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VUELVE A MI por VAMPIREPRINCESSMIYU

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Notas del capitulo: Bueno, esta es una de mis tantas locuras de GRAVITATION, no me asesinéis demasiado si no os gusta. Como siempre decir que ni la serie ni los personajes me pertanecen, que hago esto para divertirme y para pasar factura a ciertos personajes, ya ireís viendo cuales. AH, la loca del desafío de GRAVITATION titulado LUCES Y SOMBRAS soy yo, pero escribí mal el pseudónimo y no se como arreglarlo así que os lo comento aquí.
Día a día
-¡Que me pillan, socorro!.
-¡Es él, Shuichi Shindo, de Bad Luck!.
Miles de fans, tanto chicos cómo chicas, perseguían a un muchacho de cabellos rosas, lo habían descubierto cuando salía de los estudios de grabación de NG y se habían abalanzado sobre él cómo una jauría de sabuesos sobre una liebre. Le habían dejado la ropa reducida a jirones y arrebatado todos los botones. Le estaban dando alcance cuándo al pasar por un callejón alguien lo agarró del brazo y tiró de él poniéndolo a salvo.
-¡Pero bueno!, ¿No te dije en una ocasión qué era peligroso andar por la calle sin camuflaje? Y más ahora que eres famoso y uno de los cantantes más deseados de Japón.
-¡Tú!, ¡Taki Aizawa!, ¡No te me acerques!.
-Tranquilo, chico Taki no te hará nada, aunque no lo creas es el presidente de uno de tus clubs de fans.- Dijeron los compañeros de Aizawa que estaban también allí.
-Debo estar enfermo por que me ha parecido oír que el ojos de besugo este es fan mío.
-Pues aunque no te lo creas lo es- Dijo Maa sonriente- Cómo nosotros dos, hemos ido a todos tus conciertos ¿Sabes? Y Aizawa tiene un póster tuyo tamaño gigante en su habitación.
-Cierra la boca Maa.
-Atchis
-Salud, madre mía no me había fijado, te han dejado prácticamente desnudo, anda vamos a casa y te dejo algo de ropa. ¿Por qué me miras así? ¿No te fías de mí?.
-Ni pizca.
-Listo el chico- Dijo Ken- Yo tampoco me fiaría si fuera él.
-¿Cómo te atreves a sugerir que yo le haría algo malo a mi Shuichi del alma?
-Pues por que no sería la primera vez, que cuando te da por ponerte envidioso tienes unos prontos de lo más retorcido.
-Puede que a mí me den prontos retorcidos, pero a ti te dan ataques de gilipollez aguda.
-Esto, yo mejor cojo un taxi y me marcho, que no quiero interrumpiros.
-¿Ves lo que has conseguido con tu bocaza, Ken? Se ha asustado y se va.
-¿No se habrá asustado por verte a ti? Chantajista, delincuente, embaucador, miserable.
-Idiota, descerebrado, desecho humano, piltrafa.
-Desgraciado
-Cabezón.
-Cerca de aquí hay una tienda- Terció Maa- Espera un poco que te compro algo.
Al poco rato Maa había vuelto con unos vaqueros, una sudadera y unas zapatillas deportivas así cómo con una gorra y una mochila. Pusieron a Shuichi el abrigo de Maa y le hicieron entrar a un bar a vestirse. Cuando salió tenía un aspecto realmente anodino, la gorra  ocultaba su cabello rosa, los vaqueros y la sudadera eren de un color azul marino, las zapatillas y la mochila negras, parecía uno de tantos estudiantes que salían de clases nocturnas.
-Venga que te acercamos a tu casa- Dijo Taki.
-Mejor que no, no es que no me fíe pero, puede que Tohma y los demás estén allí, es que últimamente van mucho de visita.
Al oír mencionar el nombre de Seguchi los ASK temblaron, aquel tipo, con cara angelical, había arrojado a Aizawa al paso de un vehículo para que muriese y aunque no lo había conseguido matar le había amargado la existencia.

 

En la casa que compartía con Shuichi, Eiri Yuki apagaba su doceavo cigarrillo mientras paseaba arriba y abajo. Cuando la puerta se abrió el escritor tiró la cajetilla en el sofá y se dirigió a la entrada cómo una centella.
-¿Sabes qué hora es? Me tenías muy preocupado –Gritó abrazando a Shindo- Maldita sea ¿Para qué demonios quieres el móvil? Si me vuelves ha hacer algo parecido yo... ¿Qué es ese olor que despides?. Es KalvinKlain, tú no usas ese perfume y tampoco nadie que conozca ¿Y esta ropa?. ¿No me habrás puesto los cuernos, verdad?  Vamos di algo.
-¿Pero tú estas mal de la cabeza? ¿Cómo quieres que te ponga los cuernos? Es que al salir de NG había un ejército de fans. Se me han echado encima y me han arrancado la ropa, luego me han perseguido pero de pronto Taki Aizawa me ha agarrado del brazo y me ha metido en un callejón, con él estaban sus dos compañeros de ASK y al verme en este estado uno de ellos me ha dejado su abrigo mientras me iba a comprar esta ropa para que no me resfriase.
-¿Has dicho que esta ropa te la ha comprado uno de los ASK?¿Qué te has puesto su abrigo? ¿Qué has aceptado un regalo de un hombre que no soy yo?.
-Vamos Eiri, tú nunca has sido una persona que pierda los estribos por algo cómo eso. Ya hablaremos mañana cuando estés más calmado ¿Eh?.
-Nada de mañana, hablaremos ahora.
Shuichi se metió en el cuarto y atrancó la puerta poniendo la mesa contra ella por que el escritor tenía una cara que daba miedo, de inmediato se empezaron a oír golpes y gritos al otro lado.
-Ábreme, ábreme o hecho abajo la puerta.
A la mañana siguiente cuando el cantante de Bad Luck salió de la habitación se encontró a Yuki dormido en el sofá. Se encamino hacia la puerta confiando en que no se enteraría pues parecía profundamente dormido.
-¿Dónde crees qué vas? Tenemos una conversación pendiente, Shuichi.
-Es que tengo que ir a la productora, estamos grabando un nuevo disco.
-Bueno, no pasa nada por que llegues tarde, y dudo que puedas salir de aquí- Dijo Yuki con una sonrisa sádica cómo las de los primeros tiempos- A menos claro que sepas algo de escapismo. –Agregó esposando a Shindo a la barra del mueble bar y guardándose la llave en el bolsillo.
-Suéltame ahora mismo, mira que Sakano es capaz de suicidarse y K se puede presentar aquí y liarse a tiros.
-Al primero se le entierra y al segundo se le da con la puerta en las narices. Y ahora a lo que íbamos, ¿Qué ha pasado ayer entre Aizawa y tú?
-Nada, no paso nada, ya te conté lo sucedido.
-Venga Shu, sabes que no me puedes engañar, si apestabas a colonia.
-Que ya te lo expliqué, desconfiado, ni que estuvieses sordo.
Dos horas después, tras haber convencido a Eiri de que nada había ocurrido, Shindo salió de la casa para ir a los estudios. Pero a la entrada hacían guardia una horda de fans y al cantante le fue muy difícil escabullirse. Entre aquella caterva de locos se encontraba Mariko Amano, una chica guapa, rubia de ojos azules, largas piernas y que traía por la calle de la amargura a un buen número de chicos. Mariko estaba locamente enamorada de Shindo, había llegado a Japón desde América hacía muy poco tiempo y en el aeropuerto había escuchado una de las canciones de Bad Luck. En el primer concierto al que fue al, ver a Shuichi sobre el escenario se quedó prendada de él, cuando le vio salir intento acercarse pero unos del Backstage se lo impidieron bruscamente, entonces Shindo intervino y se disculpó por la manera en que la habían tratado, le dio su autógrafo y se marchó de allí con una sonrisa. No pudo dejar de pensar en él desde ese momento, veía su rostro en todas partes, se compraba todos sus discos y tenía la habitación empapelada con sus fotos y cuando supo que vivía con Eiri Yuki sintió tales celos que casi se muere.
Mariko no entendía cómo alguien tan dulce cómo lo era Shu podía vivir, con semejante prototipo de mafioso, y mucho menos amarlo. Decididamente la única explicación era que el escritor lo estuviese engañando de alguna forma, pero ella lo rescataría.

 

Era el día del cumpleaños de Shu y en la discográfica se habían reunido todos sus amigos y compañeros (en la casa no era posible por que Eiri era muy antisocial) y le habían dado tanto sus regalos cómo los que le mandaban las fans. Ryuchi Sakuma nada más llegar, y para vergüenza de los presentes, se había tirado sobre la tarta y la había emprendido con ella a mordiscos por lo que hubo que encargar otra y amarrar (literalmente) al cantante de Nittle Grasper a la pata de una mesa en la otra punta de la sala.
-Yo quiero tarta, y Kumagoro también.
-Que vergüenza, y que miles de fans estén locos por él- Suspiro Tohma- Dime Shindo ¿No te gustaría cambiar de grupo? Si dejas Bad Luck podrías cantar con nosotros.
-Quieto ahí Seguchi aléjate de Shindo ahora mismo.
-Vamos K, que era una broma, ¿Qué vas a hacer con eso?, mira que esos chismes son muy peligrosos. Deja ese lanzacohetes hombre, te prometo que no lo volveré ha hacer más.
-Empieza la cuenta atrás 5...4...3...2...1...
En ese momento la esposa de Tohma agarró una maceta y se la partió a K en la cabeza.
-Cero - Dijo con una sonrisa demoníaca- Fin de la historia.

 

En la casa que ambos compartían Yuki se encontraba concentrado en su trabajo, quería terminar cuanto antes ese capítulo para ir a buscar a Shu y darle una sorpresa, por supuesto que no podrían salir a cenar juntos pero, él era un manitas en la cocina. Sin embargo cuando se disponía a irle a buscar la sorpresa se la llevó él al verlo regresar en el coche con K, y descargar un montón de paquetes, de pronto de entre las sombras del portal surgió una chica rubia y se acercó al cantante, intercambiaron unas palabras y la chica le tendió un paquete, luego se arrojó sobre él besándolo en la boca mientras Shindo no reaccionaba. La chica lo soltó y salió corriendo calle abajo riéndose cómo una loca. Con unos ojos que daban miedo, los mismos con los que había mirado a Aizwa tras moler a palos a Maa, Yuki se sentó en el sofá y espero. No tuvo que esperar demasiado por que al poco tiempo Shindo abría la puerta para meter los paquetes en casa, lo acompañaba K que, tras verle la cara al escritor, dejo los que traía y se marchó.
-Shu ¿Lo has pasado bien hoy?
-Pues si, me han hecho una fiesta en la discográfica y han estado todos, incluso tu hermana, si hubieses estado tu también todo hubiese sido perfecto y...
-Cállate, no es eso a lo que me refiero- Dijo el escritor dando un puñetazo a la pared tan fuertemente que se lastimó los nudillos- Dime, niñato- Murmuro en tono amenazante mientras se lamía la sangre de la mano- ¿Quien era esa chica?¿De qué hablasteis?¿Que quería de ti?
-¿Chica?¿Qué chica?
-La rubia desteñida de hace unos minutos, a no ser que halla más.
-Era solo una admiradora, quería felicitarme por mi cumpleaños y darme un regalo.
-Ya, ¿Besas en la boca a todos tus fans o solo a ella?
-Me beso ella a mí.
-Pues no vi que te dieses mucha prisa en apartarte.
-Es que me cogió de sorpresa, nunca pensé que Mariko Amano fuese capaz de algo así.
-Si hasta te sabes su nombre.
-La veo en todos mis conciertos, siempre compra entradas de primera fila y me escribe cartas.
-A o sea que lo reconoces, te escribes con ella.
-Que no, que no es eso, me escribe cartas igual que miles y miles de fans de todo el país.
-Si, ya. Seguro que no te sabes los nombres de todos tus fans. ¿Y qué era el paquetito ese?.
-Pues no se, me suelen regalar dulces, ropa o flores pero esto no se lo que contiene.
Shindo abrió el delgado paquete, dentro, en un estuche de joyería, había una esclava de oro grabada con las iniciales S.S & M.A. Al verlo a Yuki casi le da un patatús.
-Tírala ahora mismo. Mañana voy a comprarte una pulsera de oro cómo esa y la haré grabar con nuestros nombres
-No es necesario Yuki, la verdad es que a mí este tipo de cosas no me gustan.
-Oh, si es necesario, por que verás, no quiero que a la tía esa le quede ninguna duda de a quien  amas y con quien vives, y para eso tiene que ver una prueba fehaciente-Dijo mientras se quitaba la ropa- Pienso dejarte marcas por todo el cuerpo, así cuando te enfoque la cámara todo Japón las verá, y si cómo has dicho esa cría va a todos tus conciertos y se pone en primera fila no dejará de advertirlas. Y tal vez sería conveniente que llevas también una alianza en el anular de la mano izquierda.
Eiri se había acercado a Shu y lo recorría de pies a cabeza con las manos arrancándole la ropa, lo besaba por todas partes y se reía en sordina al oírlo gemir.
-Voy a hacer que te olvides de todo y de todos, Shu, para cuando esto acabe ni te acordaras del nombre de esa chica.
-Pero Eiri...
-Calla.
Yuki apenas dejo dormir a Shindo aquella noche, así que cuando al día siguiente fue al estudio tenía unas enormes ojeras y K le hizo tomarse 10 tazas de café solo. Mientras en la casa el escritor se levantaba más fresco que una rosa y más contento que unas pascuas. La alegría, todo hay que decirlo, le duró muy poco, justo media hora, que fue lo que tardo en empezar a sonar aquel invento maligno denominado teléfono.
-¿Diga?
-¿Shu?¿Eres tú mi amor?
-¿Quién demonios eres?
-Por la voz y el tono deduzco que no eres “mí” Shu, o sea que tienes que ser Yuki, bien da igual. Soy Mariko Amano.
-Contigo quería yo hablar, mocosa ¿No te enseño tu mamá que esta muy feo meterse entre una pareja? Lagarta.
-Pues al parecer se la olvido, igual que a la tuya enseñarte modales, víbora reteñida. Y eso de pareja... ¿Cómo demonios crees que Shu va a quedarse contigo pudiendo escogerme a mí? Ayer se lo dije muy claro ¿Sabes? Que tú no le convenías y que haría bien dejándote y viniéndose conmigo.
-¿Cómo te atreves?. Que sepas que Shindo es mío y de nadie más y a quien me lo quiera quitar me lo meriendo. Y te informo que a diferencia de ti yo no me tiño el pelo. Cretina oxigenada.
-Si, si, tuyo, eso ya lo veremos, te lo pienso quitar. Así que aprovecha para cacarear mientras puedas.
-No estés tan segura, niña, de que me lo quitaras tan fácilmente, fíjate bien en su cuerpo la próxima vez que salga en Best of Japan.
-¿Qué le has hecho?
-¿No te lo imaginas?.
-No importa lo que hayas hecho. Conseguiré que lo olvide, y también que te olvide a ti, mejor aún lograré que te odie.

 

Desde ese día las llamadas de Mariko Aino a la casa, a los estudios o a las oficinas de NG preguntando por el cantante eran constantes. Seguchi y los demás que al principio habían tomado el pelo a Shindo a conciencia y se habían reído a gusto con lo que sucedía y con las reacciones del vocalista, que cada vez que oía el teléfono palidecía, estaban ahora tan preocupados que se turnaban para acompañarlo a casa. Pero un día Shindo  no llegó al trabajo, no se encontraba en casa de Yuki y localizarlo era imposible. Seguchi movilizó a todos los efectivos de que disponía la NG, a la policía y a media docena de detectives, K se puso en contacto con sus amigos de las fuerzas armadas y les pidió que usasen la red de satélites para buscarlo mediante el dispositivo de rastreo que llevaba en su colgante ( y que no sabía lo que era), Hiro se subió en su moto y se recorrió la ciudad de punta a punta, Ryuchi Sakuma le buscó por todos los parques de atracciones y centros de diversión, Nuriko empezó a llamar a los hospitales y los de relaciones públicas se concentraban en callar a la prensa. Yuki, por su parte, se dirigió al lugar donde ensayaban los ASK, abrió la puerta de una patada y se encaró con Taki Aizawa agarrándolo del cuello.
-Bien Aizawa, creo que ya sabes cómo las gasto, así que iré al grano. Dime que has hecho con Shuichi, a no ser, claro, que quieras morir.
-¿Qué le ha pasado a Shu?
-¿Shu, qué es esa familiaridad?
-Es que soy el presidente de uno de sus club de fans y....
-Por mí cómo si eres el presidente del Congo, o me dices lo que le has hecho a mi niño o te mando al cementerio. Desembucha. Que has hecho con él.
-Te digo que yo no se nada, es la primera noticia que tengo.
-Menos cuento, tu le envidias por que tiene talento para cantar, magnetismo con el que atraer a la gente, una voz increíble... y por eso le has hecho daño en el pasado, pero lo de hacerlo desaparecer ya pasa de castaño oscuro. Si no me dices donde puedo encontrarlo te aplasto cómo a una vulgar cucaracha.
-¿Desaparecido?- Pregunto Aizawa zafándose del agarrón- Chicos vamos a buscarle, el que lo encuentre que avise a los demás.
 En ese momento sonó el móvil del escritor y este, al ver en la pantalla el nombre de Shuichi lo cogió.
-Shu, ¿Dónde estas, idiota?
-Temo que te has equivocado, rubiales, no soy Shu.
-Tú, mocosa, ¿Qué haces con el teléfono de Shuichi?
-No solo tengo el teléfono, también tengo a Shu, muy ingenioso el rastreador del colgante, lástima que no sea resistente a ácido.
-Suéltame, loca, pervertida- Se escuchaba de fondo gritar a Shindo- Déjame marchar.
-Cállate, cariñito...
-La madre que... Mocosa te la estas jugando, ¿Qué le has hecho a Shu?
-Mi pequeñín está bien, nunca le haría daño. Pero te he llamado para que sepas que cumplo lo que te dije, te lo he quitado y ahora es solo mío, existirá, cantara, y vivirá por y para mí.  Jua Jua Jua. Nunca volverá a tu lado y en cuanto a esa horrible pulsera que llevaba y a esa ridícula alianza... no flotaban muy bien.
-Te voy ha...me ha colgado. Cuando la coja, mira que secuestrar a Shu, maldita chiflada egocéntrica.
-¿Quién era?- Pregunto Maa.
-Una fan, Mariko Aino, lo ha secuestrado ella.
-¿Secuestrado por una fan? Pues que no le pase nada, esa tía debe estar coladita por él, a saber que le estará haciendo.- Dijo Ken
-¿Cómo que ha saber?
-Bueno, si lo ha secuestrado digo yo que no será solo para jugar a las damas chinas.

 

Yuki, tras partirle la cara al tercero de los ASK, que era el que había hecho tal comentario, salió cómo una bala para NG tras avisar a los demás, de cerca le seguían Aizawa, Ken , con el ojo morado y el labio roto, y Maa que no se atrevieron a entrar en la discográfica por si Seguchi les inculpaba también a ellos.

 

-Hola Yuki ya estamos aquí, ¿Qué le ha pasado a Shu?
-Lo ha secuestrado la loca esa que lleva una temporada dándonos la lata- Dijo Yuki de un tirón- No sé dónde lo tendrá, y K, olvídate de localizarlo por satélite, la tía esa se deshizo del colgante con ácido.
-Menuda perla ha resultado la tal Aino.
-A mí me va ha dar algo, me desmayo.
-Desmáyate cuando aparezca Shindo, Sakano, que no estamos ahora para tus ataques de histeria.

 

Pasaron dos  semanas interminables para Yuki hasta que Shindo volvió. Durante un descuido de Mariko había salido de la casa de campo de esta en Londres y había tomado un avión a Japón, nada más llegar cogió un taxi y se persono en las oficinas de la NG, allí estaba K en plan Rambo dispuesto a buscar personalmente a Aino, en cuanto lo vio llegar agarro el teléfono y llamó a todo el mundo. El escritor fue el primero en llegar.
-¿Estas bien, Shu?¿Te ha hecho algo esa loca?, me tenías tan preocupado. ¿Cómo se te ocurre dejarte raptar por una mujer?, pedazo de idiota, ¿No te da vergüenza?.
-Buaaa, Yuki esta loco, socorro.
-Desde luego hermano –Dijo Tetsuha abrazando a Shindo- Eres un caso, ya le has hecho llorar.
-No le sobes, pulpo.
-¿Pulpo yo?
-Si tú, que no sé quien te ha llamado. Anda y vuélvete con el viejo, a ver si lo matas a disgustos y se olvida de que existo.
-Vuélvete tú, yo me quedo para purificar a Shu.
-Contigo cerca se le pegaran todos los demonios, salido.
-Loco.
-Creo que estos dos tienen para rato, cuñado- Dijo burlona la esposa de Tohma- Ve a descansar un poco. Que alguno le acompañe a casa.
-Kumagoro y yo vamos con él.
-Bueno pues que K les acompañe a los dos.
-Ya me toco hacer de niñera.
-Andando.
-Sí señora. Esta tía tiene peor genio que mi instructor del ejército.
-¿Qué has dicho?.
-Vamonos, Shu, que tienes muy mal aspecto.
Tras largas horas de discusión con su hermano Yuki volvió por fin a la casa, esperaba ver a su amado y poder charlar un rato con él, pero en el piso quien lo esperaba no era Shu si no K que, apoyado en la pared, miraba el paisaje desde la ventana.
-¿Qué haces tú aquí?.
-Me he quedado para hablar contigo, esto no puede seguir así Yuki. Shu tiene que dejarte.
-¿Cómo?
-Mira, esto ha pasado porque él tiene muchos fans, hombres y mujeres, y todos le adoran le tienen por suyo y aceptan, a regañadientes, que tú seas su pareja. Pero los hay que están enamoradísimos de él y te la tienen jurada. No te han hecho nada solo por que no quieren darle un disgusto. Pero mucho me temo que esto se vuelva a repetir. Aunque la noticia no se ha filtrado a los medios los fans están muy bien informados y si alguno descubre lo sucedido puede decidir imitarlo. Por eso Shindo ya no vivirá contigo.
-¿Pretendéis arrebatármelo ahora? ¿Por que no hicisteis nada al principio cuando todo esto aún tenía solución?
K no respondió, se limitó a coger su americana y a largarse de allí. El escritor por su parte fue al cuarto y vio horrorizado que las cosas de Shindo no estaban por ningún sitio, ni las fotos que se habían tomado juntos, ni sus instrumentos, ni el cuaderno de notas, ni la mochila, no había nada, era cómo si esos cuatro años de convivencia no hubiesen existido. Se fue a la cama pero no pudo conciliar el sueño, ¿Donde estaría ahora? ¿Comería bien?.
-Ag no lo resisto, mañana mismo llamo a Tôma.
Al día siguiente Yuki telefoneó a NG Productions y pidió que lo pusieran con el presidente.
-Hola Eirito, buenos días.
-¿Dónde demonios habéis metido a Shu?
-Cálmate, que esta muy bien atendido. No soy tan tónto cómo para dañar a mi mayor fuente de ingresos.
-Seguchi, ese tono musical tuyo no me gusta un pelo, o me dices donde esta o no te vuelvo a dirigir la palabra en la vida.
-O.K., está en Nueva York.
-¿Qué?
-No me des esos berridos por teléfono Yuki, esta en Nueva York, alojado en el Hilton. De paso hará una gira de promoción por América.
-¿Cuándo lo volveré a tener en Japón?.
-Dentro de un año estará de vuelta.
-¿Un año? ¿Y qué hago yo mientras tanto?.
-Mira Eiri, no he querido decírtelo hasta ahora, pero tienes una cara dura cómo pocas se han visto. Tú te largaste a Nueva York a promocionar tu novela y Shu estuvo con una depresión de las buenas. Nos costo un triunfo que volviera a ser el de siempre y cuando volviste no fuiste capaz ni de saludarle normalmente, la segunda vez que te largaste se organizo otra tremolina por parecidas causas, Shu tiene que soportar todas tus burradas y salidas de tono, y son muchas, y ahora, por que se ha ido a América en viaje de trabajo y para alejarse de lo que le provoca estrés te pones hecho un energúmeno.
-Pues yo quiero que vuelva, quiero que vuelva pero ya.
-Se siente pero no puede ser, que pases un buen día.
-Encima cachondeo, no me cuelgues que... Me colgó.
-Secretaria- Decía mientras Tohma en su despacho- Que nadie me pase más llamadas de Yuki, y llama a K, dígale que se las apañe para que Eiri no pueda dar con Shu.

 

El tiempo volaba, un año transcurrió rápidamente y Shu volvió a Japón, en el aeropuerto de Narita muchos fans y periodistas lo esperaban ansiosos. Su estancia en América había dado a Shu cierta madurez de cara a los medios y a las fans, se había vuelto mucho más descarado y los ataques de timidez le daban con menor frecuencia, sus compañeros de Bad Luck, que habían estado Japón salvo para los conciertos, se asombraron de verlo tan cambiado.
-Shindo, ¿Qué tal impresión le ha causado América?
-Me ha gustado mucho, he tenido tiempo para disfrutar a conciencia.
-¿Disfrutar?¿En que sentido?
-Imagíneselo.
En su casa Yuki estaba pegado a la tele, ¿De verdad ese era Shu? Se le veía tan seguro de si mismo ¿Donde habían quedado su timidez y su inocencia? ¿Era posible cambiar tanto en un año?. Tetsuha que estaba con él también alucinaba, quien hubiera dicho que el chico llorón pudiera mostrarse tan descarado con los periodistas y tan natural con las fans.
Un par de horas más tarde Shu llegaba a la casa de dónde Eiri acababa de echar a su hermano con cajas destempladas. El escritor no le dejó ni posar las maletas, tras gritarle “desgraciado”, le dio una tremenda bofetada. Shindo trastabilló y, para horror de K que lo acompañaba y de Eiri se cayó golpeándose la cabeza con fuerza. El manager llamó enseguida a Tohma y a Sakano quienes se presentaron allí al cabo de media hora. Dos horas más tarde Shu seguía inconsciente, Tohma le daba un rapapolvo a Eiri y K dividía su atención entre impedir el suicidio de Sakano y vigilar al vocalista. Finalmente este empezó a volver en sí.
-¿Qué me ha pasado?
-¿Estas bien Shu?- Pregunto K.
-Claro que si, no tienes de que preocuparte.
-Excelente, entonces no cancelaremos tus compromisos para mañana-Tercio Tohma.
-Siento haberte abofeteado pero los comentarios tuyos que vi por televisión me pusieron de los nervios.
-¿Y puede saberse quien demonios eres tú?
-¿Cómo que quien soy yo? Soy Yuki, Eiri Yuki.
-¿Ese nombre debería decirme algo?.
-¿No me recuerdas?¿No te acuerdas cómo nos conocimos?¿El tiempo que pasamos juntos?.
-E Tohma parece que este chico esta mal de la cabeza- Dijo Shu- No le había visto en mi vida. ¿Y por qué pone ese tono de amante abandonado?. Y otra cosa ¿Qué hago yo en esta casa? ¿Cuándo podemos ir a un hotel para registrarme?
Se quedaron todos de piedra, al parecer el golpe había tenido consecuencias inesperadas, todos los recuerdos de Shu con respecto al escritor habían desaparecido, cómo si nunca hubiesen existido.
-¿Me estás tomando el pelo, criajo? Te advierto que si sales por esa puerta ya puedes ir olvidándote de volver a pisar esta casa. Lo nuestro habrá acabado para siempre.
-Sabes Seguchi, esta broma ya no tiene maldita la gracia, me largo ahora mismo.
-De acuerdo, Shu vamos a buscarte un hotel.
Eiri se quedó parado sin saber que hacer ni que decir, había sucedido lo impensable, Shindo había salido de su vida, tal vez para siempre, por culpa de su mano larga y su manía de hablar a destiempo.
-¿Y ahora qué puedo hacer?- Gritó- Shu, mi pequeño Shu me ha olvidado.
Al día siguiente anunciaron por la tele un concierto de Bad Luck y Eiri que lo estaba viendo decidió asistir. Cuando llegó al Tokio Dome su sorpresa fue mayúscula. Gran cantidad de gente se agolpaba en los accesos al recinto, las chicas coreaban el nombre de su favorito y exhibían pancartas con su nombre.
Durante el concierto Eri estuvo en trance de morir aplastado cuando las fans se lanzaron hacia adelante para abrazar a Shu.
Finalmente todo termino y los chicos salieron del Tokio Dome por la puerta trasera donde las fans les esperaban, muchas de ellas se lanzaron sobre el vocalista que las atendio amablemente. Algunas le arrancaron parte de la ropa y Eiri, que lo veía todo sin poder acercarse, se aguantaba las ganas de emprenderla a bofetadas con aquella panda de histericas.
-Shu- Dijo K- Vamos sube al coche.
-De acuerdo, adiós preciosas- Dijo el vocalista guiñando un ojo a las fans.
-Descarado- Murmuro Eiri al borde de la apoplejía.-Esto no quedará sí, vaya que no.

 


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