1.Es mío
Cuando Mikaela entro al aula y no vio a quien buscaba le importo muy poco el grupo de alumnos reunidos haciendo barra a quien sabe quien, ó, que el profesor de la tercera hora aun no hubiese llegado ya que para él solo venia rondando un pensamiento en su cabeza y ese era que tenia que disculparse con Yuu-chan por no decirle que ese día había tenido cita con el dentista, es mas si no hubiese sido por su fastidioso tío Ferid ni hubiese ido.
El rubio paso todos los pupitres hasta llegar al suyo, sentarse y dejar sus cosas.
¿Estaría molesto? Conociendo a Yuu-chan eso era mas que claro.
¿Le ignoraría? Posiblemente los primeros 5 minutos lo cual seria su infierno.
Mika soltó un suspiro algo frustrado mientras maldecía interiormente a su tío por arrastrarle al dentista.
-¡TE DIJE QUE YUICHIRO-SAMA ES MÍO!
Aquel grito no solo hizo que levantase la cabeza de golpe sino que también frunciese el ceño; observo el grupo de estudiantes aglomerados en una esquina reconociendo a Shinoa Hiragi quien estaba grabando, Shiho Kimizuki quien también estaba grabando y Yoichi Saotome quien parecía querer ayudar pero no sabia que hacer; los amigos de Yuu-chan eran bastante ruidosos por si solos por los que les dejaría ser.
Espera… Mika volvió a observar al grupo.
¿Yuichiru-sama?¿mío?¿que mierda?
-¡¿COMO TE ATREVEZ A LLAMAR A HYAKUYA-SAMA POR SU NOMBRE?! ¡Y ES MIO!
Que no sea lo que creo que es, que no sea lo que creo que es, que no sea lo que creo que es… que no sea lo que creo que es, que no sea lo que creo que es…
Mikaela se levanto de su pupitre y se dirigió a paso veloz hasta los alumnos reunidos solo para apartar de empujones tres chicos que soltaron una exclamación molesta pero al verle se alejaron lo máximo posible; para cuando Mika observo lo que todos sus compañeros de salón miraban su sangre se calento.
Tanto Shinoa como Kimizuki intercambiaron dinero al ver a Mikaela Tepes.
En el centro de todas la miradas se encontraban dos chicas jalando de un extremo a otro a un molesto Yuu mientras se debatían entre las dos a quien pertenecía; Yuu juraba que si no fuese por la amenaza de Guren sobre sus notificaciones de la dirección por saltarse clases hace un buen rato se hubiese ido del salón y para colmo de males Mika no estaba.
-¡YA TE DIJE QUE YUU-SAMA ES MÍO!
-¡ES MÍO Y DEJA DE LLAMARLE POR SU NOMBRE!
Silencio.
Ambas chicas que hasta el momento se miraban con odio dejaron de hacerlo al no escuchar a sus compañeros darles animo como venían haciendo hasta el momento, con un miedo creciente voltearon solo para ver unos fríos ojos azules que empezaban a teñirse.
Yuu mantuvo en silencio ya que era raro ver a Mika molesto y mas raro aun era verlo tan iracundo como se veía y cuando sucedía los ojos del rubio parecían tener ese raro tinte rojizo, justo como en ese momento.
-¿Se puede saber que estan haciendo con Yuu-chan?
Una de las chicas vio esto como una oportunidad ya que después de todo Yuu-sama y Tepes-san paraban juntos en todo momento.
Shinoa miro divertida la situación ya que no todos los días veías a uno de tus mejores amigos metido en tal problema y no siendo el causante directo de ello; la pelimorada paso un billete mas a Kimizuki quien a su vez saco un billete mas, lo que vendría seria histórico.
-Tepes-san, dígale a esta ignorante que no puede estar con Yuu-sama ya que es mío.
Los fríos ojos de Mika pasaron a la chica que estaba sujetando el brazo derecho del pelinegro quien lo soltó cuando sintió todo el peso de la mirada del rubio.
-Yuu-chan no te pertenece.
Todos los compañeros alrededor sintieron algo de pena por la chica pero ni locos se metían en el camino de Tepes, el chico pegaba tan fuerte como Hyakuya.
-Te lo dije~ Yuu-sama es mío~
La chica que tenia a Yuu cogida del brazo izquierdo sonrió victoriosa al ver la mirada derrotada de su oponente pero la sonrisa le duro poco al sentir la mirada de Mikaela, ella también soltó el brazo del pelinegro.
-Yuu-chan tampoco te pertenece.
Yuu vio todo en cámara lenta, desde que Mika lo jalo del brazo para rodearle la cintura con un brazo para que su mano libre se colocase en su nuca, hizo lo único que siempre hacia en momentos como esos sin importarle que Shinoa y Kimizuki estuviesen grabando, que Yoichi pareciera apunto de convertirse en tomate o que el resto de sus compañeros estuviesen mas rojos que remolachas.
Yuu rodeo el cuello de Mika jalándolo para que acercase aun mas rápido sus labios hacia los suyos.
Seria una burla a la moral decir que aquel beso que ambos chicos se empezaron a dar fue de lo mas casto, aquel beso que ambos chicos estaban empezando a compartir era peor que una porno; los labios del rubio y del pelinegro se movieron en sincronía dando a entender que no era la primera vez que sucedía, las jaladas de labios, mordiscos y pequeños gemidos contenidos hacían que mas de un chico voltease la mirada y mas de una chica se sonrojase violentamente; aquello no solo daría de que hablar el resto del mes sino que también causaría los sonrojos de la siguiente semana de todo aquel que vio semejante beso.
Shinoa sentía sus mejillas calientes pero siguió grabando a diferencia de Kimizuke quien le entrego el dinero cuando desvió la mirada, había ganado.
Para cuando Mikaela y Yuu se separaron se notaba que no era porque quisiesen sino porque les faltaba el aire.
Mika ya con los ojos de ese azul hipnotizarte miro a cada estudiante a su alrededor mientras que Yuu seguía medio aturdido.
-Yuu-chan es mío.
Nadie rebatió aquello aunque con aquellas palabras Yuu volvió a la vida y un solo pensamiento se alojo en su cabeza.
Al diablo Guren.
Mika fue jalado rápidamente fuera del salón por Yuu.
Shinoa aun algo sonrojada soltó un silbido.
-Hasta que lo hicieron oficial.