Desde que nuestra diosa pidió a su padre que nos devolvieran la vida. Eh tenido demasiados problemas, o algo así.
Casi nunca había cruzado la palabra con algunos de mis compañeros. Solo cuando se anunciaban en la casa de virgo para ir con el patriarca o con algún otro caballero.
Aunque... Con la llegada de los jóvenes de bronce todo se había vuelto casi un caos. No había día en que una flecha cruzara rompiendo algo en mi casa, o algunos ataques de Camus que ahora tenía continuamente con su discípulo que congelaban medio santuario.
Shun estaba a mi cargo, que por suerte no era tan "rebelde" como su hermano.
Recuerdo ese día... Ese pequeño joven se había estado bastante torpe con el entrenamiento de un día a otro.
-Auch! -se sobaba la mejilla mientras se levantaba del suelo-
-Pon más atención, si sigues así podrían matarte en cualquier momento. -Shaka lo miraba con desaprobación- Has estado bastante distraído -suspira-
-Lo siento maestro -se pone de pie y se coloca en posición de pelea- No volverá a pasar. -
Siguieron con el entrenamiento hasta que tocó la hora de descanso. Decidieron tomar un baño, ya era noche.
Shaka se colocó en posición de meditación cerca de una ventana, la luz de la luna llena era suficiente para ver toda la casa.
Shaka soltó un suspiro sin pensarlo.
-M-maestro...
El rubio reconoció la voz de su discípulo.
- ¿Qué sucede? -el peliverde se sienta al lado de el-
-Eh tenido varios problemas... y... -se empezaba a agitar-
-Respira profundo. -Shun obedece- Sigue.
-Pues es que, hace tiempo que siento que mi cara arde siempre que veo a una persona... Pensé que me sentía mal, pero no era dolor. Era algo que me hacía sentir bien. -Shaka escuchaba atentamente lo que le contaba, y sabía lo que sucedía- No me puedo concentrar en los entrenamientos por esa razón.
-... -no dijo nada. Shun pensó que se había enojado con él o que se quedó dormido- No es una enfermedad, es natural
- ¿Natural? ¿L-le sucede a todo el mundo? ... ¿A usted le ha pasado? -preguntó algo nervioso-
El rubio se quedó pensando unos momentos y el silencio inundó toda la casa.
-No podría explicarte ahora, ve a dormir que mañana entrenaremos temprano y Athena nos quiere ver a medio día. -El peliverde se puso de pie y asintió-
-Gracias, con su permiso -se retiró a su habitación-
No tenía palabras para eso. Había estado meditando demasiado cómo para estar manteniendo relaciones con alguien. Soy Virgo... La virgen... Nunca me imaginé con una pareja.
No podía...
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Eran las 6 de la mañana y todo el santuario y los bronces estaban con ropa de entrenamiento sin la armadura en el campo de combate del santuario.
Shion llegó y se dispuso a ver como entrenaban.
Mientras tanto algunos caballeros discutían por quién había entrenado mejor a sus discípulos.
-Es obvio que Hyoga ganará -Decía Milo seguro- Camus y yo lo entrenamos -sonríe triunfador-
-Ikki es muy bueno en las técnicas que le estoy enseñando, aguanta muy bien el entrenamiento y sin duda es el mejor -decía Aioria mirando de a Milo retador-
-No es por nada hermano, pero Seiya muy bueno con el arco y con más cosas -se interpuso entre ambos-
Dohko solo los miraba, no quería que Shiryu se metiera en problemas, Shaka igual.
Shun al ver a sus compañeros se fue directamente con Hyoga.
En ese momento pensé que el discípulo de Camus era el causante de esas distracciones.
Qué estupidez...
Me quedé imaginándome cómo sería si tuviera alguna pareja. Sería una hermosa amazona o acaso... ¿uno de mis compañeros?
Death Mask había encontrado el amor con Aphrodite. Seguido pasaba por mi templo cargando varios ramos de flores y demás regalos y era obvio que eran para Aphrodite.
Milo y Camus se habían vuelto muy cercanos. Tendría uno que estar ciego para no darse cuenta que Milo estaba enamorado de Camus, y este por su mirada fría no sabría explicar.
Estamos en Grecia, la homosexualidad es normal aquí.
Total, es amor, algo que no eh tenido tiempo que experimentar por encerrarme en mi propio mundo y cerrarme ante mis camaradas.
Ser pacífico en cuerpo y espiritualmente...
¿Podría... dejar de ser una persona antisocial por una vez?
Shaka
Debería...
Shaka
En esta nueva vida...
Shaka.
Darme la oportunidad de ser feliz...
¡Shaka!
Una voz sacó de sus pensamientos al rubio.
- ¡Virgo! Estoy llamándote desde hace rato.
-Lo siento su ilustrísima -se arrodilló frente a Shion-
- ¿Está bien si comenzamos con tu discípulo? -
-Si... -Se pone de pie y se coloca a la izquierda del Patriarca-
Shion llamó a Shiryu para que combatiera con el peliverde. Dio las indicaciones y comenzó el combate.
Shaka estaba atento a los movimientos de su alumno.
Se sentó en una roca para observar mejor.
-Buenos días -No se dio cuenta quien se sentó a su lado-
-Mu -volteo a verlo- Buenos días.
El Ariano le sonrió. Y miró el combate.
-Ha mejorado mucho -dijo Mu sin pensarlo-
- ¿De qué hablas? -preguntó confundido-
-Shun... También Shiryu, serán unos excelentes caballeros dorados.
-Si
Mu sacó de su bolsa un pan. Y se lo ofreció a Shaka quién aceptó, pues no habían comido nada y tenía hambre.
-Gracias
-No es nada -sonríe de lado rápidamente- Te...
Es interrumpido
- ¡Mu! -es llamado por el patriarca-
- ¿Si maestro?
-Necesito que vayas a una cosa.
- ¿No quiso decir misión? -lo miraba confundido-
-Como que sí, pero no.
- ¿Cuál es maestro?
-La señorita Athena encargó algunas cosas para la reunión de hoy. Me pidió que tú, Aldebarán y Saga fueran por ellas.
-Ellos ya están enterados?
-Sí, una vez acabado todo esto se irán inmediatamente por las cosas. Para que lleguen temprano y queden presentables.
-Si. -cerró la conversación y se volvió a sentar con Shaka-
Esta vez no hablaron. Hasta que acabó el combate con todos los discípulos un "Hasta luego" fue lo único que se dirigieron.
Las horas pasaron rápidamente. Aldebarán, Saga y Mu llevaban las cosas al salón del patriarca.
Cuando iban pasando Mu se quedó al lado de mí. Se veía cansado.
-Disculpa mi presencia, eh estado descuidándome un poco. -respiraba con dificultad- No creo poder llegar a Aries.
- ¿Por qué no te teletrans... -No alcanzó a decir más. El Ariano cayó desmayado-
Shaka lo llevó a su habitación, no entraba muy seguido, pero había una cama que gracias a unas sirvientas se encontraba limpia.
Lo recostó, este estaba sudando. Colocó su mano en la cabeza de su compañero y se encontraba caliente, pudo haber sido el sol que a esa hora pegó muy fuerte.
Recordó lo que le dijo Shun.
"Mi cara arde siempre que veo a esa persona"
Este caso le fue diferente. Shaka lo miró unos segundos y pensó llamar al Patriarca, pero descartó esa opción al ver que andaba recuperándose. Solo que ahora dormía profundamente.
Quería intentar algo nuevo dejando de lado todo el asunto de santo caballero.
Acortó la distancia entre sus rostros y juntó sus frentes rozando sus labios hasta unirlos en un suave beso.
Nunca me imaginé que los labios de Mu eran tan suaves.
Nunca sintió que su corazón le latiera rápidamente, pero le hacía sentir bien.
Fue un experimento, quería más.
Se recostó al lado de su compañero y estando más alerta si despertaba solo tomó su brazo y lo abrazó.
Pasaron horas considerables.
Hasta que el Ariano despertó poco a poco.
Reconoció que no estaba en su casa y abrió más los ojos encontrándose con la cabellera rubia que era solamente de Shaka.
Le llegó una rara sensación y se apartó lentamente. Lo miró y se retiró de su templo.
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Aún faltaba una hora para la reunión con Athena.
Shaka despertó y se alistó para ir.
Recordó lo que paso. Sin duda lo volvería a repetir.
Sonreía para si mismo tratando de controlarse.
Ya estaba en camino y encontró al Ariano quien estaba en la entrada de la casa de Libra.
-Shaka... -lo miró de lejos, aún estaba bastante lejos de él- No creas que no me di cuenta -sonrió-
Decidió esperarlo. Ya todos estaban con Athena solo faltaban ellos dos.
Una vez se tuvieron enfrente. Mu lo miro, pero al otro pareció no importarle y siguió su camino.
Eso lo molestó mucho y lo tomó de la muñeca haciendo que lo mirara.
-Mu, Tenemos que estar arriba, estamos retrasados.
-Te vi -lo miró-
En ese instante su corazón se paralizó, pero pensó que era de otra cosa.
- ¿De qué hablas?
-Te sentí... besarme.... -esto último lo dijo con dificultad-
-Que... No... -trató de ocultarlo- Te estás equivocando -trató de irse, pero no lo logró-
-No es tarde para hablar de eso ¿sabes? -lo tomó de ambas manos y fue arrinconándolo a la primera pared que encontró, el rubio solo retrocedía y no era buena opción hacer un escándalo-
-No creerás lo mucho que esperé esto -hunde su cara en el cuello de Shaka, este acto fue como si encendiera algo en él, pero no era momento para eso-
-No es...
-No me importa -juntó sus labios con los de Shaka, el rubio lo brazo por la cintura y el otro se abrazó de su cuello, tan solo ese acto incitó a ambos a seguirse tocando.
Seguía arrinconando a Shaka hasta que se separó abruptamente de Mu.
¡Recordó la reunión debía ser con ATHENA! Si por el fuera ya hubieran continuado, pero. NO
-No Mu -Decía el rubio retirándose del alcancé del peligrosa-
-... -no lo soltó y se aferró más a él.
Finalmente tenía la oportunidad de estar con alguien. Mi compañero de armas Mu de Aries...
¿Sería lo correcto?
¿Estoy siendo usado?
Qué importa ya...
Él me había elegido.
No pude pensar en más.
Cuando me di cuenta ya me encontraba besándolo y metiendo mi mano debajo de sus prendas.
Sea experimento o no.
Athena o el patriarca se molestarán, No importa.
Estábamos haciéndonos uno.
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