Era un día muy caluroso, un hombre de cabellos alborotados estaba sentado en el sofá frente a la televisión, Milk se marchó de compras con Bulma, su hijo menor estaba en el colegio y Gohan estaba en la casa vecina; su mujer estaba visitando a Mr. Satán. Estaba algo estresado, últimamente no tenía paz, pensaba en su príncipe, pero estaba enojado con él porque se había cogido a Yamcha y los vio, aunque le pidió disculpas no estaba dispuesto a perdonarlo tan fácil.
Pero como sacarlo de su mente, Ese trasero tan rico y más aún estar dentro de él, no negaba que cuando Vegeta lo hacía suyo también le gustaba, no aguantó más y se fue a su cuarto a calmar su inminente erección.
Gohan fue a buscar a su padre a ver si entrenaban juntos, tenía llaves “de emergencia” entró pero no había nadie, estaba a punto de gritarle, al oír unos sonidos en el segundo piso se dirigió allá, tan inocente y abrió la puerta, casi le da un infarto; ver a su padre con una mano en su miembro masturbándolo y la otra en su trasero, sus ojos cerrados y susurrando – Vegeta, que rico lo haces
-¡papa que haces! – estaba muy sonrojado, eso lo perturbó
El Saiyajin mayor paró en seco, estaba pálido, maldición y ya casi terminaba, su hijo le había visto en tal acto – Gohan ¿Qué haces aquí? – estaba tartamudeando
-Nada ya me voy – iba a salir, pero un agarre lo sostuvo
-Espera hijo, por favor no le digas nada a Milk – lo haló fuerte e hizo que el joven se volteara bruscamente y chocara con su desnudo cuerpo
Gohan quedó cerca, a centímetros de chocar sus labios con los de su padre, se detuvo poniendo sus manos en el pecho del frente, ese olor, ese sudor, que macho por así decirlo, perdió su conciencia y lo besó.
Al principio el mayor estaba quieto por la sorpresa, pero estaba muy caliente, °°° sólo esta vez °°° pensó y correspondió, después de empezar a invadir con su lengua la cavidad bucal de su hijo, le quitó la ropa, volteó hacia abajo, definitivamente era su hijo, que buen palo mandaba. Delicadamente con su mano lo tomo para masajearlo.
El menor no pudo evitar mandar la mano también a la entrepierna de su padre. Estaba bastante resbaloso, así se quedaron unos minutos hasta que el mayor lo empujó hacia abajo, para que lo ayudara con la boca, la situación era incomoda pero no lo dudó y se introdujo el glande en su boca, hash que agrio y a la vez dulce.
Gokú se tiró al piso formando un 69, le dio un par de lamidas al pene de su hijo y lo invito a doblarse para encontrar su entrada trasera. Escupió varias veces para luego meter el dedo índice de la mano derecha allí, nadie había perforado antes, que caliente; metió un segundo y tras esto sintió como su hijo se tensó por el dolor.
Gohan estaba muy nervioso, pero continuaba chupando el miembro en su boca – Espera – dijo su padre para luego retirarlo y derramarse fuera, su padre se sentó y con el semen untó todo su miembro, luego lo puso boca arriba y lo abrió de piernas, ahora si estaba temblando-
-Papá, prométeme que no me dolerá – cerró sus ojos y dejó caer un par de lágrimas, no esperó para introducirse aunque lo hizo lento.
-tranquilo Gohan – le sonreía pervertidamente – la primera vez duele, pero pronto gozaras.
Se empezó a mover lentamente ignorando por completo los empujones que le daba su hijo para que saliera, antes lo sujetaba fuerte para que se quedara quieto. Al final se resignó y no porque no tenía escape, sino porque su entrada le proporcionaba un placer desconocido,
Gokú miro abajo, su pene tenía un color rosa por la sangre y el semen, entonces se echó hacia adelante para abrazar a su hijo y besarlo, le subió una pierna a su hombro para que se relajara más, su mano derecha se agarró del falo para masturbarlo.
El mayor jadeaba y suspiraba mientras escuchaba al menor gemir pidiendo más, aceleró el ritmo de su mano, sus cuerpos resbalaban por el sudor y ese sonido de la penetración retumbaba por toda la habitación. No se percataron que alguien se encontraba detrás viéndolos.
Goten regresó del cole y eso no lo previeron, al llegar los vio en semejante pose, con un leve chorrito de sangre en el piso justo debajo del trasero de su hermano. Los dejó ahí y se fue desnudando y esperó a que terminaran.
-Me vengo papa – Grito Gohan para liberarse, la mano de su progenitor, recogió todo, lo llevó a su boca y se lo tragó
-Que rica leche hijo – sonrió y cerró sus ojos para darle unas estocadas más terminando dentro de él.
Cuando sus sensaciones pasaron, salió de él y se volteó, quedaron pálidos, el otro pelinegro de la casa de solo 15 años estaba parado frente a ellos y se les acercaba peligrosamente.
Se lanzó encima de su padre – esto empieza ahora – le susurro para besarlo, una de sus manos tomó con firmeza el miembro de su hermano, fue difícil que se quedara quieto ya que estaba muy sensible. Mientras él lo restregaba con el de su padre.
Los mayores estaban bastante sorprendidos, pero bueno una más que mas daba.
Gokú agarro el falo que se restregaba en su abdomen, pero el otro abandonó la posición para ayudarle a su hermano con la boca, de esa manera lo obligo a cuadrarse detrás de él. La mano se metía en medio de sus piernas para masturbarlo,
Al ver para abajo, el de cabellos alborotados sangró por su nariz al ver la depilada estreches de su hijo menor, se veía provocativa y se le estaba ofreciendo en bandeja de oro moviendo sus caderas.
Metió dos dedos en su boca para ensalivarlos y los introdujo, pero esta vez su hijo no se indispuso.
°°° Ese Vegeta, maldición se la haré pagar °°° como vio que entraba fácil reemplazo sus dedos por su enorme miembro, se hundió sin problemas se movió rápido, como su miembro estaba aún lubricado se sentía en la gloría, tibio y sin problemas.
Gohan se levantó para hacerse detrás de su padre y lubricarle su entrada, pues también quería hundirse, pero él lo detuvo con su mano °°° eso solamente lo tocara Vegeta, sino jamás me lo perdonará °°° estaba un poco decaído, en serio quería, afortunadamente su progenitor se retiró para cederle el puesto. Sin dudarlo y con lo prendido que ya estaba se hundió, sí que era estrecho y caliente
-¿Gohan?
Goten estaba sonrojado y escurriendo baba de tanto placer - ¿Qué sucede, lo hago muy duro?
-no, ¿quieres sentir más? Conviértete
No terminó de decirlo y ya estaba rubio y aumentando la velocidad de sus estocadas. Lo abrazó por la espalda y se apoyó en sus pies para embestirlo.
El de cabellos alborotados se acomodó debajo de su hijo para hacer un 69, de esta manera le ayudó con el problema en sus piernas. Ahora los sonidos de la felación y la penetración formaban un solo ritmo. Gohan ya estaba por llegar al clímax y se empujaba con todas sus fuerzas - yo ya no aguanto – gritó aferrándose a su hermano y quedándose sin fuerzas sobre él, sin embargo su miembro seguía erecto y adentro.
Goten era torturado por su padre, que le chupaba muy fuerte el glande, espasmos ya están recorriendo por su sudoroso cuerpo, empezó a mover su cadera para adentrarse en aquella boca al tiempo que el miembro en su entrada se resbalaba – mmm – le dio un mordisco al palo que estaba chupando, su semilla se regó llenando la boca de su padre que la tragó gustosa. Su hermano estaba sin fuerzas y prácticamente dormido, lo bajo de ahí para montarse en el miembro de Gokú.
De espaldas a él cabalgaba sin cesar, el mayor se trasformó llenando su estrechez y ayudándole a moverse. – AHHHHHH – se transformó también para hacerlo llegar más rápido.
Al sentirse tan aprisionado el mayor trataba de disfrutarlo, pero su hijo lo sujetaba de sus caderas para auto penetrarse, y pronto soltó un audible gemido liberándose ahí dentro.
Goten no resistió más y cayó sobre aquel marcado cuerpo y quedó dormido como una roca.
-hijos ustedes son los mejores – los besó en la frente y se levantó de ahí.
Un Saiyajin de cabellos en forma de flama se encontraba cruzado de brazos viéndolos
-¿los mejores? No lo creo – Vegeta se volteó y alzó vuelo yéndose a toda velocidad.
-ESPERA – Gokú tomo sus prendas y se teletransportó frente a él –oye Vegeta, perdóname
-¿quieres decir que me perdonas también? – le sonrió de medio lado
-te perdono, pero prométeme que no lo harás con nadie más – le miraba con carita de cachorro regañado – porque sé que te cogiste a Goten
-Lo haré, si me das más de esto – habiéndolo dicho le agarró las nalgas y le plantó un beso
Gokú le sonrió y se aferró él profundizando ese beso - ¿me pongo la ropa?
-am, déjame pensarlo, no