—¡JiMin, por favor acompáñame! ¡No quiero ir solo! — los lloriqueos de Taehyung comenzaban a hartarlo y comenzó a cuestionarse a si mismo el conseguir nuevos amigos.
—No, debo estudiar y creo que tu deberías hacer lo mismo.
—Ah... tan cortante... —lo vio hacer un exagerado puchero. — Anda, Jungkook estará allí y todos sabemos que esas loco por él... tómalo como un bonus extra, vas a la fiesta, te diviertes un rato y ligas con Jungkook...
—¿Jungkook? —detuvo su paso inmediatamente al escuchar aquel bello nombre. —¿Jeon Jungkook irá? —sus ojos brillaron emocionados. Taehyung asintió con una boba sonrisa en sus labios.
—Sí, el irá a la fiesta.
—Supongo que no estará tan mal dejar pendientes los estudios para acompañar a mi buen amigo a la fiesta...
Y con una ultima sonrisa cómplice entraron a clases.
***
Su ceño estaba tan fruncido que parecía que le daría un calambre, Taehyung lo miraba con una mueca de disculpa dibujada en su cara.
JiMin estaba molesto y no era para menos, él había ido a esa dichosa fiesta solo para poder estar con Jungkook, el chico que le gustaba desde hace tres años y lo primero que ve al entrar es a Jungkook prácticamente follándose a una zorra en medio de la cocina.
—Vamos JiMin... no puedes quedarte allí sentado todo el rato solo por ver a ese niñato con alguien más... — Taehyung lo jaló del brazo en un vano intento por hacer que se levantara del sillón para ir a bailar un rato pero JiMin se negó.
—Oh, claro que puedo, tu solo obsérvame. —cruzó los brazos decidido a quedarse sentado allí toda la noche, o al menos hasta que fuera hora de irse, él no quería arruinarle la diversión a su amigo.
—Bien, pero solo te digo que hay muchas chicas y chicos igual o más atractivos que Jeon Jungkook mirándote. No pierdas tu tiempo en un niñato hormonal como ese... — y dicho eso se fue, dejándolo solo.
Suspiró. Taehyung tenía razón, no podía amargarse la vida solo por haber sido rechazado indirectamente por Jungkook.
Caminó hasta la mini-barra para tomar un poco, quería entretenerse en algo.
—Quiero una cerveza solamente. —le pidió al "barman", este asintió y al poco rato le dio su cerveza.
No supo cuanto tiempo pasó allí, lo único que supo es que entre cerveza y cerveza sus ojos se encontraron con una mirada felina que lo veía fijamente mientras lamía sus labios lenta y tortuosamente. JiMin sintió su pene endurecerse con tan solo ver aquella escena.
Tal vez... si podría olvidarse de Jungkook por al menos un buen rato...
***
Dio dos profundas estocadas y finalmente sintió como el cuerpo frente a él se tensaba, apretando su interior con fuerza y derramando su esencia, manchando su ropa. Tomó con fuerza las caderas del cuerpo contrario para después volver a penetrarlo con profundidad, queriendo llegar de una vez al orgasmo. Sintió los finos labios besar su cuello con lentitud y también como las cortas y perfectas uñas comenzaban a arañar su espalda. Penetró con rudeza y finalmente llegó al orgasmo, corriéndose dentro de aquel molesto pedazo de plástico que cubría su pene, el cual estaba lleno de su esencia. Sonrió satisfecho, ya eran más de tres corridas en esa noche junto a ese chico tan lindo.
—El mejor puto polvo de mi vida... —le escuchó decir y sonrió aún más.
—Te digo lo mismo, chico.
Ninguno de los dos sabían sus nombres, no sabían que edad tenían o algo más... solo sabían que ambos habían sido invitados a esa fiesta. Soltó cuidadosamente las piernas del chico, sosteniéndolo aún para evitar que este cayera al suelo de aquel baño. Esperó unos minutos para que finalmente el chico pudiera sostenerse por si mismo y lo soltó, alejándose de él y quitándose el condón para posteriormente tirarlo al bote de basura junto al baño. Subió sus bóxer junto a sus pantalones y desvió su mirada, dándose cuenta de que aquel chico aún intentaba regular su respiración mientras se acomodaba la ropa.
De pronto sintió curiosidad. ¿Cómo se llamaba? ¿Qué edad tenía?
Terminó de abrochar su cinturón y se miró en el espejo. Su rostro se veía horrible, sudado, con el poco delineador que Taehyung le obligó a usar completamente corrido pero dándole un atractivo exótico gracias a su cabello revuelto. Escuchó los lentos pasos del chico tras él y no pudo evitar reír al ver que no podía caminar con normalidad.
—Lamento eso... —le dijo, refiriéndose a su mal caminar. El chico lo volteó a ver con una mueca que él no supo clasificar.
—Oh, tranquilo, si no me hubieras dejado así creo que no lo hubiese disfrutado como lo hice... —ambos sonrieron, como guardando perfectamente un pequeño secreto.
No lo pudo evitar, JiMin siempre fue un chico impulsivo y se dio cuenta de que era verdad cuando se descubrió acorralando nuevamente al chico en una de las paredes de ese baño. Besó sus labios con lentitud, saboreándolos. Sintió los delgados brazos rodear sus hombros, enterrando sus dedos en su oscuro cabello, dejándose hacer nuevamente. Acarició las piernas del lindo desconocido cuando las sintió enredarse en su cintura. Se separó de los delgados labios y bajó lentamente, besando el delgado y blanco cuello a gusto, lamiendo y dejando pequeñas marcas.
Le escuchó gemir suavemente y eso fue como un incentivo para su polla, la cual volvió a endurecerse cuando ese sonido volvió a escapar de los dulces labios del desconocido. Lo tomó por las caderas y bajó sus manos suavemente, apretando su trasero con fuerza, no para causar dolor, más bien para hacerlo gemir nuevamente.
—Ah~ — Joder, si seguían así JiMin no aseguraba poder controlarse. —Mmmh... sí~
Sus labios volvieron a encontrarse pero esta vez de una manera más hambrienta, queriendo devorarse mutuamente. Las caderas del chico se mecieron lentamente, casi torturando a su pene el cual estaba desesperado por más contacto con ese delgado cuerpo.
Justo en el momento en el que estuvo apunto de desabrochar sus pantalones y sacar otro condón de su bolsa trasera alguien tocó la puerta, logrando que tanto JiMin como el desconocido detuvieran sus movimientos de inmediato.
—¡Con una mierda, me orino, sal del baño!
Joder... Taehyung...
La risita del chico se escuchó levemente, burlándose del ridículo tras la puerta.
—Al parecer nos han arruinado el tercer polvo de la noche... — JiMin gruñó y el chico volvió a reír.
Intentó ignorar esas palabras y volvió a besarle, logrando que las risitas del chico se detuvieran de inmediato. Los suspiros llenaron el baño nuevamente, dándole a entender al tipo tras la puerta lo que pasaba allí.
—¡Joder, al menos usen protección!
Taehyung... eres tan estúpido...
El cuerpo entre sus brazos se tensó completamente cuando una de sus manos se coló en sus pantalones, acariciando su trasero sin tener restricción alguna, disfrutando de la suavidad de esa blanca y dulce piel.
La curiosidad volvió a él. ¿Cómo se llamaba el chico? De verdad, ya era necesario saberlo, no le incomodaba del todo que ese chico solo lo llamara "hombre" o "sexy desconocido" pero tal vez sería mejor llamarse por sus nombres para aumentar la excitación...
—¿Cómo te llamas? — el chico detuvo los movimientos de cadera que había comenzado a hacer y lo miró extrañado.
—¿Es necesario saber el nombre? Solo es un polvo... —volvió a besarle pero JiMin se apartó de inmediato. Enserio quería saber su nombre...
—Soy JiMin. —se presentó. El chico viró los ojos. —Es solo que quiero escucharte gemir mi nombre... —se justificó inocentemente, como si en verdad fuera solo para eso y no por querer saber algo de él y poder "toparse de casualidad" algún día.
—YoonGi... —murmuró. JiMin le sonrió enormemente, feliz de saber ahora su nombre. —Aunque realmente no me molestaba que me llamaras "rubio" o "bonito" —hizo un leve puchero con sus labios el cual a JiMin se le hizo lo más tierno del mundo y hasta se vio tentado a pellizcar sus mejillas y saltar como loco debido a su ternura.
Con que YoonGi... lindo...
Volvieron a besarse con rudeza, queriendo fundirse en el beso por al menos un buen tiempo. Cada uno desabrochó sus pantalones con rapidez, ansiosos de volver a unirse de esa forma tan placentera y pecaminosa a la vez. Bajó el cuerpo del chico, haciendo que este le diera la espalda para poder penetrarlo a su gusto cuando se terminara de colocar ese molesto condón.
—Espera. —YoonGi jadeó. JiMin lo miró extrañado. —¿Tienes alguna enfermedad de transmisión sexual? —a JiMin le sorprendió esa pregunta pero negó rápidamente.
—No. Siempre me protejo... ¿Por qué? — notó la sonrisa de YoonGi e inevitablemente su erección creció.
—Entonces no lo uses y córrete dentro de mí~ lléname de ti, JiMin~
Joder...
Lanzó el condón lejos de él y estampó el cuerpo delgado de YoonGi contra la pared, pegando el rostro de este contra el azulejo. Tomó su dura polla y pronto se enterró completamente en el interior de ese rubio, excitándose aún más cuando lo escuchó exclamar fuertemente su nombre mientras que le rogaba que lo penetrara con fuerza.
—¡JiMin, por dios! —apoyó como pudo sus manos en la pared, separando un poco su cara del duro material, queriendo evitar que con las embestidas se golpeara por error. Sintió las mano de aquel moreno tomarlo por la cintura con firmeza para poder penetrarlo con más rapidez.
Le gustó la sensación de sentirse poseído se esa manera. Él normalmente tomaba el control y jamás imaginó que alguien lo llegaría a poseer de aquella manera tan excitante; y mucho menos imaginó que le gustaría tanto.
—YoonGi... —el jadeo lo hizo estremecerse. Apoyó sus piernas con firmeza en el suelo para después separarlas un poco, dejándose totalmente expuesto ante JiMin.
Quiso que entrara más profundo, que volviera a dar en ese punto que lo volvía loco y no tuvo ningún problema en hacérselo saber.
—JiMin... más~ —dejó caer su cabeza en la pared, pegando su frente al frío azulejo y se estremeció ante el ligero cambio de temperatura. Sentía las fuertes y rápidas embestidas de JiMin, entrando y saliendo con bestialidad de su culo. —Más... — ya no le importaba el comportarse como una puta, a fin de cuentas esa fama ya la tenía y se la había ganado a pulso.
—Joder... YoonGi~ —y poco a poco las embestidas aumentaron la velocidad, llegando a un punto en el que la cara de YoonGi golpeaba incesantemente contra la pared. —Aprietas mucho...
—JiMin... por favor... más~
Y para que negarlo, a ambos les excitó aún más el escuchar como el otro gemía su nombre.
YoonGi gemía como nunca, disfrutando plenamente de cada embestida de la que era victima y a JiMin le encantaba el saber que el era causante de su placer.
—Mierda... —la antes profunda voz del rubio ahora comenzaba a ser chillona, desesperada por sentir más. —JiMin~ — Aún y cuando las embestidas eran fuertes y precisas YoonGi necesitaba más, quería sentirlo hasta adentro. — JiMin... jódeme~
Y eso fue un incentivo más para él. Tomó con rudeza el delgado cuerpo y ayudado por la inercia se sentó en la taza de baño, dejando el pequeño cuerpo del rubio sobre el suyo, creyendo que así se enterraría completamente en su interior.
Sintiéndose más lleno ahora YoonGi comenzó a moverse rápido, gimiendo sonoramente ante la deliciosa sensación de sentirse lleno por esa enorme cosa.
—Joder... tan grande~ — chilló. JiMin sonrió satisfecho cuando, justo como el pensó su polla entraba completamente en aquel rubio tan bonito, haciéndolo estremecer también por el placer de sentir su estrechez asfixiándolo de esa manera tan increíble.
Pasados unos minutos ellos ya no aguantaban más, el sentir como JiMin daba en ese punto cada vez más rápido le estaba volviendo loco mientras el otro sentía como YoonGi cada vez tragaba su polla por completo. Le enloquecía el sentir como era tan estrecho, caliente...
YoonGi se movía con rapidez, apretando dentro de el la polla de JiMin, queriéndola atrapar allí dentro eternamente.
—YoonGi... —abrazó la cintura del rubio con fuerza, acercando sus labios y besándolos con intensidad, acariciando la lengua del contrario con la propia y sintiendo como el aire se escapaba de sus pulmones pero no le importó, siguió besándolo, degustando su dulce sabor.
Y entonces lo sintió, YoonGi tensó su cuerpo con fuerza y se corrió manchando sus abdómenes, sintió también como apretaba su polla en su interior, haciéndole sentir un placer indescriptible. Lo miró a los ojos y notó como este le sonreía al mismo tiempo que apretaba aún más su interior. Joder... lo hacía a propósito... ¡Pero que increíble habilidad!
YoonGi no paró de moverse, sabiendo que aún él no llegaba al orgasmo y sintió compasión. Movía su cuerpo con rapidez al mismo tiempo que apretaba cada vez más su interior hasta que, finalmente JiMin se corrió, llenándolo completamente. Sintió como JiMin rasguñaba su cintura mientras terminaba de vaciarse dentro de él.
Intentaron regular sus respiraciones. YoonGi se dejó caer completamente sobre JiMin, sin importarle el poder asfixiarlo.
—Mierda... me llenaste todo... —rió al sentir su interior húmedo, pegajoso y tibio.
—Eso era lo que querías, ya lo hice... —olió el embriagante aroma del rubio, sintiéndose desfallecer cuando este se separó de su cuerpo para sacar su polla de su interior y volver a sentarse en sus piernas.
***
Caminó lentamente entre la multitud, concentrándose en la relajante melodía de su reproductor. Taehyung iba a su lado, hablado sobre lo mucho que odiaba la universidad y a los profesores, nada nuevo realmente, él solía hacerlo cada fin de año debido a las tareas que dejaban.
Paró en seco cuando notó la luz roja del semáforo y esperó tranquilamente.
—¡JiMin! —el grito de Taehyung lo sacó de sus cavilaciones. Se quitó uno de los auriculares mirando expectante a su amigo.
—¿Qué? —inquirió curioso. No era normal ver a Taehyung sonrojado.
—¡Te digo que estoy viendo a un chico buenísimo y no me haces caso! —le picó una mejilla mientras hablaba con dramatismo.
—¿Y donde está? — Tampoco era normal ver a Taehyung tan entusiasmado con algún chico.
—Allá, míralo, es el castaño... —apuntó al otro lado de la calle, frente a ellos.
JiMin miró al chico atentamente, intentando encontrar algún detalle especial en su rostro o cuerpo. Realmente no era normal ver a Taehyung tan feliz con tan solo ver a un chico como ese, delgado, cara alargada y sin chiste alguno.
—Pues esta bien. —mintió. Él no le veía nada atractivo.
Taehyung notó su enorme mentira. —¡Pues que bueno que no te guste, así será para mí! —se volteó a otro lado, ofendido. —Pero... —volteó a ver a su amigo. —Creo que el chico a su lado es más tu tipo...
—¿Cuál? entre tantas personas a penas y veo mi nariz... —intentó fijar su mirada hacia el lugar que su amigo apuntaba tan entusiasmado, como creyéndose cupido... Y lo vió.
Cabello rubio, piel blanca, labios finos y rosas, cuerpo delgado, piernas largas y lindas, rostro lindo con rasgos tan finos que le daba algún toque femenino pero sin perder su masculinidad... YoonGi.
—¡Hey! ¡El castaño buenote! —la voz de Taehyung lo asustó. Otro día, otra vergüenza al lado de Kim Taehyung...
—¿Yo? —escuchó la voz confundida del chico castaño.
—¡Sí, tú! ¡Mi amigo de aquí y yo queremos saber si tú y tu amigo quisieran tomar un café! — Mierda, YoonGi ya lo había visto y estaba igual o más sorprendido que él...
JiMin vio como el par de chicos se miraban de reojo para después asentir con una sonrisa en su dirección. Se acercaron a ellos rápidamente.
—Mucho gusto, soy Jung Hoseok. — se presentó el castaño.
—Kim Taehyung. — Tae lo miró exigiéndole con la mirada que se presentara con los chicos. JiMin suspiró, eso sería incomodo...
—Park JiMin. —inclinó un poco la cabeza. Ahora era el tal Hoseok quien veía a YoonGi de la misma manera en la que Taehyung lo vio a él antes. YoonGi suspiró.
—Min YoonGi.
—Bueno, ya que nos conocemos bien podemos intimar. — Y Taehyung se alejó junto a Hoseok, arrastrándolo hasta una cafetería cercana.
JiMin y YoonGi se veían fijamente, tímidos. Una cosa era un encuentro casual, en los cuales eran un par de desvergonzados, y otra muy diferente era socializar.
—Creo que deberíamos seguirlos... —habló el rubio. JiMin asintió.
Comenzaron a caminar hasta la cafetería y se encontraron a sus amigos prácticamente comiéndose la boca. Se quedaron estáticos, incómodos. YoonGi se aclaró la garganta y lo volteó a ver de manera sugerente. Se mordió el labio inferior suavemente, provocándolo.
—Tengo que ir al baño... ¿me acompañas? — Y con una ultima sonrisa comenzó a caminar hasta dicho lugar.
JiMin sonrió, tal vez... tendría diversión nuevamente con ese lindo chico...