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Letras, Notas Y Sentimientos por diclonius

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Notas del fanfic:

Espero que disfruten de esta historia que mi mente descontrolada creo^^

Notas del capitulo:

holiwis gente linda ¿me recuerdan? espero que no se hayan olvidado de mi, **cricricri** T-T esta bien entiendo, nadie me quiere todo me odian.. y ya no tengo gusanitos.... pasen y lean... 

Capítulo 1

[Narra Stephan]

Recostado en el césped húmedo, respire profundo dejando que el frio aire de la noche llenara mis pulmones, “estoy solo…” pensé “amo estar solo…”
una pequeña sonrisa se curvo en mis labios, al ver pasar una estrella fugaz, estos eran los momentos que más atesoraba, solo yo, mi guitarra y las estrellas. Me senté, tomé mi guitarra y comencé a tocar.

No sé cuánto toque, no pensé en el tiempo, no pensé en nada. Solo deje que mis dedos acariciaran las cuerdas y que la melodía inundara mis sentidos, cada vez que estaba así me sentía feliz, sentía que ese era mi lugar en el mundo, sentado en el césped, de noche, lejos de todo, tocando la guitarra, si ese era mi lugar.

Llevo solo Cuatro meses en este lugar y esto es lo único que me hará extrañarlo cuando nos marchemos, “mañana nos marchamos… otra vez” ya no era nuevo para mí,  pero sería un nuevo lugar al que adaptarse, nuevas calles que memorizar, nueva habitación que “adaptar a mí”, buscar otro lugar/refugio.  Solo esperaba que las personas fuera de tipo uno. Durante mis múltiples cambios de “hábitat”  descubrí que hay tres tipos de personas, o más bien tres actitudes que las personas toman al conocerme, el tipo uno; son lo que intentan acercarse pero no insisten mucho, y cuando no lo logran me dejan en mi mundo sin meterse, a veces vuelven a querer acercarse pero sin muchas expectativas ni insistencia. El tipo dos; los que tratan constantemente de integrarme como si fuera una especie de chico tímido, y a los cuales no puedo hacerles entender que me gusta estar solo, y por más que lo ignore, aleje o amenace, siempre siguen insistiendo. Y finalmente el tipo tres; son los malnacidos que al primer rastro de introversión de mi parte comienzan a molestarme, ponerme apodos, correr rumores, golpearme, y cosas por el estilo, para mi desgracia en mi “hábitat” actual eran del tipo tres.

De alguna forma espero que en el próximo lugar sean de tipo uno, pero supongo que luego de este, que sean de tipo dos no me molestarían tanto.

Sin notarlo me perdí en mis pensamientos, cuando el sonido de mi celular me devolvió a la realidad como un cachetazo.

_ ¿¡Dónde demonios estas Stephan Vincent Powell!?- tuve que separar el celular de mi oreja para que no se reventara mi tímpano, era mi madre. “¿no debería estar dormida…? ¿Qué hora es?” pensé, cuando fui a mirar mi reloj, note que el reflejo del sol me lo impedía, le hice sombra con una mano, pero antes siquiera de ver donde estaban las agujas pensé “¿sol…?”

_ ¡maldición! ¿Ya amaneció? Estoy muerto…- escuche como alguien maldecía casi a lo lejos, era mi teléfono lo tome y susurre –ya llego- antes de la avalancha de insultos y maldiciones, tome mi guitarra y volví a la cartera, ahí estaba mi camioneta, es camioneta era mi mejor amiga, nunca me dejo a pie, a pesar de su gran kilometraje era la mejor camioneta que pudiera pedir.

_vamos chica, o estaré en grandes problemas- le susurre, mientras me subía. Era de madrugada así que durante los 24km que tenía hasta la casa solo me cruce con un camión de frigoríficos y un grupo de ciclistas, llegue rápido ya que pise a fondo, pero eso no impidió que el infierno se desatara cuando atravesé la puerta.

_ ¿¡Dónde demonios estabas Stephan!? ¡Más te vale que no hayas estado con ningún chico!- me lo veía venir, pero eso no hizo que me enfadara menos, desde que mi madre descubrió que soy bisexual vive paranoica, debe creer que mi vida gira entorno a las vergas o algo así.

_no- dije cortante y subiendo por la escalera –estaba en mi refugio- ella y mi padre sabían que siempre me hacía de un refugio sea dónde fuere que nos mudáramos, y ella era especialmente molesta, insistiendo en que le dijera donde eran mis refugios, pero nunca revele ni atisbo de pista sobre sus respectivas ubicaciones, ya que sabría que dejaría de ser mi refugio para volverse el “primer lugar para arruinar yendo cuando se me dé la regalada gana” de mi madre.

_ ¿y eso es dónde?- dijo, talvez, creyendo que porque nos mudaríamos se lo diría, me mantuve en silencio y continúe subiendo las escaleras.

_hola hijo-era mi padre, estaba reclinado sobre la puerta de mi habitación, mi padre era lo contrario a mi madre, él se toma todo con calma y prefiere hablar tranquilo, que tener un ataque de histeria -¿Dónde estabas?- su voz era cansina, pero parecía un poco preocupado.

_estaba en mi refugio, me perdí en mis pensamientos y amaneció sin que lo notara- susurre para luego bostezar.

_nos preocupamos cuando no te vimos en tu cuarto por la mañana- dijo suspirando.

_lo siento- el me dio una palmada en el hombro, luego me revolvió el cabello. Y al final se enderezo y camino escaleras abajo, antes de que su silueta se perdiera bajando, cruzamos miradas y supe lo que pensó “iré a calmar a la fiera…” sonreí y asentí.

Entre a mi Habitación y estaba casi vacía, salvo por las cajas apiladas. Me senté en el piso, tome mi guitarra y comencé  a tocar. Esa guitarra me la había regalado mi abuela cuando cumplí los 8 años, dos días después ella falleció, esa mujer había sido mi mundo durante mis primeros ocho años de vida, fue la única que siempre me entendió sin palabras, y esa guitarra era mi objeto más preciados, y al igual que mi abuela sentía que esa guitarra era mi forma de expresarme sin palabras, aunque la gente no lo entendiera, los pocos que me habían escuchado tocar solo notaban los acordes, el sonido, el ritmo, pero nunca los sentimientos escondidos detrás de estos…

_Stephan... ¿Stephan?... ¡Stephan! _ otra vez fui traído a la realidad de un sopapo. –Stephan deja de estar en las nubes, el camión dela mudanza esta abajo, lleva tus cosas- luego de haber dictado su orden desapareció de mi cuarto.

Tome una caja y baje, repetí esto con las diez u once cajas, podría haber bajado de a dos o tres y ahorrado tiempo pero no tenía ninguna prisa. Pero al parecer mi madre si la tenía, se la paso todo el tiempo que estuve bajando cajas quejándose y diciendo que las bajara más rápido.

_ ¿no podías hacerlo más rápido?- dijo con una mano en la cintura y apoyada en el auto, mientras bajaba la última caja.

_si me hubieras ayudado habría sido más rápido- masculle por lo bajo.

_ ¡no me contestes!- dijo para luego meterse ofendida en el auto.

Si no fuera mi madre creo que la odiaría, pero en fin, termine de subir las cajas al camión con ayuda de uno de los hombres que llevarían nuestras cosas a nuestro próximo destino.

En pocos minutos estábamos en camino a donde solo mis padres sabían, es probable que me hayan dicho a donde, pero hace unas cuantas mudanzas dejo de importarme, así que simplemente lo bloqueaba de mi mente cuando me lo decían.

_ ¿estas emocionado hijo?- escuche decir a mi padre que hablo justo en el momento que levante mi celular para cambiar la canción y tenía la música pausada, sí que tenía leídos todos mis movimientos como para hablarme en el momento justo.

_ ¿Por qué tendría que estarlo nos mudamos todo el tiempo?- dijo con desgano mientras miraba melancólico por la ventana, ya que justo pasábamos por donde se encontraba mi refugio.

_porque estamos yendo de nuevo al pueblo de tu abuela- me paralice al escuchar eso, no vivimos ahí desde que yo tenía 6, y nunca volvimos, luego de que la abuela murió dos años después-¿acaso no estabas escuchando cuando lo dije?- pregunto, poco sorprendido de que lo haya bloqueado.

_ni te molestes, el solo escucha y hace lo que quiere- dijo mi madre volteando la cara, seguía ofendida por lo de esta mañana, y no planeaba hablarme, “¿no debería ser yo el inmaduro en esta relación?” pensé, pero bueno no me quejaba desde que había empezado la adolescencia, en realidad un poco antes, fue cuando deje de depender de mi madre para cosas como sonarme la nariz, cocinar e ir solo a la escuela, cuando entro en modo reina del drama, de todo hacia una novela, que si llegaba 10 min tarde de la escuela, que si mi nota de este examen era más baja que la de fulano, que si mi cama estaba mal hecha, que si esto que si lo otro uno pensaría, está bien cualquier madre se preocupa así por su hijo cuando crece, eso no me molesta lo que me molesta es como lo expresa

[Palabras exactas que uso mi madre para los ejemplos planteados]

_ ¡Llegas tarde! Llevo 10 min. Esperándote, el señorito anda por la calle, un día te secuestraran y más vale que te acostumbres porque tu santo te va a ir a buscar-

_como voy a estar orgullosa de mi hijo si otra madre puede presumir una mejor nota del suyo, tu trabajo, no tu obligación es ser el mejor, para que yo pueda probar que soy la mejor madre-

_tu cama está mal hecha, ¿Qué no haces nada bien? Solo tienes que hacerlo bien, no tengo que explicártelo ya deberías saber cómo se hace, ahora ve y hazlo bien-

Suena cruel, pues lo es,  no sé qué mosca le pico pero desde entonces no para de criticarme, enojarse, haces dramas e histerias por todo, y ni hablar de cuando se enteró de que soy bisexual, ay por dios, haber gritado ¡bomba! En un avión habría causado menos histeria y descontrol empezó a gritar, a decirme que era un desagradecido, que tenía la obligación de casarme con una mujer y darle nietos, casi me hecha de la casa, nunca pude hacerle entender que también me gustan las mujeres, solo que de igual manera me gustan los hombres, vive paranoica pensando en que me iré de la casa con un tipo y le “arruinare su deseo de ser abuela”, nunca pude seguir esa conversación así que la abandone y deje que se comiera la cabeza.

Otra vez me perdí en mis pensamientos cuando la calmada voz de mi padre me trajo de vuelta a la realidad, eso de perderme en mi cabeza era algo más que cotidiano, ya al punto de ser compulsivo, no tenía interés en el mundo, y el mundo tampoco parecía tener interés en mí.

_ ¿y, que dices hijo?- me dijo mirándome por el espejo retrovisor.

_ ¿Qué debería pensar?- dije cansado, para luego bostezar.

_ Amabas ese lugar de pequeño, creí que estarías emocionado por volver- dijo crédulamente

_no amaba el lugar, amaba a la abuela- dije triste, viendo el asombro en los ojos de mi padre, y la molestia en los de mi madre. A ella no le gustaba que hablara de mi abuela. Mi abuela era la madre de mi papa, y por lo tanto la suegra de mi madre, su relación siempre fue turbia, pero lo que más enfurecía a mi madre era pensar, muy acertadamente cabe acotar, que yo quería más a mi difunta abuela que a ella.

_hijo… dijo tristemente mi padre, miro de reojo a mi madre, como indicándome que no mencionara el tema delante de ella, *no es mi problema que mi abuela haya sido mejor madre que ella* lo pensé, sabía que si lo decía se desataría una batalla campal, y era para lo que menos estaba de humor en ese momento. Así que solo chasquee la lengua y me puse a mirar por la ventana, mientras presionaba el botón de play, en mi celular, para volver a perderme en la música, hasta quedarme dormido.

_hijo…. ¿Stephan?- la voz de mi padre

_ ¡despierta por un demonio!- la de mi madre, su grito me sobresalto-ya llegamos- Dijo sin mirarme mostrándome que seguía enojada.

Me estire como si fuera un gato y Salí del auto, era casi el atardecer y el cielo tenía un color naranjo muy cálido.

_voy a estirar las piernas- le dije a mi padre que me miro casi resignado a que diga lo que diga iría igual.

_ve con cuidado, y no llegues muy tarde- sus típicas advertencias, pero que las repitiera cada vez que salía lejos de ser molesto me hacían sentir seguro, me hacía feliz saber que se preocupaba por mí.

Camine por algunas calles que vagamente recordaba, es decir tenía 8 años la última vez que vine, era lógico que no recordaría todo a detalle, creo que apenas sé que cene anoche. Entre pensamiento y recuerdo, mis pies me llevaron a un parque, camine sin rumbo por él, para seguir pensando.

_nuevo lugar, misma vida- pensé sin pensar que mi vida cambiaria tan solo en unos segundos.

Y un fuerte pelotazo dio directo en mi estómago.

 [Fin Narra Stephan]

Notas finales:

y? y? les gusto? vamos vamos, no sean timidos jaja, **cricri** gracias señor grillo por siempre estar presente.... ^.^--- espero sus reviews^^porfavor... no me dejen sholita  los amo.....^^


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