DISCLAIMER: Este es un fanfic original Yuri, sabiendo esto, no hagas plagio y si este genero no es de tu agrado, no te molestes en leer ;D.
Atada a este sentimiento.
1r Capítulo: La convivencia es parte de mi dolor.
By: Miaru
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Apretó su mano sosteniendo entre sus dedos la bolsa de la compra. Con su mano libre se ajustó el cuello de la gabardina veis que llevaba, estaba comenzando a nevar y a oscurecer. De su boca salía un vaho que chocaba contra su rostro invisiblemente. Vio el bloque de pisos elegante alzarse delante suyo y con resignación se acercó a las puertas que se abrieron al acercarse. Saludó a Tania, la recepcionista que estaba delante del escritorio o podría decirte “muro” de mármol con la vista fija en su computadora.
Era una mujer de pelo rojizo oscuro, de pecas en la piel, con más de 30 años, de gafas con montura de pasta roja y uñas pintadas rojas. La mujer levantó sus ojos marrones y con uan sonrisa sin levantar el rostro la saludó escuetamente.
Se fue a la derecha donde estaba el ascensor, metió el dedo dentro de un pequeño hueco redondo y se activó el ascensor mediante láser. Las puertas de acero pulido y brillante se abrieron y entró al espacioso ascensor. Se miró en uno de los cuatro espejos que recubrían la mitad superior de las paredes pulcramente limpios. Suspiró cerrando los ojos y frotándose las sienes. Con el clásico “clinc” el ascensor llegó a su destino y vio el largo pasillo alumbrado por elegantes lámparas en las paredes. Lo caminó lentamente, el silencio era sepulcral y en cierta forma, tranquilizador. Llegó a la puerta de su piso, 6º 1ª. Cogió sus llaves de la gabardina y abrió con una sola mano.
Todo estaba a oscuras, y eso le comunicaba que su acompañante de piso no estaba. Suspiró aliviada y encendió las luces, quitó la alarma poniendo el código y dejó las llaves sobre la mesa de cristal que tenía en la cocina/comedor.
Era un piso bastante amplio, aunque más bien era un dúplex. Al entrar por la puerta veías un pasillo cortito, y entrando por una puerta estaba el comedor/cocina, a la derecha de la gran sala había una barra con mármol negro y las cosas pertenecientes de una cocina detrás (lavavajillas, vitrocerámica, etc). Saliendo de la espaciosa cocina tras la barra, había un escaloncito y el suelo pasaba a ser parqué, de un color marrón madera oscura, al bajar el escalón, había un sofá bastante extenso de color veis tirando a blanco, al lado otro sillón de espuma muy cómodo negro, y en frente la televisión de pantalla plana bastante grande, a cada lado de esta dos estanterías algunas con altavoces del Home Cinema, otra con DVD’s y figuritas de decoración de cristal.
Al lado del sofá estaba la gran cristalera que daba a un buen proporcionado balcón. Había una mesita de madera con sillas iguales, un toldo para que no le diera el sol y un armario pequeñito con juegos de mesa de lógica.
Suspiró al ver el comedor vacío y yéndose al final al lado de la barra de la cocina había una escalera caracol que daba al segundo piso del dúplex. Nada más estar arriba vio al fondo dos camas con sabanas azul oscuro, con una mesita de noche al lado con su respectiva lámpara. A la izquierda de las camas, había dos armarios de tres puertas, y a la derecha dos puertas. El lavabo y el despacho con el ordenador, los libros, etc. (NA: Abajo había otro lavabo en el pasillo antes de llegar a la entrada del comedor ;P)
Se puso las zapatillas verdes que tenía y cogió ropa del armario para irse a la ducha a ver si podía bañarse y relajarse. Nada más entrar al baño a su derecha había un jacuzzi cuadrado con todo tipo de jabones y aromáticos que casi nunca usaban, al lado de este una bañera/ducha, y a la izquierda de esta el water. Se fue desnudando lentamente y se metió bajo el agua caliente que previamente había hecho salir. Era una suerte que ella no estuviese… De momento.
***
Lo abrazó por tercera vez, rodeando su cuello con sus brazos, y dándose un ultimo beso del día (muy apasionado), la chica entró al edificio.
.-.Buenas noches Tania! –La muchacha le sonrió a la secretaria y con una mano en alto se metió en el ascensor felizmente.-
La mujer meneó la cabeza negativamente y suspiró.
.-.La juventud de hoy en día… -Sonrió y siguió a su tarea.-
Las puertas del ascensor se abrieron y con paso alegre se fue acercando al piso que compartía con su amiga. Con las llaves abrió y rápidamente subió las escaleras y dejó el osito de peluche sobre su cama, tiró las llaves a esta también y se fue desvistiendo. No se cercioró del sonido de la ducha hasta que una voz le asustó desde el baño.
.-.Jess? –Dijo Samantha desde la ducha.- Estás aquí?
.-.Siii!! –La chica se acabó de poner la camiseta del pijama y entró al lavabo, detrás de las puertas de cristal de la ducha se puso ver el cuerpo de la chica mojado y duchándose.-
.-.Alaaa! Avisa cuando entres por lo menos! –Dijo mirándola desde la ducha con una ceja enarcada.-
.-Perdona. –Le sacó la lengua y se sentó en el water.- Sabes que? Sabes que? –Puso sus manos en su cuello con estrellitas en los ojos.-
.-.Que? –“De seguro habla de su novio” Pensó fastidiada.-
.-.Hoy he quedado con Lean!! –Sus ojos se hicieron corazones.- De hecho acaba de acompañarme a casa, y sabes? Me ha regalado un osito de peluche!! Luego te lo enseño, es hermoso! –Sonrió a su amiga, y acercándose al lavamanos se puso frente el espejo a peinarse el cabello.-
Jessica era una chica de 19 años; pelo largo, rubio, que le llegaba hasta media espalda. La piel la tenía bellamente bronceada, y los ojos glaucos grandiosos. Una nariz fina y unos labio finitos aunque carnosos de un color rojizo atrayente.
“.-.Perfecto! El noviecito le regaló un osito!” –Pensó con sarcasmo e ironía.-
.-.Y dime, que tal tu día? –La rubia se estaba haciendo una coleta alta para lavarse la cara con jabón.-
.-.Bien. –Dijo escueta, no era persona de muchas palabras, y normalmente muy fría con la gente, solo Jess la había visto MEDIANAMENTE amable, y ni eso.-
.-.Oh…. A ver cuando ligas con un buen chico!! –La chica rió y le guiñó un ojo.-
.-.Jaja! Lo dudo. –Hizo una falsa sonrisa y luego se puso seria de nuevo y la miró con una ceja enarcada como diciendo ‘en tus sueños’.-
Sam le dijo a Jess que saliese, pues iba a salir de la ducha, secarse peinarse e irse a dormir, le costó pero la rubio salió. Cuando estuvo lista, salió en ropa interior y se colocó el pijama.
.-.Vas a ir a dormir tan pronto? –Preguntó su amiga aburrida.-
.-.He madrugado demasiado. –Dijo mientras con una orquilla azul de un delfín se cogía el flequillo.-
Samantha era una chica de la misma edad de Jess; su pelo negro, corto con las puntas elevadas dándole un aspecto rebelde. Sus ojos eran de un color azulado intenso y claro con verde levemente difuminado. Su piel era extremadamente blanca y fina. Se estiró en su cama y colocándose la almohada se dispuso a leer un libro que tenía en un cajón de la mesita de noche. Antes de poder reaccionar Jess le sacó el libro de las manos y se colocó sentada encima de su tripa.
.-.Que haces?! –Preguntó con enojo Samantha.-
.-.Eres una aburrida! Mañana es sábado Sam! –Puso ojitos de suplica y la miró.- vente a ver una peli conmigo! He alquilado una de humor! –La pelinegra se la quedó viendo un rato con una ceja alzada.-
Seca y de un golpe apartó -muy en el fondo quería permanecer así, pero no lo iba a demostrar- a la rubia de encima suyo, y cogió el libro dispuesta a seguir leyendo.
.-.Ni lo sueñes! –La cogió de la mano y la bajó hasta el piso de abajo con forcejeo.-
Al final Sam se dejó y bajó a ver la película. No se rió ni un poco con la película, tenía cosas en la mente, estaba cansada, y encima, su mejor a su mejor amiga solo le importaba su novio, y para su disgusto, estaba bastante celosa.
Continua!!
Miaru: Pues nada, aquí el primer capítulo de “Atada a este sentimiento” ;D, espero que les gustase, aunque lo dudo :S.
PD: Agradecería críticas constructivas con sus opiniones, por cierto, tardaré algo en actualizar, pero no lo abandonaré ;P.