MILAGRO
Querido Santa:
Está navidad no te pido regalos ni nada parecido; no creas que he sido una niña mala, te juro que me he portado muy bien o eso dice papá y él no miente porque me ha dicho que mentir es malo o aunque tía Tasha dice "una mentira blanca a veces son buenas en la vida" yo todavía no entiendo eso; apenas tengo seis años.
Santa lo único que te pido en esta navidad es tener una hermoso y lindo papi que me cuide, juegue conmigo. Un bello papi que me dé besitos a la hora de dormir como leer un cuento y al despertar y entrar a la cocina con una enorme sonrisa me salude para que juntos cocinemos un rico desayuno familiar.
Solo quiero un papi como todos mis amiguitos. Ellos tienen una mami o papi que los espera a la hora de la salida; he visto los ojos amorosos de ellos al recoger a sus hijos, incluso algunos de mis amigos saben que si su progenitor no está presente porque debieron partir antes al cielo para convertirse en su ángel guardián pero en mi caso ni eso tengo. Mi mami solo se fue y jamás regreso eso lo escuche una vez Santa cuando mi tío Bucky estaba discutiendo con mi papá, entendí que mamá nunca me quiso pero no le guardo rencor después de todo sin ella no sería la princesa de papá.
Por eso Santa te ruego con todo mi corazón tener un papi de regaló está navidad. Que ame mucho a papá y a mí por favor te lo pido solo eso te pido (una niña al finalizar de escribir esas palabras sus ojos derramaron un par de lágrimas siendo estás que cayeron en medio de su carta con su brazo limpio su rostro para terminar de escribir su carta a Santa Claus).
Te quiere Sharon Rogers
PD: en la mesita te estará esperando un rico plato de galletas de chispas de chocolate hechos por papá por favor Santa espero que no mueras de intoxicación otra vez trataré de cambiártelo por unas compradas porque en la familia nadie sabe cocinar al igual tu vaso de leche fría.
PD2: Si es posible también quiero de regaló un ¡HERMANITO!
Tomando un sobre de color rosa con varias calcomanías de estrellas, en la parte delantera del sobre con letras blancas estaba escrito para Polo Norte, coloco con mucho cuidado su carta para luego cerrar el sobre solo abrazo fuertemente el sobre.
— ¡Ya termine de escribir mi carta papá! —grito Sharon para tomar su abrigo de color rojo y salir corriendo del departamento en donde vivía junto a su padre que al verla correr solo la siguió para verificar que no se hiciera daño con una pequeña sonrisa pudo observar a su hija ponerse enfrente del buzón para dar un beso a su carta la introdujo esperando que pronto llegara a su destino.
—Vamos cariño, Natasha y los otros deben estar esperándonos en la cafetería para desayunar —dijo dulcemente un rubio alto de ojos color azul, piel blanca cargando a su pequeña que solo lo abrazo del cuello para darle un pequeño beso en la mejilla viendo los grandes edificios de New York pero solo se abrazaron mas al sentir una fuerte corriente de aire para luego solo negar con la cabeza y seguir con su camino. Los dos estaba en su mundo que no notaron como el viento azoto el buzón sacando la carta para llevarla a su destino.
— ¡Steve Aquí! —grito una pelirroja de ojos verdes con una enorme sonrisa se acerco a su sobrina para llevarla a la mesa donde estaban James Buchanan Barnes conocido por Bucky, mejor amigo casi hermano de Steve Rogers de 28 años, Bucky era abogado al igual que Rogers aunque su amigo era mejor conocido como capitán por haber estado tres años en el servicio militar a sus 17 años actualmente trabajaba en el área de publicaciones por su dotes de dibujante.
Bucky trabajaba en una de las mejores firmas de abogados de New York y, muchas veces intento convencer a su hermano en trabajar con él pero por el horario laboral que absorbería demasiado su tiempo no podría estar al pendiente de su única hija decidió el trabajo de publicista en un centro comercial pertenecientes casualmente a la familia en que su bufet representaba aunque actualmente solo era a su hijo dueño de todo las industrias Stark un omega con una fama no muy buena a su persona.
— ¿Tía Tasha has atrapado algún malo? —pregunto la pequeña de seis años iluminando sus rostro al imaginarse a su tía luchando como una súper heroína la mujer solo le desordeno los cabellos de su sobrina y es que Natasha por sus conocimientos de defensa personal al haber estudiado para ser policía actualmente trabaja como guardaespaldas de la asistente personal del magnate Stark. Virginia Pepper incluso los tres les daba risa que de una manera a otra sus trabajos estaban relacionados con la misma familia Stark.
—Siempre atrapo y castigo a los malos mocosa, pero dime ¿Qué le pediste a Santa esta vez? —pregunto Natasha colocando una sonrisa de medio lado logrando que muchos varones solo suspiraran por la hermosa mujer pelirroja que solo les mostro una mirada de asesina en seria logrando que los otros solo se concentraran en su comida no por nada era conocida como la “Viuda negra”; la menor le brillaron los ojos para juntar sus dedos con algo de timidez bajo su rostro.
—Tía Tasha eso es secreto pero yo se que Santa no me defraudara —levando su rostro solo le regalo beso al aire pero su mirada se enfoco en una mesa en donde la risa de un madre limpiando el rostro de su hijo hizo que su mirada se ensombreciera para mirar con anhelo esa escena al verlo la viuda solo se levanto para cargarla y llevarla a la zona de juegos sabiendo la profunda herida de Sharon a esas escenas.
Steve solo se mordió los labios al sentirse impotente al ver el dolor de su hija y maldecía internamente a la madre de Sharon. El nombre de ella era Sara se conocieron cuando ambos tenían 14 años empezaron siendo amigos aunque siempre ella tenía sola una meta ser una famosa actriz o conocer alguien con el suficiente dinero que la mantuviera como una reina, dos años después en un fiesta con las copas subidas se fueron a un cuarto todo empezó con un beso y luego ambos amigos se habían tenido relaciones sexuales para Steve fue su primera experiencia todo lo contrario con Sara que estaba de novia con un hombre mayor pero ella al idea siguiente solo lo besó y le rego que guardara el secreto porque para la desgracia de Rogers estaba enamorado de ella desde la primera vez que la vio en cambio Sara solo lo tomó como un pasatiempo luego cuando cumplió los 17 años y sintió el llamado de su patria entro a la milicia por tres años dos de ellos participo en una guerra y la otra hizo trabajo de oficina manteniendo una relación con su amiga con derecho como había impuesto la relación Sara.
De algo que agradecía Rogers era su capacidad para aprender rápido con mucho esfuerzo había podido estudiar para ser abogado junto a su hermano. Los tres mosqueteros como se auto nombraron ellos tres siendo Natasha la conciencia como darles una buena paliza si no le obedecían en sus cosas. Al tener 21 años como teniendo otros de sus encuentros casuales con Sara y por el momento de placer ambos no tomaron la medidas preventivas para evitar un embarazo, al los tres meses se enteraron que iban ser padres; él tomo la noticia con una felicidad abrazadora tendría un fruto con el amor de su vida pero Sara lo tomo demasiado mal, discutieron acaloradamente ya que ella no iba a arruinar su futuro por un error estando a la puerta de finalizar sus estudios universitarios como Rogers, dispuesta y con la intensión de abortar como lo había declarado desesperadamente Steve tomando sus ahorros de su vida como lo que le dejo su trabajo de soldado pudo comprar a su bebé.
Una vez que tuvo a su hija en sus brazos fue el momento más especial de su vida su pequeño milagro de navidad y prometiendo que se entregaría en cuerpo y alma para la crianza de Sharon sin importar nada más desde ese día Sara salió de su vida solo basto que Bucky junto a él y su profesor un abogado graduado hicieran un documento legal en donde ella rompía cualquier lazo materno con su pequeña hija dese ese día y ahora seis años después nunca supo nada de ella y esperaba que siguiera de esa forma pero sabía que Sharon necesitaba el calor materno, alguien que le brindara ese amor de madre y no importaba si fuera un omega o mujer. El problema es que él no se sentía atraído físicamente por alguien y no es que siguiera amando a Sara eso era un cosa del pasado pero no había nadie suficiente capaz de que hiciera girar su congelado corazón.
— ¿Te encuentras bien Steve? —preguntó preocupado Bucky viendo como su amigo se había perdido en sus pensamientos el otro solo asintió para levantarse e irse a trabajar no si antes despedirse de su milagro sabiendo que Natasha teniendo su día libre la cuidaría hasta que él regresara a su casa.
—Claro, solo espero que pronto sea navidad —fue la sencilla respuesta del capitán para dirigirse al lugar en donde trabajaba rogando a todos los santos que no estuviera su jefe. Ese hombre odiaba con todas sus fuerzas la navidad pero lo bueno era que respetaba a sus empleados como al igual que una de sus empresas fuera un centro comercial hacia que debía tolerar las festividades como poniendo a sus empleados a la realización de las actividades navideñas aun cuando lo único que deseaba su jefe era encerrarse en su pent-house.
EN OTRO LUGAR
Un hombre mayor estaba sentando en un cómodo sillón viendo la hermosa vista, con una sonrisa enorme apreciaba la nieve tan blanca, tan pura como la inocencia de un niño en creer en él aun cuando todo en ese tiempo dijeran lo contrario que solo era una fantasía, un cuento para esas fechas.
Dando un largo suspiro solo recordó los buenos tiempo en que la humanidad no necesitaba mucho para creer en la magia como fantasía en donde su hogar abundaba la magia ahora estaban en una escases aun cuando sus dos hijos luchaban para que la magia del polo norte no se esfumará cada día estaba dudando si los niños en ese tiempo seguían creyendo en Santa Claus.
Si bien era cierto que estaba ya anciano para seguir con su trabajo de Santa dejando su puesto a su hijo mayor que junto a su esposo hacían un magnífico trabajo pero para él su yerno era como otro hijo por ese motivo todos en el polo sabían que Santa tenía dos hijos pero había días en que realmente deseaba ayudar, al menos encender una pequeña chispa en el corazón de un niño para que este con el tiempo se convirtiera en una llama. Pero estando jubilado y aun cuando le doliera en esos tiempos donde él utilizaba su trineo con sus amados renos ahora era una nave modernizada para lograr utilizar menos magia.
Lo único que le dejaba hacer porque desde que inicio como Santa y cuando sus ojos cansados por la viejez decidieran cerrarse sabría que su hijo lo disfrutaría a lado de su esposo era leer las cartas para él. ¿Cómo no disfrutar de leer los sueños como deseos de ángeles como lo eran los niños?
Sentando en su cómodo sillón, testigo mudo de sus alegrías como lagrimas cuando una carta llega y deseando muchas veces tener más poder para poder realizar los milagros que piden pero hay cosas que aun él debe respetar y aquellos que están en el cielo en su nuevo hogar Santa no pude bajarlos aun cuando lo desee con todo corazón; sin saber cuando había estado meditando en sus cosas cuando en sus dedos callosos un sobre de color rosa con letras blancas se poso en ellas con una sonrisa abrió la primera carta para él. Al finalizar de leerla abrazo la carta y sin importar romper los deseos de sus hijos en que descansara en sus deberes como Santa él tomaría ese caso especial en sus manos.
La pequeña Sharon tendría su papi o él dejaría de llamarse Santa o mejor conocido Odin. Levantándose del sillón tomando un abrigo color café un poco de magia decidió ir a buscar su viejo trineo sus renos como si supieran su idea ya estaban en la entrada del taller sin pensar ni tener mucho menos un plan desempolvo un poco todo para dar una orden y que su trineo surco los cielos como en la antigüedad.
CONTINUARA…