Draco observo con poco interés la habitación que Narcisa le había designado, "Narcisa" aun le era extraño llamarla así, pero tenía claro que ella no era su madre, mediante un hechizo había separado su sangre y magia de la suya... renunciando a ser su madre, tal vez hubiera podido llamarla madre si tan solo le hubiera criado o siquiera mostrado algo de cariño y atención; durante años solo pudo llamarla madre debido al vínculo de sangre y magia que creyó los unía, pero que ahora sabia falso y ciertamente nulo.
Con un Bunny Bunny dormido entre sus brazos, recorrió con la vista el pequeño cuarto que le habían asignado, solo contaba con una cama, armario, silla y una mesa, ciertamente no le sorprendía la falta de comodidades, así como tampoco le era una sorpresa el polvo acumulado en los muebles, tan solo al llegar y ver la casa en evidente abandono, se imaginó cual sería el estado de las habitaciones.
Con un pase de su varita limpio toda la habitación, acomodo a Bunny Bunny en la cama y tiro de la silla para posicionarla junto a la ventana.
Draco miro hacia el oscuro y deprimente paisaje que se mostraba frente a sus ojos, no habían tardado tanto en llegar a la casa en la que ahora se encontraban, pero ese día en especial parecía nunca amanecer, el sol ocultaba sus rayos luminosos y las nubes oscuras presagiaban una mañana lluviosa, no sabía a qué lugar se habían transportado pero realmente tampoco era algo que le importara.
Distraídamente se preguntó si Harry ya había encontrado su carta, ¿Cómo tomarían los demás su partida?, ¿Lo buscarían?, tal vez...
-Bastardo asesino abre la puerta- se escuchó el llamado de Narcisa tras la puerta.
Draco no estaba realmente de humor para verla, pero tenía claro que ella no se iría hasta decir lo que quería, Bunny Bunny se removió en la cama como si estuviera apunto de despertar y Draco se apresuró a abrir la puerta, no deseaba que los constantes gritos de la mayor despertaran a su conejito.
-Tanto tardabas en abrir la mugrosa puerta que por un momento llegue a pensar que estabas muerto- hablo con voz fría mientras se adentraba en la habitación- no seas alguien tan desconsiderado y egoísta Draco, debes avisar con tiempo el día que por fin te mueras, encontrar el vestido perfecto para celebrar la muerte de tal inmundicia no es tarea fácil querido- expreso con odio, mirando al menor con asco.
-Que deseas Narcisa, no estoy de...
-¿Narcisa?- pregunto con falso tono de sorpresa- ¿Ya no soy tu madre? Draco cariño... ¿Ya no ruegas por mi amor de madre?- pregunto con ironía.
-Ahora entiendo porque nunca fuiste una madre Narcisa, estas tan podrida por dentro que nunca podrías haber querido a nadie- dijo Draco con tono ambiguo, sin denotar sentimiento alguno- me pregunto si realmente hubieras podido amar a Caleb... si hubieras podido ser una buena madre para mi hermano.
-¡Cállate!- expreso con furia Narcisa, estrellando su mano derecha contra el rostro del rubio- no tienes derecho a hablar de mi Caleb, yo lo amaba, ¡El si era mi hijo!, a él si hubiera podido criar como tal no a un adefesio maldito como lo eres tú, ¡Maldito desgraciado! ¡Asesino!- expreso finalmente para salir de la habitación, dando un portazo al final.
-Yo también era tu hijo madre...- dijo Draco mirando fijamente hacia la puerta por la que se había marchado Narcisa Black- antes de que hicieras ese hechizo... yo también era tu hijo.
Draco sintió como algo rozaba su pierna derecha, era Bunny Bunny que se había despertado con los últimos gritos de Narcisa y ahora buscaba la atención de su amo para distraerlo de la reciente pelea.
-Es hora de dormir Bunny Bunny- hablo el rubio, sonriendo hacia su conejito, para segundos después tomarlo en brazos y nuevamente dirigirse a la cama.
Aun sentía el golpe arder en su mejilla y tenía el amargo presentimiento de que eso sería algo constante en su vida desde ahora, "Almenos en lo que reste de ella" pensó con tristeza; entendía que muchos no comprenderían su actuar pero no era un capricho o la idea de ser un mártir, era un Slytherin después de todo... no estaba en el tener alma de mártir, todo era más bien algo racional... cuestión de decisiones, no deseaba que la vida de nadie más se sacrificara en un trato solo por salvar su vida, tal vez hubieran podido encontrar alguna alternativa para liberarlo del trato, pero... ¿Y si no?, ¿Que pasaba si era algo irreversible y todos los demás solo podían quedarse viendo como poco a poco se le iba la vida?, no deseaba que eso pasara, no deseaba causarles ese dolor...
Solo morir lejos... podría ser lo correcto, ¿Cierto?
Abrazo con más fuerza a Bunny Bunny contra su pecho y se dejó llevar por el sueño, dejo que su mente volara a recuerdos más felices, a sueños imposibles... imaginando la vida que hubiera podido tener de no estar condenado.
Ahora esa era su nueva vida, viviendo con una mujer que lo odiaba, encerrado en una casa abandonada, con un cuarto desolado; una vida lamentable pero que el mismo había elegido por el bien de todos... no podía echarse para atrás, no sabiendo todo el dolor que su regreso traería, ahora solo le quedaba soportar... y esperar porque todos estuvieran bien.
-'"- Hogwarts -'"-
Harry se encontraba desesperado, después de buscar por todas partes y movilizar a todos para que ayudaran en la búsqueda de Draco, finalmente había aceptado el hecho de que Draco no estaba en el colegio, el simplemente... había desaparecido.
-No es posible que haya desaparecido- decía Harry mientras revolvía su cabello y caminaba de un lado a otro como un león enjaulado- ¿Cómo es que nadie lo vio salir?
-Draco no se marcharía de esta manera- decía un alterado Lucius Malfoy- mi niño... él no me haría esto...
-Draco no puede haberse ido solo así- apoyo Severus mientras recorría con la mirada la sala de menesteres en busca de alguna pista- tiene que haber algo, Draco...
En ese momento Severus noto la carta que se encontraba sobre la mesita cerca de la cama.
-¿Eso es...
Harry al fin había encontrado la carta donde Draco explicaba sus razones para marcharse, contaba del trato que había hecho la que creyó su madre, pero sobretodo hablaba de Caleb, su inocente hermano que había encontrado la muerte en un ritual del que solo habían salido desgracias.
...mi tiempo se agota Harry, a los 18 años moriré cuando la magia que se me entrego se vuelva en contra mía al no recibir un nuevo sacrificio, no quiero que me vean morir.
Me voy con el recuerdo de tus besos, tus caricias y promesas dulces; me marcho con el recuerdo del "te amo" que me susurraste esta noche mientras nos volvíamos uno solo, con el sueño de una vida junto a ti y la certeza de saberme tuyo... de saberte mío. Al mirar atrás no recuerdes lo malo, no recuerdes lo triste... recuérdame con una sonrisa en los labios, la ilusión en los ojos y el amor marcado en mi piel.
Se feliz, vive una vida larga y cuida de mis seres queridos... perdóname Harry, perdóname por no poder quedarme, perdóname por ser tan débil y cobarde, perdóname...
Te amé, te amo y te amare hasta el final... eso nunca lo dudes.
Atte. Draco Lucius Malfoy Black