–TaeHyung, ¿quieres salir conmigo?
Esa simple pregunta es suficiente para que el corazón del vocalista casi explote en su pecho y aunque TaeHyung no entiende lo que está ocurriendo, ni siquiera tiene tiempo para preguntárselo porque de pronto está siendo abrumado por demasiadas emociones juntas, como el miedo que forma un nudo en su garganta, los nervios que revuelven su estómago o la inquietante felicidad que enrojece su rostro, son muchas emociones y el ahora castaño no tiene idea de qué hacer con todas ellas.
–Tae… ¿qué pasa?
Otra persona que no sabe lo que está ocurriendo es HoSeok, quien simplemente sonríe enternecido por la extraña reacción de su amigo, de un momento a otro TaeHyung se sonrojó hasta las orejas mientras que se quedaba casi congelado frente a él.
–¿TaeHyung?
–T-Tú… –Balbucea para luego lamer sus labios con nervios, tratando de controlarse de una vez porque no quiere tartamudear–. Tú estás… ¿quieres…? Quieres salir conmigo… así como… ¿novios?
–¿Qué?
El rapero deja de sonreír en un segundo mientras tensa su postura, entendiendo recién la reacción del menor y palideciendo ante la confusión.
–¡N-No! ¡Claro que no! –Se apresura negando con su cabeza y sus manos–. ¡No es eso Tae!
–P-Pero…
–¡Yo no soy gay! –Exclama viendo como el menor cierra su boca y ahora lo mira con una expresión más seria, parecida a la desconfianza–. Tae, yo no… es decir… –desvía la mirada revolviendo su cabello, no esperaba ser malinterpretado, no de esa manera, y ahora no sabe cómo explicarse para que su amigo no se moleste con él–. Yo… lo siento Tae, no quise confundirte ni molestarte, lo que quería decir… lo que quiero es que salgamos pero no de esa manera, claro que no, a mí no me gustan los chicos, yo no soy ese tipo de persona así que no me odies por favor.
TaeHyung frunce su ceño empuñando sus manos a sus costados, sin saber qué responder a las palabras del mayor porque eso… él no estaba preparado para escuchar todo eso y no sabe qué hacer, no sabe qué decir así que se queda quieto y en silencio simplemente temiendo las próximas palabras del rapero.
–TaeHyung, escúchame por favor –la voz de HoSeok es seria y firme–, tú eres muy importante para mí…
El menor ni siquiera puede imaginar lo que el otro está planeando y aunque intenta no ilusionarse, en especial por la manera en que el discurso del rapero comenzó, ha soñado por tanto tiempo con palabras parecidas a esas que no puede hacer nada más que quedarse a escuchar, ignorando esa voz en el fondo de su cabeza que sigue recomendándole escapar.
–Y por eso… –continúa mordiendo sus labios por unos momentos, pensando en sus siguientes palabras–, por eso siento que puedo confiar en ti –desvía la mirada sintiendo un leve calor en sus mejillas–. Es algo que les he ocultado a todos, incluyendo a YoonGi pero creo… creo que puedo decírtelo a ti, yo… puedo confiar en ti, ¿verdad?
HoSeok vuelve a mirar a su amigo esperando una confirmación que llega en forma de un leve asentimiento, haciéndolo sonreír ampliamente.
–¡Muchas gracias! –Exclama emocionado–. Yo… pues a mí… desde hace un tiempo que me interesa alguien –baja la mirada a sus manos sin querer ver la expresión del otro–. Es una de nuestras estilistas, Yuri noona… ella es tan linda y amable que… no pude evitar fijarme en ella –ríe avergonzado para luego suspirar profundamente–. Hace días me le declaré, fue estúpido, lo sé, sé que por nuestras obligaciones no tenemos tiempo para relaciones románticas y esas cosas, pero quería decirle para saber si tenía alguna oportunidad pero… Yuri noona me rechazó –frunce su ceño torciendo sus labios con decepción–. Dijo algo así como que no puede verme de esa manera, que soy sólo un niño aunque nos separan sólo 4 años de diferencia, además de que no podría arriesgar su trabajo y yo mi carrera y… otras cosas así –revuelve su cabello con frustración al recordar las palabras de la mujer–. Me sentí realmente mal después de eso, pero entonces… después de pensarlo un poco me di cuenta de que nunca me rechazó directamente, quiero decir –mira al menor–, nunca me dijo exactamente que yo no le gusto… ni una vez, sus excusas fueron “no podemos” o “no debemos”, pero nunca me dijo “no quiero” y… eso me hace creer que aún tengo una oportunidad, no sé… quizás la tenga… ¿verdad? Es que… no me gusta la idea de rendirme si existe aunque sea una posibilidad, ¿tú qué opinas Tae?
HoSeok espera una respuesta, cualquiera, pero el menor sólo se mantiene en silencio mirándolo fijamente, con sus ojos brillantes y atentos.
–Tú… ¿crees que tengo alguna oportunidad? –Insiste viendo entonces como el otro muerde su labio inferior, encogiéndose de hombros–. Sí, es difícil saberlo, al final ninguno de los dos es cercano a ella… –suspira–. ¡Pero se me ocurrió una idea para averiguarlo! –Agrega sin dejarse desanimar–. Si de verdad le gusto quizás noona sólo necesita un empujón para admitirlo, así que se me ocurrió la idea de usar los celos para presionarla, porque estos nunca fallan, ¿verdad? –Ve como el menor desvía la mirada–. Sí, quizás no sea la mejor idea, lo pensé mucho y me di cuenta de que darle celos con una chica puede traer un montón de problemas, en especial por los rumores y esas cosas… ¡por eso decidí que tú eres mi mejor opción Tae! –Anuncia sonriendo entusiasmado–. A eso me refería al pedirte salir conmigo, quiero que me ayudes a darle celos a noona siendo más cercanos entre nosotros, ¡pero prometo que no será raro! –Se apresura–. ¡No me propasaré contigo ni nada parecido! Sólo quiero darle celos mostrándole lo tierno y lindo que sería con ella si aceptara salir conmigo, haríamos cosas como hacer planes de citas frente a ella, abrazarnos, besarnos… ¡sólo en la mejilla! Es… sólo eso, nada más, lo prometo.
HoSeok sabe que no es el mejor plan, sabe que quizás ni siquiera resulte pero aun así quiere intentarlo, está dispuesto a hacer todo lo que esté en sus manos para poder conseguir a la chica de sus sueños.
–Por… ¿p-por qué yo?
La voz de TaeHyung se escucha ahogada, como si le hubiese dolido el pronunciar aquellas simples palabras pero HoSeok se lo atribuye a la sorpresa de su confesión, así que suaviza su sonrisa con afecto y se acerca a quien con ojos brillantes, continúa mirándolo en un inusual silencio.
–Porque eres el único en quien puedo confiar –admite–, ya te dije que nadie más sabe sobre esto y quiero que se quede así, además nadie podría ayudarme tanto como tú Tae, es decir, ¿te has visto en un espejo? ¡Eres perfecto! Estoy seguro de que noona se sentirá amenazada si me acerco a ti, eres prácticamente mi tipo ideal Tae y ella lo notará, ¡lo sé!
HoSeok espera alguna confirmación o aunque sea una respuesta del menor pero este sigue en silencio, así que se acerca un poco más estirando sus manos en un intento de tomar las contrarias pero estas se apartan al primer contacto.
–TaeHyung… –murmura frunciendo su ceño–. Yo… te prometo que no tengo una intención oculta con esto, de verdad, tú eres mi amigo y nunca podría verte como algo más que eso así que confía en mí, cuando digo que es sólo un plan para conquistar a Yuri noona no miento, es sólo eso, no estoy buscando excusas para acercarme o aprovecharme de ti, yo no soy gay, no me interesan los chicos así que por favor no tengas miedo ni me odies –intenta acercarse una vez más y aunque las manos contrarias tiemblan entre las propias, sonríe cuando estas no se apartan–. Por lo menos… por lo menos dime que lo pensarás, ¿de acuerdo? No es necesario que decidas ahora pero por favor piénsalo antes de tomar una decisión, me ayudarías mucho y yo te lo agradecería siempre.
TaeHyung baja la mirada a las manos juntas y con cuidado las apartas de las contrarias, empuñándolas enterrando sus uñas en la piel, sintiendo como el dolor le permite recuperar cierto control y entonces asiente con su cabeza.
–L-Lo… –lame sus labios–. Lo pensaré…
–¡Oh por Dios! ¡Gracias Tae! ¡Yo…! –HoSeok está a punto de lanzarse sobre su amigo para abrazarlo, cuando su celular suena alertando un nuevo mensaje–. Oh… Nam quiere que vaya al salón de práctica, creo… que debería ir, suena importante… ¿puedes regresar tú solo al departamento? –Pregunta desviando su mirada del celular al menor que asiente–. ¡Perfecto! Nos vemos en casa entonces –se inclina para tomar su mochica y ajustarla en su hombro–. Muchas gracias por escucharme Tae, esperaré tu respuesta… ¡te compraré todas las cosas que quieras si aceptas! ¡Nos vemos!
HoSeok corre hacia la puerta de la azotea y entonces el menor libera un tembloroso suspiro.
–Uno…
TaeHyung se mantiene quieto en su lugar contando los segundos.
–…dos…
Treinta segundos desde que el rapero cerró la puerta de la azotea.
–…veintiocho…
Treinta segundos que el menor sabe que toma bajar las escaleras.
–…v-veintinueve…
Treinta segundos que son los que TaeHyung puede mantener los pedazos de su corazón juntos antes de dejarlos caer.
–…t-treinta…
Sus piernas tiemblan y TaeHyung se derrumba de rodillas en el suelo porque no es justo, no es justo que eso le pase a él, ¿por qué…? ¿Por qué tiene que ser él? Son siete miembros en el grupo, HoSeok tiene un montón de amigos más, ¿por qué justamente a él tenía que incluirlo en su plan? ¿Acaso es algún tipo de castigo? ¿Acaso está pagando por algún pecado de su vida anterior? ¿Qué hizo TaeHyung para merecer ese dolor? ¿Qué hizo para ser lastimado de esa manera? El vocalista sujeta su pecho con ambas manos como si de esa manera pudiera mantener los pedazos juntos, pero es demasiado tarde, su corazón fue roto de tal manera que siente como si los pedazos lo cercenaran desde el interior, cortándolo, desgarrándolo y haciéndolo sangrar.
–¿P-Por qué…?
Las lágrimas caen sin descanso mezclándose con el maquillaje y el sudor, sus brazos tiemblan por el continuo descenso de la temperatura y su boca sangra por lo fuerte que muerde sus labios mientras que en su cabeza se repite una y otra vez la misma pregunta, buscando la razón, buscando el error que él cometió, porque debe ser su culpa, eso debe ser su culpa y por eso está siendo castigado… ¿o es culpa de HoSeok? El rapero fue quien rompió su corazón pero… pero no, TaeHyung no puede culpar al otro, no puede porque sabe que HoSeok nunca lo lastimaría a conciencia así que sigue pensando, sigue buscando una respuesta porque la necesita, necesita una razón, no puede ser que eso pasara sólo porque sí, su corazón no pudo ser destrozado por algo tan simple y ridículo como un plan, eso no puede ser… no puede…
–Por favor…
TaeHyung se abraza a si mismo buscando calor, buscando un consuelo que sabe que no encontrará, está solo y eso está bien, él ya sabe llorar solo, él ya sabe vivir con el dolor por su cuenta pero… pero nunca antes había tenido un corazón roto que sanar.
De pronto el sonido de la puerta de la azotea hace al vocalista temblar y aunque trata de limpiar las lágrimas en su rostro es inútil, estas se niegan a detenerse, el dolor es demasiado nuevo e intenso, no se detendrá tan fácilmente. La persona que llega a la azotea lo mira inmediatamente, sin siquiera darle la oportunidad a TaeHyung de disimular lo evidente pero a pesar de verse descubierto, el vocalista puede sentir un atisbo de alivio ante la expresión de desinterés que YoonGi le muestra.
Son simples segundos, YoonGi lo observa en silencio por escasos cinco segundos para luego dar la vuelta y marcharse, y aunque TaeHyung vuelve a estar solo con su dolor no puede sentirse herido, más bien agradece haber sido encontrado por el único integrante del grupo que le daría el espacio que necesitaba en ese momento, porque ahora TaeHyung no quiere un abrazo o un consuelo, lo único que quiere es llorar… necesita llorar, llorar y seguir llorando hasta que no queden lágrimas que derramar, necesita deshacerse de todo el dolor, necesita dejar que su corazón se rompa y sangre porque sabe que después se verá obligado a usar una máscara para enfrentar a los demás, pero no ahora, ahora sólo quiere llorar.
…
TaeHyung no tiene idea de qué hora es pero sí es consciente del atardecer a su alrededor y del frío que entumece sus brazos desnudos, sabe que ha pasado demasiado tiempo en la azotea y que quizás sea el momento de regresar, puede escuchar el constante sonido de su celular a lo lejos pero aún no se siente seguro de poder levantarse para enfrentar a los demás, TaeHyung sabe que no será capaz de forzar una sonrisa en su rostro cuando aún hay lágrimas manchando sus mejillas.
El cielo rojizo finalmente se convierte en pura oscuridad y TaeHyung se abraza a sus rodillas, ya no se encuentra en medio de la azotea sino que está sentado contra el alambrado, con la cabeza entre sus brazos se concentra en contar cada una de sus respiraciones porque tiene que intentar tranquilizarse, porque no puede seguir escondiéndose ahí arriba, en cualquier momento alguien empezará a buscarlo y él no puede dejar que vean su dolor, tiene que esconderlo, encerrar toda esa pena y sonreír, tiene que hacerlo pero…
Pero ya no puede sonreír.
De pronto el sonido de la puerta lo hace temblar y TaeHyung se aferra con más fuerza a sus rodillas, porque no pueden verlo ahora, es demasiado pronto, necesita un poco más de tiempo… el vocalista cierra sus ojos, pidiendo en silencio que la oscuridad sea lo suficiente densa para ocultarlo, quizás si se queda muy quieto, quizás si deja de respirar la otra persona no lo note y… y entonces TaeHyung siente un peso cálido y liso sobre su cabeza que lo hace saltar.
–¿Q-Qué…?
–Hola.
Los ojos de TaeHyung arden, apenas puede ver con claridad pero aun así la expresión seria de YoonGi aparece entre la bruma que significa la acumulación de lágrimas, y entonces el corazón del menor tartamudea con miedo y vergüenza, intentando prepararse para el posible regaño, preguntándose al mismo tiempo si será capaz de resistirlo sin llorar.
–Es chocolate caliente –explica en voz baja mientras aparta el vaso de la cabeza del menor para mostrárselo–, bébelo que estás temblando –manda poniéndolo ahora frente a los ojos contrarios.
El menor parpadea con confusión, sintiendo como las lágrimas acumuladas se deslizan otra vez libres a través de sus mejillas y aunque se siente avergonzado, cuando el vaso toca esta vez sus manos no puede evitar sostenerlo por reflejo.
–Vamos, bébelo ahora que está caliente.
El rapero insiste y TaeHyung fija su mirada en el vaso, queriendo decir algo, quizás un agradecimiento o quizás alguna excusa, cualquier cosa pero teme no ser lo suficientemente fuerte, así que al igual que antes, se queda en silencio mordiendo su labio inferior.
–No hagas eso –le regaña con suavidad–, tu labio ya está sangrando, no lo lastimes más, sólo bebe el chocolate y trata de tranquilizarte.
TaeHyung no se siente lo suficientemente fuerte para hablar pero sí para obedecer esa orden así que asiente en silencio, acercando el vaso a su boca sintiendo como su estómago se retuerce por el olor dulce, recordando de pronto que desde hace horas que no come. Cierra sus ojos y bebe lentamente el dulce chocolate sintiendo como la calidez se hace camino desde su garganta hasta su estómago, las lágrimas continúan cayendo, puede sentirlas deslizarse por sus mejillas pero aun así el llanto disminuye, la respiración empieza a estabilizarse, poco a poco deja de doler el simple hecho de respirar.
–Las bebidas calientes también sirven para consolar.
El menor mira de reojo como ahora el rapero está sentado justo a su lado, no tan cerca como para tocarse pero sí lo suficiente para poder sentir el calor corporal contrario y entonces nota que Suga también sostiene un vaso en sus manos pero de café.
–Sé lo que es querer estar solo –comienza el rapero fijando la mirada en su vaso, sin querer mirar al menor porque sabe que este aún espera que lo deje solo para seguir llorando–, sé lo que es querer llorar sin que te molesten, el no querer dar excusas absurdas o evitar que te consuelen, por eso cuando te vi aquí antes no me acerqué y te dejé, pero todos tenemos un límite y tú ya lo has superado, puedo desviar la mirada si uno de mis compañeros llora respetando su privacidad, pero si es uno de mis dongsaengs esto se hace más difícil y si ha llorado por horas es completamente imposible así que por eso estoy aquí ahora, por eso me convertiré en una persona entrometida –sonríe levemente levantando la mirada hacia el frente–. Sólo porque tu dolor es demasiado profundo y esas lágrimas siguen sin detenerse me convertiré en ese tipo de persona que tanto me molesta, así que entiende que por eso ahora te pediré explicaciones para tratar de entenderte y ayudarte.
YoonGi mira por cinco segundos más hacia el frente para luego voltear y mirar al menor a su lado, todo lo que dijo es cierto, nunca estuvo en sus planes entrometerse en la tristeza de su amigo y no es porque no le preocupe, por supuesto que no, para él el cuidado de sus dongsaengs (en especial de la línea maknae), es una responsabilidad importante y aunque él no se muestra tan involucrado como SeokJin, tan presente como NamJoon o tan cercano como HoSeok, YoonGi tiene su propia manera de cuidarlos, darles consejos disfrazados de regaños, mantener el orden cuando NamJoon pierde el control y SeokJin no se atreve a gritarles o cuidar de que nadie se acerque a ciertos espacios cuando descubre a alguno llorando. Porque esa no es la primera vez que ve a TaeHyung llorar, muchas veces se quedó contra la puerta del baño cuidando que nadie entre cuando sabía que estaba ahí encerrado o escuchaba la música a volumen alto para que el llanto del menor no fuera audible, él se encarga de cuidar esos momentos de privacidad de todos, hasta de Jimin y JungKook cuando la presión es demasiada y sólo necesitan llorar un momento, sin ser nada grave, sólo un momento de desahogo nada más, por eso puede dejarlos pasar, pero ahora… ahora no puede, el dolor del segundo maknae es demasiado profundo, ahora no está llorando porque extraña a su familia, porque el trabajo fue muy duro o por ser regañado, no, su dolor ahora es por algo más grave y es evidente que el vocalista no puede solo con él, después de todo a los ojos del rapero, TaeHyung sigue siendo sólo un niño.
–Sé que no puedo forzarte a hablar –continúa manteniendo un tono pausado y bajo–, pero aun así quiero que sepas que puedes confiar en mí porque te prometo… no, te juro que cualquier cosa que me digas no lo volveré a repetir, así que si hay algo que necesites decir, si existe algún secreto que te esté ahogando y no te deja seguir adelante puedes decírmelo, no puedes cargar con todo tú solo, eso te destrozará en algún momento… TaeHyung déjame cargar con parte de tu peso, si dividimos ese peso en dos te darás cuenta de que no dolerá tanto como ahora.
TaeHyung fija su mirada en el vaso entre sus manos sintiendo a su corazón golpear con fuerza en su pecho, está asustado, se siente aterrado porque sabe que el mayor tiene razón, sabe que ese secreto puede destrozarlo porque ya lo ha estado lastimando por mucho tiempo, TaeHyung ha llorado tanto tiempo en silencio y… lo odia, odia ese dolor que parece sólo empeorar, odia cada vez que llora porque pareciera que no existe un final, sólo es dolor, dolor y más dolor sin un atisbo de alivio pero ahora… ahora después de tanto tiempo y por primera vez puede ver una salida, y quizás ni siquiera funcione, quizás el dolor continúe siendo el mismo pero TaeHyung de pronto quiere arriesgarse porque cree en las palabras de YoonGi, le cree cuando le jura silencio, le cree cuando dice que el dolor disminuirá, quizás sea la seguridad que Suga siempre le ha transmitido o no sabe qué, pero cree en él y aunque su corazón continúa latiendo en su pecho asustado, sabe que tiene que hablar sino terminará ahogándose.
–Y-Yo… –el menor cierra sus ojos con fuerza presionando el vaso vacío entre sus manos, tratando de tranquilizarse, intentando respirar, son sólo dos palabras, sólo tiene que decir dos palabras y el dolor quizás disminuirá, no es tan difícil… ¿verdad? Porque nada puede superar al dolor de ahora, aunque YoonGi es su amigo, si el rapero lo desprecia o lo odia eso nunca podrá superar su dolor de haber perdido a HoSeok–. Yo… soy gay…
Pensarlo, sentirlo y hasta serlo parece mucho más tolerable si es en secreto, porque en secreto sólo debe enfrentarse a su propia culpa pero ahora… ahora que acaba de decirlo en voz alta es vulnerable a las posibles consecuencias, porque existen personas que odian a los hombres como él, hay personas que lastiman a los hombres como él, hay personas que persiguen a los hombres como él… y entonces el miedo se intensifica convirtiéndose en terror.
TaeHyung tiembla aferrándose otra vez a sus rodillas, pensando… temiendo las consecuencias a sus palabras, odiando ese efímero impulso de valor que lo dejó expuesto y vulnerable, ¿valió la pena? ¿Valió la pena exponerse de esa manera? ¿Valió la pena exponerse al maltrato o al dolor por un poco de alivio en su corazón? De pronto, como si fuese una respuesta a todas esas preguntas, el menor siente una mano en su cabeza que lo hace dar un pequeño salto pero el toque es suave, no es un golpe, es una simple y afectuosa caricia que lo impulsa a abrir sus ojos para poder ver la expresión contraria, encontrándose con algo completamente opuesto a lo que esperaba ver.
YoonGi está sonriendo.
–Está bien –el rapero murmura manteniendo la suave caricia en el cabello contrario–, la verdad… desde hace un tiempo lo sospeché.
–¿Q-Qué?
–No soy tonto Tae –explica al ver la clara confusión en el otro–, pude ver ciertas señales que me hicieron sospechar, no fueron cosas evidentes así que no te asustes, sólo… algunos detalles que llamaron mi atención, quizás sea porque puedo identificar a las personas con mis mismas preferencias.
Los ojos de TaeHyung se amplían un poco más ante eso último, ¿acaso escuchó bien? ¿O es que escuchó bien pero no entendió? Porque es imposible… Suga no puede… es decir…
–Yo también soy gay, Tae.
YoonGi puede sentir la vergüenza calentar sus mejillas y espera que su sonrojo no sea tan intenso como el contrario, la verdad nunca buscó confesarse a sí mismo pero tras pensarlo un poco creyó que era lo correcto, después de todo el vocalista había compartido con él un secreto demasiado importante y sentía que debía corresponder esa confianza de alguna manera, además de que él también necesitaba aliviar un poco su propio peso, ya eran años sin mencionarlo, aunque él ya había pasado la etapa de llorar y culparse, esa es la primera vez que se lo dice a otra persona.
TaeHyung no da crédito a lo que acaba de oír, no puede creerlo y es que… ¡es YoonGi! El rapero no puede venir de buenas a primeras y confesarle que es gay, ¿cómo? ¿Cuándo? ¿Por qué? Es cierto que él no es tan observador como su hyung para decir que podría haber sospechado algo, ¡pero es que no había nada de lo cual sospechar! Suga nunca tuvo algún comportamiento que le dijera que le gustaban los chicos, no, eso tiene que ser una… el menor frunce su ceño ligeramente al creer en una broma de mal gusto o de algún tipo de deseo de “solidarizar” con él para que no se sintiera tan solo pero el rapero mantiene su mirada firme, YoonGi no está mintiendo, si sabe algo del rapero es que este es honesto y completamente consecuente con sus palabras y actos, así que si él le está diciendo que es gay entonces lo es, YoonGi es gay al igual que él.
Entonces el dolor de sentirse solo desaparece.
–¿C-Cómo…? –Pregunta con sincera curiosidad.
–¿Cómo lo supe? –Ve al menor asentir y tuerce su boca en una mueca pensativa–. Cuando estaba estudiando quizás… no estoy seguro, pero la verdad nunca me gustaron las chicas así que cuando empecé a cuestionarme la razón, fue que me di cuenta.
–Ya veo… –“conmigo no fue así” piensa TaeHyung mientras baja la mirada–. Y… ¿y alguien más sabe? ¿Los chicos…?
–Nadie más lo sabe –niega–, sólo yo y ahora tú así que te pido lo mantengas en secreto por favor, mantendremos ambas confesiones en secreto –ve como el menor asiente de acuerdo murmurando un suave “lo prometo” y el rapero siente como su pecho se alivia, pero entonces cuando vuelve a mirar los ojos brillantes y heridos de su amigo, frunce su ceño–. Aunque ese fuera un secreto importante, eso no es todo, ¿verdad? La razón… la razón de tus lágrimas no es sólo porque seas gay, debió ocurrir algo, dime TaeHyung, ¿qué pasó?
El vocalista casi muerde su labio inferior pero siente el peso de la mirada del otro y se contiene, sólo presionando el vaso aun entre sus manos para luego asentir, si ya sabía que el mayor no lo condenaría por amar a un chico, no importaba de quien estaba enamorado, ¿verdad?
–Y-Yo… yo descubrí que soy gay no hace mucho, fue hace apenas unos meses y lo hice porque me gustó alguien… –siente sus mejillas sonrojarse y su garganta cerrarse pero intenta que eso no lo detenga, tiene que decirlo, tiene que deshacerse de ese dolor–. Me enamoré de un chico, así fue que lo supe… y no es sólo un chico, es uno de mis mejores amigos… él es… es… –no puede nombrarlo y no es por miedo, es sólo que siente que si dice su nombre su voz se quebrará en la primera sílaba para luego volver a llorar.
–Te enamoraste de HoSeok.
El escuchar su nombre es tan terrible como pronunciarlo, porque apenas el rapero lo dijo las primeras lágrimas comenzaron a caer y ese dolor en su pecho regresó, la respiración vuelve a escasear pero ahora una cálida mano deja suave caricias en su espalda ayudándole a respirar.
–Está bien, puedes llorar… no te contengas… –lo anima con tranquilidad viendo como el menor sólo asiente y trata de no ahogarse, a lo que YoonGi frunce su ceño pensando, tratando de encontrar alguna otra razón, porque a pesar de que había acertado a todas sus sospechas estas no parecían suficientes para el dolor de su dongsaeng, el amor de TaeHyung por HoSeok no es algo reciente, YoonGi está seguro de eso así que… así que debió ocurrir algo, el chico de la esperanza debió hacer algo para romper el corazón de TaeHyung.
Mientras que TaeHyung continúa llorando, YoonGi empuña la mano que no está en la espalda del vocalista, reteniendo ahí su mal presentimiento, pidiendo que HoSeok no haya cometido alguna estupidez irreparable porque lamentaría el tener que ir a romperle la cara por dejar en ese estado al segundo maknae, porque si algo tienen claro los cuatro mayores es que con la línea maknae nadie se mete, ni siquiera ellos mismos, sino las penas del infierno caerá sobre el que se atreva a lastimarlos.
–¿C-Cómo…? –Logra balbucear entre sollozos.
–Te dije que no soy tonto –sonríe con afecto al ver a su amigo mirarlo con ojos llorosos hipando al no poder controlar su respiración–, he visto la manera en que lo miras, tus sonrisas cuando hace alguna tontería, noto que tratas de mantenerte siempre a su lado, que le ofreces compañía cuando él tiene que salir, que suspiras mientras duermes cuando es él quien te abraza, son… sólo pequeños pero significativos detalles que he notado en el transcurso del tiempo.
TaeHyung siente su rostro arder ante todos aquellos detalles de los que ni él se había percatado y es que la verdad cuando se trata de HoSeok él reacciona casi por reflejo, nunca nota que está mirando fijamente al rapero hasta que este voltea y le sonríe haciéndole mirar hacia otro lado al verse descubierto, sabe que su sonrisa es constante con HoSeok pero no creyó que esta fuera diferente a las otras.
–Pero otra vez –retoma la palabra Suga captando la atención de su amigo–, esa no es la razón de tu llanto, debió ocurrir algo… ¿pasó algo con HoSeok? ¿Te molestó? ¿Pelearon? Acaso… –oprime más su puño–. ¿Acaso te hizo algo?
“Rompió mi corazón”, TaeHyung piensa pero no cree que sea justo decirlo, porque él sigue creyendo que es su propia culpa, porque él nunca debió fijarse en su amigo, él nunca debió enamorarse de otro chico y entonces las lágrimas aumentan quitándole el aliento, algo que no es un buen augurio para el rapero que espera una respuesta pero YoonGi será paciente, aunque puede sentir su corazón latir cada vez más rápido por la incertidumbre, esperará hasta que el otro esté en condiciones para hablar.
–Y-Yo… –murmura TaeHyung después de unos minutos, sintiendo como su pecho se oprime al tener que recordar lo ocurrido para relatarlo pero es necesario, tiene que sacar eso de su corazón, ya ha confesado demasiado como para detenerse además de que quizás YoonGi pueda ayudarlo a encontrar una solución porque se supone tiene que pensar en la petición de su amigo y la verdad no quiere hacerlo, pero tampoco se siente tan fuerte como para negarse; entonces cierra sus ojos dándose fuerzas a sí mismo para seguir y no romperse en el camino–. Desde que descubrí mis sentimientos nunca pensé en confesarme, más que por ser rechazado es porque me asusta… me aterra que HoSeok hyung me odie, yo mismo me odio por sentirme así… me siento sucio, repulsivo… siento que estoy traicionando a mis padres al no seguir el camino que ellos me enseñaron, a mis amigos al ocultarles un secreto tan importante, a hyung por buscar su compañía con otras intenciones… Hobi me considera su amigo y yo lo busco sólo porque me gusta, eso es tan… malo… –presiona el vaso vacío en sus manos arrugándolo–. Por eso decidí nunca confesarme y dejar que esto muriera dentro de mí, ahogarme solo… llorando solo… ese sería mi castigo… estaba bien con eso, lo estuve desde que lo decidí pero hoy… hoy todo se rompió… yo no lo culpo porque él no sabe el daño que me estaba haciendo pero… pero no siento que sea justo, si yo ya estoy cargando con mi culpa, ¿por qué tengo que seguir sufriendo? ¿Por qué tienen que lastimarme así? Yo no sé… debí ser una persona terrible en mi otra vida… –fuerza una sonrisa sintiendo como sus ojos comienzan a arder–. HoSeok hyung me pidió ayuda, hay alguien que le gusta… una… una chica… –muerde su labio inferior sin querer pronunciar el nombre porque se supone que es un secreto, él prometió silencio.
–Yuri noona –pronuncia por su amigo quien frunce su ceño con confusión–, es… algo que descubrí por mi cuenta, HoSeok cree que es un secreto pero él nunca ha sido la persona más disimulada del mundo –se encoge de hombros.
–Sí, él… él cree que nadie más lo sabe… –asiente–, d-dijo… hyung me dijo que sólo puede confiar en mí… y que por eso necesitaba mi ayuda… –lame sus labios con nervios–, él quiere… n-no sé cómo se le ocurrió –ríe con voz quebrada–, q-quiere… que le ayude a darle celos a noona… a mí, justo a mí me pidió actuar como una pareja con él para darle celos a la chica que le gusta… ¿puedes creerlo hyung? Y eso no es todo, me dejó bien claro que no es gay, que jamás podría verme con otros ojos, que yo soy sólo un amigo, que nunca podría amarme por ser un chico, acaso… –Frunce su ceño sintiéndose de pronto molesto–. ¿A-Acaso cree que ya no lo sabía? Eso es lo que me repito todas las veces que me sonríe, es lo que me repito cada vez que me toca, “eres sólo su amigo”, “nunca te amará”, “eres un chico, él nunca amará a un chico” –deja el vaso a un lado para mirar las palmas de sus manos vacías–, todas esas cosas… que mi conciencia me dice todos los días… todo él me las dijo una por una y yo… n-no quiero… –empuña sus manos–, sé que no tengo que molestarme porque no es su culpa, no lo es pero… p-pero es tan injusto YoonGi hyung… e-es tan injusto que él pudiera decir todo eso con una linda sonrisa mientras que yo sólo podía sentir que me estaba rompiendo el corazón…
TaeHyung vuelve a extender sus manos para presionarlas contra sus ojos, sintiendo como estos arden bajo sus palmas, sintiendo como algo más oscuro y pesado comienza a aplastar su corazón, porque él de verdad no quiere culpar a HoSeok, no quiere hacerlo pero de pronto se siente tan molesto con el rapero, de pronto desea haber sentido toda esa rabia antes para haberle gritado al mayor, gritar que estaba siendo lastimado, gritarle que el plan es una idea estúpida.
–Y-Yo… –continúa respirando con más fuerza, sintiendo como el aire casi rasga sus pulmones y las lágrimas ahora queman sus ojos, pero quiere continuar, tiene que sacar todo eso de su pecho–. Él… empezó invitándome a salir y eso… m-maldición, eso no está bien… –fuerza una sonrisa torcida–, me dio esperanzas hyung… me las dio y luego me las quitó en un segundo, ¡hasta se sonrojó! Cuando estábamos acá arriba, mientras me invitaba a salir se sonrojó y… hy-hyung… él sonreía tan avergonzado, todo era tan estúpidamente romántico que no pude evitar ilusionarme y sé que fue mi culpa, nunca debí ilusionarme, no debí pero… p-pero lo amo hyung, lo amo y él estaba sonrojado, él estaba sonriéndome cuando me dijo si quería salir con él y yo… y-yo… ¿qué más podía hacer? ¡¿Qué debería pensar después de todo eso?! –Empuña sus manos contra sus ojos–. ¡Si hubiera sido Jimin o JungKook sabría que era broma! ¡Si hubiera sido SeokJin hyung, NamJoon hyung o tú no les hubiera creído! ¡Pero no! ¡Era él! ¿C-Cómo iba a decirle a mi corazón que no se emocionara después de eso? ¿Cómo no iba a tener esperanzas si todo era tan malditamente perfecto…? –Un nuevo sollozo y tiene que detenerse unos segundos para respirar, contando en su cabeza cada respiración para no ahogarse y poder continuar–. Como… c-como me elevé demasiado alto el golpe fue aún más duro y me rompí en pedazos cuando caí a la realidad… –suspira–. C-Cuando se disculpó por no explicarse bien gritándome a la cara que él no es “ese tipo de persona”, ¿qué…? –Suspira otra vez tratando de ahogar con eso el llanto–. ¿Q-Qué tipo de persona…? ¿Qué tipo de persona soy? Y-Yo qué tipo… ¿qué tipo de persona fui cuando creí que el chico que amo se me iba a declarar? ¿Qué tipo de persona soy ahora sin poder dejar de llorar por él? Es mi hyung… lo quiero pero… pero es un idiota… es un idiota y es mi amigo… es mi amigo p-pero… lo amo… y duele… d-duele tanto… yo había aceptado este dolor… yo creí que estaba bien que doliera porque es mi castigo pero siento que es demasiado… YoonGi hyung es demasiado… ¿t-tan malo es que ame a un hombre que tengo que ser castigado por eso…?
YoonGi siente su pecho contraerse ante aquellas palabras, claro que nada de eso es justo, TaeHyung no se merece ese sufrimiento, nadie lo merece porque nadie debería ser juzgado o castigado sólo por amar, sólo por sentir.
–No estás siendo castigado –niega–, esto no es un castigo porque no está mal lo que sientes TaeHyung –agrega con firmeza en su voz y aunque él no es amante del contacto físico ni de consolar, no puede evitar esa necesidad de contener en sus propios brazos a ese chico que se está desmoronando frente a él, tratando de sujetar con sus manos los pedazos del corazón ajeno sin dejar que ninguno se pierda; cuando sus brazos se cierran alrededor de su amigo lo siente temblar, resistiéndose al consuelo porque TaeHyung sabe que eso lo hará llorar más y es que esa es una de las consecuencias de consolar a alguien, hacerlo llorar aún más–. Eres una persona hermosa –continúa–, eres increíble, eres brillante, eres dulce, eres amado… –murmura con voz suave una y otra vez mientras acaricia la espalda del menor, sujetándolo con fuerzas recibiendo cada una de las lágrimas del otro–. Tu familia te ama, tus amigos te aman, ARMY te aman, SeokJin hyung te ama, NamJoon, Jimin, JungKook y el idiota de HoSeok te aman, hay muchas personas que te aman así que no creas que es tu culpa o que tú eres el malo aquí, porque yo también te amo y créeme cuando te digo que yo no amo a cualquier persona… así que aparta esa idea de tu cabeza, tú no eres malo, el amar a alguien no te hace malo, el llorar por alguien no te hace malo… –recarga la cabeza del menor en su pecho para acariciar su cabello con lentitud, calmando el llanto que poco a poco se tranquiliza, como si cada palabra fuera adormeciendo el dolor convirtiendo los espasmos del llanto en ligeros sollozos que son ahogados en su pecho–. Tienes… tienes que dejar de culparte, esto no es tu culpa, amar a un hombre… amarlo a él y sufrir por él no es tu culpa, ni tampoco debes ser castigado por eso.
YoonGi se mantiene acariciando tanto el cabello como la espalda de su amigo para tranquilizarlo mientras en su mente repite las partes importantes de la conversación, preguntándose cómo es que HoSeok había logrado herir tanto a su “dongsaeng favorito” (como el otro lo llamaba en sus conversaciones), porque YoonGi entiende que el chico de la esperanza no tiene la culpa, si HoSeok supiera sobre los sentimientos de TaeHyung jamás se le hubiese ocurrido hacer algo como eso, pero aun así… a pesar de que no hay culpables a los cuales indicar eso no elimina el dolor ni resuelve la situación, TaeHyung continúa en medio de un amor no correspondido mientras que HoSeok sigue en medio de su absurdo capricho. Quizás YoonGi no esté siendo del todo justo con su mejor amigo pero nadie puede sacar de su cabeza la idea de que HoSeok sólo está encaprichado con la mujer y no es que desconfíe de la sinceridad del otro, pero si hace un ejercicio tan simple como comparar la manera en que TaeHyung mira al rapero a la manera en que HoSeok mira a Yuri, estas son completamente diferentes, los ojos del rapero brillan con algo parecido a deseo y obstinación, mientras que los ojos del vocalista brillan con honesta admiración y afecto, y sí, tal vez no esté bien basarse en una simple comparación de miradas, pero… ¿por qué cuando YoonGi observa el comportamiento de HoSeok sólo puede pensar en un niño encaprichado con un juguete nuevo?
…
–L-Lo siento… –murmura manteniendo su rostro oculto en el pecho contrario, nunca había estado así de cerca de su hyung y ahora que el dolor había disminuido, su vergüenza hizo acto de presencia haciéndolo sonrojar.
–No te disculpes tonto –lo regaña con voz suave soltando un poco el agarre para permitirle al otro separarse–. ¿Estás mejor? –Pregunta ladeando su cabeza buscando la mirada del menor.
–Un poco… –suspira–. Gracias hyung, tú no…
–No agradezcas –lo interrumpe–, TaeHyung… quiero que tengas algo claro –con su dedo índice toca entre las cejas de su dongsaeng obligándolo a mirarlo a los ojos–, no estás solo, yo estoy aquí así que no quiero que vuelvas a llorar solo, si quieres llorar búscame, no te haré preguntas, no te consolaré ni te tocaré si así no lo quieres pero ya no quiero que llores solo, ahora los dos estamos juntos en esto, ¿de acuerdo?
–P-Pero yo… –trata de morder su labio inferior pero la mirada frente a él se lo impide así que se limita a torcer su boca en una mueca–. No me gusta que me vean llorar…
–¿Por qué no? Si te ves adorable llorando –se burla riendo bajito, viendo como el sonrojo del otro aumenta por esto.
–Y-Yah… ¡hyung!
–Es broma, es broma, la verdad te ves horrible, perderías un montón de fans si te vieran llorando –ríe de nuevo pero ahora no ve sólo un sonrojo, sino que el vocalista infla sus mejillas demostrando su molestia haciéndole largar una carcajada aún más alta.
–¡Hyung!
De pronto el tono de llamada del celular de YoonGi suena interrumpiéndolos, a lo que el rapero lo saca de su bolsillo frunciendo su ceño por el nombre que se ilumina en la pantalla.
–¿Qué pasa HoSeok? –Cuestiona tratando de sonar tranquilo pero sin poder evitar ese tono de molestia en su voz, en especial cuando TaeHyung desvía la mirada mordiendo sus labios–. No, nada, sólo… sólo estoy ocupado, ¿pasa algo?… ah sí, sigo en la compañía… ¿qué? Oh… no, está aquí conmigo… –mira de reojo a su dongsaeng que se mantiene con la mirada baja–. La verdad no lo sé, pensaba quedarme aquí con él… lo sé pero le pedí ayuda con algo y aun no terminamos… sí… sí… no importa, está bien, pediré algo de comer acá… te digo que sí, tranquilo… sí, avísales tú, Tae y yo dormiremos hoy acá en mi estudio –dice y ve como el menor levanta la mirada enseguida arqueando una ceja interrogante a lo que él sólo le sonríe–. ¿Qué? No, no puede… no puede HoSeok, no insistas… no importa, mañana hablas con él, hoy no puede… ya, mañana nos vemos, sí, sí, adiós.
–¿Por qué nos quedaremos aquí? –Pregunta con curiosidad agradeciendo en silencio el no tener que regresar al departamento, no se siente capaz de enfrentar aún a los demás.
–Ya te lo dije, te ves horrible y no puedo dejar que te vean así –responde sonriendo entretenido pero al ver como el otro frunce el ceño sin creerle, accede a dejar de bromear–, en el departamento está HoSeok y no puedes verlo, no aún, mañana trataré de mantenerte ocupado para que no te cruces con él, algo se me ocurrirá, hasta entonces nos esconderemos en el estudio para no tener que regresar.
–No es necesario que tú también te quedes hyung, yo puedo…
–Ni se te ocurra –niega–, no te dejaré solo además, ¿crees que me dejarían entrar si llego sin ti? Me mandarían de regreso por ti o hasta el mismo HoSeok es capaz de venir a buscarte y eso sería desastroso, así que no, nos quedamos ambos, ni que fuera la primera vez que duermo en el sofá del estudio.
–Pero ahora somos dos, no caeremos.
–¿Quieres apostar? Jimin y JungKook han dormido ahí cuando se han quedado a molestarme, así que si ellos pueden nosotros también, en realidad… creo que ya es hora de que entremos –agrega mirando la hora en su celular para luego bloquearlo y guardarlo–. Es tarde y está helando.
–No hace frío.
–Claro que hace frío, además estás usando sólo una camiseta, ¿sabes qué pasará si te resfrías? No podrás cantar y más importante aún, SeokJin hyung me matará porque se supone que eres mi responsabilidad –se quita la sudadera para dejarla sobre la cabeza del menor–. Abrígate y vamos.
–Pero hyung, ahora tú te enfermarás –se queja quitándose la sudadera para devolvérsela al mayor pero este se levanta antes de que le acerque la prenda.
–No me enfermaré si entramos ahora y ponte eso, yo tengo otra allá adentro, de todas maneras pensaba quedarme esta noche antes de encontrarte así que traje otra por si acaso, vamos, abrígate y levántate que hay que pedir comida, tengo hambre.
TaeHyung ve como su amigo alza una mano frente a él y no tarda en aceptar la ayuda levantándose gracias a la fuerza contraria, para luego abrigarse con la sudadera del mayor agradeciendo que su hyung acostumbre usar ropa tallas más grandes.
Ambos chicos se dirigen al santuario de composición del rapero en donde ordenan Jajangmyeon para cenar y YoonGi recibe seis llamadas durante la cena, una de JungKook alegando de porqué había secuestrado a TaeHyung si iban a jugar esa noche a lo que el vocalista tuvo que callar al maknae con promesas de futuras noches de juegos antes de que el rapero le gritara, una de SeokJin cuestionando la ausencia de uno sus niños sin haberle consultado antes, una de NamJoon pidiendo que revisara una de las canciones que dejó sobre el escritorio, una de HoSeok pidiendo hablar con el menor a lo que YoonGi le cortó casi enseguida y dos de Jimin, la primera para quejarse de porqué se había quedado con TaeHyung si él se había ofrecido a hacerle compañía y lo había rechazado por ser demasiado ruidoso, conversación que terminó con TaeHyung discutiendo con Jimin (en broma claro está) y la segunda con el mismo fin pero que terminó esta vez con YoonGi discutiendo con Jimin (no en broma).
La hora de dormir se aplazó dos horas después de la medianoche, bastante temprano para el rapero que estaba más que acostumbrado a desvelarse mientras componía, pero aun así se obligó a sí mismo a dormir antes porque podía ver el agotamiento de TaeHyung, la verdad le sorprendía lo fuerte que el otro se mantenía después de llorar tanto, él mismo recuerda que cuando lloraba quedaba sin energías y lo único que quería hacer después era dormir, pero el segundo maknae se había mantenido en una pieza durante la cena y entonces la idea de que quizás el menor se estaba forzando a fingir lo preocupó, TaeHyung confiaba en él, podía sentirlo, pero aun así también sentía que este se reprimía a sí mismo, cuidando su forma de ser, controlándose y lastimándose en el camino (aunque ni siquiera se diera cuenta).
–Apaga la luz –ordena el rapero acostado sobre el sillón de dos cuerpos mientras mira su celular.
–Hyung, no creo que quepamos ambos en el sillón –dice apagando la luz de todos modos para luego dirigirse hacia donde ve la pantalla del celular de su hyung brillar.
–Cabremos, ya verás.
TaeHyung alza sus manos tratando de tocar el borde del sillón mientras piensa como recostarse sin aplastar al rapero y entonces siente que sujetan su muñeca jalándolo y haciéndolo perder el equilibrio.
–Hy-Hyung… –murmura sintiendo el sonido del corazón de su amigo justo en su oído, de nuevo está siendo abrazado por su mayor aunque ahora él está sobre el cuerpo del rapero acostados de una manera en el límite de lo incómodo y lo cómodo.
–Por hoy te dejaré usarme de colchón, sólo porque pesas casi nada –anuncia tratando de acomodarse para estar más cómodo y es que el hecho de que el menor sea más alto que él es un poco más molesto ahora.
–Si peso puedo…
–No –lo interrumpe dejando de moverse cuando encuentra la posición, puede notar que las piernas de su dongsaeng están flexionadas a diferencia de las propias que están extendidas pero aun así ambos caen perfectos en ese limitado lugar–, te dije que hoy no te dejaré solo, entiéndelo TaeHyung, hoy no puedes estar solo.
–¿Cómo que no puedo? No soy un niño, además me siento mucho mejor y…
–Mientes –lo vuelve a interrumpir cerrando sus ojos.
–No miento, estoy bien, ya no lloraré así que…
–Volviste a mentir –lo interrumpe otra vez–. Tae, tu corazón fue roto, tú estás roto y una tarde de llanto no reparará eso, yo nunca podré reparar tu corazón porque para nuestra desgracia, el único que puede hacerlo es el mismo que lo rompió…
–Hyung por favor… –murmura sintiendo sus ojos arder, le había costado tanto levantarse, no puede volver a caer.
–Quizás… –continúa abrazando con fuerza al que comienza a temblar–, el tiempo pueda sanarte, pero ahora sólo HoSeok puede hacerlo y sabemos que eso no ocurrirá… es más, puede que vuelva a romper esos pedazos que apenas pude salvar hoy y por eso necesito que estés preparado.
–N-No puedo… n-no puedo hyung… –TaeHyung tiene miedo, ya se había roto y dolió mil horrores, aún sigue doliendo, no pueden romperle el corazón otra vez.
–Volverás a romperte cuando él te pida ayudarlo, cuando te recuerde todo eso que te dijo hoy y… tengo miedo… –suspira.
–¿Miedo…?
–Miedo de que te lastime tanto que el daño sea irreparable, miedo de que te rompa y después se dé cuenta de lo que hizo, entonces HoSeok no sólo se odiará a sí mismo sino que también terminará lastimado y si eso pasa… entonces tu corazón no lo resistirá.
–YoonGi hyung… –presiona con fuerza la chaqueta del mayor enterrando su rostro en el pecho ajeno, sintiendo como las lágrimas arden en sus ojos–. Y-Yo no quiero… no quiero lastimar a HoSeok hyung… no importa si tengo que llorar yo pero él… no quiero ver a Hobi llorar…
La voz de TaeHyung es temblorosa, el menor realmente está preocupado por lastimar al otro y YoonGi no puede hacer nada más que sonreír enternecido admirando en silencio los sentimientos de su amigo, inclinándose un poco para dejar un leve y suave beso sobre la cabeza de quien se congela entre sus brazos.
–¿Hy-Hyung…?
–Tienes que dejar de castigarte –habla en voz baja–, tienes que dejar de creer que estar enamorado de él es algo malo porque no lo es Tae, un amor tan honesto… tan desinteresado no puede ser algo malo, quizás la vida… el destino, la suerte, como quieras llamarlo, no estuvo de tu lado en esto pero eso no significa que sea tu culpa, esto no está pasando porque amas a un hombre en vez de a una mujer, es simplemente… amor, el amor que en cualquiera sus versiones puede ser injusto y doloroso.
TaeHyung cierra sus ojos liberando sus lágrimas y a pesar de que esté llorando otra vez, ahora el dolor no es tan intenso como antes porque los latidos que escucha junto a su oído se encargan de relajar sus sentidos, marcando el ritmo de sus respiraciones sin permitir que se ahogue.
–¿Por qué…? –El menor susurra después de unos minutos–. YoonGi hyung, ¿por qué eres así conmigo? ¿Por qué te preocupas tanto?
–Porque eres mi amigo y sé lo que estás pasando –responde abrazando con más fuerza al otro–, puedo entenderlo porque yo lo sufrí tiempo atrás… y no hablo de tu corazón roto sino que de ese rencor, de ese odio que sientes contra ti mismo por sentir lo que sientes, sé lo que es sufrir solo y en silencio, ahogarte sintiendo que no hay escape a tu alrededor porque tú eres el problema, porque tú eres lo que está mal, porque… porque crees que naciste roto… te sientes roto…
TaeHyung mantiene sus ojos cerrados mientras siente que el abrazo a su alrededor cede un poco, a lo que simplemente se queda quieto y en silencio porque cree que eso es lo que YoonGi necesita, porque el consuelo en ocasiones puede ser sólo quedarse en silencio y escuchar.
–Esto… –el rapero lame sus labios sintiéndose de pronto nervioso, sintiéndose avergonzado porque se supone que él está ahí para consolar al otro pero ha mantenido esa tristeza encerrada por tanto tiempo que necesita deshacerse de ella y si compartir su dolor permite que su dongsaeng no cometa sus mismas equivocaciones, entonces vale la pena–. Este dolor… este odio que sientes por ti mismo es algo que yo también sentí, el cuestionarte, el castigarte por sentir cosas que no parecen correctas… el desear, pedir, suplicar poder amar como una persona normal y odiar el no poder hacerlo, odiar no poder sentirte como se supone que tienes que hacerlo, como te enseñaron que tenías que hacerlo es tan doloroso… es tan… solitario –suspira–. Eres valiente TaeHyung, eres valiente al aceptar el dolor y querer vivir con él porque yo… yo no pude hacerlo, me rendí a la primera herida, quise escapar, huir del dolor llorando y sangrando, yo… –muerde sus labios y cierra sus ojos–. Yo quise terminar con todo esto, no sólo acepté el castigo sino que me lo autoimpuse lastimándome a mí mismo.
–Tú… ¿quisiste…? –Un escalofrío recorre su espalda justo cuando siente al cuerpo bajo él tensarse, ¿lo había hecho? Su hyung, el hyung que siempre se ha mostrado fuerte frente a él, ¿había intentado lo que él ni en sus peores pesadillas podría hacer?
–No fui tan valiente como para llegar hasta el final –confiesa suspirando ante lo que su dongsaeng pueda estar pensando de él–, pero aun así quise hacerlo, aun así lo intenté arrepintiéndome en el último segundo y… y considero que llegar hasta ese punto es igual de terrible, una vez caes en ese agujero es muy difícil salir porque lo único que ves es oscuridad… por eso es que soy así contigo, porque yo caí en ese agujero y no quiero que caigas en él, no dejaré que lo hagas y si llegas a hacerlo estaré ahí para tenderte una mano y sacarte, te enseñaré lo que yo tuve que aprender a punta de golpes, te demostraré que no está mal ser diferente, porque tú eres hermoso tal cual eres y no dejaré que te consumas porque la sociedad dicta lo contrario, después de mucho tiempo yo aprendí a aceptar lo que soy y siento, aunque aún mantengo algunos prejuicios y me limito a mí mismo al esconderme de los demás, ahora estoy tranquilo siendo tal cual soy, quizás no sea felicidad completa pero es mejor que el infierno en el que estaba antes.
YoonGi cierra sus ojos cuando siente que estos empiezan a arder porque sabe lo que eso significa y no está dispuesto a ser débil esta vez, tiene que consolar el llanto de su dongsaeng y no puede hacerlo si él también está llorando.
–Si yo soy hermoso… –murmura el menor acurrucándose en el pecho contrario cuando siente los latidos desestabilizarse–. Tú también lo eres hyung y así como yo no estoy solo porque puedo llorar contigo –desliza una de sus manos buscando la del mayor sujetándola con fuerza al sentirla temblar–, tú puedes llorar conmigo porque tú tampoco estás solo, no te dejaré solo.
–Yo te estoy consolando a ti TaeHyung.
–Yo no te estoy consolando hyung porque tú no estás llorando… ¿verdad? –Se mantiene en silencio sintiendo como la mano contraria refuerza el agarre, haciéndolo sonreír–. Sólo yo estoy llorando, tranquilo… si se escucha algún sollozo soy sólo yo.
YoonGi sonríe mientras levanta su mano libre para cubrir sus ojos, sintiendo como su pecho continúa humedeciéndose porque TaeHyung sigue llorando pero aun así no es tan malo como antes, el menor sólo se está desahogando.
–Buenas noches YoonGi hyung.
–Buenas noches TaeHyung.
Ambos cierran sus ojos sintiendo como los latidos contrarios marcan el ritmo a sus respiraciones, sin dejarlos ahogarse a pesar de que las lágrimas amenazan con no detenerse.