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A SOUBI por Hally362

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Notas del fanfic:

Estoy obligada a decir que la historia original no me pertenece (T.T) es de Yun Kouga.

Notas del capitulo:

Para Serena, una de mis mejores amigas y cumpleañera que olvidé felicitar ;-;
Los personajes no me pertenecen.
La autora de la idea original ya presentó su permiso, así que...no problem?

¿No le has pedido que te quiera o que te acepte? Si, Soubi, los has hecho. Inconcientemente, pero lo has hecho. Ya no esperas que nadie más te acepte y, para ti, sólo está él. Exactamente como en cierto momento fue para mí.

Sigue siéndolo ahora. 

Ninguno de nosotros es humano. Estamos condenados a luchar sin razón y a vivir lo que se nos asignó, sin variaciones. Estamos aquí para interactuar y no sentir nada por nadie, a excepción de nuestro Sacrificio o nuestro Luchador. No sé porqué tiene que ser así, pero es algo de lo que me vengo dando cuenta desde hace mucho.

Mentira. Nunca sentí nada por ti, si acaso desprecio.
En cambio, él era mi todo. Nunca supe porqué.
Quizá no lo entiendas, pero duele que esté atado a ti. Yo no soy como tu, no me gusta el dolor.

¿Es extraño que te lo diga?

Ya te lo había mencionado antes, me preocupa esa inexpresividad tuya; el dolor es lo único que te despierta. Y lo que más lastima a mi hermano.

Él no está dispuesto a lastimarte.

¿Sabes lo mucho que él ha sufrido? No y no te esfuerzas en entenderlo. Quieres cambiar su futuro, pero no entiendes lo que su pasado le hace. Para él, causar dolor es inadmisible. A él ya le han causado bastante…

Un sacrificio, es la persona que admite las laceraciones del combatiente. Una y otra vez. Lo sabías y me causaba rabia que quisieras lastimarte porque a mí también me dolía. Quizá no te dabas cuenta…Siempre fuiste muy extraño.

No hay nada más que hacer…

Te lastimaba porque así lo deseabas tú, sinceramente me parecía repugnante. Pero he de reconocer que yo siempre fui así. No me importaban los demás. Y lastimarte a ti era una manera de desquitarme por no poder estar a lado de la persona que realmente quería y que ahora sólo te ama a ti.

¿Y qué hago yo ahora? Intento no pensar en ti, en él, en ambos.

Te dejé a cargo de él, fue un error. Pero era necesario.

Debes amarlo, cuidarlo, porque nadie más podrá hacerlo. Si bien Ritsuka puede ser amado, él no lo permitirá. Ya lo has conocido, has tocado su corazón y explorado su manera de ser hasta conocerlo completamente, supongo que ahora sabrás que no es una persona común y que tiene una visión del mundo muy fría, en su mundo no existe nada eterno.

¿Para qué querría él que lo ame alguien si al final ese sentimiento terminará aniquilado, hecho pedazos junto a su dañado corazón?

Por otro lado, amarlo no es para nada difícil. Es una persona a la que te puedes atar, dejarte a él una y otra vez, y aunque considere el rechazarte, jamás lo va ha hacer…

La primera vez que lo dijiste fue mentira, una mentira poco convincente y dolorosa.

La segunda fue por piedad, porque ya no había nadie más que tú para animarlo a sobrevivir. A seguir en el mundo que él odiaba con todo su corazón.

La tercera fue por que él lo sentía. Tú lo sentías. Habías comenzado a creer que por fin decir “Te amo, Ritsuka” había dejado de ser una obligación, habías aprendido a amarlo como yo lo hago aún ahora. No era mi deseo, de verdad. No tenía intenciones de que fueses más profundo de lo que fui yo. Ahora mira quien va primero. Haz logrado algo que yo no pude hacer, y te detesto todavía más por ello.

Es horrible.

¿Te hace sentir vulnerable lo frágil y compasivo que puede ser Ritsuka?
No me sorprende, esa debilidad por él también la viví. Y es que el hecho de que sea tan inocente, tan puro y tan indispuesto a dañar es conmovedora, encantadora y logra hechizar hasta el punto de no poder más y atarte de una manera aterradora. 

Si, el alejarme de él, el hacerlo ver lo cruel que es el mundo con los sentimientos humanos y lo estúpido que puede ser el amar a alguien se lo he enseñado yo…porque más que nada quiero que sobreviva a cualquier golpe. No sabes lo mucho que temo por él, lo que el mundo puede hacerle es una idea insoportable. 

Ritsuka te lo ha dado todo, te ha mostrado todo. Todo lo que puede dar, sus miedos, sus gustos, su dolor, todo. De alguna manera este lazo no es el de un Combatiente con un Sacrifice; es otro; muy distinto, pero con la misma intensidad. Amor, amarlo por sus errores, por su majestuosidad, por su dolor y felicidad. Y siempre deberás amarlo, Soubi. Sin importar que el te deje de amar, sin importar siquiera el que llegue a odiarte. No habrá duda de que eres suyo.

No puedo seguir aquí, pero deseo hacerlo porque de una manera u otra lo estás lastimando, ese sentimiento lo lastima.

Mi hermano también tiene miedo, de ser sólo una especie de “contrato” entre tú y yo. Tiene miedo de que desaparezcas o de que odies el que no sea como yo. En cierta forma el que no sea como yo me alivia. Ritsuka no debe ser contaminado, es perfecto así. Delicado.

Si permites que eso cambie regresaré sólo para que recuerdes que tu vida me pertenece.

Nunca he pedido que él te ame. Siento, tal vez de forma absurda, que no eres adecuado para él. A final de cuentas lo que has demostrado que haces y harás las cosas por amor. Si pudiera te alejaría de él, si pudiera lo alejaría de todos y de todo para tenerlo a salvo. Eso sólo porque es para mi lo que me salvó de muchas cosas, el que existiera Ritsuka fue una felicidad para mi. Si esa felicidad depende de ti, por más que lo odie, por más que aborrezca que te ame de una forma tan entregada, no te atacaré…Lo único que realmente necesito que estés a su lado y lo hagas feliz.

Mi existencia dejara de ser existencia si llegase a saber que él es infeliz, que está triste o que tiene deseos de convertirse en el ser detestable que fui yo. La vida es…Ritsuka.

Soportaré todo, soportaré que lo ames y que él te corresponda. Soportaré el hecho de que lo lastimes, le devuelvas la vida, le cures. Soportaré porque no puedo hacer más…Yo no puedo estar con él. 

-Soubi- murmuró el pequeño tan suave que el rubio no alcanzo a escucharlo.

Yo escucho cada palabra, siempre voy a estar con él. Y también comprendo que haya aprendido a actuar egoístamente, aferrándose a ti. 

Mi hermano, Loveless, el chico sin amor, el sacrificio perfecto, Ritsuka.


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