Jeon Wonwoo y Kim Mingyu eran mejores amigos, y lo habían sido desde que se conocieron en el parque infantil del barrio a las edades de 6 y 5 respectivamente. Se habían metido en una pequeña pelea cuando Mingyu había empujado a Wonwoo por el tobogán antes de que este estuviera listo, el mayor, posteriormente, le dio un puñetazo en la nariz. Había habido sangre y caos y Wonwoo pensó que había matado al chico más joven. Fue un alivio saber que no lo había hecho y atrapó a Mingyu en un abrazo rompehuesos y se juraron ser hermanos desde entonces.
Cuando Mingyu se enteró de que la madre de Wonwoo había muerto cuando él era un bebé, estaba angustiado. No podía imaginar que alguien no tuviera una madre; la suya lo arropaba en la cama por las noches y le hacia panqueques para el desayuno. Cuando Wonwoo finalmente había logrado calmarlo, Mingyu le ofreció compartir su propia madre. El corazoncito de Wonwoo se duplicó en tamaño ese día.
Su amistad había sobrevivido mucho. Compartieron buenos y malos momentos, como el miedo de Kim Mingyu de perder a su mejor amigo cuando este tuvo un nuevo novio y la incomodidad entre ellos cuando dicho novio dejó a Wonwoo, acusándolo de acostarse con Mingyu a sus espaldas; o el miedo de Jeon Wonwoo de perder a Mingyu cuando este tuvo una nueva novia, y la conversación que tuvieron después de que ella lo dejó en circunstancias similares acerca de cómo tendrían que ser menos amables entre ellos si querían hacer funcionar una relación con cualquier otra persona. Su determinación no duró mucho tiempo, y volvieron a ser inseparables luego de una semana.
Hubo una vez que decidieron tratar de hacer funcionar una relación entre ellos. Estar juntos no era muy distinto de ser hermanos, con excepción de los besos - que no era algo totalmente extraño en absoluto - y acurrucarse en la cama. Todo terminó, sin embargo, cuando decidieron dar el siguiente paso; ninguno de los dos se sentía cómodo tocando el cuerpo totalmente desnudo de su mejor amigo, y todo terminó en un montón de risas. Rápidamente decidieron olvidar convenientemente esa parte de su historia.
Habían sobrevivido a la distancia y a los choques entre sus personalidades y responsabilidades cuando Wonwoo se fue a la universidad para estudiar música mientras Mingyu terminaba su último año en la escuela secundaria. Wonwoo conoció nuevos amigos, siendo el mas notable un tal Lee Jihoon y su novio-oso de peluche Choi Seungcheol, ambos estudiantes de la misma facultad. Durante ese año, su amistad había pasado de ser física, a pasar a ser a través de un teléfono, sin embargo, cuando Mingyu fue inscripto para su primer año en la misma universidad, todo volvió a la normalidad como si ni siquiera hubieran estado separados.
Mingyu estudiaba fotografía, y rápidamente se hizo amigo de Lee Seokmin, y su novio Kwon Soonyoung, estudiante de artes escénicas, los cuales parecían ser rayos de sol disfrazados de personas. Resultó que los amigos de Mingyu conocían a los de Wonwoo por colaboraciones anteriores, por lo que los seis pronto formaron un estrecho vínculo.
La vida universitaria para los dos pasó en una bruma de fechas límites, fiestas después de los exámenes, y posteriores noviazgos casuales. Mingyu y Seokmin entraron en su último año, mientras que los otros ya se habían graduado y movido a la vida laboral. Wonwoo había sugerido alquilar un piso con Mingyu, quien trabajaba a tiempo parcial, después de que él encontró uno a un precio accesible a medio camino entre el campus y su trabajo. Naturalmente Mingyu lo siguió y todo continuó de la misma manera como siempre había sido; el par y sus amigos encajando entre sí como piezas de rompecabezas.
Era la fiesta de Navidad anual y todos se reunieron en casa de Seungcheol y Jihoon; la pareja se había vuelto bastante popular dentro de la escena musical después de haber ganado varios concursos, obteniendo colaboraciones regulares, y la venta de su música a grandes firmas de primera mano. La casa estaba decorada con el gusto elegante y reservado de Jihoon - un cambio agradable a la decoración de mal gusto del año pasado cuando Seungcheol se había encargado de hacerlo solo - la única cosa llamativa en la casa era la cantidad francamente ridícula de muérdago colgando del techo y de cada puerta; claramente hecho por Seungcheol, y sólo para el placer de las parejas existentes. Wonwoo y Mingyu evitaron con habilidad todos menos uno; para ser justos, ¿Quien espera encontrar muérdago colgando de una rama del árbol en el jardín?
En realidad, no debería haber sido gran cosa; eran cercanos, se habían besado antes, y confiaban el uno en el otro. De todos modos era torpe con otras cuatro personas haciendo comentarios desagradables y silbidos, y Wonwoo agarró a Mingyu, dándole un beso al estilo Hollywood. Debería haber estado bien, de verdad, pero de alguna manera la mente de Mingyu explotó.
De repente, en ese muy incómodo momento, se dio cuenta con absoluta claridad de que amaba a Wonwoo; estaba loca y verdaderamente enamorado de su mejor amigo en el mundo. Se desmayó poco después.
Los días siguientes sólo sirvieron para afirmarlo en lugar de hacerlo un error de borracho como Mingyu había esperado - y más llegó a entender por cuánto tiempo estos sentimientos habían estado creciendo en su interior. Vivir con Wonwoo de repente se convirtió en algo increíblemente difícil para el joven y al parecer eso no escapó a la atención de Wonwoo cuando este le trajo el desayuno a la cama a Mingyu en la mañana de la víspera de Año Nuevo, e insistió en que tenían que hablar.
"Así que..." Wonwoo suspiró mientras se sentaba en la parte opuesta de la cama de Mingyu. "Dime que está mal, gigante amable. Has estado actuando raro toda la semana."
Mingyu se encogió por dentro; Wonwoo utilizó el apodo cariñoso, lo que significaba que quería respuestas y no había forma de salir de esto. "¿Lo hice?" Lo intentó, poco convincente.
Wonwoo simplemente miró a los ojos de Mingyu con una expresión que Mingyu había llegado a conocer como ‘atrévete a mentirme una vez mas’.
"Estoy muy estresado por mi proyecto final." Bueno, no estaba mintiendo por completo, el proyecto final se cernía sobre su cabeza como la espada de Damocles. "Lo siento si he estado actuando raro, realmente no sé que estoy haciendo en estos últimos días."
Su media mentira pareció funcionar cuando Wonwoo visiblemente se relajó y tomó una cucharada de arroz del tazón de Mingyu. En vez de comer él mismo, lo metió en la boca de Mingyu con una sonrisa.
"Oh, gracias a Dios. Pensé que había hecho algo estúpido como para hacerte enojar de nuevo. Sinceramente, no tenía idea de que había hecho." Él se rió entre dientes. "Así que, explícame el proyecto final de nuevo, tal vez podrías intercambiar ideas conmigo." Él se ofreció con una sonrisa.
El problema era que ahora esa sonrisa que había servido para ayudarlo a relajarse todos estos años estaba de repente calentando el corazón de Mingyu y acelerando su ritmo cardíaco; sus pensamientos simplemente se evaporaron en el aire. Así que se metió la comida en la boca y se encogió de hombros.
"Muy bien, lo entiendo." Wonwoo dijo con decepción fingida, y le guiñó un ojo. "Voy a salir. Sólo... ¿Todavía estamos para lo de esta noche?"
"Claro." Mingyu respondió, quizás demasiado rápido. "Voy a estar listo a las ocho."
"Bien." Wonwoo dijo desde la puerta. "Voy a estar fuera durante el día, así que te veré esta noche. Termina tu desayuno."
Con eso Wonwoo se había ido y Mingyu era libre de abofetear su rostro varias veces.
Mientras tanto, Wonwoo estaba teniendo un ataque de pánico afuera. Claro, él había amado a Mingyu desde que se habían convertido en amigos y se había dado cuenta rápidamente cuando sus sentimientos se volvieron románticos durante su pequeño experimento adolescente. Claro, él se había asustado al principio, pero rápidamente se dio cuenta de que nunca podría hacer nada para poner en peligro la amistad que significaba todo su mundo. Y sí, claro, no podía mantener un novio, pero estaba preparado para vivir pasando por relaciones sin sentido si eso significaba que podía quedarse con Mingyu y ver que era feliz; era algo que sintió natural. Mingyu lo era todo para él y nunca se cuestionó de que iba a perderlo.
Wonwoo había aprendido a manejar sus sentimientos a la perfección; le facilitó en gran medida el hecho de que Mingyu era tremendamente distraido a todo lo importante. Así que cuando él besó a Mingyu en la fiesta de Navidad, debería haber estado bien, debería haber estado a salvo; en lugar de eso, sintió a Mingyu tensarse en sus brazos, con una mirada desconcertada en su cara, y él sabía que lo había jodido. Afortunadamente, Mingyu se había desmayado media hora después, y Wonwoo podía desahogarse con su círculo de amigos que le sonrieron cariñosamente, diciéndole que era un idiota, y que todo estaría bien.
Su pánico no había disminuido cuando Mingyu se mantuvo evitándolo en casa y siempre revoloteando nerviosamente fuera del alcance de Wonwoo. No se creyó nada de lo que estaba diciendo Mingyu durante el desayuno y ahora estaba de pie fuera sin tener ni idea a dónde ir, a punto de empezar a hiperventilar. Afortunadamente, su teléfono decidió sonar en ese momento.
"Amigo, ¿A qué hora vas a estar esta noche en casa del JiCheol?" La voz excesivamente alegre de Soonyoung preguntó en el otro extremo.
"Uh... Íbamos a salir de aquí a las ocho." Wonwoo logró decir, dándose cuenta de que sólo tenía una chaqueta liviana y no un abrigo en el viento helado.
"Por supuesto." Soonyoung dijo, e hizo una pausa por un segundo antes de continuar. "Oye, ¿Estás bien? Suenas raro."
Wonwoo suspiró y sus dientes castañetearon. "No, no creo que las cosas van a estar bien entre Mingyu y yo."
Podía oír Soonyoung moverse. "¿Dónde estás? Iré por ti."
Eran las tres de la tarde cuando Mingyu no podía soportar el silencio en el piso y decidió llamar a Jihoon.
"¿Hola?" Llegó una respuesta un tanto ahogada. "¿Qué quieres?"
"Lo siento, hyung. ¿Te estoy molestando?" Mingyu dejó escapar un suspiro abatido. "Puedo llamar más tarde."
"No, ya me has interrumpido ahora de todos modos. ¿Qué pasa?"
Mingyu no dijo nada durante demasiado tiempo mientras luchaba consigo mismo; prácticamente podía oír a Jihoon rodar sus ojos.
"¿Y bien? Escúpelo."
"Creo que estoy enamorado de Wonwoo." Él dejó escapar su propia consternación.
Hubo una risita débil y palabras ahogadas en el otro extremo de la línea antes de que la voz de Jihoon regresara. "¿Qué quieres decir con que "crees" que estás enamorado? Lo estas o no lo estas."
"Bien." Él hizo un mohín. "Estoy enamorado de Wonwoo."
"Sí, lo sabemos. ¿Qué pasa con eso?"
Mingyu estaba a punto de continuar antes de que se diera cuenta de lo que dijo Jihoon. "Espera. ¿Qué quieres decir con que lo saben?" Él comenzó a entrar en pánico. "¿Wonwoo lo sabe?"
"Por supuesto que no, él es un idiota. Lo sé porque yo no soy un idiota, y Seungcheol lo sabe porque yo le dije." Mingyu podía oír un débil ‘Hey, estoy ofendido por eso’ pronunciado por Seungcheol en el fondo.
"Um. Está bien. Wow. ¿Cómo puedes saberlo cuándo yo no lo sabia hasta hace unos días?"
"Porque también eres un idiota, amigo. Has estado enamorado de Wonwoo desde que te conozco. Probablemente durante más tiempo. Eras demasiado estúpido para darte cuenta." Podía oír la sonrisa de Jihoon en sus palabras "Así que, ¿Qué fue finalmente lo que te llevó a darte cuenta?"
"El beso en la fiesta de Navidad." Mingyu podía sentir la vergüenza arrastrarse hasta su rostro.
"¡Sabía que el muérdago haría su trabajo!" Jihoon exclamó triunfante y se rió.
"Espera. ¿Tu los colgaste para tenderme una trampa?" Mingyu estaba empezando a preguntarse si había vuelto a caerse dormido en su cama esta mañana y esto era sólo un sueño muy extraño.
"Sí." Eso fue todo, ninguna otra explicación escapó de la boca de Jihoon.
"¿Eso es todo?"
"Si, eso es todo." Jihoon sonrió.
"¿Qué se supone que debo hacer con esta información? He acabado de decirte que estoy enamorado de mi mejor amigo que, por cierto, no parece verme en una perspectiva romántica, y tú estás sentado ahí todo tranquilo y sarcástico y mierda... ¡Ayúdame, maldita sea!"
Jihoon dejó escapar suspiro "¿Qué tienen en común el osmio y Kim Mingyu?"
"Maldita sea, hyung. ¡No es el momento para tus cosas raras!"
"Sólo tienes que responder a la pregunta."
Mingyu gimió. "¿Qué tienen en común?"
"Los dos son pesados." Jihoon estalló en risas odiosas y Mingyu tuvo que luchar contra el impulso de saltar a través del teléfono y apuñalarlo.
"Oh, gracias."
"Simplemente dile a Wonwoo cómo te sientes. Sabe que tienes que hacerlo, y mientras antes lo hagas, mejor te sentirás."
Mingyu sabía que Jihoon tenía razón, pero el riesgo de perder a Wonwoo estaba jugando en su mente. ¿Y si él arruinaba la amistad que tenían? ¿Volverían a recuperarse si Wonwoo sintió que Mingyu había cruzado la línea? Su instinto le decía que Wonwoo nunca dejaría de estar ahí para él, pero su cerebro estaba le decía lo contrario y él era un desastre.
Finalmente habló. "Supongo. Gracias hyung. ¿Nos vemos esta noche?"
"Sí, y buena suerte. Ahora cuelga para que pueda volver a chupársela a mi novio."
Le tomó cuatro segundos a Mingyu entender el último pedazo de información y él gritó, lanzando su teléfono contra la pared y trató de borrar la imagen de su mente.
El viaje en coche de vuelta a casa de Soonyoung de había sido tranquilo, Wonwoo simplemente jugó con las mangas de su sweater viendose muy devastado. Ahora estaba sentado en el sofá, encajado entre Seokmin y Soonyoung, con una taza de café en sus manos.
"Entonces, ¿Qué pasó?" Seokmin preguntó cuidadosamente "¿Pelearon?"
"¿Qué?" La cabeza de Wonwoo se levantó. "¡No! Sólo hemos peleado una vez, cuando tenía 11 años, y ambos terminamos con las narices rotas."
Soonyoung suspiró. "Entonces, ¿Qué es? ¿Por qué estás tan triste?"
Wonwoo respiró hondo y miró a sus dos amigos. "Creo que Mingyu sabe que tengo sentimientos por él."
"¿Cómo iba a saberlo? ¿Te dijo algo?"
"Bueno, no. No lo sé. Sé que dijeron que lo del beso fue todo en mi cabeza, pero Mingyu ha estado actuando muy raro en los últimos días. Él no se acercó a mí. Traté de hacerle hablar esta mañana, pero me mintió en la cara. Jamás pensé que haría eso."
Era la mentira lo que realmente dolía; Mingyu nunca lo había engañado intencionalmente. ¿Mingyu estaba lentamente tratando de poner distancia entre ellos? ¿Estaba disgustado con Wonwoo? El solo pensarlo casi lo mata. Wonwoo no se había dado cuenta de que estaba apretando la taza demasiado fuerte hasta que Soonyoung la quitó suavemente de sus manos.
"Oye, cálmate." Soonyoung le sonrió. "Te prometo que va a estar bien. Sólo tenemos que trabajar en esto. Ahora, ¿Cómo sabes que te estaba mintiendo y no estaba solamente muy estresado?"
Wonwoo rodó los ojos. "Porque lo conozco desde que tenía 6. Prácticamente vivimos juntos desde entonces. Me ofreció a su madre. Hemos sido mejores amigos, novios, hermanos. ¡Por supuesto que sé que estaba mintiéndome!"
Seokmin levantó las manos "Bien, bien. Te creemos."
"Entonces, ¿Qué quieres hacer?" Preguntó Soonyoung.
"¿Y si él piensa que soy asqueroso? No puedo ir y decirle. ¿Y si no quiere tener nada que ver conmigo?"
"Bien, ahora estás siendo histérico. Te prometo que no hay posibilidades de que él va a querer cortar lazos contigo. Tu mismo lo dijiste, son inseparables."
"Si, pero..."
"Mira, ambos intentaron esto de estar juntos en la escuela secundaria, ¿Cierto? Si estuvo de acuerdo con eso, no hay manera de que no estaría de acuerdo con esto."
"Pero esto es diferente. Este sería yo diciéndole que lo amo. Que estoy enamorado de él. Que he estado enamorado de él desde siempre." Wonwoo suspiró. "Se sentiría engañado. Lo sé."
Seokmin lo abrazó. "Hey, por lo que yo se, no creo que reaccionaría así en absoluto."
Wonwoo lo miró con confusión "¿Qué quieres decir?"
"Estoy diciendo que debes confiar en mí y decirle. Lo prometo. Prometo que no va a terminar como tú temes."
"Es fácil para ti decirlo, ustedes dos son felices juntos. He estado tratando de no quedar expuesto frente a mi mejor amigo durante años."
Seokmin y Soonyoung suspiraron al unísono. "Mira." Soonyoung dijo finalmente. "Se honesto contigo mismo. ¿Vas a dejar de amarlo en este momento?"
"Honestamente no." Nunca fue una cuestión y Wonwoo lo sabía.
"Necesitan aclarar esto correctamente. Si siguen actuando incómodos entre ustedes, van a alejarse. Al menos diciéndole y hablando de ello, tendrán la oportunidad de arreglar las cosas."
Wonwoo enterró su cara entre las manos y trató de no llorar; sintió a Seokmin apretar su hombro con simpatía.
"Sí. Sé que tienes razón. Es que... tengo miedo."
"Lo sabemos, pero estamos aquí para ti."
Eran las siete de la tarde y Mingyu sólo tenía una hora para estar listo antes de que tuviera que enfrentar a Wonwoo nuevo. Estaba volviéndose loco poco a poco, sin saber si quería decirle sus sentimientos a Wonwoo tan pronto como el otro llegara a través de la puerta o enterrar sus sentimientos y tratar de volver a la normalidad. Cuando escuchó las llaves en la puerta principal y el sonido familiar de los pies de Wonwoo en el apartamento hizo su decisión; le diría a Wonwoo esta noche, después de regresar de las celebraciones. Estaba aterrorizado, pero decidió aplacar ese sentimiento mientras se preparaba.
A los cinco minutos antes de las ocho hubo un suave golpe en la puerta haciendo saltar a Mingyu; tomó una respiración profunda, agarró su cámara, apuntó, y abrió la puerta.
"¡Di whisky!" Gritó y tomó la foto antes de que Wonwoo pudiera siquiera reaccionar.
Fue sólo después de que él bajó la cámara que se dio cuenta de cómo Wonwoo se veía, y su sonrisa vaciló un poco. Tragó saliva con nerviosismo. Los ojos de Wonwoo estaban delineados y maquillados y vestía todo de negro; una camisa abrazándolo como una segunda piel con pantalones apretados, un cinturón de cuero negro clásico sosteniéndolo; en sus pies, zapatos de cuero brillantes. Mingyu se enamoró un poco más.
"¡Demonios, no hagas eso!" Wonwoo se quejó con un mohín. "Casi me da un ataque al corazón."
Ahora ya sabes cómo me siento, pensó Mingyu. "Lo siento, pero debes saber que ahora me encanta tomar fotos de gente desprevenida."
"De todos formas, estoy teniendo una crisis de cabello. ¿Ayuda?"
Wonwoo le tendió el bote de gel para el cabello a Mingyu, quien lo tomó, y se sentó en la cama de Mingyu.
"¿Como te lo pongo?" Mingyu se sonrojó ante sus propias insinuaciones no deseadas y mentalmente se abofeteó a sí mismo.
Wonwoo tosió. "Oh... um... Sólo lo que creas que va a quedar bien."
Mingyu se puso a trabajar, disfrutando de la sensación del pelo de su amigo, luchando contra su deseo de darle un tirón ligeramente para poder chocar sus labios. Wonwoo olía increíble y todo lo que Mingyu quería hacer era enterrar su rostro en el hueco del cuello del otro. Se sorprendió por lo mucho que quería a Wonwoo en este momento; haciendo claramente una decisión acerca de sus sentimientos, le hizo estar más decidido a tener éxito. Respiraba de forma insegura y sabía que Wonwoo se había dado cuenta cuando el mayor siguió jugando con sus manos nerviosamente.
"Se ve bien. ¿Qué te parece?" Le entregó un espejo a Wonwoo, quien se miró muy brevemente.
"Genial. ¿Estás listo para irnos?" Wonwoo se levantó bruscamente y se dirigió a la puerta principal.
El corazón de Mingyu se hundió mientras una pieza de su confianza se quebraba. Wonwoo actuaba frío y todos los temores anteriores de Mingyu regresaron cuando se dirigió hacia su amigo y salieron.
Las manos de Wonwoo temblaban mientras se vestía por la noche. Su plan era verse tan bien que Mingyu nunca se negaría una vez que se confesara después de la medianoche, pero la verdad es que estaba tan nervioso que tuvo que hacerse smokey eyes porque no dejaba de arruinar su delineado de ojos. Finalmente, se miró en el espejo y sonrió levemente, se veía sexy y, con suerte, irresistible. Agarró su gel para el cabello y se dirigió a la habitación de Mingyu. Su plan para seducir a Mingyu comenzaría ahora.
Vacilante, él llamó a la puerta y fue recibido con el flash de una cámara cuando la puerta se abrió. Se recordó a sí mismo borrar la imagen si alguna vez ponía sus manos en la cámara; lo cual era poco probable, ya que Mingyu la vigilaba con su vida.
Mientras Mingyu estaba ocupado peinando su cabello - se sentía increíble – él le estaba dando una buena mirada a su amigo. Mingyu no sólo olía pecaminosamente bien, se veía genial; en sus pies llevaba botas, unos jeans blancos ajustados abrazaban sus caderas y un jersey suelto de color negro colgaba de uno de sus hombros. Su cabello castaño estaba peinado hacia atrás en un look sexy, revelando cada gloriosa pulgada de la piel de su cara.
Una repentina ola de ansiedad golpeó a Wonwoo; él era muy consciente de la respiración inestable de Mingyu y lo interpretó como malestar. Su hábito nervioso de juguetear con sus dedos volvió de nuevo y estaba a punto de desmayarse al momento en que Mingyu terminó con su pelo y le mostró el espejo.
Sabía que fue demasiado abrupto, pero tenía que poner distancia entre ellos. No podía hacer esto. Simplemente no podía confesarse. Mingyu lo odiaría y él perdería a su mejor amigo en el mundo entero. Él iba a perder al hombre que amaba tanto como a su propia vida. Así que mantuvo los ojos lejos de él, haciendo una pequeña charla mínima y se dedicó a tratar de ignorar a Mingyu durante el resto de la noche.
Llegaron a la casa de Jihoon y Seungcheol después de treinta insoportables minutos. Mingyu estaba a punto de golpear cuando la puerta se abrió de repente y una pareja que se veía ligeramente borracha los recibió con silbidos.
"¡Se vinieron con todo esta noche!" Jihoon sonrió y tomó a los dos en un abrazo.
"¿Verdad? Lástima que no pensamos en invitar a mas solteros a la fiesta. Sus looks se van a perder." Seungcheol les guiñó un ojo y regresó al interior.
Wonwoo se separó del abrazo de grupo y se fue con Seungcheol, mientras Mingyu se quedó con Jihoon y lo abrazó un poco más fuerte.
"No creo que esto vaya a funcionar." Le susurró al oído a Jihoon.
El hombre mayor le apretó una vez más y lo soltó, sonriendo suavemente. "No seas tonto. Por supuesto que sí. Mírate, eres irresistible." El tanteo gentil en su parte trasera no pasó desapercibido por Mingyu.
"Ya estás borracho, ¿No es así, hyung? Te pones toquetón cuando estás borracho."
"Eh, tal vez un poco. Pero yo soy un borracho que dice la verdad. Así que confía en mí, no habrá ningún problema."
Mingyu siguió a Jihoon por unos momentos, sacando coraje del hombre más pequeño; afortunadamente su amigo también era un borracho cariñoso.
Wonwoo estaba abatido; se odiaba más a cada minuto. Se las había arreglado para evitar a Mingyu con éxito durante toda la noche y mientras más lo hizo, más miserable se sentía. ¿Realmente era así cómo iba a terminar esto? ¿Por qué estaba siendo tan estúpido? No podía dejar de luchar consigo mismo. Por fuera se veía como cualquier otro asistente a la fiesta, feliz de deshacerse del pasado año y darle bienvenida al nuevo año con bebidas, amigos y besos. Ahora que estaba cerca de la medianoche y se había escondido en el patio detrás de una gran planta en maceta, desordenando su pelo y tratando de no llorar.
De repente, el flash de una cámara se disparó en su cara y estaba momentáneamente ciego. Cuando se recuperó, se encontró a pulgadas de la cara de Mingyu, estudiándolo de una manera medio divertida.
"¿Qué tienes esta noche?" Mingyu preguntó.
"Nada." Él le espetó, y de inmediato se arrepintió cuando Mingyu se estremeció. "Lo siento. Estaré bien en un minuto."
"¿No quieres hablar de ello?"
"No, realmente no." Eso era una mentira. Quería arrojarse a Mingyu y prometerle el mundo, pero no era más que un cobarde.
"Bueno." Mingyu se encogió de hombros y se quedó allí en silencio, mirando al cielo sin estrellas.
Wonwoo no podía amar más ese momento aunque lo intentara; su amigo siempre estaba dispuesto a complacerlo, a seguirle sin decir una palabra. Su corazón se hinchó dolorosamente mientras miraba a la ridículamente hermosa cara de Mingyu. ¿Cómo es que siquiera él era real? Era intimidantemente atractivo, aún poseyendo el más tierno corazón imaginable.
"Hey, ¿Quieres entrar?" Mingyu dijo cuando volvió su atención a Wonwoo. "Es casi la hora de dar la bienvenida al Año Nuevo."
"No, me gustaría quedarme aquí por un tiempo. Ve tú. Encuentra a alguien a quien besar."
Mingyu le sonrió con tristeza, pero hizo lo que le dijo, como siempre. Wonwoo dejó que sus lágrimas cayeran una vez que estuvo seguro de que Mingyu estaba de vuelta en el interior. Oyó la cuenta atrás, los festejos, y se dejó hundir más profundamente en su corazón roto.
Entonces, de repente, había un par de manos en sus mejillas y un par de labios en su frente, antes de fue tirado en un fuerte abrazo.
Mingyu sintió que su corazón se rompía ante las palabras de Wonwoo; cada paso que daba lejos del otro era más doloroso que el anterior. Oyó comenzar la cuenta atrás y miró la escena delante de él. No quería estar allí, quería estar aquí con Wonwoo. Cada fibra de su ser le gritaba y se dio la vuelta, tomando grandes pasos hasta que llegó con Wonwoo justo a medianoche. Podía ver las lágrimas del hombre mayor y ya no pudo controlarse a sí mismo; tomó la cara de Wonwoo entre sus manos y besó su frente con ternura.
Abrazó a Wonwoo fuertemente mientras le susurraba. "Sea por lo que sea, no llores. Estoy aquí, siempre estaré aquí."
Las manos de Wonwoo se acercaron lentamente a la espalda de Mingyu y el más alto sintió todo su cuerpo cantar por tacto.
"Puede que no. Es posible que me dejes."
Mingyu sólo lo apretó más fuerte "Nunca te dejaría, te seguiré a cualquier lugar; siempre lo hago, lo sabes."
Se quedaron en silencio por un rato, escuchando los lejanos fuegos artificiales y los aplausos que mueren dentro de la casa. Con cada respiración, Mingyu se perdía más y más en Wonwoo, rodeado como estaba por el hombre, y se dejó ir. Volvió la cabeza y le dio un beso profundo a la piel por debajo de la oreja de Wonwoo. Oyó al otro jadear antes de que fue empujado suavemente.
"¿Por qué hiciste eso?"
Los ojos de Wonwoo le desafiaban y lo miró de vuelta con tanta intensidad; no perdería ahora, no había marcha atrás. Respiró hondo, una vez, temblando mientras lo dejaba salir.
"Porque te amo."
Los ojos de Wonwoo estaban llenos de emociones en conflicto mientras susurraba. "Yo también te amo, lo sabes. Pero, ¿Por qué me besaste así?"
"No lo entiendes." Mingyu gruñó y se pasó una mano por el pelo frustrado. "Te amo."
Wonwoo lo miraba sin comprender "¿Qué? ¿Qué estás...? Yo no..."
"Oh, por el amor de dios! ¡Te amo! ¡Estoy enamorado de ti!"
Sólo hubo un silencio durante unos segundos, pero fue suficiente para hacer que Mingyu lamentara todo.
"Oh." Dijo Wonwoo.
Estaba a punto de alejarse para que Wonwoo no viera sus lágrimas cuando fue empujado contra la pared de la casa y fue besado con intensidad. Cada nervio de su cuerpo explotó cuando los labios y la lengua de Wonwoo se movieron contra la suya; sus manos lo agarraron con fuerza, con miedo de que todo esto fuera a terminar pronto.
Wonwoo se apartó un poco para susurrar. "Dilo otra vez, Mingyu, por favor."
Mingyu dejó que sus lágrimas cayeran libremente por su rostro. "Estoy enamorado de ti. Siempre lo he estado, pero yo no lo supe hasta que me besaste en la fiesta de Navidad."
Wonwoo sonrió contra la mejilla de Mingyu. "Estoy enamorado de ti, mi gigante amable. Siempre lo he estado, pero pensé... Estos últimos días que me has estado ignorando, pensé que era porque sabías. Pensé que lo supiste cuando te besé y no me querías de vuelta. Estaba seguro de que me dejarías.”
"Lo diré de nuevo. Nunca te dejaría."
Ellos se abrazaron más apretado y juntaron sus labios una y otra vez, sus besos lentos y apasionados, llenos de años de amor y deseo. Nada existía excepto ellos dos. Bueno, nadie más que sus mejores amigos que decidieron interrumpir el momento con aplausos y silbidos de borrachos.
"¡FINALMENTE, MALDITA SEA!" Jihoon gritó y cayó entre risitas.
Seungcheol estaba luchando con su propia embriaguez mientras trataba de ayudar a su novio a levantarse. "Les tomó demasiado." Él dijo arrastrando las palabras.
Seokmin y Soonyoung estaban pegados al otro, con las mejillas juntas mientras arrullaban a la nueva pareja.
"Ves, ¿Que te dijimos? ¿No le dijimos, Seokmin?" Soonyoung hipó.
"Estoy seguro de que lo hicimos. Esto fue todo por nuestros. Lo hicimos bien. Merecemos pastel." Seokmin estaba divagando y tratando de llevarlos a entrar.
Wonwoo y Mingyu gimieron al unísono, dispuesto a golpearlos, pero luego se miraron y sonrieron; había demasiado de que ponerse al día. Silenciosamente se pusieron de acuerdo, decidieron hacer caso omiso de sus amigos y caminar en línea recta por delante de ellos para hacer su camino a casa.
Esa noche ninguno de los dos tenía dudas sobre explorar los valles y llanuras desnudas del cuerpo del otro mientras se susurraban palabras de amor hasta bien entrada la mañana.