Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

MI COMPANERO DE AL LADO por Watashi Niko

[Reviews - 1]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

ESpero lo disfruten...

(LxL)

(Au)

(Este es un fic propio cualquier coincidencia es casualidad)

Espero les guste y si pueden dejen comentarios XP... Este junto el One-shot "SOSPECHOSO" que subí ayer es mi primer fic en esta categoría no les pido compasión, ni lástima mucho menos; lo único que deseo son consejos para mejorar los errores. Gracias!

.................................. Capítulo 1: Mi compañero de al lado!!!

 

 

Siempre termino metido en líos por culpa de mi compañero de al lado. Desde que entró a clases se veía tan serio e introvertido que cuando lo sentaron a mi lado pensé que iba a ser como si no hubiera nadie allí. Cuan equivocado estaba.

Cuando entró al aula lo vi, con su mirada fija y negra al vacío adornada por oscuras ojeras que respondían al menos a dos meses de sueño inconcebible; y sus cabellos azabaches alborotados como si poco le importara peinarse. Me pareció descuidado y eso me encantó. Yo soy muy cuidadoso con mi apariencia ya que esta representaba ante el resto mi forma de ser y tengo que mostrarme ordenado, serio e inteligente para establecer una relación de igualdad con los adultos y de admiración de los jóvenes. No era fácil, en lo absoluto, ser otra persona es complicado pero planes futuros lo requieren. Si soy bastante calculador pero que puedo decir?! Es bastante cómodo. Volviendo a mi compañero; se acercó y sin un hola siquiera se sentó al lado. Ambos lados de mí estaban vacíos pues odiaba a esos que se pasan la clase distrayendote. Soy un genio, lo acepto pero tengo que prestar atención a clases.

Una vez a mi lado intente ignorarlo pero fue imposible. Primero me llamó la atención su posición, encorvado como si quisiera esconderse de algo; sus pies los puso en la silla y recosto su rostro en las rodillas; levantó su mano izquierda y acercó su dedo pulgar a los labios rosados con tonalidades en rojo vino. Al comenzar la clase de biología tomó su libro y lo colocó de manera tal que escondía su rostro en él notandose solo sus negros cabellos. No entendí porqué lo seguía viendo. Me preocure a mi mismo atender las clases y, sin la molestia de nadie me estaba distrayendo con mi compañero del al lado; gire el rostro y lo ignoré fijandome exclusivamente en el pizarrón. Y no, no soy bizco pero es que uno de mis ojos se desviaba hacia él.  Noté como sacaba de su bolsa cajas de cerillas y cigarrillos, lo primero que pensé fue que se pondría a fumar en medio de clase. No pude evitar imaginarme lo problemático que sería ese chico pero contrario a mis expectativas tomo un lápiz y le dibujó una carita a cada una de ellas. En ese momento pensé: "está de remate". Quería apartar la vista pero no podía, tenía que seguir mirándolo. A continuación con unos alambritos hizo manos/brazos, pies/piernas y cabello a las cajitas. Realmente parecían una familia; mamá cejetita, papá cajón, bebé cuadradito y hermano mayor cuadrangular.

-"Pero que estupidez!"-pensé.

Mientras él se mantenía ensimismado noté como el profesor se abría paso entre los alumnos y llegaba a nosotros, solo tres pasos más y lo descubriría. No sé que me pasó pero quise ayudarlo. Me corrí hacia al lado y con mi pie golpee su silla pero ni siquiera me volteó a ver, golpee más fuerte y nada; me estire más y golpee su pierna pero volví a ser ignorado, sin otro remedio le lancé mi borrador directo a la cabeza y entonces por fin me miró, resignado, haciéndome un gesto hacia el profesor. Confundido mire al profesor quien esraba frente a mí en ese momento.

-Tiene problemas para concentrarse Yagami-kun?-preguntó burlón.

-No sensei.

-Entonces no moleste a su compañero.

-Pero si él...- voltee hacia él para mostrar las cajitas cuando...Nada! Estaba todo organizado, incluso el libro en la página correcta y el cuaderno lleno de notas.

-Decías?-cuestionó el maestro.

-Nada.-respondí entre dientes, escuché una risita entonces. Se reía de mí!! El maldito pelinegro se reía de mi! Lo mire con furia y maldije por lo bajo, bueno no lo suficiente pues el profesor me escuchó.

-Veo que no puede mantenerse calmado. En cualquier caso le informo que está usted castigado después de clases.-me dijo. Miré al nuevo por inercia, sabía que él no diría la verdad la humanidad está muy podrida como para tal sinceridad. Y acerté no se culpó a sí mismo, aún más raro fue lo que hizo.

-Yo también tomaré el castigo.

-No es necesario...-intentó el sensei.

-Si lo es la culpa es de ambos por lo que yo debo responsabilizarme.

-... Está bien.

.

.

.

.

.

.

.

.

.

.

.

.

.

*En la tarde... Luego de clases*

 

-Cómo te llamas?-pregunté viendo el salón vacío donde asumimos el castigo

-Ryuuzaki Hideki. Tú?

-Yagami Light.-respondí. -Por qué tomaste el castigo?-se supone que no debería preguntar pero...

-Es lo justo.

-Justo? La justicia no existe.

-No. Pero voy a crearla.-dijo como si nada.

-Abogado? Quieres esa profesión?

-Detective privado, desde hace dos años.

-Tan joven?

-Soy mayor de lo que parezco.

-Que edad tienes?

-Lo siento el detective soy yo, yo hago las preguntas.

-Perdón si te molesté con esas preguntas.-me disculpé, por pura cortesía, claro está.

-Si no lo sientes no pidas perdón.

-...-me dejó sin habla un momento.-"Tal vez este tipo es más inteligente de lo que parece".-pensé.

Yo estaba sentado sobre uno de los pupitres o mesas de la primera fila, mientras que Ryuuzaki estaba sentado en el suelo. Nos miramos fijamente, sentía como sis su mirada me disolviera en puntos de luz muy  pequeñitos que iban desapareciendo poco a poco.

-Eres raro.-dijimos al unísono-"Y eso me gusta"-dije para mí; ahora que lo pienso probablemente él pensó algo así también.

-Ya es hora de irnos.-anunció el fin del castigo.

Ambos salimos de la escuela, no nos fuimos juntos solo que nuestras casas quedaban más o menos por el mismo camino así que caminamos uno al lado del otro, sin decir ni una palabra, durante un rato. El cielo estaba nublado, imponentes nubes de vapor salino lo surcaban y los truenos no se hicieron esperar acompañados de grandes gotas de agua, era oficial estaba lloviendo. Apresuré el paso hasta llegar a correr para refugiarme en algún lugar cercano. Ryuuzaki seguía hablando por el celular, algo de un asesino, mientras avanzaba a paso lento. Volví sobre mis pasos y lo tomé de la mano, de la sorpresa colgó y comenzó a correr conmigo. Yo iba más adelante llevándolo a rastras, el pobre apenas cordinaba sus pasos. Entré a una cafetería allí cerca, ambos terminamos empapando la alfombra de entrada pero con un poco de "encanto" convencí a la camarera para que nos permitiera entrar y tomar una mesa.

La camarera nos trajo una gran malteada, de esas con una gran absorbente (popote, pajilla) rosa que se forma un corazón y luego se dividía en dos partes una para él y otra para mí.

-Perdone pero jo jemos ordenado esto.-dije.

-Cortesía de la casa... Por el día de los enamorados, solo faltan dos días y no es extraño que hayan parejas celebrando.

-P-parejas?-dije sonrojado y al mirar hacia Ryuuzaki lo vi igual de sonrojado, sentí un tirón en mi mano derecha y entonces entendí todo. Estábamos de la mano!!! Ryuuzaki y yo no nos habíamos soltado las manos!! Ambos nos soltamos las manos y desviamos la mirada rojos como tomates.

Luego de hacer nuestro pedido nos fuimos. Fue un pedido inmenso, el detective pidió dulce tras dulce; perdí la cuenta de cuantos fueron. Es extraño que le gusten tanto pero bueno eso lo hace especial, único e increíble. Una vez pagamos nos retiramos, sin tocar la malteada obviamente, no ibamos a darles a esas camareras el placer de tener razón respecto a nuestra relación....y no es que tuvieramos alguna en ese entonces.

Esa noche estuve pensando en Ryuuzaki. En aquel entonces lo hubiera negado pero para qué hacerlo ahora? Me consumían los nervios, no sabía que tenía ese pelinegro que me hacía bajar la guardia, me hacía dejar de pensar, yo el gran Light Yagami, genio #1 de Japón, hombre súper calculador perdía su orden mental, su tranquilidad y su cordura con un viejo detective ojeroso y descuidado. Esa noche tuve un sueño muy raro...

.

.

.

.

.

.

.

.

.

.

Iba caminando tranquilo por las calles sucias y colmadas de gente de la gran ciudad. De momento estaba solo en un cruce y frente a mí avanzaba a paso lento y sigiloso Ryuuzaki. Llegamos a estar frente a frente y ocurrió esa vergonzosa situación dónde me moví a la derecha y el hizo lo mismo, a la izquierda y él continuó, como si el destino nos hubiera unido para nunca separarnos. Volví a dar un paso a la derecha y él hizo lo propio; di un paso al frente y él también, la música empezó a sonar y empezamos a bailar un vals... Sí, definitivamente raro pero era un sueño, al fin al cabo. Me desperté burlandome de mi mismo por tal imaginación, patética la verdad.

Me vestí cuidadosamente prestando atención especial a cada detalle, como siempre. Al llegar al aula vi a Ryuuzaki. Esta vez en clases de Matemáticas se entretuvo en jugar con los 20 borradores que extrajo de su bolsa. Pensé que, en el momento en que el profesor le ordenó resolver un ejercicio bastante complicado en el pizarrón, iba a estar fatal pero para mi sorpresa le tomó aproximadamente 11.4 segundos llegar a la respuesta final. Mi récord, curiosamente era de 11.2 segundos. Cuando se sentó todos los alumnos se pusieron a su alredor me sentí tan molesto.

-Dejadlo en paz de una maldita vez!!-grité sin poder contenerme, a los segundoa me di cuenta de que estaba perdiendo el control sobre mí mismo, y eso se sentía tan bien, todo por culpa del tal Hideki. Estaba cambiando y solo lo conocía de un día, en una semana ya sería otra persona. Todos me miraron raro, yo solía ser controlado y tranquilo, nunca le había gritado a alguien de esa manera. Me puse de pie y salí del salón a paso lento pero constante. Ryuuzaki me siguió a la enfermería, lugar donde me dirigí para estar solo, bueno solo con él. Necesitaba arreglar mis ideas, ordenar mis pensamientos que me tenían algo desorientado. Me lancé de plano en una camilla ignorando la dureza de estas. A los pocos segundos llegó él.

-Light-kun?

-Hmm.-respondí.

-Sabes?

-Sí?

-Fue divertido ayer. Aunque no comí ni un dulce en toda la madrugada.

-No duermes de madrugada?-le pregunté. Yo estaba mirando hacia el blanco y deteriorado techo de la enfermería, acostado bocarriba en la camilla, con medio cuerpo fuera de esta y él estaba sentado en su clásica pose en la silla giratoria de la enfermera que estaba ausente por cierto.

-No.

-Y no tienes sueño en clases?

-No.

-Cuando duermes.

-No sé es aleatorio, supongo que duermi diariamente una hora en cualquier momento del día.

-Por qué?

-Es una pérdida de tiempo.

-Entonces esas ojeras son por no dormir?

-Sí.

-Y estuviste toda la noche despierto?

-Bueno suelo estar despierto investigando pero anoche me quedé dormido unas 3 horas y tuve un sueño muy raro.

-Y qué lo digas!

-Tú también?

-Sí. Que soñaste?

-Soñé contigo.

-Ahh?-en ese momento me sorprendí y me senté el la camilla de un sobresalto.

-Soñé que tu cadáver flotaba en una piscina con un libro negro entre tus brazos que tenía escrito en blancas y tenebrosas letras las palabras: Death Note. Recuerdo también que yo investigaba tu muerte solo para descubrir que yo mismo era tu asesino.

-Espeluznante. Ryuuzaki?

-Qué?

-Qué tienes? Te vez decaído.

-Nada solo me preguntaba sobre ese sueño.-dijo mirando al suelo.

-No te preocupes nunca voy dejar que me mates, será al revés si es necesaria una muerte.

-Quieres matarme Yagami-kun?-me preguntó sonriendo altivamente.

-Tal vez.-contesté con la misma sonrisa socarrona.

-Prometelo. Promete que me matarás antes de que lo haga yo.

-Ja! Lo prometo.

-Volvamos a clase.

-Ni que prestaras atención.

-Es que ya sé todo esto.

-A sí? Como?

-Ya terminé la preparatoria hace mucho.

-Y porqué estas aquí?

-Para atrapar a un sospechoso.

-Eso quiere decir que cuando lo atrapes te irás?

-Probablemente.

-Ojalá no lo atrapes nunca...-susurré.

-Aunque me gusta estar aquí, tal vez me quede hasta el próximo curso.-dijo acomodandose el pantalón de mezclilla y la playera blanca que traía. Para ser sincero aunque nadie lo notaba yo sabía que no era la misma. Como notaba la diferencia? Ni idea, las ventajas de ser un genio tal vez.

No dirigimos a clase. Ahora tocaba Inglés, una clase innecesaria para mí.  Esta vez usó lápices y una bola de papel arrugado para jugar el muy loco de Ryuuzaki.

-Psss.

-...

-Psss Ryuuzaki.

-....

-Tch.-suspiré resignado mientras escuchaba a la profesora como conjugar los verbos regulares en pasado. Me perdí en mis pensamientos tanto que la voz de la sensei se escuchaba confusa y lejana.

-"Aún no sé porqué reaccioné de esa forma cuando todos se acercabaron a Ryuuzaki. Tal vez me puse celoso de que haya un nuevo genio en la clase pero no me molesté con él, me molesté con ellos. No entiendo tampoco el sueño de ayer fue bastante extraño, en el sueño a pesar de que me apartaba de él para poder avanzar, en lo profundo rezaba porque él diera el mismo paso que yo, no quería tomar un camino diferente al suyo. También es confuso el porque me entristeció que dijera que se marchaba. Demasiadas preguntas y ninguna respuesta. Creo que lo estoy empezando a ver como un amigo. Pero..."

-Yagami-kun... Yagami-kun?...Yagami Light!!-volví a la realidad con el grito de mi profesora.

-Sí?

-Respondame la pregunta.

-Ammm...-miré hacia un lado y vi un papelito que decía: Yes, I do sujeto por Ryuuzaki.-Yes, I do?

-Muy bien pero preste más atención para la otra.

Tome un papelito y se lo pase a mi compañero del lado rápidamente. Él lo tomó y se puso a escribir en el espacio restante en el trozo de papel.

×Gracias×

Solo eso había escrito yo.

×De nada.

Somos amigos no?×

Respondió él.

×Sí×

Contesté.

Luego de la clase nos marchabamos cuando de la nada apareció una molesta rubia, Misa Amane. Una chica del salón continuo al nuestro, malditamente enamorada de mí e insoportablemente melosa.

-Light!-gritó corriendo en mi dirección.

-Tch.-ya la veía acercarce a mí.

-Vamos al cine.-pidió

-No. Lo siento pero..."que excusa invento? Ahh ya sé!"...tengo planes con Ryuuzaki.-dije pellizcando la espalda de este, indicándole que me siguiera el juego.

-Y es más importante este rarito que tu novia?!

-Sí.-intervino Ryuuzaki un poco molesto

-Ryuuzaki?...

-No te metas rarito, mi Light no es uno de los tuyos.

-De los míos?

-Sí...de esos a los que le gustan los hombres.-dijo ella despectivamente.

-Y-yo no...-trató él avergonzado.

-No lo nieges! Se que vas tras mi novio.

-Misa!!!

-Qué amorcito?

-Ya te he dicho que no eres mi novia!

-Pero...

-Y nunca! Nunca!! Vuelvas a hablar así de Ryuuzaki!!

-No me digas que has caído en los trucos de este...este maric@!!-gritó asqueada atrayendo muchas miradas por el espectáculo que ella estaba montando en la salida del colegio.

-Mira pequeño ser coprofago(*), te aconsejo te retires de mi vista antes de que te arreste.-dijo él.-Y sí, puedo hacerlo, con solo una llamada de hecho.-mencionó el detective jugando con el celular entre sus dedos.

-No te atreverías.-comentó altanera.

-Watari... Sí...10 segundos máximo.-dijo hablando por el móvil. Ni 7 segundos pasaron antes de que 5 patrullas se estacionaran frente a la escuela. La sonrisa de Ryuuzaki era tan superior y desafiante que sinceramente me encantó.

Varios polis se bajaron del auto y a una señal del pelinegro esposaron a la chica que no paraba de patalear. El resto de los chicos se largaban apresurados con temor de enfrentar el mismo destino que Misa.

Sin más nos fuimos a casa.

-Lamento haber arrestado a tu novia.

-Mi novia? Ja! Te burlas de mí! Esa nunca será mi novia.-nunca hablaba así de nadie pero supongo que con Ryuuzaki es especial, por lo que pude abrirme con él y ser yo mismo.

-Qué bueno...-dijo aliviado.

-Por qué? Te gusta? No creo que te corresponda después de esto.-me burlé.

-No! Jamás me gustaría una chica así. De hecho nunca me ha gustado nadie.

-A mí tampoco.

-Pero quisiera que alguien me quisiera. Tal vez es porque como soy huérfano nunca he tenido ese cariño familiar.

-Ya encontrarás a alguien, eres apuesto y divertido además muy inteligente y ocurrente para las ofensas.-dije. Quería preguntar tanto sobre su niñez, el orfanato, si alguien lo adoptó y más cosas; pero no quería que se sintiera incómodo.

-Ofensas?

-Sí. Le has dicho ser coprofago. Ja! La has ofendido y pide ver por su cara que ni siquiera sabía lo que decías.

-Es que no quería decir una grosería.

-Por mí...

-...

-Qué ocurre?

-No será molesto para ti que las personas piensen...que...somos...ya sabes lo que ella dijo.

-Ella es una psiquiátrica celosa, nadie más pensará lo que no es.

-Vale.-nos despedimos luego y luego nos fuimos a nuestras casas. Lo que em ese entonces no sabía era que la casa de Ryuuzaki era la mansión que quedaba a 4 cuadras de mi casa.

.......................

 

 

Fin del cap 1.

 

Espero les haya gustado la idea era hacer un one-shot pero empecé a escribir y luego ya me quedó muy largo. Pienso hacer 4 o 5 capítulos.

(*) Coprofago: Animales que basan su alimentación en desechos.

No sé si me salí mucho de sus personalidades pero me esforce en no hacerlo... Gracias por leer.


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).