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Pink Cocktail por LovingTales

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Notas del capitulo:

Hola mis queridas, aquí me reporto actualizando el 2 capi de este Fic. En primer lugar agradezco los reviews que me han dejado así como sus sugerencias y opiniones, ya que es muy importante y lo tendré en consideración. 

En segundo lugar les pido un poquito de paciencia para quienes esperan ahora un ZoSan en plena acción, puesto que quiero que esto se de con tiempo para entender un poco más a los demás personajes, los contextos y cómo todo esto conducirá a que podamos ver a la pareja principal.

A veces se me pasa la mano con la extensión de los capis :(

un beso y espero lo disfruten

 

Los personajes son propiedad de Eiichiro Oda.

 


Los rayos del sol inundaban aquella hermosa habitación, Doflamingo se encontraba durmiendo abrazado a su joven amante quien al escuchar la alarma despertó y comenzó a besar al rubio que al parecer no reaccionó al sonido.


-Buenos días amor… despierta o llegarás tarde-


Sin embargo no parecía tener efecto. El día anterior había sido bastante ajetreado y el moreno entendía perfectamente el cansancio de su amante. Lo besó y vistiéndose con apenas una camiseta larga bajó a la cocina para preparar el desayuno.


-Buenos días mi señor Law ¿qué le puedo preparar para desayunar?- preguntó una de las trabajadoras encargadas de la cocina de aquella mansión-


-Buenos días…. Eh quisiera desayunar en la pieza, lo de siempre porfavor-


-Entendido, deme unos minutos- exclamó la mujer a la vez que abría la nevera y sacaba algunas cosas mientras Law picaba una manzana-


El ambiente en aquella enorme casa era bastante agradable para todos. Trabajaban alrededor de 15 personas encargadas de mantener las cosas en orden para que el joven amo, como llamaban al rubio, no tuviera de qué preocuparse. Sin embargo era bien sabida su debilidad por los chicos más jóvenes por lo que era ya costumbre ver a distintos chicos salir de la pieza del rubio durante las mañanas, así que todos trataban de mantener una actitud discreta. No obstante Law llevaba varios meses viviendo ahí y ya todos se habían acostumbrado a su presencia.


Después de esperar unos minutos la mujer se acercó e indicó al moreno que la bandeja estaba lista. Tomando la bandeja subió lentamente y entró al dormitorio percatándose que el rubio aún seguía durmiendo. Sonrió y avanzó hasta encontrarse con sus labios y dándole un húmedo beso se quedó observando a aquel hombre que lo hacía volver loco. Su cuerpo bronceado y bien trabajado cubierto con apenas una sábana blanca era una imagen tentadora sin embargo ya eran casi las 08:00 y se supone debían llegar a la empresa a las 08:30. Se deshizo de aquella larga camiseta y sentándose en las caderas del joven amo  se dispuso a despertarlo de la forma que más disfrutaba.


 Eran alrededor de las 10 cuando Nami se dirigió a la sala de los supermodelos para repasar las actividades de aquel día.  De camino se preguntaba por qué Doffy (sus más cercanos le llamaban así) aún no había llegado, no obstante al percatarse que Trafalgar Law tampoco se encontraba en la sala se  tranquilizó y supuso lo más obvio.


-Bien chicos buenos días espero hayan tenido un sueño reparador-


-Bueno días Nami- respondieron-


-Como saben hoy tendrán acondicionamiento físico y por la tarde cada uno realizará sus actividades personales. Es el último tiempo libre del que dispondrán antes de que comience la campaña así que aprovéchenlo- la peli naranja salió de la sala en dirección a la cafetería con intención de tomar un café-


-Esa sudadera rosada apesta Cavendish- exclamó Sanji quien lucía un conjunto deportivo color celeste-


-Al parecer alguien amaneció de mal humor hoy… no me interesan tus opiniones kuroashi, después de todo tú no combinas con esta marca- respondió sonriendo el rubio provocando la ira del otro-


-¿Qué dices?-


-Basta chicos, nos esperan en el gimnasio compórtense- interrumpió Ace quién apenas vestía una sudadera blanca con un buzo negro-


-maldito simplón entrometido- musitó Sanji a la vez que tomaba su bolso y salía de la habitación-


Lo cierto era que el rubio no había amanecido de buen humor, como lo recalcó Cavendish, su cita la noche anterior había sido un completo desastre pues aquella chica engreída se negó a salir con él vestido de esa manera. Esta situación provocó la ira de Sanji quien apenas escuchar esto aceleró su auto sin dar ninguna explicación. Se encontraba irritado por lo que al llegar a su departamento se duchó con agua fría y habiéndose desestresado un tanto, realizó la única tarea que realmente le hacía feliz pero que mantenía en secreto por razones personales: cocinar.


La cocina de aquel enorme piso estaba abastecida de todo tipo de frutas, verduras y carnes así como también los implementos necesarios para una buena preparación. Soñaba con tener un restaurante sin embargo no tenía el tiempo necesario para poder planearlo bien. Lo más triste de toda aquella situación era que si bien su comida era deliciosa nunca nadie aparte de él la había probado. Habiéndose mostrado siempre como un arrogante no quería que nadie se enterara de aquel pasatiempo o probablemente comenzarían a molestarle la prensa, sus fans y hasta sus colegas supermodelos, así que aquellos placeres para el paladar solía degustarlos en completa soledad.


Los cuatro supermodelos se dirigieron al gimnasio para su rutina diaria de ejercicios, siendo alcanzados por Law quien bajaba corriendo las escaleras para no llegar tarde.


 


-¡Ahhh que delicia! Este café realmente es delicioso- exclamó Nami al tiempo que daba el primer sorbo a su taza-


-Así es y a estas horas de la mañana es totalmente reparador- le respondió Perona aquella chica de pelo rosa quien trabajaba como secretaria en la oficina principal-


-¿ha llegado el joven amo?-


-Hace apenas unos minutos, al parecer está de buen humor-


-Ya veo- ambas chicas se miraron y rieron despacio-


-Bien entonces iré saliendo al aeropuerto. No quiero interrumpirlo ahora pero si pregunta por mí recuérdale que iré a buscar al busca talentos, luego lo llevaré al hotel, posteriormente a un almuerzo y a eso de las 16:00 estaremos por acá-


-Entendido, en caso de cualquier noticia o problema no dudes en llamarme-


-Gracias, nos vemos-


Nami salió en dirección a su coche aparcado en la entrada de la empresa, un hermoso wolsvagen escarabajo descapotable color naranja, regalo de cumpleaños que le hizo Doffy. Al principio se sentía muy incómoda en aquel auto tan vistoso pero ya había comenzado a acostumbrarse. El único problema fueron los rumores que esta situación había provocado por culpa de algunas personas que insistían en que era la puta preferida del multimillonario. Sin embargo Nami sabía que esto no era así, pues aquel hombre a pesar de ser extremadamente atractivo y un tanto libidinoso nunca se había propasado de ninguna manera con ella siendo su relación más bien algo como padre e hija.


Tomó la autopista en dirección al aeropuerto y aceleró. Aún era bastante temprano pero aquella terminal aérea era enorme y estaba repleta de tiendas, así que aprovechando el tiempo extra, que difícilmente tenía, haría shopping tranquilamente mientras esperaba a aquel sujeto.


-¡Vamos! ¡vamos! Chicos ustedes pueden- exclamó Franky el maestro de acondicionamiento físico- recuerden que son SUUUUPER modelos-


-Este tipo me saca de quicio- susurró Cavendish a Ace a la vez que hacía abdominales. El pecoso rio-


Aquella clase la tenían tres veces por semana pero esa sería la última antes de que comenzara la campaña de verano debido a que el tiempo para todo se vería alterado durante las dos semanas de duración de ésta. Dado lo anterior debían tener especial cuidado en no subir de peso pues esto les traería problemas.


La clase tenía una duración de tres horas, tiempo en el que debían cumplir con todos los ejercicios finalizando con baile entretenido, que todos odiaban menos Cavendish que parecía disfrutarlo aún más que Franky.


-¡Vamos chicos a moverrr ese cuerrrpo!, quiero pasos bien marcados- exclamaba Franky mientras dirigía aquella clase- Trrrrrrafalgarrr Law mueve esas caderas bien, marca los pasos- replicó al joven moreno que parecía odiar aquello más que todos sus compañeros-


Ya eran casi las 13:00 cuando Nami se percató y corrió a su automóvil para guardar la enorme cantidad de bolsas que llevaba consigo. Había logrado recorrer la mayor parte de las tiendas del aeropuerto y ahora solo debía esperar que el vuelo llegara. Sacó un cartel del maletero en el cual se leía Donquixote con la intención de que el busca talentos pudiera identificarla.


Se acercó a la puerta de salida de los vuelos internacionales y esperó. La verdad no tenía idea de cómo sería el hombre al que estaba esperando, solo podía imaginárselo un tanto mayor y seguramente vestido con ropas estrafalarias. Ese día había mucho tráfico de pasajeros lo que comenzó a ponerla aún más nerviosa no obstante el avión había llegado y era solo cuestión de minutos para que la persona apareciera.


Transcurrieron alrededor de veinte minutos cuando vio como un hombre de estatura baja y con un sombrero de paja sobre su cabeza caminaba directamente hacia ella.


-¡Hola! ¡Tú debes ser Nami de la academia de Mingo!-


La peli naranja lo miró extrañada pues quien estaba frente a sus ojos parecía ser apenas un chiquillo de no más de 20 años, ¡casi de su misma edad!


-Ehh.. sí sí, soy yo.-


-Un gusto, mi nombre es Luffy, me han enviado de Red Hawk para trabajar con ustedes- exclamó al tiempo que una enorme sonrisa cruzaba su rostro-


Debía ser una broma ¿aquel chico era el busca talentos que Red Hawk había enviado?, si apenas parecía haber terminado la escuela.


-Bien, un gusto… soy Nami la manager de los supermodelos de nuestra agencia- respondió un tanto nerviosa-


-¡Genial Nami!...  ehhh esto tengo hambre-


-oh sí, disculpa vamos a dejar tus maletas al hotel y vamos por un almuerzo ¿qué te parece?-


-¿ehh? Eso suena como mucho tiempo- dijo a la vez que buscaba algo en su bolsillo hasta que sacó unos cuantos billetes- espera iré por unas donas-


Nami lo miró sorprendida. ¿De qué venía todo esto? ¿En verdad aquel chico era el busca talentos más exitoso del mundo? , vestía apenas una camisa roja que llevaba abierta dejando todo su torso al descubierto, unas bermudas de mezclilla y unas sandalias… ah y sin olvidar aquel sombrero de paja que cubría su cabeza. Bueno la ropa no era tan extraña después de todo era  verano y ya hacía bastante calor, el punto es que la peli naranja se imaginaba un hombre viejo y extravagante y quien tenía al frente era apenas un chiquillo simplón. Se quedó ahí parada, aun un poco sorprendida, cuando vio venir de regreso a Luffy cargando una bolsa en uno de sus brazos y con la mano del otro una caja enorme de donas.


-Bien ahora podemos irnos-


-¿Enserio comerá todo eso antes del almuerzo?- pensó Nami al ver la cantidad de donas dentro de la caja-


Salieron en dirección al estacionamiento hasta llegar al coche.


-Que coche tan genial, ¡es naranjo como tu cabello!- exclamó con la boca llena el chico, sorprendido al ver el color de aquel auto-


-ehhh.. sí gracias. Guardemos tus maletas-


Una vez cargadas salieron del aeropuerto camino al hotel Red Line el cual quedaba relativamente cerca de la agencia. El individuo sentado al lado suyo no dejaba de comer, ofreciéndole cada cierto rato a Nami.


-No muchas gracias Luffy… por cierto ¿cómo estuvo el viaje?-


-ehhh bien, no me puedo quejar puesto que dormí apenas despegó y desperté al aterrizar-


-Ya veo que alivio… entonces pasaremos a dejar tus maletas al hotel y…-


-No olvides el almuerzo- le interrumpió-


-ehh… si, si claro el almuerzo-


-¡Bien!-


-Qué tipo más glotón- pensó Nami-


Luego de unos veinte minutos de viaje llegaron al hotel. Se bajaron y acercándose al mesón chequearon la reserva y subieron las maletas a la habitación. Era bastante amplia y acogedora con una vista a las montañas que rodeaban la ciudad.


-Espera Nami me daré una ducha rápida- exclamó el chico a la vez que abría una de sus maletas y buscaba una toalla-


-Bien, te espero fuera-


-no,  salgo en unos segundos, no quiero bajar solo después-


-Ehhh está bien, te esperaré aquí- Nami sacó su móvil de la cartera para revisar si tenía algún correo en su bandeja de entrada. Sin encontrar nada se dispuso a llamar a Perona para informarle de la llegada del invitado-


-¡Listo Nami! Te dije que sería rápido-


-Está bien… AH! ¿Qué haces desnudo? ¿Por qué no te vestiste en el baño?- exclamó sonrojada al ver que aquel desvergonzado sujeto había salido completamente desnudo del baño sin importarle su presencia-


-¿ehh? Jajajaj es que olvidé llevar la ropa limpia al baño- sonrió a la vez que tomaba una camisa azul con flores amarillas y unos jeans exactamente iguales a los que vestía antes-


-Te espero afuera- dijo la joven saliendo de la habitación aún sonrojada. Aquel tipo era realmente extraño, le había sorprendido la situación no porque nunca hubiera visto un hombre desnudo, sino más bien porque apenas pareció importarle que ella estuviera ahí-


Después de calmarse tomó su móvil y llamó al restaurante donde irían a almorzar para confirmar la reserva. Se trataba del lugar más popular en toda la ciudad el Baratie famoso por su exquisita comida y excelente atención. Una vez hecho esto se dirigieron a la salida del hotel para ir caminando al restaurante que se ubicaba apenas unas cuadras más lejos.


Nami había tratado de arreglarse lo más elegantemente posible, dado el calor del día, para ir a aquel lugar sin embargo apenas Luffy parecía haberse peinado. Entraron y un joven vestido de blanco los escoltó a su mesa. Todos voltearon a ver a Luffy cuando exclamó a toda voz:


-¡qué bien huele aquí!-


La joven se sonrojó al sentir todas las miradas posarse sobre ellos. Se trataba de gente bastante adinerada y muchas veces arrogantes y crueles por lo que no pudo evitar escuchar risotadas, sin embargo a Luffy no pareció importarle aquello y sentándose preguntó al camarero:


-¿qué hay de comer aquí?-


- Buenas tardes señor… le traeré la carta. Hoy tenemos como menú principal Tartiflette un clásico de nuestro restaurante-


-¿qué rayos es un Tartiflette?- inquirió preocupado-


-Es un plato consistente en patatas cocidas, bacon, cebollas, pimienta, crema fresca y un toque de vino blanco…-


-¿tiene algo con carne?-


-sí… ¿puedo recomendarle algo?-


-Está bien-sonrió-


-Boeuf bourguignon… un estofado con carne consiste en…-


-Está bien tráigame uno de esos-interrumpió-


-Muy bien señor… y ¿usted señorita?-


-Para mí porfavor Crudités- respondió Nami-


-Excelente elección… con permiso-


El camarero se dirigió a la cocina dejándolos solos.


-Bien, antes de que traigan la comida quisiera repasar tu itinerario. El casting será hoy mismo a eso de las 17:00, la sala está preparada-


-ehhh bien. Entonces ¿qué es lo que necesitan?-


Nami lo miró extrañada.


-ehhh pensé que sabías de que se trataba pero necesitamos un hombre joven, 1.80, tez clara y cabello preferentemente rubio-


-Ya veo… me pregunto si la comida demorará mucho- exclamó Luffy al tiempo que se recostaba en la mesa y jugaba con los cubiertos-


-Supongo que unos cuantos minutos-


Debido a la cantidad de público a esas horas, los platos tardaron alrededor de media hora en salir, tiempo durante el cual aquel joven moreno terminó por dormirse sobre la mesa, dejando a Nami sorprendida.


-Disculpen la tardanza… aquí están sus órdenes- el camarero acomodó los platos en la mesa despertando a Luffy. Una vez hecho esto se retiró-


-Qué bien huele y luce delicioso- el chico ya había dado el primer bocado- ¡delicioso!- añadió y comenzó a comer con ahínco-


-Vaya tienes razón, estas verduras están realmente buenas- añadió la peli naranja al probar su plato-


Permanecieron alrededor de una hora en el Baratie y posteriormente regresaron al hotel donde tomarían dirección a la agencia. Ya eran casi las 16:00 hrs por lo que Nami aceleró y en eso de unos minutos ya se encontraban en el frontis de aquel enorme edificio.


-Hemos llegado Luffy esta es  la agencia Donquixote… ¿qué opinas?-


-¡Es genial! Ese mingo debe tener mucho dinero- exclamó sonriente-


-No tanto como tú- se dijo Nami a sí misma-


-¡Entremos!-


Caminaron al frontis y al entrar fueron recibidos por Perona la joven secretaria de Doffy.


-Buenas tardes señor, buenas tardes Nami bienvenidos-


-Hola-


-Perona! Disculpa la demora, nos retrasamos en el almuerzo…- se disculpó Nami-


-No hay problema, de todas maneras el joven amo acababa de regresar de una reunión así que los está esperando en la terraza de su oficina-


-¡perfecto!-


-los escoltaré-


-Esperen debo ir al baño- interrumpió Luffy-


-si están en esa dirección, te esperamos aquí-


El moreno corrió a toda prisa.


-No puedo creer que él sea el busca talentos- replicó Perona sorprendida- me imaginaba un tipo mayor-


-Lo mismo pensé… aunque a decir verdad es bastante excéntrico-


Nami relató a su amiga las situaciones ocurridas hasta ese entonces sacándole más de una risa. Luffy tardó unos pocos minutos y cuando regresó se dirigieron a las terrazas donde Doffy les esperaba.


-Mi señor Doffy!- dijo Nami al tiempo que se encontraba con el rubio y lo abrazaba-


-Dulce mandarina al fin estás de regreso… me tenías preocupado. No nos llamaste-


-Disculpe… tuvimos algunos retrasos-


-Bienvenido a mi humilde empresa señor Luffy- exclamó Doffy mientras se acercaba y saludaba de mano al joven invitado-


-Muchas gracias… solo dime Luffy, no hacen falta las formalidades- sonrió-


-Espero que haya tenido un viaje cómodo y un almuerzo reparador pues como seguramente le recordó la señorita Nami, el casting se realiza en una hora-


-sí, así es. La comida estaba realmente deliciosa… creo que volveré para la cena-


El rubio dirigió una mirada de sorpresa a Nami quien le sonrió nerviosa. Charlaron durante un buen rato en aquella terraza que el edificio tenía. Habiéndose percatado Luffy de la piscina que había unos metros más allá no dudó en lanzarse y nadar para refrescar su cuerpo de aquel calor infernal. Mientras él nadaba Nami y Doffy lo observaban sentados bajo una enorme sombrilla rodeados por maceteros con árboles que proveían a aquel lugar de una permanente y fresca sombra.


A eso de las cinco se dirigieron a la sala donde se realizaría la actividad y dejando a Luffy al mando se desligaron de aquella preocupación que tantas horas de sueño les había quitado.


-¡Que alivio!... aunque es un chico bastante loco confío en que logrará encontrar lo que necesitamos- exclamó Nami a la vez que dejaba caer su cuerpo en un mullido sofá de la oficina de Doffy-


-A decir verdad hay algo que me tiene intranquilo… me cuesta creer que ese chiquillo haya logrado levantar Red Hawk y convertirla en la mejor agencia del mundo-


-Ya sabe mi señor… a veces las apariencias engañan. Creo que lo mejor es darle su espacio y confiar en él-


-Tienes razón mi dulce mandarina, por ahora solo queda esperar y relajarnos un rato, vamos por unos cocktails-


La joven sonrió y siguió al rubio.


 


-Bien señor Luffy ya está todo listo para comenzar. Tenemos alrededor de 20 chicos preseleccionados. Usted debe dar una puntuación para cada uno de ellos en base a los criterios que están escritos en esta hoja, los cuales básicamente son: carisma, apariencia física, antecedentes médicos y perfil para con el trabajo a desarrollar- indicó Perona  a la vez que señalaba una hoja al moreno quien la miró con desinterés-


-Bien, entonces hagámoslo rápido- respondió el chico moreno a la vez que tomaba la hoja y entraba a la sala sentándose en una mesa frente a un pequeño escenario blanco-


El casting comenzó y comenzaron a pasar los candidatos. Había muchos chicos que parecían tener todo lo necesario para ser escogidos, sin embargo Luffy no había calificado bien a ninguno y la lista comenzaba a encogerse rápidamente hasta llegar al último joven sin mayor novedad.


Perona pareció preocuparse al ver que ninguno de los chicos que habían asistido al casting había sido bien evaluado. En su opinión más de uno tenía lo necesario para trabajar en la campaña, sin embargo poco o nada valía lo que ella pudiera pensar puesto que para eso habían invitado a aquel excéntrico busca talentos. El casting terminó a eso de las 21:00 momento en el cual Luffy se levantó de su silla con la intención de salir.


-¡Espere señor Luffy! ¿Informo al joven amo de los resultados?- preguntó Perona con preocupación, puesto que sabía que aquella situación no le agradaría a Doflamingo-


-No…. No le digas nada aún. Espera volveré dentro de unas horas con el chico que necesitan- exclamó sonriendo mientras se alejaba-


-E.. es.. está bien… como usted diga señor Luffy- terminó por decirse a ella misma con un tono de duda y nerviosismo-


Después de la clase de acondicionamiento físico de aquel día, los cinco supermodelos habían quedado con la tarde libre por lo que debían aprovechar al máximo aquel tiempo para hacer todas las cosas que no podrían durante dos semanas, tiempo de duración de la campaña de verano. Debido a esto algunos optaron por retirarse a sus hogares para descansar y estar con sus familias o amigos mientras que otros simplemente se dedicaron a relajarse en un día de shopping o spa, como fue el caso de Sanji.


Tomó su coche y se dirigió al centro de belleza y spa “All Blue”  para realizarse una sesión de masajes y limpiezas corporales. Aquel lugar era frecuentemente visitado por estrellas del mundo de la música, cine, televisión y algún modelo exitoso como él, debido a los carísimos precios que tenían.


-Buenas tardes señor Sanji, ¿cómo está?- dijo la recepcionista dándole la bienvenida a Sanji-


-Buenas tardes… muy bien. Vengo a lo de siempre, llévame a las salas de masaje-


-ehh.. lo siento señor pero las salas se encuentran reservadas para ser utilizadas durante una hora. Si quiere puede comenzar con las limpiezas…-


-Me importa una mierda que esté reservada… dije que quiero lo de siempre-


La mujer lo miró preocupada sin saber muy bien que responderle, finalmente optó por llamar a su supervisora quien en un santiamén llegó al lugar arreglando el problema.


-Estimado señor Sanji, disculpe el mal rato que le hemos hecho pasar. Anularemos la reserva para que pueda utilizar las dependencias de nuestro establecimiento sin ninguna dificultad- sonrió la jefa de aquel centro-


-entonces apresúrense y comiencen con mi sesión-


-¡enseguida!-


Unas chicas jóvenes vestidas de blanco aparecieron y desvistiendo al rubio lo hicieron subir a una cómoda camilla, boca abajo, para comenzar a masajear su espalda. Utilizaban aceites esenciales con aromas dulces y frutales que relajaban la piel a la vez que la hidrataban.


-Señor Sanji su piel está tan suave- exclamaban-


-Lo sé… no vayan a lastimarla- inquirió-


-No tiene de que temer-


-Bien… entonces limítense a masajear y cierren la boca- musitó  a la vez que las dos chicas se miraban entre sí


Transcurrieron unos minutos hasta que al rubio se le apeteció algo de beber.


-tráiganme un zumo de naranja sin azúcar-


-enseguida señor- respondió una de las mujeres al tiempo que salía rumbo a la cocina por la orden. Tardó alrededor de cinco minutos- aquí tiene mi señor-


Tomó el vaso dispuesto a beber su contenido, estaba bastante bueno sin embargo le pareció más dulce de lo habitual. Nuevamente se recostó y relajó todo su cuerpo para sentir los efectos de aquellos masajes.


Permaneció toda la tarde en aquel lugar volviendo a su departamento alrededor de las 21:00 hrs. Momento en el que se animó a ir por algo de beber al bar más concurrido y popular de la ciudad: “Dressrosa”. Escogió para salir su chaqueta de cuero negra preferida, una camiseta básica gris, jeans azul claro un tanto gastados y rotos en las rodillas y calzando unos bototos estilo militar negros se dirigió a aquel lugar.


Apenas puso un pie en la fila las chicas se hacían a un lado para dejarlo pasar a la vez que le pedían fotos y autógrafos, no obstante ignoraba todas las muestras de afecto que aquellas fans le rendían y ayudado por los guardias del local logró llegar a la entrada de la zona VIP donde fue escoltado por otros hombres. Dentro del sector privilegiado de aquel bar se codeaban las estrellas y famosos más importantes de la ciudad y el país, las chicas le sonreían por donde fuera y muchas tenían la intención de acercarse a él.


Aunque el lugar se encontraba atestado de gente pudo identificar a Cavendish bebiendo con un grupo de amigos. Al parecer ya se encontraba un tanto ebrio pues hablaba más fuerte de lo normal y su gesticulación era exagerada, un rasgo común que presentaba después de beber mucho. Evitó pasar cerca de él para ahorrarse una escena, así que fue directo a la barra donde se sentó y pidió un vaso de whiskey. Unas hermosas mujeres se sentaron a su lado y conversándole lo convencieron de que bailara con ellas. Al parecer eran modelos puesto que le parecía haberlas visto en alguna que otra revista. Ambas rubias vestían trajes negros ajustadísimos que apenas les cubrían aquellos esbeltos muslos.


-Sanji! Luces tan bien…- exclamó una-


-Amé tus nuevas fotos para Diable Jamble… -


Sanji pareció ignorarlas puesto que terminó de beber su trago y se puso de pie. Ambas chicas se acercaron y lo tomaron de las manos para que se dirigiera a la pista de baile. Sin pensar bien en lo que hacía las siguió y comenzó a bailar entre las dos modelos. Sentía las manos de las mujeres rodear su cuerpo, no obstante al estar tan acostumbrado a ser tocado por todo el mundo cuando lo ayudaban a  vestir y maquillar no sentía absolutamente nada. Se mantuvo así durante unos cuantos minutos hasta que una de las chicas le ofreció un trago y junto con este una pastilla.


-Divirtámonos un rato- le sonrió-


-quitándole el trago de las manos se echó la pastilla en la boca a la vez que daba un sorbo largo de aquel cocktail rosa-


Aquella era una pastilla de éxtasis, droga muy común en el mundillo de famosos que frecuentaba Dressrosa. Una hora después el rubio se encontraba bailando desenfrenadamente junto a aquellas mujeres que no perdían el tiempo, besándolo y tocándolo a su antojo. Sería una noche intensa para Sanji.


En la agencia todo parecía ir de mal en peor, en primer lugar porque Luffy no había seleccionado a nadie en el casting y en segundo porque ya era casi medianoche y el excéntrico busca talentos no parecía llegar. Había salido a eso de las 21:00 y pidiéndole a Perona que no dijera nada de su ausencia desapareció. La peli rosa hizo tal y como le dijo el chico y se sentó a esperarlo, no obstante a eso de las 22:00 Nami llegó a la sala extrañada por no tener ninguna noticia aún y se encontró con la secretaria casi dormida en la mesa. Al explicarle esta lo ocurrido no pudo más que sentirse impotente, aun así no quiso alarmar a Doffy y decidió esperar junto a su amiga.


Por su parte Luffy habiendo salido a aquella hora del edificio su intención era recorrer la ciudad en busca del chico que necesitaban. No era mentira el hecho de que fuera el mejor del mundo, pero sus métodos para conseguirse con aquellos chicos que habían vuelto a su agencia multimillonaria no eran los convencionales. Aquella capacidad de captar la esencia de una persona con solo mirarla era herencia de su padre, bien conocido por todo el mundo como Shanks el pelirrojo, fotógrafo de los supermodelos que lo llevaron a la fama. El pequeño peli negro odiaba los casting y todas aquellas formalidades prefiriendo el trabajo en terreno, por esta razón decidió inspeccionar aquella ciudad en un cuadrante limitado a ver si su búsqueda rendía frutos.


Caminó entre aquellos edificios lujosos mirando todo a su alrededor. Los restaurantes abarrotados de gente al igual que las tiendas de ropa y libros y sin embargo ningún rostro parecía transmitirle nada. Ya casi eran las 23:00 y se encontraba ofuscado, no entendía como no podía encontrar a nadie que le convenciera. Habiéndose alejado bastante de la agencia decidió regresar e intentarlo el día siguiente, quizás tendría más suerte.


-Deben de pensar que me he ido al hotel- rio para sí mismo, no asimilando la gravedad de la situación-


Estaba casi por llegar al frontis del edificio cuando vio unos metros más adelante a un hombre hurgando los contenedores de basura ubicados en un pequeño callejón. Junto a él se encontraba un triciclo. Acercándose  un poco más se percató que se trataba de un joven moreno  bastante alto y fornido y lo que más llamó la atención fue su extraño cabello verde. No pudo evitar sonreír al verlo.


 

Notas finales:

PD: Law eres un ukecillo y como un mini adelanto ya podremos conocer bien a Zoro en el próximo capi

Saludos :)


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