un cuchillo para esconderlo detrás de él al abrir la puerta vio una joven mujer frente a él.
-Buenos días aquí vive la familia Kuroko?.-pregunto la joven.
-Sí, así es ¿A quién buscan?.-le pregunto tímido.
-Oh lo siento, soy la hermana de tu padre, habíamos perdido el contacto pero hace poco nos volvimos a encontrar ¿Esta?.
-Oh así que es usted quien me va a cuidar.-dijo Tetsuya.
-Eh? A qué te refieres?. –pregunto muy confundida.
-Mis padres salieron por el trabajo por un mes así que me pidió decirle a usted que si me podía cuidar.-le mintió.
-Bueno me gustaría hacerlo pequeño.
"Ya cayo". Pensó Kuroko para sí mismo, al principio la joven había caído en la trampa de Kuroko y siempre que el supuestamente salía a jugar iba matar tratando de callar aquellas voces de su cabeza, los tiempos pasaban como los años también Kuroko era inteligente hasta que cumplió 14 la tía se daba cuenta de que ya sucedía algo porque desde que cuidaba a Kuroko jamás veía a su hermano y cuñada dándole curiosidad, Tetsuya se daba cuenta de ese hecho para luego sonreír un poco debía matarla antes que descubriera la verdad de las cosas.
Una noche había salido con ropa bastante linda para ir a un bar, entre aquellos pudo ver a un abogado sonrió para sí y acercarse a él.
-Hola.-saludo llamando la atención del hombre sonrojándolo.
-H..hola muchacho.-decía con voz provocativa haciendo que Kuroko mostrada una sonrisa.
-Puedo preguntarle algo?.
-Dime, si tienes un problema te ayudare soy un reconocido abogado.
-Un abogado excelente!.-lo abrazo emocionado.-Mire quisiera poder abrir la cuenta de banco de mis fallecidos padres pero como soy menor de edad no puedo.-dijo con tristeza.-Mi tutora quiere quitarme ese dinero pero no sé qué hacer.
-Bueno si tienes un testamento donde te dan todo a tu nombre puedo hacer que adelanten el proceso y hacer que seas independiente.
-En serio lo haría señor?!.-dijo emocionado, "ya encontré a mi títere je~"
-Por supuesto, solo necesito el testamento de ellos y tu credencial para hacerlo pequeño, no demoraría más de una semana o menos.
-Waaa gracias.-se levantó de su asiento para sentarse en las piernas del hombre sorprendiéndole.-Me habían negado mucho eso y hoy había renunciado a aquello, tengo el testamento aquí.-saco de su bolsillo aquel papel.
-Lo haré en pocos días ten te doy mi número y nos comunicamos.-se intercambiaron los números.
-Gracias, debo irme, lo llamare.
Kuroko al salir sonrió contento su plan salía perfectamente al llegar a su casa, saludo a su cuidadosa, aquella mujer era muy despistada, la muerte de los Kuroko después de meses se dieron por muertos y como jamás cambiaron el testamento que era dar todo sus ahorros como su empresa muy reconocida a su único hijo que nunca supieron que había muerto, Kuroko tuvo una visita de todos pero jamás la hermana de aquel hombre supo las cosas, también con el tiempo se ganó el cariño de la familia de su supuestos "padres" engañaba pero era eso o asesinar más de la cuenta, eso sí porque cuando salía en sus días de juegos o a juntarse con sus "amigos" iba asesinar a alguien cuando las voces gritaban "Ese" "Mátalo a él/ella" entre muchos, supo que callaban por largo tiempo si les hacía caso cuando ellos elegían a su víctima y él también le encantaba la elección, muchos le decían que tenía la cara de 'poker face' y baja presencia dándole mucha libertad y a la vez nunca lo pillaban una sonrisa se le escapó de sus labios al ver el correo electrónico había sido aceptado en Teiko, "Esto será divertido" pensaba ya había pasado 2 días desde que había hablado con el abogado.
-Genial lo logre.-se dijo a sí mismo.
[Aburrido~]
-Tks.-se enojó al oírlo para después meterse en otro programa de software donde aparecía en la pantalla pidiendo contraseña. La escribió para salir muchos archivos del gobierno o de empresas como la de él.
-Jo~ las cosas van bien en la empresa, pero alguien también la quiere...mm~...Ah los Akashi eh~.-puso una mueca al ver los nombres Akashi.
Sintió que su tía subía las escaleras apretó unas cosas para luego salir en la pantalla nuevamente su correo justo en el momento que entraba la mujer.
-Tetsu tienes una llamada.
-Gracias Tía.-su voz monótona como fría para salir de su cuarto seguido por la mujer castaño, tomo el teléfono para esperar su voz.-Hola?
-*Hola Kuroko-kun soy el abogado*
-Oh siento mucho por no preguntar el nombre.-dijo apenado.
-*Cierto mi nombre es Takao Yoshido, bueno a lo que venimos esta todo arreglado con el testamento solo falta tú firma y todo arreglado.*
-En serio Takao-san?!.-dijo un poco alegre.
-*Si, solo déjalo en mis manos después de todo tengo mis contactos no demore mucho en que lo aprobaran como iba tú situación y lo aceptaron.*
-Entonces nos podemos juntar en ese mismo bar Takao-san?.-dijo con voz un poco provocativa ya que su tía gana salido a comprar.
-*S..si mañana?*
-Mou mañana no puedo pero pasado mañana sí. ¿No le incomoda en la noche?.
-*No, entonces nos vemos pasado mañana.*
Al corta sonrió de lado al ver que todo iba bien como él quería. Se dirigió hacia su cuarto nuevamente para acostarse sobre su cama y ver su computador en el escritorio, lo atrajo a él para teclear algunas cosas antes de bajar la pantalla y guardarlo para acostarse. A la mañana siguiente como estaba en vacaciones y como hace poco ya tuvo sus 14 años haría lo que debía ser 'asesinar a su ultimo testigo' suspiro al despertar por la alarma, salió de su cómoda cama para ir a bañarse y vestirse cómodamente, al estar listo bajo para ver que su tía cocinaba el desayuno, disfruto la comida para salir de casa con una pequeña mochila donde llevaba su computadora portátil para irse hacia un parque e irse a sentar bajo un árbol.
Prendió su computadora y abrir unos archivos.
-Veamos Akashi, Akashi.-decía levemente molesto hasta que encontró lo que buscaba.-Solo padre e hijo, su hijo tiene mi edad y va a ir a Teiko, vaya tengo suerte.
[Quiero sangre]
[Mata a Takao Yoshido, Mata a Takao Yoshido]
Repetían y repetían lo mismo una y otra vez 'mata a Takao Yoshido' Kuroko se tomó la cabeza frustrado por las voces.
-Lo haré, lo haré pero cállense mañana lo haré.-dijo en voz baja sintiendo que las voces disminuían.-Que fastidio.
Suspiro para guardar sus cosas y pararse de aquel lugar, camino sin rumbo hasta que encontró un lugar para comer, pidió una malteada de vainilla y una hamburguesa, se sentó para abrir nuevamente su computadora y seguir con su búsqueda suspiro un poco entre el popote de su bebida; siguió con otra cosa hasta que sintió que alguien se sentaba frente de él un chico moreno, alto y de cabellos azul oscuro como sus ojos.
-Que bien que este lugar este desocupado.-dijo esa persona.
-Ehm...etto.-Kuroko no sabía que decir pero al soltar su voz llamo la atención del chico que se asustó.
-Tú desde cuando estás aquí?!.
-Antes que tú.
-Eh?.-al ver las cosas se dio cuenta que era verdad se rasco su mejilla algo avergonzado.-Lo siento, pero no te vi.
-Siempre pasa.-se encogió de hombro.
-No te molesta?.
Kuroko negó ante la pregunta viendo la sonrisa de aquel muchacho.
-Gracias me llamo Aomine Daiki y tú?
-Kuroko Tetsuya un gusto Aomine-kun.-se presentó con voz monótona.
-Bueno en que secundaria vas a ir?.-le pregunto Aomine con un poco de curiosidad.
-Voy a ir a Teiko y tú Aomine-kun.-apago su computador para guardarlo no quería que un desconocido viera lo que hacía.
-Que coincidencia yo igual.-dijo sorprendido.-¿Juegas un deporte?
-Juego un poco el baloncesto pero no soy bueno.
-En serio yo igual juego baloncesto.-sonrió recibió una llamada para volver a verlo.-Me debo ir, espero vernos en la bienvenida Tetsu.-se levantó para irse del lugar.
Kuroko no pudo evitar soltar una pequeña sonrisa aunque era antisocial pero no le molestaba la presencia del moreno esperaba que esas voces no dijeran lo que pensaba.
[Tetsuya tiene un amigo]
[Ya se nos volvió sentimental]
[Quiere llorar jajaja]
Y allí estaba, suspiro pesadamente para seguir con su malteada e irse ya que era bastante tarde, regreso a casa para cenar e irse a dormir ya tenía todo planeado para mañana sólo faltaba realizarla, levanto tarde, se bañó y vistió veía a la mujer algo nerviosa y eso no le gustaba, no hiso nada en toda la tarde hasta la noche que se puso una sudadera negra y unos short con botas donde tenía una daga.
Al salir se fue donde se juntaría con aquel hombre, no demoro en llegar como en encontrarlo ya que era bastante fácil, al acercarse Yoshido explicaba las cosas que sucederían y los documentos ya completamente legales Kuroko firmo donde le indican. Estuvieron un buen rato conversando hasta que Kuroko vio la hora se hiso el sorprendido alegando que si podía acompañarlo hasta su casa ya que era muy tarde para él ir solo en la noche, Yoshido ya algo borracho acepto, caminando en aquellas calles vacíos con solo la luna llena en esa noche Tetsuya lo guió a un cajellon excusándose que era un atajo lo tomo de mano para empujarlo en la fría pared, el hombre sorprendido miro expectante al joven con algo de picardía le tomo la cintura y se acercó a su cuello mientras tanto Kuroko ya acostumbrado por años e experiencia en sus asesinatos solo levanto su pierna derecha como si le siguiera el juego saco con lentitud la daga escondida en su bota y sin piedad ni resentimiento se la incrustó por la espalda al hombre repetidas veces, Yoshido escupió sangre por la acción como a la vez se arrodillaba en el suelo dándole una oportunidad a Kuroko para patearlo en el estómago dando gritos de agonía, de sufrimiento, pedía ayuda pero Kuroko lo ignoraba; y sentarse dejando sus piernas a cada lado en el mismo lugar; levantó sujetando el arma en su mano para apuñalarlo en el corazón, pecho y brazos al ya muerto cuerpo, sin estar satisfecho le abrió el estómago sin ocultar su ojos brillando por la sed de sangre, reía un poco por como cortaba y cortaba a su ya fallecida víctima, su sonrisa adornaba en aquel lugar al ya aburrirse con el cuerpo bañado de sangre se llevó los papeles que necesitaba dejando allí el cuerpo pero sin olvidar su marca personal una flor acónito, que significa que deseas mi muerte.
Y no era falso pero eso le caracterizaba muy bien, sonreía mientras iba caminando a casa con un poco de sangre en su ropa pero con la sudadera no se notaba mucho y en su mano jugaba un poco con la daga bañada en sangre, le gustaba más la katana pero no se quejaba sabía utilizar pistolas como cuchillos, espadas, etc. Llego a su destino a pasos lentos y con aun su sonrísa algo loca abrió la puerta encontrándose con su 'Tía' con los documentos de la antigua familia, sin que ella se diera cuenta al ser silencioso se ganó detrás de ella poniendo su daga en el cuello de aquella mujer asustándola como sorprendiéndola.
-¿Quién eres realmente?.-pregunto la mujer con algo de miedo en su voz.
-Vaya, vaya por fin te das cuenta que no soy Kuroko Tetsuya eh~ 7años y recién te das cuenta.-dijo con sarcasmo para ir a su oído a susurrarle.-Soy un asesino uno muy reconocido por cierto.
-"La sombra asesina".-dijo con voz baja.
-Si~ quieres saber que les paso a esta dulce pareja~?.-tenía una voz juguetona divertido al verla temblar entre sus manos, sabiendo que no viviría.
-...L..los m..ma..mataste.-so voz quebrada y sus lágrimas correr por sus mejillas al ver que jamás volvería a ver a su hermano.
-Si fueras niña te daría un dulce por saberlo pero no lo eres.
-¿Que me vas a ser?.-pregunto temerosa.
-Dirás que no te haré Tía~.-remarco aquella palabra para reírse al ver su expresión.-Ya no te necesito más, ya tengo lo que quería ahora falta votar lo que ya no es de utilidad...como tú.-presiono aquel arma en el cuello.
-P..por favor no me mates.-rogaba.
-En serio crees que te dejare ya sabiendo lo que sucedió en esta casa, me crees idiota?.
-...
Kuroko sin más enterró la daga en una movimiento rápido matando con suma rapidez a la mujer salpicando un poco los muebles y en su cara, la soltó dejando caer el cuerpo suspirando al verla en el suelo, se sacó la capucha y buscar una bolsa de basura debía sacar la basura frente a sus ojos, después de botar el cuerpo, limpio la sangre para irse a acostar pronto tendría que ir a la secundaria.
Las cosas que pasaran más adelante le sorprenderá a Kuroko y como algo que él jamás esperó llega a él, las voces no cesaran como tampoco su ganas de matar. Él no aceptada lo que le prepara el destino menos con las personas menos esperaras, de a poco el frío corazón de el mejor asesino, ya no tendrá la soledad de compañía solo esperemos que esas voces dentro de su cabeza no acabarán lo que pronto tendría.
Continuara...