TU ROSTRO
Dos años en los que habían comenzado a salir, dos años en donde espero pacientemente para poder recibir aunque sea una pequeña sonrisa de parte del más pequeño. Kagami recuerda cuando lo conoció, eso fue hace cinco años, era pequeño y más bajo que el, de ojos celestes y con un hombre como novio, si mal no recordaba Kagami el nombre de ese hombre era…no, no lo diría.
Subió decidido al escenario del bar, esta sería una de sus últimas canciones que tocaría en la banda y por ser una ocasión especial, su amigo Takao le iba a dejar el micro para que él sea el cantante; en ese momento, cuando vio a Kuroko entrar por la puerta del bar en donde se habían conocido hace tiempo, unos recuerdos vinieron a su mente, recuerdos llenos de dolor y felicidad; ese fue el momento en donde recordó el inicio de ambos.
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(Flash back de hace 5 años ;))
Aquel chico había entrado al bar en donde él trabajaba por las noches, recuerda que el fue el primero en llamar su atención; era pequeño, en verdad pequeño y llamativo.
Aquel chico y su novio se sentaron en una mesa, pidieron bebidas y las tomaron, la banda que tocaría en la noche era la de Kagami y sus amigos, una banda que habían formado desde adolescentes y cada vez comenzaba a tener más prestigio; cuando subió al escenario y vio al público, aquel chico fue lo que más llamo su atención en medio del oscuro lugar, ese fue el inicio de un montón de encuentros entre ellos y no paso mucho tiempo hasta que ellos se llegaran a presentar; Kagami Taiga era un músico de la banda Paradise Black y Kuroko Tetsuya era un maestro de inicial que salía con un hombre que trabajaba en una empresa como contador.
Kagami recuerda la cara de Kuroko por esa época, no mostraba expresión alguna, no hablaba mucho, no mostraba sus sentimientos y por un momento pensó que esa era la personalidad del joven maestro, solo hasta que aquello paso.
Fue en uno de esos días donde se quedó hasta tarde por la presentación del grupo, como casi siempre ese día habían ido Kuroko y su novio al bar; sin embargo cuando las luces se vieron apagadas y las personas se habían ido, en el callejón que quedaba detrás del bar Kagami lo vio…Kuroko estaba siendo golpeado por la persona que lo amaba y la situación no se quedaba ahí, el sujeto estaba desnudándolo a punto de violarlo en plena calle, Kagami no pudo aguantar más, sabía que no debía de meterse en donde no le llaman, pero esto ya era demasiado, sentía las inmensas ganas de destruir a ese hombre, quería que desapareciera de su visión y cuando menos lo espero, sintió un cuerpo cálido que sujetaba sus brazo, entonces despertó.
-Kagami kun…por favor detente…ya no lo golpees.
Ante el, tenía al sujeto en el piso sangrando y el lo había golpeado, lo había golpeado hasta casi matarlo, Kuroko lo había sacado de ese estado de ira y ahora veía con algo de miedo a Kagami, el solo quería protegerlo.
Así, de esta manera ellos se habían distanciado un poco, solo hasta que las cosas se calmasen y al menos tengan en claro que es lo que harían a partir de ahora.
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Cinco meses tuvo que esperar Kagami para volver a ver a Kuroko, no tan bello como siempre estaba, pero al menos lo tenía vivo. Las vendas que cubrían su cuerpo y parte de su rostro le decían claramente lo que había tenido que pasar en estos meses, algo doloroso de ver.
-lo deje…ya no podía estar con el, ya no había amor entre nosotros.
Kagami recuerda aquellas palabras de Kuroko, entre lágrimas le conto todo lo que había tenido que pasar, los golpes de su pareja y que aquella noche no había sido la primera vez que lo golpeaba, le dijo que aún lo amaba por eso lo soportaba, pero que ya había sido demasiado dolor, ya no podía con todo eso. Le conto que aquella noche donde los vio, había decidido dejarlo ahora si, ya no seguir con esa relación enfermiza y lo había conseguido, pero que hace una semana él había vuelto suplicando volver y que aquello solo había sido una mala racha, error…
Aquel hombre ante la negativa de Kuroko de volver lo había golpeado y violado, había hecho trizas las pocas fuerzas que tenía. Kagami al oír todo eso, sintió unas inmensas ganas de matar a aquel sujeto, pero Kuroko lo detuvo.
-está en la cárcel…no va a salir en un buen tiempo.
El criminal pagaba por sus actos, pero la víctima era la que tenía que cargar con las consecuencias del agresor y esto es lo que le pasaba a Kuroko ahora, tenía un inmenso miedo al contacto humano y Kagami no tardo en darse cuenta de ese detalle, así como los demás detalles que desprendían mucha cautela de parte de Kuroko. Ante esta nueva fobia nacida por parte del profesor, Kagami había tenido mucho cuidado al acercársele y así había pasado rápidamente dos años y Kagami no tardo en confesar sus sentimientos ante Kuroko, sentimientos que en un inicio parecían perdidos y negados por parte del peliceleste.
Kagami lo comprendía, Kuroko tenía miedo de amar, tenía miedo de volverse a entregar en cuerpo y en alma como lo hizo con aquel hombre, tenía miedo de que vuelvan a lastimarlo y de traicionar su confianza, Kagami comprendía todo eso y aun así se había quedado al lado de Kuroko para amarlo y sanar cada herida que tenía.
Así, sin darse cuenta ya había pasado un año más y ellos seguían juntos, no de una manera romántica, Kuroko aún tenía sus miedos a amar por lo que siempre trataba de fingir y dar una sonrisa falsa, una sonrisa que al menos les dijera a todo el mundo que estaba bien. Por su parte Kagami seguía esperando a Kuroko, no se rendiría por que el se había enamorado y se había enamorado de una persona que era difícil de amar.
Aquel día donde ambos salían de una tocada en el bar, mientras la nieve comenzaba a caer, Kagami vio a su compañero, lo volvió a ver y se dio cuenta que a pesar de los tres años que ya lo conocía aún no había cambiado en nada.
-Kuroko…se mi novio.
Aquellas palabras antes ya habían salido de la boca del pelirrojo, hace un año cuando Kuroko lo rechazo, pero aun así Kagami seguiría insistiendo, aunque Kuroko lo rechazase también en esta oportunidad, Kagami seguiría esperando.
-…si.
Pero antes de perder todas sus esperanzas Kagami había oído las palabras de Kuroko, el creyó que lo volverían a rechazar, pero no; Kuroko le decía que si. El frio paso por su cuerpo y el solo pudo hacer algo, dejo caer la guitarra de su hombro y con sus brazos abrazo fuertemente a Kuroko.
-gracias…
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De eso ya pasaron dos años, aun lo recordaba Kagami, siempre lo recordaría, porque el siempre estuvo enamorado de Kuroko, y ahora que ya lo tenía sentía que su felicidad estaba completa, estaba llena a tope. Al inicio su relación no fue muy buena por los miedos de Kuroko, pero ahora todo era distinto, ambos se entregaban el uno al otro, confiaban al 100% uno del otro; no había golpes o insultos en su relación, solo amor y cariño, era una buena relación la que tenían y sus amigos los apoyaban, pero todo comenzó a cambiar hace una semana.
(Fin del flash back)
Exactamente hace una semana alguien había ido a casa que compartía con Kuroko, era la visita más inesperada y desagradable que podía tener Kagami, era aquel sujeto que le causo un grave daño a Kuroko, era su ex novio.
-estoy arrepentido por lo que hice, salí de la cárcel hace unos días y ahora quiero pedirte que volvamos a intentarlo, Kuroko yo sé que estaba mal, pero en verdad te amo y quiero volver a intentarlo.
Palabras falsas, Kagami lo sabía, todas ellas eran palabras falsas, aquel sujeto no amaba a Kuroko, solo estaba obsesionado por lo que perdió. Kuroko por su parte estaba decaído ante la visita de su exnovio, el creía firmemente que todas las personas merecen una segunda oportunidad, pero el lo había lastimado mucho y muchas veces lo perdono, no creía ya en sus promesas; sin embargo todas las personas merecen una segunda oportunidad.
El exnovio se volvió a presentar unos días después de nuevo a su casa, les juro que había cambiado y que solo quería volver a intentar amar a Kuroko una vez más, a Kagami esta vez le molesto, pero no dijo nada, se lo guardo para el solo. Mas sin embargo las dudas lo comenzaban a asechar, Kagami comenzó a tener miedo de que Kuroko lo deje, amaba a ese pequeño profesor, pero si tenía que dejarlo marcharse, este definitivamente no sería con aquel hombre. Kagami lucharía por ese amor hacia Kuroko.
Mas su lucha se vio interrumpida ayer cuando Kuroko lo llamo, tenía algo que decirle, por un momento Kagami temió a las palabras de Kuroko, temía a que dijera que aún estaba enamorado de su ex, eso sin duda no lo soportaría.
-Kagami kun…veras-las palabras habían salido medio entrecortadas, Kagami reconoció eso como una señal de una mala noticia-esto me tomo por sorpresa y la verdad no sé cómo te lo tomaras…-las palabras cada vez salían más despacio, más bajas del tono usual que solía usar Kuroko-…esto no estaba en mis planes de vida, pero tenía que decírtelo…-sin duda era una mala señal para Kagami-…Kagami kun, estoy embarazado.
-…-Kagami oyó la noticia, creyó oír un lo siento tenemos que romper, pero no fue así, Kuroko había dicho que estaba embarazo, una noticia que no era buena ni mala.
-yo sé que es inesperado, pero no sé cómo ocurrió, solo sé que paso y ya…lo siento Kagami kun, yo sabía que no estaba tampoco en tus planes asumir una paternidad por lo ocupado que estas con lo de la banda, pero… yo no pienso abortar a este niño Kagami kun, sé que es egoísta, pero quiero tenerlo.
-…-Kagami aún no podía hablar, tenía las palabras atoradas en medio de su garganta.
-…no es necesario que me conteste ahora, yo puedo esperar tu respuesta, tú me esperaste mucho tiempo a mí, lo justo es que yo también te espere a ti, respetare la decisión que escojas, ya sea estar junto a mí y nuestro hijo o dejarnos, si es así, créeme que no te odiaría y le hablaría a nuestro hijo de lo gran hombre que eres, porque…porque es así Kagami kun.-Kuroko no dijo nada más y salió del café.
Eso había pasado ayer y Kagami lo recordaba, toda la noche había pasado por su mente la idea de tener un hijo con Kuroko, es cierto que lo amaba y mucho a decir verdad, pero un hijo…un hijo es mucha responsabilidad, el lo sabía; un hijo requiere mucha atención y cuidados, pero también traía problemas a los padres, Kagami lo sabía más que nadie, él lo había pasado y recordaba las discusiones de sus padres antes de divorciarse, como ambos discutían por no querer cuidarlo…un hijo era mucho miedo para el. Pero por otro lado estaba Kuroko, no lo quería dejar ¿Por qué dejarlo? Él era la persona más especial que había tenido en su vida y lo amaba, pero…no, no existía un pero para el cuándo se refería a Kuroko. Así con las ideas en su cabeza y una decisión ya tomada había tomado su móvil y marco el número de Kuroko.
-Kuroko, esta noche ven al bar y te daré la respuesta a lo que me dijiste ayer.
No dijo nada más y cortó la llamada, marco otro número y espero a que contestara la persona del otro lado.
-¿Kaga chan? Porque me llamas tan temprano.
-Takao, quiero que me hagas un favor, tú y los chicos.
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Subió decidido al escenario del bar, esta sería una de sus últimas canciones que tocaría en la banda y por ser una ocasión especial, su amigo Takao le iba a dejar el micro para que él sea el cantante; en ese momento, cuando vio a Kuroko entrar por la puerta del bar sabía lo que tenía que hacer.
La oscuridad que daba el bar, el bullicio de los susurros del público, el resonar de las instrumentos y el ahí, parado en medio de todo eso, listo para dar la última melodía a esta triste etapa de sus vidas. Takao le dio el micro a Kagami, el suspiro hondamente, no había vuelta atrás, el lo había pedido y sus amigos solo lo estaban ayudando. Cerro fuertemente los ojos para abrirlos y dirigir su mirada en una solo persona que también lo miraba solamente a el, la guitarra comenzó a sonar y en eso su voz comenzó a salir.
En tu rostro se marca el dolor de tu sentir
Es difícil escuchar tu voz en esta oscura traición
Hoy te entiendo más, al verte llorar
Kuroko abrió los ojos sorprendido, creyó poder ocultar sus sentimientos de Kagami, creyó ocultar sus miedos e inseguridades, pero no había sido así, el pelirrojo lo conocía muy bien como para saber las cosas que lo lastimaban y ahora lo decía claramente en esta canción.
Tú intentas fingir, pero no puedes reír
No hay forma de actuar
Sonrisas falsa que le había dado en ese último mes, Kuroko no quería seguir en esto, amaba a Kagami, lo amaba en verdad, no quería que lo deje, quería criar a su hijo junto con la persona que amaba.
(Coro:)
Quiero soñar por tí
Golpear en tí
Y que te sientas como antes
Kagami sabía que no podía borrar el pasado de Kuroko ni el daño que le había hecho aquella persona, pero ahora podía construir un futuro para el, un futuro donde solo podían existir ellos.
Pensarías que no hay más que andar en tu existir
Pero entiende que yo estoy aquí
E intentaremos surgir
Y dar un paso mas
Quiero soñar por tí
Golpear en tí
Y que te sientas como antes
Las palabras de Kagami no solo eran una canción con una historia que contar, era una promesa de amor y devoción a la persona que amaba, le pedía a Kuroko que confiara en el, que se entregara completamente ya que Kagami curaría todo rastro de dolor.
Quiero soñar por tí
Golpear en tí
Cuando requieras de alguien… Y despertar
Kagami vio a sus amigos; Takao el vocalista de la banda, Aomine la guitarra, Iwaizumi el bajo y Zoro en la batería, esta sería la última tocada de ellos cinco, porque a partir de ahora Kagami realizaría un nueva vida con Kuroko, le daría una estabilidad económica y sería un apoyo emocional para el.
Era egoísta y tal vez luego Kuroko le echase la bronca por dejar colgados a sus amigos de la banda, incluso Kuroko podía sentirse culpable por la decisión que estaba tomando Kagami, pero sus amigos sabían de esto, ellos los habían apoyados desde un inicio y ahora no sería la excepción.
La guitarra de Aomine sonaba más fuerte y la batería de Zoro se escuchaba a reventar, todo el grupo tocaba con lo mejor que tenían, les había costado aprender el ritmo y la letra ya que todo esta escena se había armado hoy por la mañana por idea de Kagami y Takao sin duda había puesto su granito de arena al decir que lo más romántico seria que Kagami le dé una respuesta a todo a Kuroko en medio de un concierto de música.
La música comenzó a bajar el sonido, cada vez más despacio y luego de un silencio en donde todos se miraron cómplices y sonrieron, los instrumentos volvieron a sonar en la oscuridad de aquel bar junto con la voz de Kagami.
Más allá del cristal te transforma tu mirar
Reconozco tus deseos de actuar
Recobrar tu lugar, esa inmensa libertad
Que alojabas en tu palpitar
Sin duda Kagami amaba a Kuroko y ahora estaba listo para darle una respuesta.
(Coro)
Quiero soñar por tí
Golpear en tí
Y que te sientas como antes
Y cuidaría de él y de su hijo por el resto de su vida, el estaría para ellos.
Quiero soñar por tí
Golpear en tí
Cuando requieras de alguien...
La voz de Kagami comenzó a bajar de tono, se hizo más melodiosa a oídos del público para susurrar así la última parte de aquella canción dedicada a Kuroko. Una canción que decía lo mucho que había sufrido y lo mucho que lo quería.
Los dolores que más daño dan son los del alma
no permitas que te venza el mal.
Silencio…todo el bar estaba en silencio ante la hermosa canción del pelirrojo.
-Kuroko…-de repente la voz de Kagami se oyó en medio del oscuro escenario-…cásate conmigo.
Fin ;)