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Le Soldat por maikyuc

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Se levantó como siempre, antes que el sol entrara por la ventana, tenía que preparar el desayuno para el abuelo y el cabeza de familia, por lo que salió con su paso silencioso y seguro con rumbo a la cocina—Kiril… —ordeno al sirviente más fornido y que era de los favoritos del abuelo— adelántate a despertar a Sire Aitite, yo me encargaré de despertar al Sire Aita— comentó el rubio con bastante seriedad, luego hizo unas señas para que las sirvientes y cocineras terminaran de preparar el desayuno.

—Joven Damian…—la voz seria que le llamaba mientras corrían las cortinas le hizo abandonar el mundo de los sueños

—¿Quién está ahí? — esperaba que no fuera otra vez ese metiche de siempre

—Soy Izmene joven amo—respondió la mujer que terminaba de abrir las ventanas

—Ah sí … Izmene— Damian termino de incorporarse con pereza en la cama — debe arreglarse para desayunar

—¿En familia nuevamente? —pregunto el chico mientras se estiraba y acababa de bostezar

—No, el día de hoy Sire Aitite no ha pedido verles a todos— la voz, esa gruesa y metiche voz

—Es bueno ver que sigues por aquí ¿Dick te mando? — le dijo a la figura que había ingresado por completo a su habitación

—No, mi padre me envió para recordarte que hoy irán de visita a casa de los Allen— explicó el castaño—Izmene que traigan la comida del señorito…—indico a la servidumbre que salió a toda prisa de la habitación

—Tt, —el chico solo chasqueo con la lengua mientras salía de la cama y hacía unos estiramientos leves —¿Qué? —Damian notó que le miraban con algo de desapruebo

—No deberías dormir tan ligero de ropas…— y es que Damian iba solamente vestido con unos ligeros interiores de algodón que apenas y cubrían su desnudes, y sobre el pecho su amuleto de oro que aún lo identificaba como un niño, dejó de mirarlo para que no le malinterpretara y se acercó con agua y telas—Brazos por favor

—¿En algún momento me dejarán usar mi baño como se debe? — el menor sintió como el sirviente le tallaba ligeramente con los trapos húmedos —me gustaría sentir de vez en cuando como el agua cae por mi cabeza en las mañanas….

—Haberlo dicho joven amo— rió con malicia y le dejó caer casi la mitad del agua sobre la cabeza, el castaño se hizo para atrás esperando la reacción de Damian

—¡Idiota! —dijo aun con la cara impactada—¡no me refería a eso! ¡Me las vas a pagar!…— Damian se arrojó para darle un par de golpes a su sirviente el cual sin un gran esfuerzo evitó los manotazos y cubrió con una toalla al chico

—Termina de secarte joven amo, yo buscaré tu ropa— el joven castaño se dirigió al closet, el sabia escogerle bien la ropa a Damian quien mientras esperaba dejaba caer la toalla y su ropa mojada.

El movimiento de tan importante casa siempre empezaba temprano, sirvientes iban y venían, jardineros regaban las flores y los pastos, y la limpieza comenzaba en algunos rincones, en la "casa" de Dick todo iba de la misma manera, pero lo hacía solo un hombre —Buenos días amor—la voz sonaba muy calmada a pesar del ligero enojo del día anterior Dick se mostraba muy amable, se acercó a Barth que apenas estaba terminando de apagar los fogones donde había acabado el desayuno para Dick—huele bien

—Espero que te guste... —dijo mientras colocaba un par de platos en la mesa y terminaba por servir el desayuno —¿dormiste bien?

—Bastante bien— Dick tomó asiento—tuve un sueño raro, bueno no tan raro… más bien agradable

—¿Sobre qué? —Barth estaba muy curioso con lo que decía Dick

—Algo sobre un extraño asomando a un balcón, todos le saludaban…

—Suena bonito… quizá eras tú…—Barth comenzó a comer al igual que su esposo— se que tus negocios van bien…

—Mejor de lo que piensas—Dick miró al chico con el que le había casado después de todo era dulce, muy amable, inocente... le retiró la mano y volvió a ponerse serio— pero podrían estar mejor…— Lindo, pero no era a quien quería—hoy iras a casa de tus padres

—S… si… ya sabes… tu padre ha dicho…

—Se lo que mi padre dijo—Dick se había tornado serio de momento — más bien lo que ordenó

—Dick yo no… no quise—Barth se puso tenso en ese instante

—Lo sé, no tienes que decir nada… —Dick puso una mano sobre la de su chico— sé que te encanta pasar el tiempo conmigo, pero hoy además tengo negocios que atender…—siguió comiendo y Bart también en completo silencio—por cierto en la sala hay unas cosas para tus padres y tu hermano…—Barth miraba interrogante a Dick—sí, ¿por qué no vas a ver?

Se levantó de la mesa y se apresuró a ver en el pequeño recibidor donde habían varias bolsas una de ellas tenía su nombre —¿Para mí? —Barth se dio la vuelta mostrando la ropa que Dick le había comprado

—¡Hey! Si vas a ir a ver a tus familiares deben de ver que con nosotros estas muy bien— Dick se acercó para besar a Barth —que vean que cuidamos a su pequeño tesoro…

—Lo haces, siempre lo haces…— Barth terminó cediendo ante las galanterías de su esposo, porque después de todo Dick no era malo solo es que tenía malos días… su trabajo era estresante.

El barco dio una vuelta completa a la isla, por que esperaba que fuera lo suficientemente turístico ¿turístico? No había realmente mucho que ver en Mugán— ¡Demonios! Que viaje tan largo— se quejó el nuevo jefe del equipo de policía

—Venimos por la ruta escénica amigo…— Tim estaba a su lado en el barandal observando cómo se acercaba a casa—no es que hubiera mucho que ver…

—Cada momento que pasa la gente me pinta mucho mas feo este sitio—comentó Jason algo pensativo— cualquiera diría que quieren espantarme…

—No hay nadie que quiera eso—explicó Tim— pero hay que ser realista, yo crecí en este sitio tiene lugares bonitos y se puede vivir bien… pero se ha vuelto algo oscuro…

—Pues o te preocupes Tim, yo vine para cambiar eso—explico confianzudo el militar — ¿te parece que vayamos por las maletas? —Tim asintió

Cuando estaban listos para bajar del barco con todo y valijas la gente se amontonó alrededor de ellos—sabes para no ser un lugar tan bonito como dicen todos viene demasiada gente—Jason decía esto mientras notaba que la gente le empujaba y se arremolinaba a su alredor

—Muchos solo están de paso ¡auch! —Tim se quejó y puso una cara algo complicada, Jason sonrió …lo miraba lindo al hacer esas extrañas muecas, se formaron ambos en la fila de la aduana, Jason miraba todo con cierto asombro veía al fondo del muelle una gran estatua con cuatro figuras que sostenían un enorme bloque el cual parecía tener escritas unas palabras:

Yo lo he visto todo…

Al pájaro, construir el nido y

a las tempestades, hurtarle el abrigo

Al niño que llorando, reclama la madre,

y a la que espera, porque lo ha perdido

Ave que disfruta de una carroña

y al león salvaje, guardando su leona

Al hombre que dice defender la paz

y para la guerra se siente capaz

Al fusil que apunta, porque es inconsciente

y encuentra el blanco, en un inocente**

—Qué lindo—dijo Jason como no queriendo la cosa

—¿Qué? —Tim notó que Jason desde la fila vecina que avanzaba lentamente le hacía señas con los ojos—¡Ah! Eso… tiene algo que ver con la desesperanza

—Más buenas noticias ¿cierto? — dijo entre risas Jason

—¿Motivos de visita? — el sujeto que atendía la aduana se dirigió a Jason — ¿motivos? —insistió

—Trabajo nuevo —Jason notó que el hombre uniformado y serio no le contestó parecía mirarle de manera extraña, como si le desnudara con la mirada ¿se había relamido los labios? —Mierda… estúpido pervertido…

—¿Dijo algo? — el guardia le miró con recelo

—No nada—abrieron su maleta y comenzó a revisar confianzudamente—¡Oye! ¡Eso es privado! — se sonrojo al ver que sacaban uno de sus interiores de uno de los compartimentos de la maleta

—Tranquilo galán, no pasa nada… pasa por aquí —le hicieron pararse frente a un muro y le tomaron una foto instantánea— suficiente chico…bienvenido a Mugan — Jason se aguantaba las ganas de hacer un escándalo cuando volvieron a meter todo a su maleta en un perfecto desorden— que tenga buena estancia

—Como sea…— le hicieron avanzar después de la línea de revisión, notó como su foto era colocada… ¿entre los boxers que le habían sacado? —Maldito cerdo…—eso le daba una idea de cómo se manejaban las cosas en ese sitio

—¡¿Qué?! — Tim reconoció la voz como la de su nuevo amigo que parecía ser sacado de la fila y llevado hacia una puerta—Pero yo soy originario de aquí…

—Y eso te hace peligroso de por si niño bonito…— comentó otro guardia que empujaba a Tim con todo y su equipaje

—¡Hey! ¡Déjenlo en paz! — Se quejó Jason que intentó regresar al lugar—fuera de mi camino— dos guardias más le salieron al paso—más vale que me dejen pasar, no saben con quien se están metiendo…

—Mejor retírate galán, tu amigo estará bien—le dijo el guardia, a lo lejos vio que Tim parecía asentir, por el momento no podía hacer nada más que seguir su camino.

El barco no solo había llevado pasajeros, llevaba una carga muy valiosa para Dick— hermoso — dijo al abrir una de las cajas y ver como debajo de las sedas estaba una gran cantidad de armas, más abajo era seguro que iban sus preciadas drogas—¿estamos a tiempo? —Dick le pregunto al que era su notable lugarteniente, el mismo que más temprano había ayudado a vestir a Damian

—La policía está lo suficientemente lejos, si llegan a dar alguna vuelta indebida me avisaran— el castaño se acercó a Dick— ¿todo al almacén?

—Envía dos a mi padrino, debe estarlo esperando—Dijo Dick mientras encendía un cigarro y luego tomaba una pistola, la tanteo y apuntó con ella—me encantan…estas irán a los rebeldes del norte…las enviaremos por mar

—¿y las drogas?

—Irán al este las enviaremos por aire… —Dick tomó otra pistola y se la dio a su lugarteniente— toma: un regalo— el pelicastaño asintió, luego pareció revisar algo entre su teléfono

—Debo adelantarme Richard… tengo que encargarme de algo— explicó el misterioso hombre

—Está bien, te veré luego, hay que preparar a las mulas para las drogas— Dick se dirigió a su auto—una cosa más, papá no quiere demasiado escandalo esta ocasión, no los vueles en pedazos…— Dick recibió una afirmación de cabeza, adoraba como trabajaba ese hombre.

Estúpido, se sentía estúpido viéndose con esos pantaloncillos que acababan cuatro dedos arriba de sus rodillas—Damian deja tu ropa en paz—le riñó su segundo padre mientras le daba un ligero manotazo para que deje de estirar hacia abajo la de por si diminuta prenda

—Me veo estúpido—explicó Damian—detesto que me vistan de manera idiota

—Tienes bonitas piernas es bueno que las luzcas hijo— comentó el rubio mientras no perdía de vista lo que pasaba frente a su ojos, hacía rato que habían llegado a la "ciudadela" la casa de los Grandes Mayordomos de Mugán, hogar de los Allen—pon atención que esto es interesante…

—No es verdad padre es por demás aburrido—Damian se cruzó de brazos mientras notaba como el Mayordomo de turno, el señor Barry Allen recibía en audiencia a un sin número de gente—esto parecía más divertido en mi mente— miró a un lado y notó que Barth estaba relajado, lucía tranquilo y pensaba que por ver bien a su hermano político valía la pena aburrirse un rato

—Gracias… —Barth habló bajamente pero su frase le sacó una sonrisa a Damian

—Estas en casa Barth, seguro que será un buen día, aunque no pase nada interesante — Dijo Damian sacándole una sonrisa cómplice a su cuñado. Pero se equivocó Damian se equivocó al menos eso pensaba Barth que se había quedado boquiabierto al ver a un chico vestido de azul que se presentaba junto con su padre "son mis credenciales de Medico" explico el que a leguas se veía que era el padre, Barth no quería perder ni un segundo de esa figura morena de rasgos rudos pero mirada amable que pareció cruzarse con la suya un segundo

—deja de babear Barth, si tu esposo se entera va a enojarse — un pelirrojo se paró al lado de Barth— buen día Hermanito

—Buen día Wally, me da gusto verte…—Dijo Barth tratando de sonar lo más natural posible

—Lo mismo digo hermanito, Señor Oliver un gusto tenerlo con nosotros— el rubio le saludó de la misma manera—Hola Damian…

—Buenos Días Wallace, lindo día ¿verdad? —Damian trataba de lucir poco interesado

—Lo era hasta que llegaste a casa—dijo Wally seductoramente, sacándole una mala cara a niño—Tranquilo dije que era bueno, pero ahora que estas aquí es mejor…

"Es mejor" la frase sonó en su cabeza y se reflejó en sus coloradas mejillas, en la sonrisa de Bart y en la cara picara de su padre, Wally tomó a Damian por sorpresa.

Fue sin duda una sorpresa que le hubieran requisitado para una revisión en privado, llevaba horas esperando a que alguien entrara para decirle por que seguía encerrado, Tim comenzaba a impacientarse, suerte era que llevara con él sus libros los cuales había hojeado para entretenerse —vaya como siempre tienes las narices entre los libros — le interrumpieron su lectura—¿te quedarás mucho tiempo Timothy?

—Depende de que me dejen entrar señor Orm— Tim retiró el libro de su rostro—¿me enviaran con la policía?

—Vamos Tim, solo quería ser el primero en saludarte…—dijo el hombre mientras se sentaba en un escritorio frente a Tim—¿Cómo estuvo el viaje?

—Cansado… me gustaría llegar a casa y recostarme y no puedo porque estoy retenido desde hace horas

—Es por tu seguridad Timi…—Orm se reclinó en le silla—además sé que en casa no te esperan hasta mañana— Tim le miro intrigado— si ya sabes, a tiempo para la fiesta de bienvenida

—Quise darles una sorpresa, por eso pregunto ¿puedo irme ya? —Tim estaba un poco molesto, estar en presencia de ese desagradable Curry era lo que menos quería

—Si claro... —Orm se puso de pie y se dirigió a la puerta, Tim se dispuso a tomar sus cosas— después del cateo de rutina— Tim bufó enojado, noto que el hombre cerraba las persianas alejando las miradas de todos los curiosos—¿recuerdas cómo es?

—No dejas de ser un maldito pervertido "tío" —dijo con sarcasmo Tim mientras se cruzaba de brazos

—Vamos Timi, cuando eras pequeño no te molestaba "jugar" a ese juego

—Como sea— Tim exhaló con desgano —no me dejaras ir sino accedo ¿verdad? —Orm se tocó la nariz en señal de afirmación, el joven profesor comenzó a quitarse la ropa hasta quedar solo en ropa interior

—Brazos extendidos— Tim obedeció la orden de Orm—separa las piernas— hizo como que buscaba algo pero más bien era que lo estaba acariciando—apóyate en el escritorio —Tim obedeció y sintió como le retiraban la ropa interior…

—Eres un maldito degenerado— Tim escuchó el sonido que hace algo elástico al chocar con la piel

—Solo cumplo con mi trabajo —Orm se acomodó el guante de latex—ahora relájate…—Tim solo cerró los ojos

—Hijo de puta…— dejó que siguiera su extraña revisión, estaba regresando y no quería armar escándalos, ya habría tiempo de vengarse…

—¿Te gusto la merienda? —el pelirrojo que estaba sobre el pasto mirando al cielo trataba de llamar la atención del chico que estaba a su lado —¿Damian? —la verdad es que el chico le escuchaba claramente pero se hacía el dormido, odiaba que le dejaran solo con ese pelirrojo engorroso que pretendía hacerse el amable con el.

—Si Wally, estuvo muy bien— Damian habló sin abrir los ojos, de haberlo hecho hubiera notado que Wally le miraba interesado— las cocineras de tu casa, son mejores para los postres que las de la nuestra, Barth hace buenos postres…

—¿Los has Probado?

—en ocasiones los visito a él y a Dick … Barth es buen hermano me ofrece algo de sus dulces… es su forma de calmar a mi hermano, siempre le hace feliz que le cocinen —Damian sonrió con malicia—hacen bonita pareja— Damian pudo sentir como Wally tornaba su alegre sonrisa en una mueca de desagrado

—¿Qué te hace feliz a ti? — preguntó Wally algo sugestivo

—Que retires tus dedos de mis piernas pedazo de idiota— Wally disimuladamente había colocado su mano sobre la piel del menor y había comenzado a moverla desde la rodilla hacia arriba— te lo advierto Wallace— el pelirrojo no se detuvo, metió su mano un poco más dentro de los shorts del chico, rozando las orillas de su ropa interior—¡que me sueltes Imbecil! — Damian en un movimiento rápido se colocó encima de Wally y le apuntó con una navaja directo a la mejilla

—Me encanta que tengas ese carácter…—dijo irónico el pelirrojo

—Tengo más que solo carácter Allen , más vale que no te quieras pasar de listo…

—Yo no me quiero pasar de nada— Wally se movió haciendo que su creciente erección rosara la parte trasera de Damian haciéndolo darle un respingo, logrando que se distrajera lo suficiente "¡Nn!" la expresión involuntaria que sirvió de distracción hizo que cambiaran de posición—no quiero nada que tu no desees— ahora Damian estaba atrapado bajo el cuerpo del mayor

—Te equivocas conmigo Allen, no todos los Wayne desfallecen por ti… y menos yo

—Me gusta pensar que algún día lograre hacerte cambiar de opinión— el pelirrojo le deposito un beso en la mejilla, Beso que Damian correspondió con un golpe en el rostro

—¡Auch! —el pelirrojo se retiró de encima del pequeño, se llevó la mano a la boca le había sacado unas gotas de sangre el férrico sabor del líquido rojo le asqueaba— perdona…— se puso de pie enseguida y acomodó sus ropas—no quería… no pretendo… solo perdóname Damian…— no dijo nada mas se retiró a toda prisa dejándolo solo en el Jardin.

—Maldición… —Masculló Damian algo enojado, se puso de pie y acomodó sus ropas, se le habían caído un par de botones en el forcejeo — esta es mi camisa favorita…

Cuando finalmente le dejaron salir ya había caído la tarde, Orm le permitió vestirse eso fue realmente rápido, por supuesto que había reclamado su "trofeo" era una ventaja que el no fuera tan apegado a sus prendas de vestir— que bueno que llegas, comenzaba a preocuparme— comentó una voz que le esperaba desde hacía horas al final del muelle—si soy yo…

—Jason…pensé que ya estabas en casa o algo así ¿me esperaste todo este tiempo?

—No podía hacer mucho más que esperar ¿te hicieron daño?

—No, nada grave es un asunto de… mala suerte—comentó Tim en un tono algo agrio que no le pasó desapercibido al moreno más alto— pero has perdido tiempo por mi culpa ¿Por qué?

—Solo es que me preocupé al ver cómo te llevaban, esos procedimientos no parecen policiales ni tampoco del ejército

—la marina mercante no responde antes la autoridades es una seguridad portuaria contratada por los dueños de las navieras…—explico Tim de manera elocuente

—Se supone que la policía se encarga de vigilar el mar…—Dijo Jason mientras tomaba sus cosas y comenzaba a caminar junto con Tim

—Vigilan las aguas, pero los aduaneros vigilan los barcos y las entradas a la isla si notan algo raro avisan a la policía—Jason hizo una mueca de desacuerdo, algo parecía no cuadrar muy bien en el proceder de esa gente—ya lo veras… por cierto ¿A dónde te diriges?

—Por ahora creo que aun hotel… mientras busco un departamento o algo…—Jason miraba en todas direcciones como buscando algo— si gustas por ahora puedo acompañarte a casa

—No es necesario …—dijo Tim alegremente, no quería causar mas molestias a tan amable extraño, cuando llegaron a la calle como por inercia miró a todos lados y ahí lo encontró —genial… ahí esta mi transporte

—¿Transporte? ¿tu familia sabe que llegaste?

—Me temo que no todos, pero no importa, ya han venido por mi… —Tim tomó sus maletas y comenzó a caminar hacia el auto—ha sido un placer Jason—estrechó la mano del nuevo policía—espero verte pronto… y con bien

—Así será amigo, te lo prometo, solo que la siguiente vez qu eme veas será usando mi uniforme, espero que eso no sea un problema

—Para mí nunca lo es— Tim acabo de subirse al auto mientras miraba como cerraban la puerta para mi familia quien sabe—suspiró con desgano y dirigió su mirada hacia el conductor—hora de ir a casa— el joven Tim ha llegado a su destino…

Notas finales:

Tim está en casa y parece que más de uno lo sabe, pero ¿conocen los motivos de su regreso? ¿el joven Wayne estará mucho tiempo por ahí? El esta consiente de lo que pasa a su alrededor, y sabe que muchas cosas no son esperanzadoras, por momento pareciera querer luchar contra el destino como lo hace el joven Damian, no se deja de nadie, tiene un carácter muy férreo y parece que pretende que más de uno le tengan miedo ¿a qué se referiría con que no todos los Wayne desfallecen por Wally? Pareciera que él sabe algo… ahora que Barth parece haber visto algo interesante, ojala que su marido no se entere, que si no le podría ir mal.

Espero que les haya gustado el fic, que como siempre se hayan pasado un buen rato al leerlo y que se hayan divertido, si les gustó pueden recomendar el fic con confianza y dejar un review si así lo desean todas las opiniones son mas que bienvenidas, por ahora procedo a despedirme deseandoles lo mejor, mucha paz y bien para todos, nos leemos pronto por ahí.

See ya!

Anotaciones:

** el poema se llama DESESPERANZA es de la autora Teresa Ternavasio

 


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