Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Por eso no contestan por dark kirito

[Reviews - 1]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del fanfic:

Fic dedicado a Yayoi, espero que te guste¡

Kuroko no basuke pertenece a Tadatoshi Fujimaki-sensei.

Muchas gracias por el apoyo a Yayoi  y todos los que leen¡¡¡¡¡¡¡ Escrito en el móvil, errores son sin querer jajaa.

 

Notas del capitulo:

Fic dedicado a Yayoi, espero que te guste¡

Kuroko no basuke pertenece a Tadatoshi Fujimaki-sensei.

Muchas gracias por el apoyo a Yayoi  y todos los que leen¡¡¡¡¡¡¡ Escrito en el móvil, errores son sin querer jajaa.

<<-¡Buaaaaaaaaaa Midorima-chi!!!>>- Escucha cierto oji esmeralda en su móvil.

-¡Por dios Kise! ¡Si después de cincuenta y seis llamadas no contesté es por algo!

<<-Buaaaaaaaaaa- moqueaba- p-pero...>>

En ese momento vaya que se arrepentía de haber presionado el botón  que diera paso a tan absurda conversación, pero supuso que la insistencia del rubio se debía a un suceso de vital importancia.

-¿Qué quieres?- suspiró fastidiado.

<<-Buaaaaaaaaaa... Kuroko-chi...>>

-¡¿Le pasó algo a Kuroko?!- preguntó alarmado.

<<¡No me hace caso!>>

En ese momento el peli verde furioso hizo una canasta imaginaria con su amado teléfono, corrió lo más rápido que pudo para atraparlo... demasiado tarde, sus tiros eran infalibles... se lo había cargado...

>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>> 

<<-¡Buaaaaaaaaaa!>>- Escuchaba desde su celular cierto moreno.

-¿Al fin te accidentaste?

<<No.>>

-Entonces no me interesa.

Y sin más Aomine colgó, continuó con su caminata al puesto de revistas porno más cercano, cuando este volvió a sonar, lo ignoró, pero volvió a pasar, y el suceso se repitió unas veinte veces, por lo que harto decidió ponerlo en vibrador, mientras continuaba caminando, se escuchó un ruido seco y cayó de lleno al piso, se había partido el físico con un poste.

>>>>>>>>>>>>>>>>>>> 

<<-Buaaaaaaaaaa...>>- Escuchaba esta vez un joven de cabello morado.

-¿Qué pasa?- cuestionaba con flojera.

<<-Kuroko-chi...>>- Lloriqueaba como las veces anteriores.

-¿Qué pasa con Kuro-chin?

<<-No me hace caso...>>

-¿Y ya probaste regaladole algo?

<<-Algo- sonaba con fuerza su nariz, casi sacandose el cerebro- ¿Cómo qué?>>

-Algo que le guste... como dulces.

<<-Buaaaaaaaaaa... ¡Eso solo te gusta a ti!!>>

Esta vez fue el oji miel que despreciando el consejo de Murasakibara finalizó la llamada.

El chico se quedó parado en medio de la calle un momento pensando que había mala señal y por eso no escuchaba sonido alguno, cuando un perro que pasaba le robo su bolsa de tesoros en un hábil movimiento para perderse en la distancia...

>>>>>>>>>>>>>>>>> 

<<-Buaaaaaaaaaa...>>- Escuchaba esta vez un pelirrojo, como que esto ya parece deja vú.

-¿Qué sucede Ryota?

<<-Kuroko-chi... buaaaaa>>

  -Oh- dijo con su hermosa voz tranquilamente- ¿Es por qué no ha querido tener una cita contigo?

  Wow, lo que el rubio esperaba del emperador.

<<-Si... buaaaa...>>

Tetsuya tiene un carácter difícil de entender para la mayoría, pero puedo asegurarte que le interesas tanto como el a ti.

<<-¡¿Cómo lo sabes?!!!!>>-Se escuchó como abría  una bolsa, seguramente el décimo rollo de papel higiénico en lo que lleva de conversación.

-Solo basta con verle a los ojos... estos brillan cuando te ve.

<<-¿Ensherio?>>- Ya ni podía hablar correctamente por culpa de su nariz obstruida de... obviemos eso.

-Si, lo que necesitas es...

De pronto un cartel se cae del techo de una tienda en dirección al joven de ojos rubí, pero lo esquiva con facilidad, haciendo ver sencillo el asunto.

<<-¿Akashi-chi?>>

-Ah, no te preocupes, es que voy a mis lecciones de violín y casi me golpea un anuncio.

<<¡¿Estas bien?!!!>>

-Si, recuerda, soy absoluto, no hay nada que...

En ese momento una coladera cerrada hasta hace un segundo se tragó al chico, cayendo de lleno a las alcantarillas, tómala, ni su absolutismo pudo con eso...

<<¿Akashi-chi?>>- No obtuvo más respuestas.

>>>>>>>>>>>>>>>>>>> 

El rubio se quedó aplastado como masa inerte en la banca del parque donde había estado las últimas cinco horas, aburrido, deprimido y con el trasero dormido por la falta de circulación, llamar a sus ex compañeros no había servido de nada, suspiró.

-¿Por qué tan triste Kise-kun?

-¡¿Kuroko-chi?!!!!- gritó con voz de soprano, pues no había visto al peli azul que tomaba su clásica malteada de... ¿fresa?

-¿Qué no tú favorita es la de vainilla?

Puso una casi inexpresiva cara de decepción.

-Lo es.

-¿Y?

-No tenían.

-¿En serio?

-Si, justo hoy se les ocurrió hacer un concurso de malteadas de ese sabor, creí que podría conformarme con la de fresa... pero no es lo mismo.

-¡Esperame aquí!

-¿Kise-kun?

El rubio desapareció en segundos, y volvió al poco todo sudado, había buscado en cinco sucursales del Maji hasta que dio con el elixir, aunque tal vez solo su amado le vea de esa forma.

-Toma- le extendió una bolsa con diez bebidas.

-E-es mucho...

-¡Nada es demasiado por y para ti!

-Yo...

  -¡Se que te fastidio! ¡Pero me gustas!- había soltado sin más, el menor se sonrojó- siempre ha sido así, es solo que nunca me pones atención y me impides decirte lo que siento.

-La verdad -susurró- también...me gustas.

El sonido fue tan bajo que casi no se escuchaba, pero el oído de pervertido, o algo así del oji miel lo captó fuerte y claro.

En ese momento puso la sonrisa más bella de la historia, y tomo al peli celeste por la cintura, este cerró con fuerza los ojos completamente ruborizado, sus rostros se acercaron y sus labios se rozaron sutilmente, cuando al fin el mayor iba a darle tan ansiado beso a su preciado ángel, sintió varias auras asesinas a su espalda, un sudor frío le recorría el cuerpo, volteó lentamente solo para ver cuatro espectros tras de si, estaban molestos con el chico, uno se cargó su teléfono apesar de llevar su ítem de la suerte que por cuestiones del destino tenía dentro de un bolsillo, tal vez por eso no había funcionado, pero era penoso traer en la mano... una tanga de leopardo.

Por su parte el moreno se había dado un golpe tan certero que le había salido un tercer ojo... o un enorme chichón en la frente, que para el caso es lo mismo.

El joven de orbes morados había sido asaltado por un canino, y para variar en la bolsa traía la cartera y las llaves de su casa, solo él para ponerlas ahí.

Y el pelirrojo que había intentado ser pez en el lugar menos indicado.

No estaban furiosos, lo que le sigue, volteó para buscar ayuda en su amado, pero este había escapado gracias a su falta de presencia, le ama, pero no quiere morir joven.

¿Y cómo lo encontraron? Fácil, el emperador es absoluto, aunque como ya vimos, cada que se le da la gana a esta habilidad funcionar.

Cuenta la leyenda que nunca volvieron a ver a Kise Ryota, solo quedó el recuerdo de él en carteles pegados por toda la ciudad... choro, choro... ¿o no?

 

Notas finales:

Gracias por leer¡¡¡¡¡¡¡ >///< Hasta la próxima¡¡¡¡


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).