Suspiros
Luego de la pelea con aquel asesino nadie hablo más del tema, tal vez Koro-sensei les dijo que ya no preguntaran, sentía las miradas de mis compañeros en mi cuando los profesores no estaban, pero tampoco se acercaban a hablarme y eso era un tanto tranquilizador para mi, a veces veía mi celular por aburrimiento.
Suspire antes de recostarme en mi pupitre, era la hora de almorzar y muchos se fueron de la sala, yo no traje nada pero tampoco es como si quisiera salir para no encontrarme con nadie.
Ya todo acabo y lo se, ya nadie hablaba conmigo por temor o simplemente me ignoraban, era de suponer. Después de todo yo no fue nada para ninguno de ellos, karma la persona que conocí antes que todos, tal vez hubiera sido diferente pero como creí todo fue una ilusión de parte de mí.
-Fue un tonto-susurré antes de cerrar los ojos, estuve así no se cuánto tiempo pero sentí que me movían haciendo que despertara, mire a mi alrededor viendo a Koro-sensei y la sala vacía, ¿me dormí? Ah ya que.-Lo siento Koro-sensei.
Él simplemente me sonrió.-No te preocupes Nagisa, he sabido que has tenido que vigilar a los alumnos por las noches, no has estado durmiendo mucho ¿cierto?
Suspire antes de asistir-Así es, solo he dormido tres horas nada más, ir y venir por todo Japón en busca de sus casas, es difícil, son muchos objetivos y poco ayuda-volví a suspirar, sabía que había gente detrás de la puerta-Y debo decir que son muy chismosos.
Koro-sensei al escuchar lo último abrió la puerta votando a algunos de los chicos, Chiba, Sugino y Nakamura. Los mire antes de mirar afuera, era la hora de educación física.
Nadie me despertó, suspire nuevamente antes de levantarme.
-¿No deberían estar allá afuera?.-les pregunte mirándolos.
-Nos mandaron a buscarte-dijo enojado Sugino.
-Bueno no era necesario, además Narasuma-sensei sabe lo que soy capaz, él no los llamo.
-Si, bueno tienes razón queríamos hablar contigo.-mire a Nakamura, cerré los ojos antes de mirarlos nuevamente.
-No deberían, no somos amigos, ni compañeros, solo es mi trabajo estar aquí, no es que haya querido venir por ustedes ni por nadie, solo que el gobierno me busco.-les explique.
Ellos estaban sorprendidos por como reaccione, suspire, ¿Cuantas veces llevo suspirando hoy?
Trate de tranquilizarme, negué con la cabeza al ver que iban a volver a hablar.
-No quiero escuchar nada más, además ustedes nunca me consideraron su amigos, simplemente me usaron ¿no? ¿Por lo menos podrían admitir eso?
-Y..yo...nosotros-hablo Chiba, pero él no podía, sonreí leve, un tanto cansado de la situación.
-Solo quisiera saber ¿Quiénes eran las personas que les gusto jugar con mis sentimientos hacia Akabane-san?.-les pregunte, ellos se sorprendieron ante tal pregunta.
-E...espera, ¿Qué quieres decir con eso?.-preguntó Nakamura.
-...Akabane-san hizo una puesta, de que si hacia que me acostara con él ganaría... -apreté los puños-Debía salir conmigo primero, me ilusionó, jugo con mis sentimientos por él... Solo fui un juego para él.-suspire con pesadez.
-Y..yo pensé que él te amaba de verdad.-me dijo Chiba, como lo sabia, no todos sabían de esto o no muchos jugaron conmigo.
-Ese maldito.-vi a Sugino enojarse, tal vez pueda confiar en ellos, sonreí de verdad.
-Nunca pensé que podría caer tan bajo-escuche decir a Sugino.
Los mire unos segundos sin dejar de sonreir.-Gracias por enojarse por mi...tal vez no estaría mal confiar en ustedes tres.
Ellos sonrieron y Nakamura me abrazo, sorprendido le abrace, sentí unas palmaditas en mi cabeza por parte de Chiba, vi a Sugino sonreirme, suspire un poco. Espero no equivocarme con ellos pero algo me dice que ellos si estaran para mi.
Koro-sensei se rió y nosotros nos miramos, reí junto con ellos, mire al cielo. "Se ve muy bien hoy" tal vez tener a alguien conmigo no estaría mal.
Luego de eso nos regañaron por faltar a clases pero nosotros nos miramos cómplices y pedimos perdón. Narasuma-sensei nos miro y supo que algo cambio. Lo vi sonreír mas tranquilo, nosotros cuatro fuimos hacia la sala aun había receso asi que nos juntamos entre nosotros para conversar, muchos nos miraban raro.
Pero no nos importaba, creo que ellos también se sintieron dañados al saber que fui utilizado de esa manera. Chiba no hablo con su compañera de tiras al tomerle del brazo para preguntar lo que pasaba, en realidad ninguno de los tres respondió las preguntas de sus amigos, eso me hizo feliz.
Al terminar las clases los chicos se me acercaron y me invitaron a comer algo, yo asistí, descansar un rato seria bueno.
Nos fuimos caminando mientras reíamos por los chistes que contábamos. Puedo decir que hoy fue divertido.
Al llegar a casa, hable con padre antes de cenar y salir ha hacer una visita a todos como ya acostumbraba, al llegar a la mansión de Karma, fui hacia su habitación y recorrí el área hasta que sentí a alguien detrás de mi, saque mi cuchillo y le apunte a aquella persona.
-¿Que haces aquí Kenshi-san?.-pregunto Karma, este idiota, suspire antes de bajar mi arma.
-Mi trabajo.-le dije antes de darme la vuelta-No deberías salir a estas horas de la noche Akabane-san, podría ser atacado.
-Pero ahora estas tú aquí ¿no?.-sabía que tendría su sonrisa burlona.
-No es gracioso, están siendo buscados, pierdo horas de sueño en ir y volver en cada casa de cada uno.
En ese momento hubo un silencio de parte de él, creo que dije mucho.
-Ahora vuelve y cierra bien tu habitación, hasta que no entres no me iré, es parte de mi trabajo. No te ilusiones.
-Esta bien...pero antes de irme, quiero saber ¿Que sucedió hoy que estuviste con ellos? Si has dejado en claro que no quieres nada con nosotros.
-Eso.-me di vuelta para verlo.-No te incumbe...deberías decir con nuestro trató ¿No lo crees?
Bufo molesto antes de entrar y estuve un rato mas antes de irme a la próxima casa.
Aun faltaba mucho para lo peor, suspire otra vez.
¿Cuantas veces van ya hoy?