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Mi único amigo 2 por CelesNicole

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Notas del capitulo:

Lo siento tanto gente!!! Fui muy mala!!! los abandoné por un mes xD jeje sé que lo prometí para enero... pero digamos que no tuve tiempo, me andubieron llevando de un lado a otro... pero ñe, aquí estoy :3 :3

 

Nótese que no pensé ni el título del fic ni el del cap, ñejeje (? okeey, disfruten!!

-Y pensar… que todo comenzó esa tarde…

 

 

-¡Vegetto! –Gritó colérica una jovencita de cabellos negros en forma de flama, mientras perseguía con mucha velocidad a otro joven de la misma edad. - ¡Dame mi celular, idiota! –Exigió cada vez más molesta, si se trataba de su celular, su furia no tenía límites.

La música seguía sonando en aquel celular, un tema en idioma japonés, la música preferida de la mujer.

-¡Ven a buscarlo! –Dijo burlón un joven muy parecido a ella, solo que sus cabellos iban en puntas hacia arriba. Corría dando vueltas por la gran casa, sus flequillos se desordenaban debido a la velocidad.

La joven no se rendía, su fleco se levantaba y volvía a su posición a medida que intentaba saltar encima de su hermano para arrebatarle el celular de sus manos -¡No es divertido! –Se quejaba más molesta, su Ki aumentaba por la furia.

 

Habían pasado unos 15 años desde que los jóvenes habían nacido. Y como todo par de hermanos, amaban fastidiarse día a día…

 

-¡Enana! –Se burlaba el más alto, ya que la otra no alcanzaba el celular por más que saltara. Gogeta comenzó a levitar e intentó quitárselo, pero Vegetto era más rápido y lograba esquivarla. -¡No hagas trampa! –Decía entre dientes, riéndose de ella.

-¡Quiero escuchar mi música, vete a molestar a otro! –Gruñía con el ceño extremadamente fruncido, imitando la expresión de furia de su padre a la perfección.

-¡Ésta música es horrorosa, no entiendo como no se te atrofia el cerebro! –Exclamó con socarronería, aún elevando su mano para evitar que tomase el aparato.

 

Gogeta había desarrollado una pasión por la música, mucho más aquella en idioma japonés. Prácticamente vivía escuchando música, y su hermano bien sabía que a ella le molestaba que la interrumpieran…

 

Seguían forcejeando, sus gritos inundaban toda la casa y cierta persona no tardó en darse cuenta…

-¡Vegetto! –Gritó de repente una voz con autoritarismo. El aludido se paralizó en el instante, Gogeta aprovechó para arrebatarle el celular. Vegetto giró el cuerpo, encontrándose frente a un hombre de cabellos en forma de flama un poco más bajo que él cruzado de brazos, lucía muy molesto. -¿Cuántas veces te dije que no le quites el celular a tu hermana?

-¡Pero papá, solo escucha, es espantosa, deberías borrársela! –Se quejó entre molesto y preocupado, señalando el objeto que aún seguía emitiendo esa música. Vegeta comenzó a acercarse a él, conservando su expresión.

 

Desde pequeño, Vegetto había sido un niño travieso, le divertía mucho hacer bromas y portarse mal. Pero siempre se arrepentía al final, al ver el rostro muy molesto de su padre Vegeta…

 

-Si a ella le gusta, no debería importarte. –Comentó con simpleza, para después girarse hacia su hija. -Además, no está nada mal –Agregó con una media sonrisa, no le había parecido mal esa música.

-¿Verdad que es bonita, papi? –Preguntó con tono cariñoso la menor, acercándose a su padre para abrazar uno de sus brazos. Ella solo medía unos centímetros menos que su padre, por lo que apoyó su cabeza sobre uno de sus hombros fácilmente.

 

Gogeta siempre había sido cariñosa con sus padres, y Vegeta jamás había estado en contra, le encantaba el cariño de su hija. Mientras tanto, Vegetto sentía asco de que su hermana fuera tan melosa y que a cada rato estuviera pegándose a sus padres como una garrapata.

 

-Ash, niña consentida. –Murmuró entre dientes Vegetto, cruzándose de brazos. En ese instante, otro hombre se hace presente en la sala, dirigiéndose a su hijo.

-Hijo, deja a tu hermana, tú tienes celular, ¿para qué quieres otro? –Preguntó con cierta incomprensión el de cabellos alborotados, aún sin entender por qué su hijo siempre le quitaba el celular a su hermana.

-¡Él solo me quiere molestar! –Respondió Gogeta, soltando a su padre para señalar a su hermano - ¡Deberían mandarlo al reformatorio para delincuentes menores! –Sugirió mirándolo con cierto odio.

-¡No soy delincuente! –Se defendió indignado, para después señalarla de la misma forma -¡A esta deberían enseñarle…

-¡Ya basta! –Interrumpió Goku, con cierta serenidad, poniendo las manos sobre sus caderas. -Mejor vayan a alimentar a Tobby y Mica, recién vi sus platos vacíos. –Dijo más como orden que como sugerencia, los menores asintieron.

-Sí papá. –Dijeron con tono molesto y resignado, mirándose mal, igual que siempre. Vegeta solo rió al ver a sus hijos así.

-Y rápido que ya vienen sus tíos con Blitz.

Los dos adolescentes salieron al patio para darles su alimento a los dos cachorros, que ya no eran cachorros sino que eran perros medianos, ya de 6 años de edad. Ellos dos, eran las únicas mascotas que les quedaban, además de los horribles peces que Goku llevaba a la casa a pesar de los quejidos de Vegeta.

Mientras ellos alimentaban a los animales, el timbre de la casa sonó. Goku se acercó a la puerta, pero apenas la tocó un pequeño de cabellos largos y desarreglados la empujó con cierta brutalidad, abriéndola para después tirarse sobre el más alto…

-¡Tío Goku!  -Chillaba entusiasta, abrazado al más alto. Goku ni siquiera tuvo tiempo de corresponder el saludo, ya que el pequeño se soltó bruscamente y comenzó a correr al interior de la casa sin siquiera pedir permiso…

-¡Blitz, niño travieso, ven aquí! –Gritó furioso Raditz, metiéndose a la casa sin siquiera mirar a su hermano, comenzando a perseguir a su hijo en esa pequeña sala.

 

Tarble había dado a luz a un niño, que ya tenía 5 años. Después de un año de darlo a luz, Tarble debió volver a trabajar, por lo que la mayoría del día el menor era educado por Raditz… Raditz lo había consentido un poco de más, y el pequeño se había vuelto muy revoltoso…

 

-Sabía que no podrías ser padre, eres un fracaso.  –Se burló Goku, como siempre aprovechando la oportunidad de hacer quedar mal a su hermano mayor. Raditz logró atrapar al niño sosteniéndolo de uno de sus brazos, para después mirar a su hermano menor con mucha molestia

-¡Cierra la boca, hermanito! ¡No eres el mejor ejemplo de padre! –Atacó, claramente refiriéndose al desastre que era Vegetto… Goku lo miró indignado

-¡Mis hijos por lo menos me hacen caso! – Se defendió, para después darle la espalda. Raditz sonrió con socarronería, pero antes de decir una palabra Tarble le hizo una seña para que se callara…

Raditz suspiró -Sí, claro, como cuando Vegetto se escapó por la ventana para ver a sus amigos – Pensó divertido, recordando aquel día en que Goku le prohibió salir a su hijo pero éste salió de todos modos…

Tarble se acercó a su hijo para cargarlo en sus brazos, intentando impedir que hiciera alguna otra travesura. El pequeño se retorcía en brazos de su padre, pero Tarble lograba contenerlo con su fuerza.

Justo en ese momento, Gogeta aparece en la sala junto a su hermano -¡Hola tíos! ¡Hola Blitzz! –Saludó alegre y algo rápido, para después dirigirse a Goku. -Papi, ¿Puedo salir con Alex unos minutos? –Pidió dulcemente, Goku arqueó una ceja -Me invitó a tomar un helado

-Otra vez Alex… -Murmuró algo desconfiado… -Ya salieron ayer, y antes de ayer, y casi siempre salen… -Agregó extrañado, pero con una sospecha que le hizo fruncir el ceño…

 

Desde que Gogeta era niña, Alex y Marck habían pasado bastante tiempo con ellos, como unos tíos más. Pero al cabo de los años, Alex y Gogeta formaron una gran amistad a pesar de la diferencia de edad, cosa que a Goku comenzaba a parecerle extraña. No le gustaba la idea de que su hija pasara tanto tiempo con un hombre mayor que ella…

 

-Es mi padrino, es normal que quiera pasar tiempo conmigo. No pienses mal papi, él es mi mejor amigo –Explicó para tratar de convencerlo, pero Goku no cedía. Desconfiaba de Alex, no sabía por qué, pero creía que podría tener “otras” intenciones con su hija…

-Ve, Gogeta. –Intervino Vegeta con una media sonrisa, Goku volteó a verlo con desaprobación en su mirada. –No seas así de celoso, solo es una buena amistad. –Intentó calmarlo Vegeta. Goku lo pensó un poco, para después suspirar derrotado

-Está bien, supongo. –Respondió algo dubitativo. Gogeta no esperó ni un segundo más por miedo a que se negara, sonrió ampliamente y abrazó con fuerza a sus padres.

-¡Adios! –Se despidió, y salió de la casa sin más… Vegetto miraba el suelo con el ceño fruncido y los brazos cruzados.

-Esa niña siempre se sale con la suya. –Murmuró rechinando los dientes. Goku se acercó sigilosamente a él, para susurrarle algo al oído.

-Oye hijo, ¿no te gustaría ganar 20 dólares? – Propuso, para después alejarse un poco y mirarlo con un rostro con cierta malicia. Vegetto entendió al instante, por lo que dibujó una sonrisa divertida.

-¿Qué tengo que hacer esta vez, padre? –Preguntó muy interesado Vegetto, no era la primera vez que su padre le hacía aquella propuesta… pero desgraciadamente para ellos dos, Vegeta escuchó.

-¡Nada de espiar a Gogeta! –Advirtió furioso, ya conociendo la estrategia de su esposo. Goku se sobresaltó y se alejó un poco -¡Goku, no exageres! –Agregó cansado, mirándolo directamente con su típica desaprobación. Goku suspiró rendido

-Está bien, Veggie… -Vegeta se fue a la sala, siendo seguido por Tarble, Raditz y un revoltoso Blitz que intentaba soltarse del agarre de su padre. Pero antes de que Vegetto los siguiera, Goku lo tomó del brazo por detrás -Toma, ve –Le entregó los 20 dólares, Vegetto sonrió

-Con gusto, padre – Respondió cómplice, Goku se echó a correr detrás de los demás para que nadie sospeche, mientras Vegetto escapaba sigilosamente por la entrada…

**

En otra casa, a unas cuantas cuadras de aquella, dos hombres se encontraban en la cocina de su casa tomando un café tranquilamente, sin decir ni una palabra, cada uno en su mundo. Hasta que su joven hija de 15 años se aparece frente a ellos con su expresión de seriedad tan conocida…

-¿Me dan dinero para ir a la tienda? – Pidió acercándose a la mesa, con su usual tono demandante. Vegeta levantó la vista, dejando de leer su periódico para dirigirse a su hija sin ningún interés.

-¿Qué necesitas comprar, hija? –Preguntó algo aburrido. Vegita se sonrojó levemente ante la vergüenza, desconcertando a sus padres.

-A-algo… ¿Me dan el dinero? –Volvió a pedir suplicante, intentando evadir el tema. Sus padres se miraron unos segundos con confusión.

-Primero dinos para qué lo quieres –Ordenó Bardock, arqueando una ceja en señal de intriga. Vegita bajó la vista avergonzada, sin saber cómo decirles. Tragó saliva, notablemente nerviosa

-Es que… Cosa de mujeres… - Murmuró en voz baja, mirando el suelo. Bardock y Vegeta comenzaban a comprender la situación, o eso creían…

-¿Qué tipo de cosas? ¿Maquillaje, perfume, crema? –Empezó a averiguar Vegeta, sacando de su bolsillo algunos billetes. Vegita se mordió los labios

-No, o-otra cosa, ya saben ¡Solo denme el dinero! –Exigió mirándolos con algo de molestia, su paciencia comenzaba a acabarse. Vegeta arrugó un poco más el entrecejo.

-No hasta que nos digas. – Sentenció finalmente, cruzándose de brazos. La pequeña miró a su padre Bardock, buscando ayuda, pero él la miraba seriamente, como esperando a que dijera la verdad.

Vegita miró el suelo, y gruñó frustrada-… ¡Necesito protectores femeninos! ¿Felices? –Gritó exasperada, con el rostro teñido de carmín... Sus padres abrieron los ojos hasta el tope

-Eh… e-eh… S-sí… Toma… -Dijo tembloroso y algo horrorizado Vegeta, extendiendo la mano en la que tenía los billetes. Vegita sonrió y lo tomó con rapidez

-La próxima vez no preguntaremos nada –Comentó Bardock con unas gotitas de sudor bajando por su frente.

-Gracias papis –Agradeció alegre, guardándose el dinero en el bolsillo -¡Adios! –Levantó una mano para saludarlos, y se fue sin más de la cocina.

Bardock y Vegeta se miraron unos momentos…

-¡Eres un idiota! Te dije que no debías indagar en los asuntos de mujeres de nuestra hija –Regañó Bardock, levantándose de la mesa para llevar su taza al fregadero, solo para no ver de frente al otro…

-¡Me lo hubieras dicho hace un rato!  -Se defendió indignado, dejando el periódico en la mesa. Bardock solo rodó los ojos, sin darle importancia. -Aún no me acostumbro a esto… -Agregó en voz baja Vegeta, recordando aquel día en que su hija dejó de ser aquella niñita…

 

**FLASH BACK**

-Papis, tengo algo que decirles… -Dijo Vegita muy apenada mirando el piso, quedándose parada frente a sus padres. Ambos la miraron con su típico ceño fruncido…

-¿Qué es, pequeña? –Preguntó suavemente Vegeta, Vegita tragó grueso

-Bueno… e-es algo difícil… -Dijo dubitativa, bastante avergonzada por tener que decir aquello…

-Dinos Vegita, ¿te sucede algo malo? –Preguntó con algo de preocupación Bardock, pero la pequeña negó con la cabeza

-N-no, n-no e-es malo… pe-pero…

-Sin miedo hija, ¿alguien te hizo algo? –Interrumpió molesto Vegeta, imaginándose que alguien le había hecho algo malo, pero Vegita volvió a negar.

-No es nada de eso papá, tú tranquilo. Necesito dinero para comprar algo –Pidió levantando la vista, arrepentida de querer decirles aquello…

-¿Qué cosa?

-Una cosa, nada importante, ¿me dan dinero? –Exigió, ya que no quería contarles su problemita… Ambos se miraron, para después mirar con seriedad a su hija

-Pero primero dinos qué te pasa, no nos preocupes así

-E-es… ¡denme dinero y ya! –Exigió molesta, Vegeta se cruzó de brazos.

-¡Nada de eso, jovencita! Primero cuenta…

-¡Ya no soy una niña! –Gritó alterada, uno de sus defectos era su corta paciencia… Vegeta se levantó del sillón de golpe, mirando muy impresionado a su hija

-¿¡Qué!? ¿¡Qué dices, n-no me digas qu-que un asqueroso humano…

-¡No papá! ¡Nada de eso! Sigo siendo virgen, pero… Tengo… Mi período… -Lo último lo susurró muy bajito, los dos hombres no llegaron a oírlo bien

-¿Tu qué?

-¡Me vino la regla! –Gritó ya sin paciencia, dejando estupefactos a sus padres. Bardock y Vegeta se miraron con mucha sorpresa, sus labios temblaban intentando decir algo

-… e-eres muy pequeña aún –apenas pudo susurrar Bardock

-Ya tengo 12, papá, era el momento

-… -Ninguno pudo decir nada, simplemente le dieron el dinero…

 

**FIN DEL FLASHBACK**

Una gotita de sudor resbaló de la frente de Bardock –Exageraste – Murmuró con cierto aire de burla.

-¡Tú también tenías una cara de espanto! –Le gritó, con una venita en su frente.

-Bueno, eso tendría que pasar algún día –Le dijo más calmado, Vegeta lo miró extrañado

-Primero te espantaste tanto como yo, ¿y ahora eso? Los pasivos y las mujeres son tan complicadas.

-¡Oye!

**

Vegita salió de su casa tranquilamente, como siempre siendo seguida por la mirada de varios chicos de su vecindario. Ya se había acostumbrado a recibir aquellas miradas, claro que no le interesaban esos humanos tan insignificantes… Ella solo tenía interés en una persona…

Siguió ignorando a todos, lanzando alguna que otra mirada llena de furia que lograba congelar en su sitio a cada uno de esos depravados… Hasta que llegó a la zona “céntrica” de ese vecindario, donde estaban todas las tiendas y en el centro esa plaza tan tranquila a la que siempre iba a pasar el rato…

-¡Vegi! –Escuchó esa voz inconfundiblemente chillona y molesta llamarla, la buscó con la mirada, hasta encontrarse con su “Sobrina” en medio de la plaza. Cruzó la calle, y la jovencita rápidamente se acercó a ella con una sonrisa. -¿Qué tal todo? –Preguntó bastante alegre de ver a su mejor amiga

-¿Qué haces por aquí Geta? –Preguntó algo desinteresada, ignorando la pregunta de la pelinegra. Gogeta no borró su sonrisa, ya estaba acostumbrada a la forma de ser de su “Tía”

-Estoy esperando a Alex, me invitó a tomar un helado. –Explicó entusiasmada, en verdad le encantaba salir a pasear con Alex. Vegita miró con una imperceptible expresión de extrañeza a la otra, a ella también le parecía extraña la relación entre ellos dos, pero rápidamente volvió a poner su rostro neutral.

-Hm, interesante. – Respondió aburrida, al igual que siempre. Gogeta seguía sonriente, mirando a todos lados buscando a su “Tío-mejor amigo”, hasta que Vegita volvió a hablar -¿No sabes si Marck vendrá con él? –Preguntó con un leve interés…

-Tal vez, no sé.  ¿Por qué preguntas? –Preguntó con total inocencia, ese gesto tan característico de su padre Goku… Vegita se volteó

-Nada, nada. –Se apresuró a negar, manteniendo su semblante serio. -Nos vemos luego –Se despidió y comenzó a caminar hacia otro lado con algo de rapidez, Gogeta la saludó desde atrás…

-Está bien, ¡Adiós Vegi!

 

Y mientras tanto, a algunos metros de Gogeta, detrás de unos árboles, un joven de cabellos parados observaba a su hermana bien oculto, tal como le había dicho su padre… Gogeta no se había dado cuenta de su presencia, pero otra persona sí…

-¿Qué haces aquí Vegetto? –Vegetto gritó horrorizado al mismo tiempo que se volteaba, pero la ágil Vegita le tapó la boca para que Gogeta no se diera cuenta de que él estaba ahí. –Cállate niña, di qué haces aquí. –Ordenó autoritaria, el otro tragó grueso

-N-nada, ¡Ju-juro qu-que nada! – Respondió exasperado, moviendo sus manos de un lado a otro. Vegita solo se cruzó de brazos, mirando al otro con incredulidad

-Sí, claro. ¿Goku te mandó a vigilar a Geta? –Preguntó con cierto interés. Vegetto no quería responderle, solo miraba hacia otro lado. –Vamos, no seas cobarde. – Vegetto suspiró y asintió, por lo que Vegita dibujó una sonrisa maliciosa en su rostro.

-No le digas que me viste. –Pidió en un susurro, Vegita se rió levemente

-No sé, ¿Qué ganaría si no le digo nada? – Preguntó chantajista, Vegetto rechinó los dientes molesto, otra vez tenía que lidiar con esa extorsionista.

-Te doy 5 dólares –Ofreció, pero la mujer negó con la cabeza.

-¿Me crees tonta? Sé que te dio más. Si no aumentas, le contaré a Vegeta de aquella vez en que te saliste por la ventana… O aquella vez en que miraste por…

-¡Ash! Toma 10 dólares. –Interrumpió molesto, entregándole unos billetes de mala gana. Vegita los tomó sonriendo victoriosamente. -Extorsionista malvada –Susurró Vegetto con mucho odio, Vegita rió burlonamente

-Un gusto hacer negocios contigo. –Y se fue sin más…

-Maldita… -Murmuró furioso. Volvió a mirar a su hermanita, quien estaba algo lejos acompañada de un muchacho más alto que ella. - ¡Oh, ahí está! –Empezó a caminar hacia ellos sigilosamente, siguiéndolos desde lejos, observando cada movimiento mientras se ocultaba detrás de los árboles, hasta que…

Una mujer hermosa pasó por su lado, parecía de su edad, con un vestido bien ajustado y corto que dejaba ver sus curvas… Vegetto dejó de cuidar a su hermanita para ver a esa castaña tan hermosa, casi babeando por ella…

 

Vegetto no podía evitar quedarse embobado al ver una mujer pasar cerca de él, mucho menos cuando se trataba de una mujer con buenos “atributos”… Pero, ¿eso sería consecuencia de sus hormonas revueltas, o había algo más?...

 

-¡Gogeta! – Recordó luego de unos segundos, sacudió la cabeza para salir de su trance y miró hacia donde estaba su hermana hace unos segundos… -¿¡Dónde está!?....

**

Y en lo alto del cielo, bastante alejada del suelo, una joven de cabellos azabaches miraba hacia donde estaba Vegetto con una notable expresión de molestia-Ese Vegetto es un idiota. –Gruñó cruzándose de brazos, aún levitando, olvidando un pequeño detalle…

-Emm… Geta…- llamó con cierto nerviosismo Alex, quien estaba aferrado al cuerpo de la menor para mantenerse elevado, mientras mantenía los ojos cerrados intentando no pensar en la altura -¿M-me ba-bajas? – Pidió casi en un susurro, la joven volteó a verlo avergonzada

-¡Sí! ¡Perdón! –Rápidamente descendió al edificio más cercano, donde Alex se dejó caer en el suelo sin cuidado -¡No te tires así! Aun no había bajado –Dijo con cierta preocupación, pero Alex no le prestó atención, simplemente pensaba en los nervios que sintió al tocar ciertas partes que no debía al sujetarse de la menor…

 

Desde hace tiempo, Alex había empezado a sentir cierta atracción insana a su “ahijada”, cosa que intentaba controlar, ya que sabía perfectamente que no podría estar con ella por su edad…

 

-Go-gogeta… ¿Qué ha-haría tu hermano ahí? –Cambió de tema lo mejor que pudo, Gogeta no notó su nerviosismo, simplemente se sentó a su lado, para luego suspirar con total frustración.

-Hm, ni me interesa lo que haga ese tonto, luego lo acusaré con mis papás. – Comentó con un leve puchero, gesto que había heredado de su padre Vegeta…

Alex no podía evitar verla, era el vivo reflejo de Vegeta, ese chico del que se había enamorado a primera vista, y al que jamás pudo tener a su lado. Nunca se había jugado para ganarse el amor del pelinegro, ni siquiera demostraba verdaderamente su interés, algo de lo que se arrepentía profundamente… Aunque se reprendía a sí mismo por mirar tanto a la hija de aquel hombre, después de todo, era muy joven... Deseaba tener una oportunidad con ella cuando fuera mayor…

 

Pero estaba no tenía ni la más remota idea de que eso no estaba en los planes del destino…

 

**

Vegetto se sentó derrotado en una banca de la plaza. Los había perdido totalmente de vista, y la muy astuta de Gogeta había ocultado su Ki para que no pudiera detectarla. El pelinegro suspiró frustrado, pensando con mucha seriedad “Papá me castigará” hasta que una mano se posó en su espalda, sobresaltándolo al instante.

-¡Hola niñito! –Saludó con una sonrisa un hombre de cabellos rubios y ojos verdes, para después mirarlo con cierta malicia -¿Qué haces tan abandonado? ¿Ya no hay nueva pornografía que mirar? –Insinuó divertido, codeando al menor.

-¡Nada de eso, Marck! –Respondió sonriente, bastante alegre de ver a su tío -Papá volvió a pedirme que siga a Gogeta, pero los perdí –Explicó, borrando su sonrisa para mirar el suelo con frustración.

-¡Eres un inútil! –Rió a carcajadas el mayor, mientras se sentaba a su lado sin dejar de burlarse. Vegetto se cruzó de brazos, colocando una mueca de indignación.

-¡Inútil tú! –Se defendió con fingida molestia, desviando la vista. -Tendré que ir a buscarlos de nuevo –Comentó cansado, para después soltar un largo suspiro -¿qué haces aquí?

-Te vi solo ahí y pensé “Necesita un poco de diversión”, y aquí tienes a tu tío favorito para entretenerte –Respondió aún divertido, igual de egocéntrico que siempre. Vegetto se levantó de la banca

-¡Dios me libre! ¡Prefiero aguantarme a Vegita! –Dijo en medio de risas - Iré a buscarlos –Avisó comenzando a moverse hacia un lugar, el oji verde se levantó del asiento para seguirlo.

-A decir verdad Alex está demasiado pegado a tu hermana. No sé si es mi imaginación, pero creo que se la quiere voltear… -Comentó desinteresadamente, mirando el cielo.

-¡No digas esas cosas! ¡Mi hermana no le prestaría atención! –Dijo con cierta molestía, en verdad no le gustaba la idea de que su hermana fuera cortejada por ese hombre tan grande, simplemente no lo aceptaba por más que lo ocultara…

Marck seguía mirando hacia arriba, mientras hablaba con suma serenidad -Lo sé, por eso me da algo de pena por él. –Bajó la vista para mirar al menor, nuevamente con una sonrisa burlona - Aunque se lo merece por pedófilo asalta cunas –Reflexionó chistoso

Vegetto no pudo evitar reír. -No tienes remedio. Dime  ¿Por qué andabas en la plaza? ¿Se te cortó la luz y no podías ver más porno? –Preguntó insinuante, Marck cambió su expresión a una más seria y depresiva

-¡Exacto! ¡Estaba en el mejor momento, y la luz se fue! ¡Fue un bajón total! ¡Casi muero! –Explicó completamente exasperado, agarrándose la cabeza con las manos cómicamente. Vegetto rió a carcajadas por la situación de su “mejor amigo”, siempre era la misma historia con él.

-Desesperado… -Murmuró para molestarlo, para después mirar hacia otro lado… El más alto rechinó los dientes, pero rápidamente volvió a mostrar su sonrisa maliciosa

-Hm, mira quién habla, ¿podrías dejar de babear por las mujeres, por lo menos frente a tu tío? –Preguntó lentamente, Vegetto dejó de mirar a esas dos chicas, para ver el piso con cierta vergüenza…

-¡Cállate!

**

Y algo lejos de donde ellos estaban, Goku y Vegeta caminaban por la ciudad tranquilamente, con algunas bolsas en las manos. Habían terminado de hacer las típicas compras para llevar todo lo necesario a su hogar… Caminaban en silencio, hasta que Vegeta recordó cierto asunto…

-¿Goku, viste a Vegetto? –Preguntó tranquilamente, Goku sintió su rostro palidecer al instante…

-Eh, sí, salió luego de Gogeta, iba a ver a unos amigos. –Respondió algo rápido, sin siquiera ver a su pareja. Vegeta sospechó de esa respuesta, rara vez Goku se ponía así de nervioso…

-¿En serio?

-¡S-sí! ¡Ya sabes cómo es, ama andar en esa cosa, ya sabes, skate! ¡Skate con sus amigos! –Explicó más rápido, con una mano detrás de la nuca, mientras reía nerviosamente. Aún no sabía controlar sus nervios cada vez que Vegeta lo descubría.

El de menor estatura prefirió dejar pasar el asunto. -Bueno… - Suspiró aburrido, para seguir con su camino a la casa…

Pero mientras caminaban, Vegeta sentía como si tuviera una mirada encima, por lo que giró la cabeza para mirar hacia atrás. –No hay nadie – Pensó al verificar, pero aún así seguía dudando. Continuaron un poco más, pero esa sensación de que alguien los seguía se hacía más fuerte, por lo que paró y miró hacia atrás.

En eso, ve un hombre justo detrás de él, usando un sombrero bastante ostentoso, quien simplemente le pasa por al lado y continúa su camino tarareando una canción. Vegeta miró el lugar por donde venía el hombre del sombrero, pero no había nadie más.

-¿Pasa algo Vegeta?

-No, solo fue mi imaginación. –Respondió con simpleza, volviendo a caminar. –Seguro ese hombre me estaba mirando – Pensó aburrido, ignorando el asunto.

-Espero encontrar a Vegetto en casa primero, antes de que le invente otra excusa a Vegeta…  - Pensaba nervioso Goku, gotas de sudor comenzaron a resbalar de su rostro. No era que le tuviera miedo a Vegeta, pero no eran muy divertidos los castigos y reprimendas que le daba cada vez que hacía algo así…

-¿Pasa algo?

-¡N-nada! 

Notas finales:

Jeje bueno, qué tal? me pidieron que me centrara en la vida de los jóvenes, algo que obviamente pensaba hacer e_e Blitz... jaja bueno! no tuve mucha inspiración pra los nombres y títulos xD I'm sorry very much T-T

Hm, Vegetto mujeriego.... ¿se lo esperaban? ¿por qué será así? e_e Alex interesado en Gogeta, la viva imagen de Vegeta, ¿qué saldrá de todo eso? 

(Voz misteriosa: Alex en ambulancia (?)  SHH! SHARAP XD 

Espero les haya gustado el cap!!! jeje y nuevamente disculpen la tardanza T-T Espero mis queridos lectores sigan aquí, y no se hayan aburrido de tanto esperanme xD 

JEJE bye!! cuidense! criticas, opiniones, sugerencias, todo el rw!!! :D 

 


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