Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Two sides por urumelii

[Reviews - 4]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

Lo siento, tenía que sacarlo de mi sistema. Si pudieran comentar que les pareció los amaré por siempre. 

Uruha

 

Se sienta y me mira, como si pudiera leer su mente, lo odio. No lo odio, odio esa capa de absoluta frialdad que parece rodearlo cada vez que tenemos que hablar de nuestros sentimientos; está bien lo admito, yo comencé esta discusión. No tengo una excusa para lo que pasa cada vez que le pido que me demuestre lo que siente.

 

Estamos juntos y para mi debería ser suficiente, lo sé. ¿Será que exijo demasiado? A veces me pregunto si soy yo él que está mal. Está conmigo, me lo repito una vez más mientras contemplo su mirada, su cabello negro y esa figura que me volvió loco desde el principio, aunque no me atravería a aceptarlo.



Pasé años convenciendome de que no me atraía, que no me gustaba para nada mi compañero de guitarra, que sólo me gustaba verlo de vez en cuando y que lograba hacerme sonreír simplemente porque entendía como hacerlo. Pasé otro año estupidamente enamorado de él, dejando que me lastimara sin decir nada ¿por qué? al principio estaba con alguien más, despues: odiaba lo que tuviera que ver con una relación.

 

Pero es que el gran Aoi Shiroyama siempre tiene la razón y si él dice que no necesita de nadie, es la verdad. Y así casi un año después de haber roto su relación con Shou y de acostarse con quien sabe cuantos va y me pregunta qué hacer si el cable de su habitación no funciona. Yo que llevaba meses debatiendome si lo encontraba terriblemente atractivo o sólo estaba confundido hice lo que cualquiera: lo ignoré. Treinta días de drama después, me disculpé y acepté un café de su parte.

 

Nos acostamos, como era de esperarse.

 

Un año dejando que me tocara, me besara y me acariciara como si no hubiera otra persona en el mundo para después hablar de lo mala persona que era Shou por haberlo dejado...Hasta que un día no pude más y lo mandé a la mierda. No hablamos durante mucho tiempo, componer era difícil e incluso lo vi distanciarse de la banda, y aunque lo único que pasaba por mi cabeza era hablar con él, tenía que ser fuerte e ignorarlo. Hasta que por fin un día se acercó a mi, me intentó besar y me dijo que quería estar conmigo.

 

Así hasta ahora, y con esa relación de comienzo tan complicada uno esperaría que todo fuera miel sobre hojuelas. Pero aquí estamos sentados uno frente al otro sacando chispas por los ojos por una discusión que ni recuerdo como empezó, pero si recuerdo lo último que dijo, que yo dije.

 

-¿Por qué es tan importante que te tenga que estar diciendo lo que siento? estoy contigo, por qué no te basta - casi gritó encendiendo un cigarro.

 

“Porque tengo miedo de perderte” quise responderle pero no pude. No quería que supiera que en realidad soy tan frágil como el cristal y tan inseguro como una colegiala de quince años si de nuestra relación se trata, no quería decirle que me dolía aún escucharlo hablar de Shou cuando no estábamos juntos y no saber si sentía algo así por mi ahora que ya eramos pareja. Que muy en el fondo pensaba que no, que necesitaba esa reafirmación de su parte para no sentirme perdido, para no sentirme en la sombra de lo que él juraba era el amor de su vida. Sin embargo escogí guardar silencio, darle la razón y sentirme como un estupido por pedirle que me dijera aunque sea algo bonito.

 

-es suficiente- terminé por contestarle. No lo era.

 

-así soy y no voy a cambiarlo, si no te parece tal vez no deberías estar conmigo - su tono fue serio y eso era precisamente lo que me temía.

 

Quise enfurecerme, soltarle un puñetazo y gritarle que no era justo, que no era justo que me pidiera con tanta vehemencia que lo entendiera cuando no quería entenderme a mi, que así era él y yo debía aceptarlo o simplemente no seguir con esto. Quise decirle porque tampoco podía aceptar que yo quería una muestra más de cariño, que yo así era, que tampoco quería cambiarlo. Pero escogí el silencio.

 

El silencio por cobardía a perderlo y es que yo lo amo más que a nada en este mundo pero él sólo me tiene a su lado. No sé si me ama, no sé nada de lo que pasa por su cabeza y lo miro, lo miro tratando de encontrarle pies y cabeza a aquel ser humano llamado Yuu Shiroyama.

 

Y pienso, pienso las veces que me ha hecho sonreír, esas veces cuando está ebrio y me dice cosas que me hacen sentir la persona más especial del mundo, que me dice al oído que no tenga miedo porque estoy con él. Que me cantan canciones cursis abrazandome como puede para no caerse de borracho o esas veces que me hace el amor, cuando su mirada se transforma y me mira como si no existiera más nadie en este mundo que nosotros dos y yo le creo, porque en ese momento con esas acciones siento que tal vez me quiere.

 

Me arrepiento al instante de echarle pelea cuando pienso en las cosas que hace, después me entra la desesperación ¿por qué solo cuando está ebrio? ¿por qué cuando estamos en la cama? ¿qué acaso son los únicos momentos en donde valgo la pena? quiero llorar, pero no lo hago. Me da miedo que note cómo soy.

 

Finalmente alzo los hombros, así es él ¿verdad? así será siempre y yo lo amo así, lo acepté así. Un sólo pensamiento me rodea en la mente “no quiero perderte”, tanto tiempo y por fin lo tengo, si sólo necesito convencerme que tenerlo en frente es lo mejor que me pudo haber pasado.

 

Sonrio.

 

-¿vas a querer algo de cenar? - pregunto aterrorizado pues de su respuesta depende si debo seguir sintiendome en el piso o estamos listos para hacer a un lado esta conversación.

 

Me mira apagando el cigarro número diez, parece preguntarse si de verdad estoy bien o la discusión seguirá - no quiero salir - contesta seco e incluso rudo, pero esa es su manera de contestar - pero podría comer algo - saca otro cigarro - hoy no comimos nada durante el ensayo, terminé agotado y Ruki seguía diciendo no sé qué del requinto, lo único que quería era comer pizza…

 

Y sigue contandome de su día, porque la crisis ya pasó, porque el histérico de su novio ya se calmó y una vez más no tuvo que decir lo que sentía.

 

-x-

 

Aoi

 

Me mira, me mira con esos ojos que parece están a punto de llorar. Lo odio, no lo odio a él, odio esa mirada, odio esa ternura y esa expectativa que tiene sobre mi, una expectativa que espera haga levantarme y besarlo. Pero yo no funciono así, sé por experiencia propia que las cosas no se resuelven así, me gustaría, pero su mirada me hace sentir que no serviría de nada.

 

¿Por qué no es suficiente para él? saber que estamos juntos, quisiera que entendiera el esfuerzo que hago, todo lo que siento que no es fácil para mi demostrar, que con el simple hecho de que esté a mi lado con todo lo que soy de insoportable para mi es muchisimo más que cualquier beso.

 

Recuerdo haberlo visto y pensar lo mucho que me atraía, pero jamás fue algo más. Estaba hundido en un camino que al final terminaría matandome, Uruha fue el que me sacó de ahí, me hizo querer intentarlo de nuevo cuando yo creía que no había esperanza en eso tan complicado que llamamos amor. Eso no lo ve, ¿por qué no lo ve?

 

Me escucha con paciencia, puedo hablar horas interminables con él y pensar que solo pasó un minuto. Aún cuando yo encontraba pretexto para no estar con él, cada cosa que hacía, sus actitudes, su risa, su capacidad de hacerme sonreír y eso que siempre hace por preocuparse por mi, a este punto no sabría como pasar un día sin él.

 

Pero me lo tomo con calma, no quiero desbaratar y desperdiciar esto que tenemos. Porque las cosas que aprecias, que quieres contigo las cuidas, te tomas tu tiempo para prestarles atención. Soy un imbécil para demostrar lo que siento, para mi es más fácil molestarlo, tirarle una broma de vez en cuando que abrazarlo. Y al mismo tiempo no lo molesto como a cualquiera, no quiero que se rompa, me da miedo hacerlo y que se vaya.

 

No entiende lo frágil que soy, lo mucho que temo que se vaya de mi lado, y al mismo tiempo el pánico que siento cuando todos estos sentimientos llegan cada vez que lo veo. Ya una vez lo hice, le di a Shou todo lo que era y quien era, me dejó vacío y abandonado. No quiero que pase lo mismo, quiero llevarlo con calma.

 

No es tan fácil entregarse.

 

Pero lo intento, intento que cada día que pasa sepa que estoy en esta lucha con él. Por eso sigo aquí, esperando a que no se enoje, a que tome la decisión de dejarme y confirme lo que siempre he temido, que esto del amor no es para mi.

 

Sin embargo se queda mirandome, esperando una respuesta y yo no se que quiere, no me dice. No le digo. No puedo darselo, porque para mi el esfuerzo está hecho en esos mensajes de la mañana, en esas veces que me hace enojar cuando no come, cuando su auto no trae combustible y yo lo termino llevando a su casa, en esas veces que le hablo desesperado por que me escuche en cualquier hora del día. ¿Qué más quiere?

 

Y aquí estamos sentados uno frente al otro sacando chispas por los ojos por una discusión que ni recuerdo como empezó, pero si recuerdo lo último que dije, que él dijo.

 

-¿Por qué es tan importante que te tenga que estar diciendo lo que siento? estoy contigo, por qué no te basta - casi grité encendiendo un cigarro. Soy muy brusco en mi manera de hablar, no puedo evitarlo, trato de contenerme cada vez que veo como cambia su semblante al sentir que le hablé más fuerte de lo normal, cuando me muerdo la lengua y me arrepiento al instante de haberlo pronunciado. Trato de desviar el tema cada que hago alguna estupidez como aquella, tratando de no hacerlo más grande, pero a veces resulta que lo he lastimado.

 

Me protejo al instante, tratando de encontrar alguna excusa que no muestre el miedo que tengo a perderlo, él es el de la culpa, no yo. No toleraría estar equivocado de nuevo, pero me entiende y eso lo admiro.

 

-es suficiente - contesta. No lo es, sé que no y finjo que con eso está bien, que en algún momento se dará cuenta de todo lo que hago por él, que tal vez valore mi esfuerzo y la dedicación que le tengo.

 

-así soy y no voy a cambiarlo, si no te parece tal vez no deberías estar conmigo - mi tono fue serio, por dentro ansiaba desesperadamente que no concordara con la falacia que estaba diciendo. Es sólo que no quería lastimarlo, con mis modos, con mi forma insoportable de ser que el soporta diario, no sé si por loco o porque de verdad me ama.

 

Y es que lo que siento por él va más allá de lo que una persona incapaz de hablar como yo puede demostrar. Quisiera poder desinhibirme  como cuando estoy ebrio y que no me importa, que no me importa que sepa lo que siento, cuando lo veo sonreír y sé que el mundo está completo. Cuando le hago el amor y no existe nadie más en el mundo más que nosotros dos. Quiero que sienta eso, que lo entienda. Nunca es suficiente.

Finalmente alza los hombros y comprendo que se ha resignado, que ya no quiere seguir peleando aunque aún pueda ver sus ojos de profunda decepción hacia mi. Así será siempre ¿verdad? nada de lo que pueda darle será suficiente ¿verdad? quisiera decirselo, pero él debería entenderlo.

 

Sonríe.

 

-¿vas a querer algo de cenar? - pregunta como si nada de la discusión anterior hubiera sucedido.

 

Me mira apagando el cigarro número diez, estoy aterrado pues de mi depende que este torbellino de discusiones siga o se termine- no quiero salir - contesta seco e incluso rudo, me reprimo por hacerlo así, pero en algunas cosas no tengo remedio - pero podría comer algo - saco otro cigarro para tratar de alivianar la tensión - hoy no comimos nada durante el ensayo, terminé agotado y Ruki seguía diciendo no sé qué del requinto, lo único que quería era comer pizza…


Y sigue contandole mi día, porque la crisis ya pasó, porque es la única manera de no seguir peleando, porque quiero demostrarle que estamos bien y eso para mi es demostrarle lo que siento.

Notas finales:

así que....

de qué lado están?? 

perdón por el drama, solo que surgió la idea y lo escribí en una tarde. 

 

¿la verdad??

 

lloré cuando lo escribí, ya sé estoy loca T_T

un rvw??? 


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).