Solía llegar siempre temprano pero ese día tuvo mucho que pensar, era una mañana como el día que murieron sus padres, siempre que el día empezaba así, irremediablemente algo importante ocurría.
La ultima vez que el día empezo así 6 personas se le declararon, a pesar de que su cuerpo y cara aparentaban 13 años en vez de los 16 que tenia, de modo que se dedico a observar todo alrededor, para seber cuando ocurriría lo inevitable.
Por algún motivo las clases no habían empezado, de modo que no llegó tarde, oyó a unas compañeras comentando que el profesor Kurama, su profesor jefe y de historia, habia muerto bajo condiciones desconocidas.
-"Yo oí que lo empujaron del techo de un edificio"
-"Yo escuche que lo acuchillaron por la espalda"
-"Yo que chocó en su auto"
-Solo rumores- Dijo el Señor Kurama.
-Y que le pasó- Pregunto Kirie.
-No estoy autorizado para decirelo- Le respondió- no deberias ser tan curiosa, trae muchos problemas.
-Bueno, ¿Pero que hara ahora?
-Me voy, no tengo nada que hacer aquí, Adios.
-Le deseo suerte, adios.
Se desvaneció en el aire, los fantasmas que conocía no los había visto vivos, "Al parecer cuando mueren estan más felices", pensó. En ese momento entro el director seguido por una persona.
-Les presento a la persona que les hara clases de historia y sera profesor jefe.
Avanzó hasta la pizarra y escricio su nombre, Kirie le clavó la mirada, quiza esa persona era el cambió que se presentaría, tenía pelo rubio, hasta el hombro, caía en mechones, aparentemente tal como se había despertado, llevaba una camisa blanca, sin corbata, pantalon negro, bastante delgado, una cara muy delgada y ojos azules.
-¡Me llamo Kirisagi Yoko y seré su nueva profesora!, ¡Hola a todoooos!- su cara perdió toda seriedad en un segundo- ¡Mucho gusto!¡Muy bien quiero conocerlos a todos a si que empezemos de inmediato!
-Espero que todo vaya bien, me despido.
Cuando el director se fue tuvimos que presentarnos todos.
-¡Muy bien empezemos por... - Se detuvo inmediatamente al verme, y se quedó un momento estupefacta, apuntándome, mirandome con los ojos bien abiertos.
-Profesora, ¿Pasa algo?
-¡Ah! ¿Que?, ¡No nada!- Su voz se puso lugubre- Empezemos por la chica de pelo azul, la que esta sentada al frente.
-Mi nombre es Ichihara Kirie.
-Ya veo...
Era como si no escuchara los demás nombres, solo me miraba fijamente y decia "muy bien" cada vez que alguien se presentaba, baje la mirada inmediatamente, no soportaba esos ojos analizandome, nos puso a leer toda la clase, sentia su mirada en mi constantemente. Sonó la campana, fui a un rincón a descansar, en un banco que solo yo usaba, abri un libro y empeze a leer, pero mientras leia sentí que me miraba, desde el salón de profesores, cuando entramos no cambió, y al salir de clases dijo:
-¡Ichihara!, ¿podrías quedarte un momento?
-¿Yo?, esto... si...
Cuando todos se fueron su cara se puso seria, y me miró a los ojos. Afuera empezó a llover.
-Se te ve muy solitaria, ¿Pasa algo?
-¡No!... nada...
-¿Tienes amigas?
-No...
-¿Novio?
-Tampoco...
-¿Porqué?
-Por que... por... no sé...
-¿Porqué?
Empeze a sentirme nerviosa.
-¿¡Porque!?
Salí corriendo sin pensarlo, no puedo decirselo, a nadie, menos a ella, no la conosco, pero... de algun modo... me pone nerviosa verla a la cara... me asusta...
Despues de un rato corriendo me encontré en mi en la calle, sudando, mojada, asustada, comensé a caminar a casa, pero un extraño hedor me detuvo, algo me seguía, empeze a correr pero no le era dificil correr, en un momento me tropezé, me di vuelta, a pesar del miedo.
-¡KIAAAA!
El monstruo estuvo un segundo frente a mí, iva a atacarme y desapareció, por atras de él, estaba una silueta con la mano alzada hacia mi, me desmayé.
La figura me tomo en brazos y me levanto, la ultima cosa que alcanze a oir fué:
-No fue de buena educación salir corriendo... Kirie...
Fin del primer capituló...
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