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Mestizo por Kurara

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Notas del fanfic:

Título del fanfic: Mestizo

Parejas: WonKyu

Tipo: Yaoi.

Género: Angst

Advertencias: Ninguna.

Notas del capitulo:

¡Hola, hola, hola! ¡Cuanto tiempo sin pasar por aquí! La vida me tiene atada de pies y manos T_T

En fin...

Estoy aquí con un nuevo fic!! Seriado aunque cortito.

Esto es algo que he escrito para Choi Ji Sungah. Es un fic a modo de premio por haber ganado el Concurso Navideño de Drabbles WonKyu que organizamos en el grupo de facebok WonKyu Shippers / Whispers Shippers del cual soy parte de la administración. ¡Os animo a hacer click en los links de arriba y leer esos drabbles! ¡Os sorprenderán!

Al principio, esto debía ser un one-shot, pero... la cosa se alargó sin quererlo... y ha terminado siendo un fic de cuatro capítulos XDDD

Pero no creo que eso sea motivo de queja, ¿verdad? :D

Los subiré muy seguidos así que no os preocupéis por la demora, ¿vale?

 

Choi Ji Sungah, esperamos que te guste (aunque el tema quizá se ha alejado un poquitín de lo que nos pediste inicialmente) y enhorabuena una vez más por tu victoria!

CAPÍTULO 1

 

Con la garganta seca, el sudor recorriendo su frente, y la pesada arma en su mano, Kyuhyun se obligaba a seguir corriendo entre las lápidas rotas. Las volutas de vaho salían de sus labios en cada zancada debido al frío clima del mes de octubre.

 

ㅡSiwon, joder, contéstame ㅡhabló.

 

Pero al igual que las cuatro veces anteriores, no recibió respuesta alguna por el auricular comunicador que llevaba en la oreja.

 

Un horrible rugido sonó en algún lugar demasiado cercano. Kyuhyun detuvo su carrera para mirar a su alrededor unos segundos antes de decidir su siguiente ruta. Corrió de nuevo, en dirección contraria a aquel ser. Había divisado un panteón a lo lejos tras el cual podría ocultarse.

 

ㅡSiwon, te juro que como te hayas muerto, me pego un tiro para ir a buscarte allí donde estés y matarte otra vez ㅡresopló agachándose tras el panteón y comprobando su arma.

 

ㅡNo creo que alguien pueda morir dos veces, Kyu…

 

Su voz hizo a cada célula de su cuerpo enervarse y a su corazón empezar a latir desbocado ante el tono lastimado y adolorido. Se dio la vuelta rápidamente. Siwon permanecía escondido tras unos arbustos y apoyando su espalda contra la pared del panteón. Su cabeza estaba ligeramente echada hacia atrás y sus ojos cerrados con fuerza. Su respiración era errática, su pecho subía y bajaba de forma descompasada y su aliento escapando de sus labios formaba volutas de vaho intermitentes. Y su mano derecha estaba completamente empapada en sangre posada sobre su estómago.

 

ㅡMierda ㅡmaldijo acercándose a él.

 

Su pecho se estrujó por culpa del miedo y los nervios ante semejante herida.

 

ㅡSe me ha roto el auricular, compañero ㅡbromeó Siwon enseñándole el pequeño aparatito negro en su mano izquierdaㅡ, y estoy sin balas. ¿Tú qué tal?

 

ㅡTengo medio cargador, el auricular en su sitio y un compañero medio muerto al parecer ㅡrespondió, tratando de seguir la ácida broma.

 

ㅡMedio vivo ㅡle corrigió Siwon. Él y su obsesión de ver siempre el vaso medio lleno.

 

ㅡ¿Te han mordido? ㅡKyuhyun llevó una mano a su barbilla, obligándole a girar su cara y mostrarle ambos lados de su cuello en busca de la marca.

 

ㅡNo ㅡnegóㅡ, esto me lo hizo uno de sus sabuesos ㅡexplicó haciendo referencia a su herida.

 

ㅡTengo que avisar a Jongwoon. Necesitamos un coche que venga a buscarte. Necesitas un médico ㅡhabló mientras buscaba su teléfono en sus bolsillos.

 

ㅡSí, claro. ¿Se te ha olvidado lo que hay ahí detrás? ㅡapuntó haciendo un gesto con su cabeza, refiriéndose al otro lado del panteónㅡ. Cómo si nos fueran a dejar pasar para llegar al coche.

 

Y como si le hubieran escuchado, una serie de feroces rugidos amenazadores cortaron el aire de la fría noche.

 

ㅡNo estarán aquí para cuando Jongwoon llegue ㅡaseguró Kyuhyun tecleando rápidamente en su teléfonoㅡ. Yo me encargaré de ellos ㅡafirmó.

 

ㅡ¿Y cómo vas a hacerlo con medio cargador exactamente? ㅡpreguntó.

 

Kyuhyun le dio el teléfono y su arma.

 

ㅡ¿Acaso se te olvida con quién estás hablando? ㅡle preguntó poniéndose en pie.

 

Siwon vio el destello de la ira brillar en sus ojos chocolate antes de que estos cambiaran a un profundo negro.

 

ㅡKyuhyun, no…

 

ㅡFirmaron su sentencia de muerte en el momento en que te hirieron ㅡsu voz se tornó grave, casi como un gruñido mientras se daba la vuelta, evitando que Siwon pudiese ver sus facciones transformándose.

 

Y con un salto desapareció de su vista antes de cambiar.

 

Siwon soltó un ahogado suspiro y apoyó su cabeza de vuelta contra la pared. Contuvo el aliento unos segundos. Y el desgarrador grito de horripilante dolor erizó hasta el último pelo de su cuerpo. Los gritos cesaron pronto, Kyuhyun jamás se regodeaba en sus presas, y el desagradable olor a sangre de aquellas criaturas no tardó en llegar a sus fosas nasales. Pero Kyuhyun no regresó.

 

Largos minutos después, Jongwoon lo encontró.

 

ㅡUfff… Kyuhyun no exageraba ㅡcomentó agachándose a su lado para examinar su heridaㅡ. Tenemos que llevarte al Cuartel. No puedo hacer mucho aquí… Kangin, ayúdame a levantarlo.

 

Siwon no había visto al otro hombre todavía, pero apareció desde detrás del panteón en camiseta.

 

ㅡ¿Y tu abrigo? ㅡfue Jongwoon el que formuló la pregunta antes que él.

 

ㅡKyuhyun lo necesitaba más que yo ㅡrespondió el hombre llegando a su lado para ayudar a Siwon a ponerse en pie.

 

ㅡ¿Cómo está? ㅡSiwon preguntó, sabía que la pregunta era innecesaria, la respuesta siempre era la misma, pero necesitaba preguntarlo.

 

ㅡHecho una furia todavía. Pero bien. Es humano otra vez. Y razona lo suficientemente bien como para no haberse querido acercar a ti estando como estás empapado en su tentempié favorito.

 

ㅡNo es mi tentempié favorito ㅡla voz de Kyuhyun se hizo oír desde detrás del muroㅡ, mi tentempié favorito son las galletas de chocolate.

 

Siwon quiso reírse, pero sólo consiguió un extraño gemido adolorido. Sí, su herida no estaba nada bien. Empezaba a sentir su vista nublada y le estaba costando horrores mantener los ojos abiertos y la cabeza erguida.

 

ㅡSiwon, no te duermas ㅡle reclamó Jongwoon.

 

ㅡNo… No… Estoy… Estoy…

 

ㅡ¡Siwon! ㅡKyuhyun gritó apareciendo frente a su campo visual.

 

Y Siwon sólo alcanzó a ver el rostro de Kyuhyun, con sus labios manchados de sangre que goteaba ensuciando todo su cuello y su pecho, perdiéndose bajo el enorme abrigo de Kangin.

 

 

 

Kyuhyun ni siquiera se molestó en limpiarse o vestirse cuando fue requerido frente a los Superiores al llegar al Cuartel. Se aseguró de dejar a Siwon en buenas manos y se presentó frente a la sala de reuniones dónde lo habían mandado llamar. Se había esperado la reprimenda, por lo que ésta no le sorprendió lo más mínimo. Y la escuchó en silencio durante más de media hora.

 

ㅡDoce, Kyuhyun. Había siete vampiros y cinco licántropos en aquel cementerio y no has dejado uno solo con vida ㅡle reclamó uno de los Superioresㅡ. Tu misión era traerlos con vida. ¡¿Cómo vamos a descubrir sus planes si sólo conseguimos cadáveres?!

 

Y Kyuhyun se hartó de estar en silencio. Se puso en pie y los miró uno a uno fijamente.

 

ㅡUstedes me reclutaron para esta misión porque mis habilidades les eran útiles. Y les guste o no, mis habilidades implican muerte si esa es mi única posibilidad para salir con vida ㅡles dijoㅡ. Doce. Ustedes lo han dicho. Doce criaturas en aquel cementerio. Mi compañero estaba herido y desarmado, ¿se les ocurre acaso alguna mejor forma para poder escapar de allí? ㅡles preguntóㅡ. Sabemos que su organización cuenta con cientos de miembros. Se reúnen cada luna llena en los cementerios del condado ㅡles recordóㅡ. Ustedes han mandado batallones a cada cementerio esta vez. No todo dependía de Siwon y de mí. ¿Qué ha pasado con el resto?

 

Los Superiores cruzaron miradas entre ellos y al final el Capitán habló:

 

ㅡNinguno ha regresado.

 

Kyuhyun no mostró cambio alguno en su expresión.

 

ㅡSi las cosas estaban igual que el sitio en el que estábamos nosotros, no me extraña ㅡrespondióㅡ. Si están frustrados porque sus planes no han salido como querían, no me echen a mí las culpas. No voy a arrepentirme de salvar mi vida y la de Siwon solo porque ustedes querían a esas criaturas vivas para interrogarlas.

 

ㅡ¡Kyuhyun! ㅡel Capitán se levantó ofendido por sus acusacionesㅡ. ¡Modera tus palabras! ¡Estás frente al Consejo de Superiores! ¡Aquí las insolencias se pagan con cárcel!

 

ㅡHagan lo que quieran. Si quieren encarcelarme, adelante. Pero no pienso dejar que me encierren en ningún lado hasta que Siwon se recupere. Así que, buenas noches.

 

Y Kyuhyun caminó hacia la salida.

 

ㅡ¡Que tengas el favor del Guardián no te hace superior a los demás! ㅡgritó el hombre en su dirección.

 

ㅡNo ㅡnegó volteando a verlosㅡ. Soy superior a todos ustedes con o sin su favor, ¿recuerdan? Soy el Mestizo ㅡdeclaróㅡ. Y ustedes me necesitan de su parte, no olviden que me costaría un simple suspiro tener todas sus cabezas en mis manos en este momento.

 

ㅡ¡¿Te atreves a amenazarnos?! ㅡexclamó el General poniéndose en pie.

 

ㅡNo. Sólo les estoy advirtiendo ㅡKyuhyun mostró sus colmillos amenazanteㅡ. Cumpliré mis misiones siempre y cuando eso no ponga en peligro mi vida o la de mi compañero. Pero no duden que haré lo que sea con tal que mis planes no se vean entorpecidos.

 

Y con esas últimas palabras, Kyuhyun salió de la sala.

 

Kyuhyun nunca se arrepentía de sus palabras, ni siquiera aunque estás supusieran una temporada de encierro como sabía que aquellas harían. Pero jamás se arrepentía. Esa gente era estúpida, le reclutaron precisamente por ser quién era, por sus habilidades y ahora pretendían que no las usara cuando la muerte le acechaba como había hecho una hora antes. Por mucho que ellos dijeran, él sabía que el Guardián estaría de acuerdo con su forma de pensar. Tal vez el hombre sí lo librara de su encierro…

 

Kyuhyun recordó el momento en que conoció al Guardián cuando vio la sangre correr hacia el desagüe al meterse en la ducha. Al igual que la sangre de su madre corrió hacia el desagüe del garaje aquella noche en que su padre los encontró. Kyuhyun jamás olvidaría aquellos ojos rojo fuego, enmarcados en aquellas blancas facciones cinceladas en mármol. Juró vengarse de él cuando el Guardián le obligó a huir. El hombre se encargó de él, se lo llevó de allí para que las autoridades humanas no le encontrasen. Y lo acogió en su casa dónde le explicó toda la verdad. Toda aquella que su madre nunca le contó y que ahora esclarecía tantas cosas de su vida que hasta ese momento no tenían explicación.

 

Él era el Mestizo, se le conocía con ese nombre entre las criaturas de la noche. Hijo de un vampiro y una mujer lobo. Los humanos habían sido muy estúpidos por creer que las criaturas oscuras no se darían cuenta que eran más fuertes unidas que separadas. Y un vampiro científico con deseos de jugar a ser Dios, supo enamorar a la Reina de los lobos y concebir un hijo. Para cuando ella se dio cuenta de las intenciones reales del hombre, ya era tarde. Kyuhyun ya se gestaba en su vientre y supo que su única opción sería huir. Y lo hizo, huyó durante su embarazo y durante siete años con Kyuhyun junto a ella. Tras la primera transformación de Kyuhyun, ella supo que jamás debía dejar que él lo encontrara, pero sus esfuerzos terminaron siendo en vano aquella fría noche de diciembre, cuando él los encontró. Ella encontró la muerte de forma inesperada, Kyuhyun lo presenció todo y, su único consuelo, era saber que no sufrió porque fue rápido.

 

Kyuhyun meneó la cabeza, tratando de dispersar esos pensamientos, mientras salía de la ducha y se enrollaba en una toalla. Observó las marcas de sus muñecas, ya casi no eran visibles después de dos semanas, y sonrió amargamente al saber que reaparecerían cuando lo encerraran en breve. Odiaba los grilletes de plata de su celda personal.

 

Sacudió la cabeza una vez más y se vistió rápidamente para salir de su habitación y encaminarse a la enfermería del Cuartel.

 

Cuando atravesó la puerta, se encontró de frente con Kangin.

 

ㅡYa me preguntaba cuando aparecerías por aquí ㅡlo saludóㅡ. ¿Te han regañado mucho?

 

ㅡSólo un poco más de lo habitual ㅡrespondió estirando su cuello tratando de ver por encima de su hombro al interior de la enfermeríaㅡ. ¿Cómo está?

 

ㅡSe pondrá bien ㅡafirmóㅡ. Ha perdido mucha sangre, pero le han hecho una transfusión.

 

Kyuhyun gruñó.

 

ㅡ¿Qué pasa? ㅡse extrañó Kanginㅡ. Te he dicho que se pondrá bien.

 

ㅡNo me gusta lo de la transfusión. Me gusta como huele su sangre. Ahora tardará un tiempo en recuperar su olor ㅡapuntó molesto.

 

Kangin se irguió todo lo grande que era y se colocó delante de él de forma amenazadora, bloqueando su vista y su paso.

 

ㅡNo te voy a dejar pasar hasta que no vuelvas a ser tú ㅡlo amenazó.

 

Kyuhyun sacudió su cabeza y le tendió el abrigo que le había prestado.

 

ㅡSoy yo ㅡafirmó mirándole a los ojosㅡ. No soy ningún peligro ahora, déjame pasar.

 

Kangin le observó unos segundos, buscando cualquier rastro de su aura amenazadora y Kyuhyun elevó la vista para verle a los ojos.

 

ㅡKangin, por favor. Sólo quiero verlo…

 

Y el soldado vio la sinceridad en sus ojos marrón chocolate.

 

ㅡEstá bien. Pasa ㅡle dijo apartándose de su caminoㅡ, pero no lo despiertes, necesita descansar.

 

Kyuhyun asintió y entró en la sala, pero se dio la vuelta antes de que Kangin se marchara.

 

ㅡ¿Habéis avisado a su padre?

 

ㅡSí, Jongwoon lo mandó avisar cuando llegamos.

 

ㅡVale ㅡasintióㅡ. Estaré aquí hasta que vengan a buscarme.

 

Kangin rió.

 

ㅡSi me preguntan, les diré que no sé dónde estás.

 

Kyuhyun sonrió agradecido y entró en la enfermería finalmente. No le hizo falta que le dijeran dónde estaba Siwon, podía sentir su olor y su presencia a kilómetros, aquella sala llena de camillas no era ningún reto para él. Caminó seguro hacia el fondo del lugar, y allí, en una de las camillas más apartadas y resguardado tras una cortina, Siwon dormía profundamente con una venda enrollada alrededor de su estómago.

 

Se acercó a su lado y se sentó en el pequeño taburete que había a su lado. Siwon respiraba profundamente, un suave murmullo escapaba de sus labios ante cada exhalación, un sonido tan distinto a su respiración entrecortada y costosa de hacía una hora…

 

ㅡMe pone nervioso que me mires en silencio.

 

ㅡ¿Estás despierto?

 

Siwon abrió los ojos y giró su rostro como respuesta.

 

ㅡDeberías estar durmiendo, te recuperarás antes…

 

Siwon elevó un brazo y llevó su mano hasta su mejilla. Kyuhyun ladeó la cabeza, agradecido por la caricia.

 

ㅡSi no te levantas tú, no voy a poder besarte ㅡbromeó Siwonㅡ. No puedo moverme.

 

Kyuhyun soltó una risita, pero se puso en pie y se inclinó sobre el mayor, sintiendo como éste trasladaba su mano hasta enredarla entre sus cabellos medio húmedos para atraerlo hacia él y devorar sus labios de forma arrebatadora. El menor no mostró duda ante la intensidad, Siwon había estado igual de preocupado por él, que como él lo había estado por Siwon. Aunque la diferencia era que Siwon no debía preocuparse por él, su transformación rara vez resultaba herida.

 

ㅡSi eres capaz de besarme así, por lo menos sé que no estás tan mal ㅡbromeó el menor.

 

ㅡCállate ㅡle respondióㅡ. Has sido un inconsciente y lo sabes ㅡle reprochóㅡ. No debes gastar tu energía así ㅡañadió agarrando su cabello en un puño, para levantarlo un poco y ver las capas inferiores de cabello que aún permanecían castañas.

 

Esa era la parte que Kyuhyun más odiaba de toda su condición.

 

El mestizaje había tenido su precio. La sangre vampira y licántropa de sus venas le había conferido una transformación brutal cada luna nueva, pues Kyuhyun no cambiaba en la luna llena como el resto de licántropos. Kyuhyun no se convertía en lobo, Kyuhyun se convertía en una bestia. Puro músculo de acero, cubierto de pelo y con dientes capaces de desgarrar cualquier cosa que se le pusiera por delante. Se volvía rápido y mortal. La sed de sangre sólo se aplacaba con la sed de muerte. Kyuhyun se transformaba en la incontrolable máquina de matar que su padre había pronosticado para liderar a ambas razas.

 

Pero aquello tenía un precio. Su vida. Kyuhyun veía su tiempo en la Tierra acortado ante cada transformación. Su cabello se volvía gris después de cada cambio. Después de cada luna nueva, un mechón de su cabello cambiaba de color. Un vil recordatorio del poco tiempo que le quedaba. Y Kyuhyun odiaba eso, porque su cabello era ahora casi completamente gris, salvo la capa más baja. Y las transformaciones voluntarias como la de aquella noche, sólo empeoraban las cosas.

 

ㅡSiwon… ㅡKyuhyun agarró su mano, obligándole a retirarla de sus cabellosㅡ. Si no lo hubiera hecho, ambos estaríamos muertos.

 

ㅡMorirás de todas formas si sigues así ㅡle acusó.

 

ㅡMoriré de todas formas haga lo que haga ㅡle recordóㅡ. No puedo controlar mis transformaciones mensuales. Los dos sabemos que no me queda mucho tiempo.

 

Siwon le vio a los ojos, viendo la amarga aceptación de su destino. Odiaba aquella sensación. Ver al menor rendirse y saber que esa era su única opción, nada podían hacer ellos para solucionar eso. Y lo odiaba. Odiaba al hombre que se hacía llamar su padre por hacerle eso.

 

ㅡYo que vengo preocupado porque me dicen que mi hijo está moribundo y me encuentro a mis dos hijos lamentándose por una muerte que no existe todavía.

 

Kyuhyun se apartó de Siwon rápidamente ante la voz. Se irguió con su espalda recta y colocó sus manos tras su espalda en formación militar. El Guardián era el único hombre frente al cuál Kyuhyun formaba.

 

ㅡSeñor ㅡlo saludó.

 

ㅡYa, ya. Descansa Kyuhyun ㅡhabló el hombre haciendo un gesto con su mano, dando a entender que su actitud era innecesariaㅡ. Nadie nos ve aquí ㅡapuntó a la cortina cerrada a su espalda.

 

Kyuhyun asintió, pero se mantuvo erguido junto a la camilla.

 

ㅡNo vas a poder convencerlo, papá ㅡhabló Siwonㅡ. Ya sabes lo cabezota que es.

 

El hombre suspiró y se sentó en el sitio que Kyuhyun había dejado libre.

 

ㅡEcho de menos la época en que era un niño obediente de diez años y me llamaba papá ㅡbromeó el hombre.

 

ㅡEso queda demasiado lejos, ya ㅡrespondió Siwonㅡ. Y nunca ha sido obediente ㅡnegóㅡ. Sólo que tú eres la única persona a la que le hace caso.

 

ㅡBueno, pero algo es algo, ¿no crees?

 

—Sí, supongo que sí —aceptó.

 

—¿Podríais dejar de hablar como si yo no estuviera aquí? —les preguntó Kyuhyun molesto.

 

El hombre mayor rió.

 

—Bueno, ¿qué tal si me contáis lo que habéis descubierto? —les pidió—. Sino tengo mal entendido, el Consejo se ha limitado a ragañarte en lugar de preguntarte por vuestra misión.

 

Kyuhyun sonrió torcido.

 

—Ni que hubieras estado espiando —bromeó.

 

El hombre rió otra vez.

 

ㅡTengo oídos en todas partes, Kyu…

 

ㅡSí, ya lo imagino ㅡaceptó Kyuhyunㅡ. En fin… ㅡsuspiró tratando de aclarar sus ideas unos segundos antes de hablar de nuevoㅡ. Cuando llegamos allí, había siete vampiros y cinco licántropos en el círculo. Cómo sospechábamos se encontraban a mitad de algún tipo de ritual. Pero no sabemos qué hacen exactamente o qué buscan conseguir con él.

 

ㅡY no queda ninguno con vida a quién poder preguntarle ㅡapuntó el hombre mirándole enarcando una ceja.

 

ㅡNo, ninguno ㅡafirmó Kyuhyunㅡ. Los maté a todos después de encontrar a Siwon herido.

 

El hombre asintió, Kyuhyun sabía que no le iba a regañar más por eso, los Superiores ya lo habían hecho bastante y, además, el Guardián sabía que si no fuera por eso, Siwon no seguiría vivo.

 

ㅡ¿Se sabe algo del resto de soldados? ㅡpreguntó Siwon.

 

ㅡNo ha vuelto ninguno ㅡnegó el hombreㅡ. No hay muy buen pronóstico ㅡse lamentóㅡ. Esperaremos hasta la mañana, pero sinceramente, no tengo demasiadas esperanzas…

 

Siwon se quedó en silencio, lamentando la pérdida de tantos compañeros.

 

ㅡBueno, por ahora, no nos queda otra que esperar a la próxima luna llena ㅡhabló el hombreㅡ. Sus reuniones se han llevado a cabo durante los últimos meses siempre durante la luna llena. Para la próxima estaremos más preparados.

 

Tanto Siwon como Kyuhyun asintieron, mostrándose de acuerdo.

 

ㅡTe dejaré descansar por ahora, hijo ㅡañadió el hombre levantándose de su sitioㅡ. Kyu, ¿cuidarás de él?

 

ㅡUhm… No creo que tarden mucho en venir a buscarme, señor ㅡse disculpó el menor, rehuyendo la mirada de Siwon.

 

ㅡNo van a encerrarte esta vez, Kyuhyun. Ya me he ocupado de eso ㅡaseguróㅡ. Así que por el momento tu misión es encargarte de que Siwon no se levante de esa cama hasta que esté recuperado ㅡel hombre sonrió al menor.

 

ㅡSí, señor.

 

ㅡDeja de llamarme señor ㅡlo regañó abrazándoloㅡ. Puedes seguir llamándome papá cuando no haya nadie más delante.

 

Kyuhyun asintió, pero no respondió. No le parecía correcto llamarlo de ese modo, aunque lo hubiese estado haciendo cuando era pequeño.

 

Él y Siwon se habían criado juntos desde que el hombre lo llevó a su casa. Siwon tampoco tenía madre y ellos dos se entendieron bien rápidamente. Se habían criado prácticamente como hermanos.

 

ㅡ¿Sabes que sigo investigando, verdad Kyuhyun? ㅡmurmuró en su orejaㅡ. No te rindas, hijo. Todavía no.

 

Y con esas últimas palabras, lo soltó y se marchó del lugar.

 

—Le pondría contento que lo llamaras papá otra vez —comentó Siwon cuando el hombre ya no podía oírlos.

 

—Siwon... Sabes que no puedo... No desde que tú y yo...

 

—Oh, vamos Kyu. No es como si fueramos hermanos realmente aunque nos hayamos criados juntos.

 

—Ya lo sé, pero... Se me hace demasiado raro...

 

—Bueno, como quieras —aceptó el mayor—. ¿Qué tal si ahora me cuentas lo que no le has dicho a él?

 

Kyuhyun lo miró sorprendido.

 

—Te conozco mejor que él —apuntó sonriendo ante su expresión.

 

Kyuhyun suspiró.

 

—Encontré algo en el cementerio después de... Bueno, después de matarlos —admitió.

 

—¿Qué encontraste? —preguntó Siwon con curiosidad—. ¿Y porqué no se lo has dicho a mi padre?

 

Kyuhyun rebuscó en sus bolsillos hasta encontrar lo que buscaba. Lo cogió y lo sostuvo en su palma abierta para que Siwon lo viera. Una cadena de oro de la cuál colgaba un pequeño dije redondo con un símbolo grabado. Era una especie de diagrama con líneas que se entrecruzaban formando un dibujo simétrico.

 

—Un collar —habló Siwon.

 

—No es un simple collar, hyung —apuntó Kyuhyun—. Es el símbolo que había en el círculo y... además...

 

—¿Además? —le apremió Siwon ante su repentino silencio.

 

ㅡMi madre tenía un collar igual que este...

 

Siwon trató de incorporarse sorprendido por aquella información, pero su herida dio un pinchazo y solo pudo gemir adolorido mientras se tumbaba de nuevo.

 

ㅡHyung, no hagas esfuerzos ㅡlo regañó Kyuhyun colocando la mano libre en su hombro para evitar que intentara levantarse otra vez.

 

ㅡ¿Qué significa, Kyu?

 

ㅡNo lo sé ㅡnegó él con su cabezaㅡ, pero tengo la sensación de que es algo importante y de que por alguna razón, esto tiene que ver conmigo...

Notas finales:

En breve el segundo :D


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