Caminaba con cansancio, volteaba a todos lados para ver si podía encontrar su vieja casa, no se preocupa si se daban cuenta que él no se encontraba en casa de los Dursley, ya que Dumbledore dio órdenes de que ningún miembro de la orden podría ir a verlo por motivos de seguridad, lo cual ocasiono el descontento de los gemelos Weasley que le escribían cada que podían para preguntarle cómo se encontraba, en cambio Ron le escribía ocasionalmente lo cual lo desconcertó un poco, pero en una carta los gemelos le explicaron que Hermione estaba encima de él para que acatara las ordenes y cuando ella descubría alguna carta la confiscaba para que no pudiera ser enviada, le deprimo un poco por el comportamiento de su amiga, también se enteró que la señora Weasley le confiscaba las cartas a Sirius y a Remus, Hermione en una carta le explico que era “Por su bien”, claro que esto no le ayudo a mejorarse, claro que no estaba tan mal porque los Dursley ganaron un viaje a América y estarían fuera por todas las vacaciones.
Un dia le llego una carta por medio de un cuervo con un sello extraño, al principio pensó que era alguna carta de Sirius o los gemelos, la abrió con mucha prisa solo para ver que no era de ninguno de ellos si no de alguien más que lo citaba ese día en el valle de Godric para revelarle la verdad.
Y se encontraba caminando hasta que al pasar por un parque en donde aparecieron luces de color azul, el trato de ignorarlas pero su curiosidad le gano y termino por seguirlas. Las luces emitían varios sonidos que él no podía entender, trato de escucharlos claramente pero solo entendió algunas frases como "mentira" "familia" "malo", los siguió hasta la casa que era de sus difuntos padres, pero las luces no desaparecían hasta llegar al recibidor.
-Así que tú me citaste-Harry se volteo con varita en mano pero lo que vio lo dejo helado, el que estaba enfrente de él no era Voldemort, era un hombre alto, con cabello negro y piel clara, sus ojos seguían siendo de color rojo.
-No sé de qué me hablas-Harry no bajo su varita en ningún momento por lo que el Lord sonrió-Lárgate si no quieres que te mate
-Quiero verte intentarlo-El Lord alzo también su varita, pero antes de que se atacaran sus varitas salieron volando y cada una termino con otras personas.
Las personas que estaban con ellos era un joven alto de piel clara, cabello negro un poco largo y ojos café, la otra persona era una joven de estatura mediana de piel pálida, cabello negro ondulado y ojos color rojos.
-Damon, Alina-gruño Voldemort, ellos solo se acercaron a ellos.
-Me alegra que vinieran-Alina sonreía.
-déjate de juegos-Dijo el Lord con su tono de voz frio.
-Escuchen-dijo mientras lanzaba y atrapaba la varita de Harry-Ustedes no deben de atacarse, ustedes son víctimas
-¿Victimas?-dijo Harry con un tono de burla-¿Victimas de qué?
Alina no respondió, simplemente trono los dedos y el piso desapareció, Harry comenzó a ver alarmado y noto que Voldemort estaba igual que él, en un momento comenzaron a pasar una serie de imágenes donde Tom y James era los protagonistas, en ese momento algo hizo “clic” en la mente de Tom y una serie de recuerdos llegaron a él, estaba tan absorbido por esos recuerdo que no noto cuando cayeron en una especie de lago; Harry comenzó a patalear, ya que él nunca aprendió a nadar, cuando el Lord reacciono tomo a Harry de la cintura para tratar de subirlo pero de pronto volvieron a caer, ambos cayeron en el piso de la estación King’s Cross, se levantaron y pudieron notar que era el ingreso a Hogwarts, Harry estaba desconcertado ya que apenas era 15 de Julio, volteo a ver a Tom y él estaba igual que él.
Harry giro y pudo ver a la señora Wesley, se iba a acercar a saludarla cuando vio junto a ella a Ron y a los gemelos como la primera vez que los vio, Tom al igual que él vio aquella escena, le hizo una seña a Harry y ambos comenzaron a caminar, ninguno intento hacer conversación con el otro; siguieron caminando hasta que vieron algo que no esperaban, ahí se encontraba James Potter abrazando fuertemente a su hijo y junto de él estaba Tom que tenía la mano sobre el hombro de James.
-James deja que se vaya-Dijo Tom lo más calmado posible-Lo volveremos a ver en Navidad, sin contar que Damon y Alina estarán con el-
James se separó de Harry y lo vio, él sabía que su hijo esperaba ansioso entrar a Hogwarts, así que suspiro y le dijo.
-Cualquier problema recure a Alina o a Damon-le revolvió el cabello-Escríbenos cada fin de semana, no importa a cual casa quedes pero si quedas con los Snape recuerda mantenerte alejado cuando peleen
-Entiendo-Abrazo a los dos al mismo tiempo-Los voy a extrañar
Los ojos de James se cristalizaron, cuando Harry se separó comenzó a correr a dirección de los gemelos Snape, los cuales lo recibieron abrazándolo y diciéndole que debían de quedar juntos, se instaló una sonrisa en James.
-¡Espero que quedes en Gryffindor!-Tanto Tom como Harry soltaron una risita.
-¡Nos vemos en Navidad!-Junto a los gemelos entro al tren.
“Sabes que regresara ¿cierto?”-Los brazos de Tom envolvieron la cintura de James.
-Lo sé-se giró y beso los labios de su marido.
Tom y Harry sintieron como los jalaban a la superficie, todo comenzó a desaparecer y lo primero que vieron fue a Alina con una sonrisita traviesa y a su lado Damon con un rostro inexpresivo.
-No lo entiendo-fue lo primero que dijo Harry-Ellos no estaban conmigo en la estación, yo estaba solo con la familia Wesley
-Eso fue en esta falsa realidad-explico Damon-En la real ese es tu más preciado recuerdo
-¿Quién fue el que cambio el tiempo?-dijo Tom, aunque él no lo expresara estaba molesto, todos sus recuerdos habían vuelto a él y le molesto que cuando el por fin pudo haber tenido una familia se la habían arrebatado.
-Albus Dumbledore-