AMIGOS
Me llamo Kotaro Hayama, tengo 24 años, soy alto mido 180 cm, mi cabello es corto de color anaranjado, el color de mis ojos son de un verde con mis pupilas negras de forma ovalada.
Practique básquetbol en mi juventud y fui apodado Bestia Relámpago, por mi manera de jugar al igual que poseo un par de colmillos ganándome ese nombre.
Que puedo decir de mi personalidad soy muy hiperactivo, bromista, alegre, un comportamiento de niño los recuerdos que más aprecio son todos pero en especial de mi infancia por Él.
Nos conocimos cuando tenía 7 años, nunca podré olvidar su hermoso cabello rojo, al igual que sus ojos, piel blanca, ese primer encuentro quedó grabado como piedra grabada en mi corazón jamás podría olvidar cuando me hice amigo de Akashi Seijuro.
Pocos conocían esa información. Sólo dos si soy sincero para él su mejor amigo Midorima, en mi caso mi Reonee. Con el tiempo nuestra amistad tomó otro rumbo.
A la edad de 12 años, me atreví a declararme, siendo niños-adolecentes nos dimos un pequeño beso en la mejilla, mi comportamiento siempre de niño nos metía en problemas pero tú siempre estabas a mi lado, un ser absoluto tan perfecto prefería estar conmigo.
Fui cobarde lo admito, nunca pensé que te dejaría solo cuando a nuestros 15 años confesaste a tu padre que éramos novios, tuve tanto miedo cuando vi los furioso y fríos ojos de tu progenitor, estaba tan nervioso que intente hacer un chiste...
Todo salió mal y desearía regresar el tiempo para enfrentarme con él, luchar por nuestro amor pero tú, mi bello guerrero luchaste por los dos, enseñaste a tu padre porque eras el emperador de Teiko.
Estudiamos en diferentes institutos pero siempre nos damos el tiempo para tener una cita, te felicite cuando te ascendieron a capitán como al igual tuvimos nuestra primera...
¡Discusión!
Y todo porque por accidente diste tú primer beso a un compañero de equipo pero recuerdo que sólo me bastó ver tu mirada bicolor para guardar silencio y esperar tu explicación. Fue gracioso saber que por estar practicando tú junto a Kuroko no deseaban ser de menos por sus alturas.
Por estar forcejeando con los más altos no te diste cuenta y terminaste estrellando tus labios con ese tipo...
Han pasado seis años que me fui y hoy te deje un mensaje para que vinieras al café dónde te estoy esperando para hablar de un futuro juntos.
Ahora que ya mi vida se encuentra normal, ooh
Que tengo en casa quien sueña con verme llegar, ooh ohh
Ahora puedo decir que me encuentro de pie
Ahora que, me va muy bien
//Akashi necesitamos hablar, te espero a las 2:30 en el mismo café dónde una vez nos digamos adiós. Kotaro//
¿Por qué ahora?
Pensé que si algún día nos volverías a ver todo quedaría en el pasado, pero hay heridas que son necesarias hacerlas sangrar para que exista una recuperación completa.
No te culpo de los errores del pasado, ambos éramos jóvenes pero tú decidiste irte de mi vida y yo aprendí de cada caída hasta que al fin pude tener la frente en alto.
Ahora que con el tiempo logre superar, mmhmm
Aquel amor que por poco me llega a matar, no ooh
Ahora ya (ahora ya), no hay más dolor (no hay más dolor)
Ahora al fin, vuelvo a ser yo
—Hola Akashi —grito emocionado Kotaro para saltar encima del pelirrojo y abrazarlo como antiguamente lo hacía, en cambio el emperador se separo lentamente para sentarse en el silla viendo los ojos de su antiguo amor y ahora ex.
—Tengo poco tiempo Hayama, por ese motivo quiero finiquitar este asunto para poder regresar a mi hogar —dijo serio Akashi dejando lucir sus ojos bicolor al pelinaranjado que solo se acomodo incomodo en la silla para que siguiera la mirada del pelirrojo a la calle viendo a las personas caminar sin darse cuenta de nada.
—Lamento me comportamiento cuando era joven —susurro el varón viendo como Akashi apretaba los puños tratando que algunos recuerdos no vinieran en ese momento lo que menos deseaba era parecer débil.
Pero me acuerdo de tí
Y otra vez pierdo la calma
Pero me acuerdo de tí
Y se me desgarra el alma
Pero me acuerdo de tí
Y se borra mi sonrisa
Pero me acuerdo de tí
Y mi mundo se hace trizas, ooh ohh
Viéndote furioso me recuerdo que tiene toda la razón de estarlo, te falle demasiadas veces por mis inseguridades, aun cuando molestaba y me comportaba como niño, no fui lo suficiente valiente para defenderlo de tú padre.
Tú otro “yo” se encargo de eso, y creo que ese otro Akashi me detestaba porque nunca me dejo tocarlo más allá de los brazos, si intentaba algo mas era de seguro que unas filosas tijeras estarían sobre mi cuello.
Recuerdo a tu padre, desde que se entero de nuestra relación te humillo, te trata tan mal y solo porque era su único hijo no te desheredaba pero jamás pudo dirigir completamente que Seijuro tuviera una relación con un hombre y ese hombre fuera precisamente yo, habiendo tanta jovencita de buena familia como fortuna.
Recibiste golpes, por mi cobardía siempre escudándome en mi carácter de niño, ocultándome que no tenía los suficientes pantalones para encarar a tu padre para protegerte.
Hasta ese día, que en plena calle él te dio una bofetada porque aun cuando nos quiso separar de una a otra manera pudimos volver a estudiar juntos, el equipo Rakuzan quedo petrificado por esa muestra violenta sin saber cómo actuar cuando nuevamente la mano de Masaomi iba a impactarte fue detenida por una enorme mano, la cual al tenerlo no se tentó el alma para lanzarlo lejos y que el perfecto traje del señor Akashi se hiciera tirones.
En ese motivo vio como tu mirada tenía un brillo especial, le agradeciste y te fuiste a mi lado, hasta que un día solo decidí irme de tu lado pensando ingenuamente que si no estabas a mi lado tu padre y tú encontrarían la manera de arreglar sus diferencias para ser una familia —relato Kotaro intentando tomar la mano del emperador pero este se alejo de la muestra de afecto para verlo con una sonrisa consoladora.
—Hayama, todo lo pasado ha sido perdonado pero no solo es porque eso que me invitaste a tomar una taza de café —contesto serio Akashi viendo los ojos de cachorro abandonado del pelinaranja pero dando un largo suspiro vio la hora en su celular, le quedaba poco tiempo si deseaba ir a esa reunión.
Kotaro observó ese gesto del más bajo y no por algo fueron novios, conocía cada expresión del pelirrojo pero su mirada se abrió de sorpresa al ver un objeto brillante en uno de los dedos de Seijuro.
— ¡¿Te casaste?! —
Ahora que mi futuro comienza a brillar, mmhmm
Ahora que me han devuelto la seguridad, oh ooh
Ahora ya (ahora ya), no hay más dolor (no hay más dolor)
Ahora al fin, vuelvo a ser yo
Al escucharlo Akashi solo cerró los ojos para colocar un par de dos en su frente masajeándola, lo que menos deseaba era tener un dolor de cabeza o mareos matutinos como los tenia últimamente, sabiendo que eso era para largo saco su celular para mandar un mensaje.
—Hayama, te ame y ese sentimiento fue absoluto en su tiempo, pero con el tiempo me di cuenta que tal vez nuestro amor se convirtió en rutina, una rutina en la que yo recibía los golpes de mi padre para defender nuestra relación pero tú no te atrevías a mas… Pero el día que te fuiste todo se me vino abajo hasta que lo conocía a él —contesto Akashi acariciando su anillo de bodas.
Pero me acuerdo de tí
Y otra vez pierdo la calma
Pero me acuerdo de tí
Y se me desgarra el alma
Pero me acuerdo de tí
Y se borra mi sonrisa
Pero me acuerdo de tí
Y mi mundo se hace trizas
—Cuando te fuiste mi mundo se vino abajo, llore pero fue un llanto silencioso, mi orgullo me impedía bajar la cabeza y más cuando mi padre me tiraba en cara tu cobardía. Pero tanto el equipo Rakuzan nuestros amigos estuvieron a mi lado, como la generación milagrosa en especial él.
Murasakibara Atsushi, el titán de Yosen siempre estuvo a mi lado, incluso no solo fue esa vez en la que se planto a mi padre, no algunas veces llegaron a los golpes y los de seguridad tuvieron que separarlos para que no se terminar con alguna fractura por su comportamiento.
Tu recuerdo siempre lastimo mi alma como corazón Hayama, pero Atsushi supo ser paciente en repararlo, a todos nos sorprendió que siendo como era, se tomara el tiempo, como perseverancia al estar a mi lado como ayudándome a olvidarte —confeso Akashi para mostrar una risa como un brillo intenso en su mirada bicolor.
— ¿Eres feliz? —
Ohh ooh ohh
Pero me acuerdo de tí
No ohhh...no no
Pero me acuerdo de tí
Y se me desgarra el alma
Oh, pero me acuerdo de tí
Mi sonrisa
Pero me acuerdo de tí
Mi mundo trizas
—Si lo soy Kotaro, luego de que muchas noches no podía dormir por tu recuerdo que desgarraba mi alma, luego de mentirme con promesas falsas que vendrías, ahora soy feliz con Atsushi —contesto Seijuro viendo como su antiguo amar solo asentía tratando de asimilar la información dada de golpe.
Mordiéndose un poco los labios Hayama vio con alegría y una mezcla de dolor como culpa a su antiguo amor.
—Renunciaste a tu padre para estar con él —hablo el varón tomando su taza de café ya frio.
—Al principio le costó darse cuenta de mi orientación, confesando que lo único que temía era quedarse sin nietos, pero que si dejaba ir a un joven como Atsushi me arrepentiría toda mi vida, luego de cuatro años de tu partida me case con mi nuevo amor. Pero después de nuestro primer aniversario nos enteramos que había un tratamiento para que algunos hombres pudieran quedar embarazados ya que su sangre lo permitía pero eran escasos y muy valiosos encontrarlos —dijo con ilusión Akashi dejando que nuevamente Kotaro sintiera un nudo en su garganta iba a hablar cuando al lado del emperador se situaba una figura muy alta de un varon de cabellos pelimorado que solo se agacho a la altura del menor para besar esos labios como colocar una mano en el vientre de Seijuro.
—Aka-chin todo bien, sabes que a bebechin no debe alterarse —susurro Atsushi entrelazando sus manos para ver al otro que solo contuvo la respiración para asentir al saludo del mayor —Debemos irnos Aka-chin a la boda de Kise-chin o si no me comeré el pastel de bodas —
—Solo debo terminar algo Atsushi, luego nos vamos —explico con dulzura Seijuro recibiendo un beso de su esposo para despedirse del otro.
—Ve con el Seijuro, y sean felices yo tratare de serlo a mi manera pero sé que cada vez que me acuerde de ti, sentiré como el peso de mis errores caen en mi cuerpo pero me consuelo saber que tu obtuviste tu felicidad, ahora ve con tu familia que te espera —hablo Kotaro viendo como el pelirrojo acedia para irse no si antes solo verse una vez más antes que él tomara un camino diferente a la de él.
Pero me acuerdo de tí
Ooh, ahh
Pero me acuerdo de tí
Oh, pero me, pero me, pero me
Pero me acuerdo de tí, oh ah
Pero me acuerdo de tí, oh ooh ohh oh
Pero me acuerdo de ti
—Aka-chin gracias por escogerme —hablo Murasakibara tomando la mano de su emperador que solo se acurruco a su cuerpo —Te amo —
—No más que yo y mis órdenes son absolutas —contesto Akashi viendo como su pareja solo negaba con la cabeza para regalarle una enorme sonrisa —ahora vamos a la boda de nuestros amigos antes que nuestro bebé decida ayudarte a comer ese exquisito pastel —
FIN