(POV BAEKHYUN)
Kygo High School, una de las mejores escuelas que pudieras encontrar, en la cual solo niños mimados con mucho dinero pueden asistir. Claro que, yo NO soy mimado. Eso es de niños tontos de primaria. Yo soy todo un macho peludo (Diva) de 17 años que ni las cucarachas me asustan, bueno, tal vez las cucarachas sí… PERO el punto es que, ¡YO NO SOY MIMADO!.
-¡Byun Baekhyun!- El grito de mi amigo de ojos muy grandes y gruñón me sacó de mis pensamientos. - ¿Siquiera estas poniendo atención a lo que te estoy diciendo? – Me pregunta alzando una ceja y cruzando los brazos, obviamente esperando una respuesta de mi parte.
Lo único que atiné a hacer como todo un macho peludo fue… rogar por mi vida antes que mis partes nobles fueran cortadas. –E-eh… sinceramente no. ¡Perdón Soo! –cubro mi cara para cuando venga el golpe y no sea en mi hermosa cara, oh no, no en mi hermosa cara que de ella vivo.
Solo escucho un suspiro de parte de mi enano amigo Kyungsoo y es suficiente para saber que estoy libre de todo peligro, por lo que bajo mis brazos y veo a un Soo aún con sus brazos cruzados observándome detenidamente, suspirando de nuevo y dando la vuelta para seguir su camino. –Como sea, vamos que si no llegaremos tarde a clases. – Sentencia mi amigo caminando hacia la entrada de la escuela. Agradezco internamente la misericordia que los dioses griegos tuvieron al librarme de mi amigo al que aunque sea un poco (muy) gruñón, le sigo queriendo desde que éramos unos niños de kínder. Sin cuestionar, corro un poco para alcanzar a mi gran amigo Soo y le sonrío mientras paso un brazo alrededor de su cuello.
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Las clases se pasan fugaces y llega el almuerzo. Salgo de clase junto con Soo y nos dirigimos a la cafetería que queda en el edificio enfrente del edificio en el que tomamos clases. –¡Juro que no se que les pasó a estos seres salidos de moda para construir la cafetería en otro edificio! – Me quejo al sentirme en un maratón por caminar tanto a mi parecer. – No seas exagerado Baek, apenas si son 100 metros y ya te estas quejando – dice Soo y rueda sus ojos ante mi exageración, siendo sincero, me daba flojera tener que caminar.
Después de uno que otro quejido de parte mía y regaños de parte de Soo durante el largo camino hacia la cafetería (sólo 5 minutos) llegamos. Pedimos lo que queríamos comer y nos sentamos en la mesa que usualmente frecuentamos.
-Soo, Baek~ - dice en forma de saludo nuestro amigo panda o también llamado Tao, aunque para mi, siempre será un panda mimado, porque para que vean, el SI es mimado y no tonterías. Aunque también como a Soo, le tengo un gran cariño desde que lo conocí hace mas de 10 años cuando fui a un viaje con mis padres a China. Recuerdo que al conocerlo, las primeras palabras que salieron de mi boca fueron, “Mira papá, un Panda en forma de niño.” Si, así es como yo saludo a las personas que apenas acabo de conocer.
- Hola amigo panda – dije con una sonrisa en mi cara al verlo sentarse en nuestra mesa con su bandeja llena de comida.
-Hola Bacon, Soo – dijo con una sonrisa nuestro amigo ardilla/bollo/baozi o también Minseok que es su nombre real. La verdad es que se le puede llamar como uno desee.
Muchas muchachas miraban nuestra mesa y nos lanzaban guiños ya que para que mentir, éramos un poco populares o también se podría decir que éramos “uno” de los dos grupos mas populares de la escuela, por lo que muchas lamían el piso por tener una cita con nosotros y la verdad nosotros no nos hacíamos mucho de rogar y se la otorgábamos a la mas buena.
-Kyaa~ -uno –kyaa~ -dos y después un coro de “kyaa” se unen en unísono al ver al segundo grupo de los chicos mas populares entrando a la cafetería con auras mas grandes que la galaxia. No diré que no estaban buenotes los tipos, pero tampoco era para tanto, osea, no se pasen niñas hormonales.
Uno por uno, los cuatro tipos se sentaron en la mesa enfrente de nosotros. Para desgracia nuestra, ellos compartían clase con la mayoría de los cuatro integrantes de nuestro grupo. Nunca les habíamos hablado directamente pero con solo ver las auras de dioses griegos que se traían, ni ganas daban de acercarse a esos plebeyos (bañados en dinero).
Después de la entrada tipo película de los otros, el almuerzo transcurrió de una manera muy normal. El timbre sonó anunciando las clases restantes, a lo que yo y mis tres amigos nos paramos y nos dirigimos a los salones.
No tuvimos el último periodo porque se escuchó un anuncio del director requiriendo a todos los alumnos en el gimnasio diciendo iba a dar un anuncio importante.
-Buenas tardes estudiantes- dijo el director en el micrófono. –Les llamé para presentarles a los nuevos profesores que nos estarán ayudando en este nuevo ciclo escolar- Se dio la vuelta y señaló a los 4 hombres que estaban detrás de el. Déjenme decirles que ninguno parecía ni cerca de sus 30’s y para nada estaban feos. –El profesor Kim Jongdae nos ayudará a enseñar canto – El nombrado dio un paso adelante, hizo una reverencia de respeto y regresó a su lugar. –El profesor Kim Junmyeon estará enseñando matemáticas –El tal jumion o algo así imitó al anterior. –El profesor Wu Yifan enseñara la clase de arte –Este parecía un poste de luz de esos bien altos. –El profesor Xiao Luhan enseñará la clase de educación física y el club de soccer. –el último profesor hizo lo mismo que los otros tres anteriores.
Pero, ¡QUE HOMBRES!, digo para que yo diga eso de alguien es que de verdad está muy bueno. Se escuchaban chiflidos por todas partes.
Así que estos serian nuestros nuevos profesores… esto se pondría emocionante. Sonreí al solo pensar en la idea.