Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Only One Night por IxchelNyx

[Reviews - 19]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

Los personajes de The Walking Dead no me pertenecen. Espero que les guste este pequeño capitulo. Espero poder actualizar mañana :D

Pov’s Rick

Estaba feliz por fin estaba lejos, lejos del pasado, por fin podía dormir en paz, había sido transferido a esta ciudad justo cuando más lo necesitaba, justo cuando era tiempo de continuar.

Mi pareja, mi esposa, la madre de mi hijo, la que había jurado amarme por siempre me había engañado, realmente ese no había sido el problema, el problema era que me engañaba con mi mejor amigo, a quien le podía yo confiar por completo mi vida, no podía seguir ahí, así que en cuanto lo supe, pedí mi transferencia a esta ciudad, a un lugar lejos de ellos, donde no verlos más.

Porque la mujer a la que ame, ya no era mi esposa y el que era mi hijo al final nunca lo fue. Acomode un poco mis cosas en mi nuevo apartamento, lo mire un poco vacío y me pareció deprimente, salí a tomar un poco de aire y caminar, sentir el viento me reconfortaba, me hacía sentir un poco más ligero, más libre. Camine unas cuantas cuadras y divise un bar, justo lo que necesitaba en este momento.

Entre, iba por mi quinta cerveza cuando lo vi entrar por esa puerta, no era nada especial, no tenía algo que lo distinguiera de los demás, pero atrajo mi mirada como un imán, no podía dejar de mirarlo, seguí cada uno de sus movimientos, sus amigos reían, el solo sonreía.

Quise acercarme pero la duda me invadió, ya no me sentía tan seguro, sus amigos se dieron cuenta que no podía dejar de verlo, uno de ellos me miro detenidamente, trataba de analizar mis intenciones. Se puso de pie y camino hacia mí.

- ¿Te gusta lo que ves?- me pregunto cuando llego junto a mí y miro hacia su mesa, dirigí mi mirada a sus amigo por un instante, luego lo mire.

- ¿Y que si me gusta?- no quería ser rudo pero aprendí a la mala a estar siempre a la defensiva.

- Tranquilo viejo, es solo que a el también le gustaste- me sonrió y me pareció estúpida esa expresión en su rostro, era tan parecido a aquel idiota que arruino mi vida, apreté los labios, no quería soltar una grosería. Me levante de mi asiento, pague mi consumo y estaba dispuesto a salir de ahí.

- Oye toma un trago con nosotros, siéntate- me ofreció su mesa, mire con cuidado a las 5 personas sentadas ahí, tres chicos y dos chicas, por cierto bastante guapas, los mires detalladamente, a la distancia no parecían tan llamativos, pero ya de cerca eran diferentes. Mi mirada se perdió en él, en esos intensos ojos azules de los cuales no me había percatado, mi respiración se detuvo por un instante, me senté con ellos converse con cada uno y de uno en uno fueron abandonados el lugar hasta que quede solo con él.

Me miro sonrió. – Así que solo quedamos nosotros dos- mire alrededor y era cierto, quedaban muy pocos clientes.

- Si creo que si- no podía de dejar de ver sus labios.

- Ya es bastante tarde, si quieres podemos ir a mi casa- sus palabras me sorprendieron, mire mi reloj eran las 4:15 de la mañana, a esta altura ya no había vuelta atrás- vivo a una cuadra de aquí- me propuso, asentí, apure mi cerveza de un sorbo. Pague la cuenta y salí tras él, llovía tan fuerte afuera, corrimos la cuadra exacta quedamos tan empapados, cuando llegamos a su casa, el agua escurría de nuestro cuerpo mojándolo todo, nos refugiarnos en su apartamento, tomamos el elevador, ninguno hablo.

Llegamos a su piso, entramos a su casa, me extendió una toalla para secarme y café para calentarme. Me quite el abrigo lo puse en la silla evitando mojar la alfombra. Mire con cuidado la habitación, en la pared había una foto de boda y mis ojos corrieron rápido a buscar los de él, me miro sonrió.

- Quédate a dormir, ya es muy tarde a dónde vas a ir- se sacó la chamarra y quito tres de sus botones.

- ¿Eres casado?- no podía dejar de ver su piel.

- Son las 4:30, yo no recuerdo si tengo esposa- sonrió con melancolía- nada va a pasar que no queramos los dos, pero si no quieres no hay problema, puedo abrirte el portón- guardo silencio, me sonrió, y le regrese la sonrisa- te advierto, no vayas a enamorarte, cuando sea de día… tendrás que irte y olvidar que alguna vez estuvimos juntos.

- Shh... no es necesario que sigas yo no te amo y tú a mí tampoco, estoy aquí para pasar el rato, no para nada mas- me acerque a su cuerpo, esa noche robe sus besos, sus caricias, su cuerpo. El éxtasis invadió nuestro cuerpo, y placer nublo nuestro juicio

La luz del día se coló por la ventana despertándonos, me miro y yo lo mire a él, ya no eras los mismos que aquella madrugada. Lo bese una vez más.

- Toma tu ropa y vete- me gire y quise quedarme con él un rato más.

- Es sábado puedo quedarme un rato más- le propuse antes de robarle un beso y colocar mi mano en su pecho.

- No, tienes que irte, ayer te lo advertí, te lo deje bien claro- negué un poco con la cabeza, esta noche había sido una de las mejores que había tenido, pero no había nada que hacer. Me vestí aun mi ropa estaba húmeda, y mi saco seguía mojado.

Salí de ahí, no mire atrás, no quería detenerme, ¿para qué? Llegue a mi departamento, me duche, acomode mi ropa, mis cosas, ahora esta sería mi cuidad, mire por el balcón, contemple la vista, y recordé sus besos, sus caricias, su urgencia.

Sacudí un poco mi cabeza para sacar su recuerdo de mi mente y no pude, no supe en que momento había llegado al mismo bar, con mi mirada busque a mi alrededor, espere encontrarlo una vez más y nada, me pedí una cerveza bien fría para brindar con su silla vacía, mi imaginación divago un poco, imagine que él llegaba y me decía <me moría de ganas de verte otra vez> no puede evitar sonreír, prometí que no me volvería a enamorar, pero un buen polvo era un buen polvo.

No había nombres, no existían antes y ahora no eran necesarios, porque realmente no importaba, ese era el chiste que no exigieran pruebas de lo que había pasado esa noche entre nosotros, y me reí de mí, de mi estupidez, por permitir que solo hubiera sido una noche.

Salí satisfecho del bar, no podía pedir más de lo que había exigido, y seguí mi camino, tenía que avanzar. No existía marcha atrás, el Rick que todos habían conocido una vez había muerto.

Fin Pov’s Rick


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).