DIECISÉIS AÑOS ATRÁS
-¿De verdad tengo que ir dónde Minho hyung? –Taemin se quejó mientras sostenía su robot de juguete.
-Sí mi vida, mami debe hablar con su amiga Minami ¿Puedo?
-Está bien mami, pero solo un ratito. – Taeyeon sonrió al escuchar a su pequeño. Los pelirrojos llegaron a la pequeña pero linda casa llena de flores y con un amplio jardín. No era lujosa pero si bien cuidada.
-Ya llegamos – la mujer de cabello largo y delgada se bajó del auto y le abrió la puerta al pequeño de 6 años.
-Gracias Mami.
-Ña ña ña Gracias Mami ña ña – la voz sonó detrás del niño que se giró para lanzar una mirada llena de odio.
-Minho – la mamá de Taemin dijo con tono cantado y el niño dejó de sonreír e hizo una reverencia.
-Buenos días señora Lee – Taemin sonrió porque el mocoso que se había burlado de él, había sido regañado.
-Buenos días Minho – le sonrió y se agachó a entregarle una playera que sacó del auto.
-¿Autografíada? – Preguntó emocionado y Taeyeon solo asintió con la cabeza antes de que el niño saliera gritando de un lado al otro en el jardín. – Se la enseñaré a mis amigos- se la puso y la remera de la selección coreana le quedaba nadando. –Gracias señora Lee.
-Vamos Taemin, debemos saludar a Minami – Taemin asintió y siguió de cerca a su mamá, pero antes de entrar miró al mayor.
-Parece que traes vestido – se rió y entró a la seguridad del vestíbulo antes de que el niño más alto que él reaccionara.
Dentro de la casa la mujer de cabello corto y negro llegaba a abrazar a Taeyeon y luego saltar dando grititos. Taemin hizo una reverencia en silencio y pasó a sentarse en el sillón a jugar en silencio mientras su madre y su amiga platicaban.
-¡Minho! – Su madre gritó después de un rato y el niño se asomó dentro de la casa.
-¿Qué pasó mamá?
-¿Ya recogiste tu cuarto? Te dije que tus amigos solo podrían venir si limpiabas.
-Ya casi está listo – el niño de 7 años corrió a una esquina de la casa y regresó con un montón de ropa que se estaba cayendo en el camino.
-Gracias nene.
-No digas nene – se quejó – mis amigos se van a burlar.
-Nene – Taemin repitió bajito riendo, a diferencia de Minho, Taemin sabía aparentar bien y rara vez era atrapado cuando hacía una maldad, lo que le daba más coraje al mayor. Minho lo miró molesto dejando la ropa en el cuarto de lavado.
-¿Puedes invitar a Taeminnie a jugar con ustedes?
-No – Minho dijo separando la ropa decidiendo que era blanco y que era de color.
-Por favor hijo.
-Pero vamos a jugar cosas de niños grandes.
-No te preocupes Minami –Taeyeon habló.
-Por lo menos deja que Taemin juegue contigo antes que lleguen.
-Solo si me ayuda a limpiar.
-¿Taemin ayudarás a limpiar a Minho?
-Si mamá – Taemin se levantó del sofá y sonrió con malicia.
-Espera – Taemin se dirigió al cuarto del alto deprisa y este salió corriendo detrás.
-No toques eso – le dijo tan pronto llegó y lo vio tomando una de sus medallas.
-Solo lo recogía – Taemin miró alrededor, el cuarto era un desastre.
-Es una cosa que un niñito como tú no entiende.
-Es una medalla, tonto, si sé eso.
-Le diré a tu mamá que me llamaste tonto.
-No te va a creer – Taemin sonrió victorioso mientras seguía mirando en el cuarto. Minho se llenó de coraje, sabía que tenía razón. Muchas veces lo había intentado y solo terminaba castigado él y hoy no lo intentaría sus amigos venían a casa.
-Cara de moco - Taemin rió por el insulto.
-Cara de rana. - El menor siguió removiendo cosas, estaba más lleno de curiosidad que con intenciones de limpiar -¿Qué es esto? -Tomó una caja de metal de debajo de la cama.
-¡No toques!
-No exageres - Taemin la abrió y dentro estaba lleno de boletos de partidos.
-¡Déjala!- Minho lo empujó para tomar la caja. Taemin lo vio enojado y lo empujó de regreso. Lo que desató que el mayor le diera un puñetazo y él respondió con una patada, ambos niños terminaron en el piso pataleando y empujando, dando golpes como podía.
-¡Minho! ¡Taemin! - Las voces de sus madres resonaron mientras intentaban quitar a Taemin de arriba de Minho mientras le mordía el brazo.
-¡Detente Taemin! - Su madre soltó y Taemin dejó de morder al mayor que seguía dando de patadas.
-Minho, ya basta - su mamá le dio una bofetada y él la miró con los ojos llorosos.
Los niños fueron castigados a permanecer en el cuarto hincados con los brazos arriba, en la misma habitación.
-Si no puedo jugar con mis amigos por tu culpa me las pagarás.- Minho dijo bajo una vez que los dejaron solos.
-Es tu culpa. -Taemin dijo casi llorando, sabía que era más listo que esto, pero el coraje le había ganado y no había querido perder.
-Olvídalo - Minho se puso de pie.
-Te van a regañar.
-No me importa.- Comenzó a recoger los boletos que habían caído. Taemin también se puso de pie y decidió salir, no quería golpearlo de nuevo. Se acercó a la cocina.
-No sé qué hacer - la voz de su tía Minami sonaba entrecortada lo que asombró al niño, por lo general era suave y amable.
-No temas - se asomó al escuchar a su madre y la vio abrazando a la otra mujer. -Eres una excelente madre, ambos estarán bien, no necesitas a ese idiota.
-Minho no quiere que su padre se marche.
-Ningún niño quiere ser separado de sus padres, pero con el tiempo entenderá, que ya no sea tu esposo, no quiere decir que ya no sea su padre.
Taemin bajó la mirada y se giró en silencio para volver al cuarto. Cuando llegó comenzó a recoger las entradas también.
-¿Qué haces?
-Tus amigos se burlaran sí tienes un cuarto tirado.
-Eres raro.-Se quedaron en silencio hasta que los amigos de Minho llegaron y Taemin volvió al sillón a jugar con su robot hasta marcharse.
-Mamá - Taemin habló en el auto,no había dejado de pensar en lo que había escuchado.
-Dime mi vida.
-Vamos a ver mucho más a la tía, ¿verdad?
-Solo será un tiempo. - Su mamá suspiró sin dejar de ver el camino mientras conducía. Minami se había vuelto un ama de casa de tiempo completo, su esposo le había prohibido seguir trabajando con el pretexto de que él proveería para la familia. Pero ahora la había engañado y solicitaba el divorcio.
Minho y Taemin eran completamente opuestos pero debían soportarse constantemente debido a la amistad de sus madres. Minami y Taeyeon eran las mejores amigas. Desde que Minami se había mudado a Corea desde el Japón en la primaria, se había vuelto inseparable de Taeyeon. Ambas se entendían bien, no importó que al principio el coreano de Minami fuera malo, tampoco importó que Taeyeon huyera de su casa en la preparatoria, al contrario fue aceptada en la casa de Minami y se volvieron más unidas. Terminando la preparatoria Minami decidió ir a la universidad pero Taeyeon se inclinó a buscar un buen trabajo y salir de la casa de los padres de Minami. Cuando la chica de cabello negro terminó la carrera se mudó junto a ella fingiendo que no podía encontrar algo por sí misma.
Y así fue como llegaron hasta el punto en el que Taeyeon decidió casarse con un hombre de buen corazón que siempre le dejaba notas en el café en el que trabajaba, se parecía tanto a Minami aunque no era tan lindo como ella, eso decía justo antes de la boda. Minami se sentía triste de que Taeyeon se alejara, pero sabía que una buena familia era lo que necesitaba.
Después de la boda Minami decidió mudarse de nuevo con sus padres, sin embargo no tardó en notar que sufría de náuseas, y se sentía más agotada de lo habitual después de trabajar. Fue entonces que conectó los puntos y se dio cuenta de que estaba embarazada. Corrió primero a buscar a Taeyeon, ya que no tenía ni idea de cómo mencionárselo a su novio, un compañero de trabajo en la revista para la que tomaba fotos. Taeyeon decidió ir con ella al doctor y luego de confirmar llevarla a casa de su novio. Minami estaba completamente nerviosa, pero para su sorpresa su novio estaba más que feliz y decidió que debían casarse tan pronto como fuese posible.
Unos meses después la boda tuvo lugar y Taeyeon tenía buenas noticias para Minami, ella también sería madre. Aquí las amigas crearon su pacto extraño, de esos que las amigas creen que son buena idea pero no piensan en todas las cosas que pueden pasar, decidieron que sus bebés algún día se casarían. Minami sabía que tendría un niño y su esposo quería llamarlo Minho como su abuelo, pero Taeyeon aseguraba que tendría una niña, aunque no fue así, ella también tuvo un pequeño unos meses luego y su padre lo llamó Taemin. Ya que a Taeyeon y Minami les salieron mal las predicciones decidieron que sus pequeños serían los mejores amigos, eso tampoco fue una buena idea.
Minho era bastantes meses mayor que Taemin, así que tardaron en juntarlos a jugar, pero sus personalidades eran tan diferentes que cada uno terminaba jugando en una esquina diferente sin interesarse por el otro niño. Minho adoraba correr de un lado al otro atrás de pelotas, tomar siestas y reír cuando las cosas caían, Taemin por el otro lado adoraba hacer ruido, bailar y subirse a cualquier lugar que podía. En la primaria ocurría lo mismo, Taemin era un año menor y le gustaba estar en la escuela y Minho rápido hizo amigos con quien pasaba jugando videojuegos o deportes y odiaba las clases.
Esta fue una de las razones porque los chicos no se llevaban nada bien, pero no sabían que de ahora en adelante Taeyeon pensaba en ayudar a aliviar la carga de Minami de vez en cuando, por lo que pasarían mucho tiempo juntos.
DOCE AÑOS ATRÁS
-¿Por qué nos sigue tu primo?
-No es mi primo -Minho volteó a ver a Taemin que iba tras él jugando videojuegos. -Agradezco que no somos familia.
-También lo agradezco - Taemin dijo sin separarse del juego.
-Bueno, pero, ¿por qué nos sigue?
-Mi madre me obligó a que viniera.
-No importa Joonjae- Takuya era un chico despreocupado, pervertido y podría decir que problemático, pero no le molestaba que Taemin les siguiese, sabía que el niño no diría nada y le interesaba un poco la aventura.
-No quiero ser niñero hoy Takuya- Joonjae en cambio era un chico algo nervioso, inteligente pero bastante flojo, lo que hacía que fuese un completo patán, por lo general el encargado de Taemin entre los tres amigos inseparables.
-No necesito niñero -Taemin habló mientras les seguía a los niños de 11 una fábrica abandonada.
-Pero Minho sí- Takuya se burló.
-Y tú necesitas una correa - Minho despeinó al chico japonés con el que era amigo desde hace 6 años.
-Un bozal tampoco estaría mal - Joonjae dijo sentándose en un sillón viejo cubierto por una manta.
-Miren lo que conseguí - Takuya sacó una revista de su espalda y se sentó en una silla junto al sillón.- Chicas ardientes sin ropa.
-A ver - Minho se acercó también y los tres muchachos comenzaron a pasar las páginas.Taemin negó con la cabeza y volvió a su juego.
-¿Qué es eso? -Preguntó después de un rato notando un extraño ruido.
-El niño tiene miedo - Joonjae se quejó.
-No molestes Taemin- Minho dijo y Taemin se puso de pie para buscar la procedencia del ruido.
-Tae tiene razón - Takuya se puso de pie.
-Soy Taemin.
-No le sigas la corriente Takuya, es peligroso, muerde. - Minho dijo riendo, desde su última pelea la mordida de Taemin en su brazo le había dejado marca y ahora a todos les contaba la historia del salvaje niño que iba a su casa y hacía su vida imposible.
Un aullido resonó y todos se quedaron en silencio.
-Ok, acepto que hay un ruido - Joonjae dijo mirando alrededor. -Sugiero que vayan a ver.
-Cobarde - Minho se rió y se puso de pie para empezar a buscar, no quería que los otros encontrarán primero -¡Ya se qué es! - Dijo tan pronto encontró a un cachorro atado a un viejo tubo de la fábrica.
-Un perro- Takuya intentó acercarse y el cachorro trató de morderlo.
-Déjalo ahí, no podemos hacer nada si no quiere ayuda. -Minho intentó alejarse.
-¿Lo dejamos morir? -Joonjae estaba conflictuado.
-Está asustado - Taemin intentó acercarse.
-Espera tonto, te va a morder - Minho jaló a Taemin.
-Déjame - se acercó y él cachorro cerró el hocico sobre su brazo. Taemin soltó un leve quejido.
-Sangre - Joonjae dijo señalando al brazo de Taemin.
-Tranquilo - Taemin acariciaba la cabeza del cachorro sin mover su brazo mientras soltaba la cuerda con el otro.
-Tu primo está loco - Takuya dijo riendo.
-No es mi primo. - Minho veía preocupado a Taemin que le hablaba al cachorro mientras este le soltaba despacio el brazo.
-Debemos llevarlo al veterinario - Taemin cogió al cachorro en brazos.
-Creo que alguien debe ir al hospital también - Joonjae señaló la manga ensangrentada de nuevo.
-¿Cómo lo llamarás?- Takuya dijo mientras salían de la fábrica.
-Aún no sé.
-Estás loco, loco - Minho estaba más que molesto. No era la primera vez que Taemin quedaba bien con sus amigos y ahora hasta tenía un perrito. Aunque sonrió al pensar que Taeyeon no estaría tan feliz y no le dejaría quedarse el cachorro. Pero no fue así, para su sorpresa, Taeyeon estaba encantada con el perro y Minami era la preocupada por el brazo de Taemin.
-¿En dónde se metieron Minho?
-En el parque - Minho no diría nada de su guarida secreta.
-¿Lo encontraron en el parque? - Taeyeon cuestionó observando el aceite que estaba sobre el cachorro.
-Si mamá, lo encontramos porque estaba haciendo ruido y estaba atado el pobrecito. - Taemin se quejó del dolor.
-Las mordidas duelen, ¿verdad? - Minho empezaba otra vez a discutir.
-Minho deberías bañarte, el parque está lleno de aceite. - En negación y un poco asustado de los poderes de vidente de su mamá, el mayor se fue a bañar mientras las otras tres se quedaron en la cocina con el cachorro.
Últimamente Minho se sentía más y más desencajado en la casa, se había quedado con su madre todo ese tiempo viendo a su padre poco, pero su padre había prometido que vivirían juntos cuando cumpliese 15 así que cuatro años parecía una eternidad. Pero a veces cuando veía a Taemin tan cómodo con ellas dos sentía que le robaban su lugar.
-Pónganle Cinnamon - dijo entrando a la cocina y abriendo el refrigerador.
-¿Cinnamon? - Taemin lo miró molesto, Minho sabía que era alérgico a la canela y otra vez estaba molestándolo. Simplemente no entendía por qué le odiaba tanto aún cuando intentaba ser invisible.
-Me gusta - Taeyeon sonrió.
-¿Qué? - Taemin la miró asombrado.
-Su color café es como el de la canela. -Minami acarició la cabeza del cachorro.
-Está bien Cinnamon será - Taemin suspiró, estaba seguro que esas eran venganzas colectivas por cómo había tratado a Minho en el pasado, así que tendría que vivir con ellas.
SEIS AÑOS ATRÁS
-¡Ya despierten muchachos! - La voz resonó en la casa, la voz de Taeyeon era potente, más si estaban en su propio hogar.
-Dijo que ya despertaramos cara de rana. - Taemin pateo a Minho al sentarse porque este dormía en el suelo. Por un momento se le quedó mirando, era tan alto y con ojos enormes, su cabello era ahora largo y ondulado. Taemin sabía que Minho hubiese sido la sensación en la preparatoria si no fuese porque siempre faltaba a clases, era un imbécil y tenía amigos igual de imbéciles.
-No molestes gusano - Taemin comenzó a buscar su ropa, Minho tenía ahora 17 y él 16, ambos seguían odiandose pero ahora se veían más a menudo. La nueva esposa del padre de Minho no quería lidiar con él, Minho no quería volver con su mamá y Taeyeon se había ofrecido a albergar cuando las cosas estaban por estallar para dar algo de alivio. Esto se había vuelto inclusive semanas completas con Minho en casa.
-Te dejaré de molestar el día que no estés en medio del pin*** piso.
-¿Maldiciendo otra vez Taemin? - Minho se sentó con una sonrisa de victoria y miró el menor.
-Ya muévete, no quiero llegar tarde. - Taemin salió al baño a vestirse, era una tortura. Tortura con la que tendría que lidiar hasta que Minho terminase la prepa, todo porque estaba peleado con Minami y Taemin no podía entender el por qué. Minami le parecía tan lamentable, su esposo la había engañado, su hijo escapaba de ella y hasta prefería a su mejor amiga y además trabajaba tanto para pagarle al malagradecido de su hijo.
-¡Taemin! - Una voz masculina resonó en la casa.
-¡Ya voy papá! - Taemin se apresuró a salir y corrió escaleras abajo. Su padre era mayor que su madre pero alguien genial y amable. Aunque Taeyeon tenía que defenderlo muy seguido.
-Aquí está - le entregó un casco rojo a Taemin. - Ahora puedes usar la moto.
-¿Enserio?
- No -Taeyeon dijo sentada desde la mesa y su padre volvió a cocinar. -Dijimos que cuando cumplas 18.
-Déjalo esta vez, he escuchado que tiene una novia.
-¿Novia? - Taemin le lanzó una mirada a su madre y ella sonrió levemente. Taemin tenía una pareja, eso era verdad, pero no podía decir que novia, más bien era novio. Y su madre lo sabía, pero no habían podido dar las noticias a su padre porque no sabían cómo mencionarselo.
-Quiero ver esta novia - Minho dijo en tono burlón entrando a la cocina.
-¿No la has visto? - El padre de Taemin sirvió el desayuno. -Va a clases en su misma escuela.
-Miraré mejor- sonrió a Taemin y cuando su padre se alejó a quitarse el delantal dijo - aunque puede que Taemin sea la novia. - Taemin le dió un puntapié debajo de la mesa. Taemin era delgado y algo alto, pero no tanto, tenía el cabello rojizo y largo, tal vez si era un poco andrógino, pero no demasiado.
Después de desayunar los chicos se encaminaron a la escuela en completo silencio. Cómo siempre lo hacían.
-Ni se te ocurra decirle a papá - Taemin soltó como sentencia.
-Ya deberías decírselo, el viejo Lee es simpático.
-Señor Lee - Taemin estaba furioso, sabía que su padre lo amaba pero estar chapado a la antigua y que ni su madre supiese cómo decirle eran claras señales de que no sería fácil. - Es un hombre clásico coreano.
-Como digas, no estoy para ayudarte - Minho sacó un cigarrillo y lo encendió.
-Suerte faltando a clases - Taemin se despidió y pasó junto a Takuya que venía corriendo en su dirección.
-Tae, deja a tu novio y sal conmigo.
-Estás enfermo -dijo Tae un poco enojado y siguió hasta encontrarse con la tétrica cara de Joonjae. Otra vez lo veía molesto, pero a Taemin no le importó, nunca le importaba lo que hacían esos tres.
-Toma - Minho le puso el cigarrillo en la boca a Joonjae.
-¿Quieres impresionar a tu primo?
-No es mi primo, estaba de odioso hablándome de sus problemas así que tuve que detenerlo.- A Minho no le gustaba pasar tiempo cerca de Taemin, llamaba demasiado la atención era muy popular, un conflicto con la vida tranquila que deseaba.
-No importa, vamos antes de que quieras correr atrás de pelotas. - Takuya tomó el cigarrillo de la boca de Joonjae.
-Eres tan vulgar - Joonjae le siguió y luego Minho riendo.
Taemin llegó a clases, en realidad no le gustaban las clases, pero como era hijo único le gustaba bastante pasar tiempo con más personas y la verdad se llevaba bien con la mayoría.
-¿Cómo fue? - Una chica le preguntó al oído.
-No te voy a contar de eso.
-¿Ni a mi? -Su amigo Jun se puso al otro lado.
-No deberían meterse en mis asuntos personales.
-Entonces Taemin ya no es virgen- otra persona más dijo y notó que ya todos estaban alrededor de su escritorio discutiendo si lo era o no.
-Pues la verdad lo había planeado, pero Taemin tenía a otro chico en su habitación.
-¡¿Qué?! -Minzi soltó el grito emocionada por el drama.
-Jonghyun-hyung, no les des ideas y vuelve a tu clase. - El novio de Taemin también era bastante popular y entrometido, le gustaba mucho estar entre el grupo que siempre rodeaba al muchacho. Taemin en cambio intentaba mantener muchas cosas ocultas y tener un novio como él lo hacía un poco complicado, pero estaba bien.
-¿Cómo es ese chico?
-Solo es algo como un pariente - Taemin abrió su libro de música.
-Se veía peligroso y alto, es totalmente tu tipo Minzi.
-Deberías presentármelo Tae.
-Soy Taemin, y no, si de verdad fuese tu tipo ya lo hubieses notado.
-¿Cómo?
-Viene a clases aquí.
-¿En serio? - Ahora Jonghyun preguntaba.
-¡CHICOS! - El grito resonó en lo alto - ¡Les recuerdo que seguimos en clase! - El profesor había intentado llamar la atención del salón que había rodeado en mesabanco de Taemin. -Jonghyun, ve directo con la directora.
-¿Otra vez?
-Estás en mi clase otra vez, claro que debes ir otra vez.
-Está bien, iré a mi cita con la directora. Nos vemos luego chicos.
-Taemin - el chico se puso de pie, sabía que él sería el castigado, no importaba que no lo hubiese empezado. -Siéntate en el frente, así todos pueden ver que no vas a ningún lado y tal vez pongan atención. -Taemin afirmó y tomó sus cosas para pasar alfrente. Cuando la clase continuó el se puso a dibujar poniendo atención a momentos, matemáticas no era su clase favorita pero debía salir bien para ir a la universidad.
-¡Minho! - En el otro lado de la escuela Joonjae le arrojaba una toalla al alto que estaba empapado en sudor. -Ya va a ser hora de clase.- Minho observó el reloj en la pared del gimnasio, estaba entrenando duro para entrar a una una universidad donde el deporte fuese importante y tal vez llegar a la selección nacional.
-No quiero ir -Minho se quejó - ¿Y Takuya?
-Ya sabes, ha de estar dando su empujón regular - Takuya era conocido por estar perdido todo el tiempo y aunque los chicos se preocupaban e intentaban alejarlo de las drogas era complicado.
-¿No puedes invitarlo a tu casa este fin de semana?
-Mi madre no está contenta de que siga juntándome con él - Joonjae suspiró - ese tonto me preocupa.
-¿No piensas decirle?
-Ni de loco, además está esa chica mayor con él, la ebria puta esa.
-Yo creo que debes decirle lo que sientes - Joonjae suspiró.
-No es tan fácil - lágrimas se asomaron en los ojos del chico y Minho lo abrazó.
-Lo sé.
-No es cierto, tú solo amas el futbol.
-Y es un amor no correspondido. - Minho logró que Joonjae sonriera.
-¿Qué hacen sin mi?- Takuya se asomó al gimnasio.
-Tenemos un abrazo candente.
-Yo también quiero.
-No, tu no eres bienvenido en nuestra relación - Joonjae dijo riendo sin soltar a Minho.
-Pero un trío es divertido.
-Como si hubieses estado en un trio alguna vez. -Minho se burló.
Los chicos llegaron a la clase de música, cosa que le interesaba a Takuya y los otros lo habían seguido como siempre. Esta era la única clase que debían de compartir con Taemin.
-Es cierto - Jonghyun estaba parado frente a Minho. -Este chico está en la escuela.
-Enano déjalo pasar - Joonjae que también era bastante alto amenazó a Jonghyun que veía a Minho de arriba a abajo.
-Tranquilo, solo quería saludarlo.
-Minho tienes un admirador. - Takuya era alto igual que los otros dos y ahora rodeaban a Jonghyun, que no se veía nada preocupado.
-Admirador es mejor que enano.
-Aunque eres más admirador de Taemin - Takuya dijo tranquilo y Joonjae lo miró fijamente.
-Aaa, ya recuerdo - Minho estaba pensando desde el principio dónde había visto a ese chico.
-Sí, nos vimos anoche y hoy Tae me dijo que estabas en la escuela.
-Soy Taemin - Taemin pasó al lado ignorando a los altos y entró al salón.
-Vamos a sentarnos - Minho los empujó alejándolos del chico que era demasiado amistoso para su estilo de vida y demasiado relacionado con Taemin.
A mitad de la clase una mujer entró y llamaron a Taemin, no regresó para la clase y en la siguiente hora llamaron a Minho. Ese día todo cambió para Taemin, ese fue el día que llamaron a la escuela para decir que sus dos padres estuvieron en un accidente.
-¿Cómo estás? - Una chica le preguntó a Taemin que entraba a la escuela.
-Mucho mejor, gracias - Habían pasado unas semanas,Taemin se había mudado con su tía y su esposo, ellos eran algo viejos pero solo sería por un tiempo hasta que llegase a la universidad. Minho había decidido volver con su madre, porque si había alguien tan dolido como Taemin sería Minami quien nunca había aprendido a estar sin Taeyeon en realidad.
-Taemin - Jun se acercó a él. - Nos hiciste falta.
-¿Ya no interrumpieron clases? - Taemin sonreía amplio, era feliz de volver a donde las cosas parecían ser iguales.
-Tu primo se ve mejor-Takuya dijo observando desde lejos, Minho le lanzó una mirada molesta y siguió su camino.
-Te interesas demasiado en él. -Joonjae dijo molesto.
-Es solo que lo vimos crecer - Takuya dijo en tono de anciano. - Escucharon que su tío le dió una paliza a su novio y ahora no puede verlo.
-¿Dónde escuchaste eso? - Joonjae preguntó.
-Todos esos putos doble-caras siempre están diciendo cosas del chico así que es normal escuchar.
-Solo sé que Cinnamon se quedará con nosotros por un tiempo - Minho se puso de pie, no deseaba escuchar sobre la vida de Taemin, la verdad él también estaba dolido. Como lo vio Taeyeon era su único escape fuera de su loca familia y ahora tenía que vivir en la locura.
-Cinnamon odia a Takuya - Joonjae dijo riendo.
-No tanto como a Minho, no puedo imaginármelos conviviendo.
-Me agrada más el perro que Taemin - Minho se alejó, él a diferencia del falso Taemin no podía esconder sus emociones.
Las clases pasaron, Minho fue a comer una hamburguesa o tres con sus amigos y luego fue a casa de su madre. Tenía que hacer sus deberes, estaba por entrar a su último año. Llegó y ayudó a su madre a limpiar un poco. Ahora vivía en un pequeño apartamento y tenía siempre su material fotográfico por todos lados.
-No puedes dejar tus cosas así si vamos a tener una mascota. -Minho la regaño y Minami sonrió un poco avergonzada. -Eres todo un caso Minami.
-La puerta - la puerta sonó un poco después y Minami corrió a ella -¡TAEMIN! - Por el grito Minho también fue a asomarse -¿Qué pasó?
Taemin estaba empapado y tenía el ojo morado. Minho le veía intensamente, sabía que algo estaba mal, muy mal.
-No fue nada, me tropecé. -Entró con Cinnamon siguiéndole y la madre de Minho corrió por toallas para los dos.
-¿Y el perro también se tropezó? - Cinnamon tenía una marca roja alrededor de su cuello y algunos moretones eran visibles entre el pelaje mojado.
-No digas nada. - Taemin bajó la mirada y se sentó en el piso frente al perro que se veía desanimado. - Perdóname Cinnamon, volveré pronto - puso su frente contra la del animal que soltaba leves quejidos. -Toma. - Le dio la corre a Minho.
-¡Espera! - Minho vio como el chico salia corriendo antes de que su madre volviese con las toallas.
-¿Y Taemin?
-Ya se fue - Minho cerró la puerta y soltó al pobre animal de la correa.
-Le diré que venga el próximo fin de semana, así podrá jugar con Cinnamon, ha de estar muy triste el pobre.
-Mamá - había pasado mucho desde que Minho le decía así a su madre - Taemin no volverá pronto.
Y así fue, cómo dijo Minho pasó, Taemin no apareció de nuevo en la escuela, los rumores de que usaba maquillaje para cubrir heridas se esparcieron rápido, pero luego se volvió que Taemin trabajaba en las calles y tenía un novio abusivo y él era quién había golpeado a Jonghyun. Por su parte Jonghyun terminó la preparatoria y no hubo nadie que corroborara o negara los rumores.
-No los entiendo, ¿no lo adoraban? - Joonjae preguntaba en el verano después de escuchar a dos chicas hablar entre ellas.
-Solo son un montón de falsos, no eran sus verdaderos amigos.
-¿Siempre deben estar hablando del mocoso?
-Rara vez hablamos de él Minho -Takuya pasó su brazo por los hombros del alto que estaba furioso de escuchar a las chicas. -Deberías aceptar que lo extrañas y eso haría todo más fácil.
-Eres un tonto - Minho lo empujó, no lo extrañaba, pero le tenía pena.
-Es triste - Joonjae habló suave y los dos voltearon a verlo - puede que nosotros fuésemos lo más cercano que tenía a un amigo. - Los tres se quedaron en silencio pensando.
-No tengo idea de que traes ahora - Takuya lo empujó - si dices cosas así de sensibles me harás llorar.
-Eres un idiota.
Y así fue como la historia de Taeyeon y Minami terminó, y posiblemente la de Minho y Taemin también, no llegaron ni a ser conocidos en realidad, solo compartían espacios, no eran amigos ni llegaron a ser pareja como sus madres lo planearon, solo eran dos chicos que se infortunaron mutuamente. Así lo fue, pero tal vez el infortunio no había terminado.