“Por este medio se le comunica al Capitán de las fuerzas armadas Steven Grant Rogers, consolidar los futuros negocios y tratados para el futuro de la defensa nacional, no hay nada más importante que estar preparados para cualquier amenaza y así estar confiados de la seguridad de los ciudadanos.
Como ya estará enterado Industrias Stark tiene un nuevo director de frente siendo el heredero de las mismas, así que todos y cada uno de los contratos deberán de estar firmados y en orden, así como recibir toda la información necesaria para el entrenamiento de los soldados con el nuevo armamento, confiamos en su capacidad.”
Termino de leer esa carta, había pasado tiempo, realmente todo había quedado atrás, o al menos el así lo había dejado claro para sí mismo, pero ahora todos esos recuerdos lo enterraron como si de una monstruosa avalancha se tratara, que postura debía de tomar, como debía reaccionar, aquel formidable e inquebrantable capitán se encontraba sumido en una encrucijada que no sería sencilla en lo más mínimo, se levantó de su escritorio personal y salió de su oficina para ir a agendar una cita a Industrias Stark, mientras más rápido fuera todo, sería mejor, o eso esperaba
-Buenos días, habla el Capitán Steven Rogers, por parte de una orden presidencial, debo reunirme con el director de Industrias Stark, espero y sea lo más pronto posible- Hablo por el teléfono privado, irrastreable y totalmente confidencial, quien le había respondido automáticamente redirigió la llamada a la persona de más alto mando posible, el director se encontraba en una reunión importante y después de esta tenía otros asuntos pendientes, por lo que fue agendada su cita con la mano derecha del mismo
-Estimado capitán, el Director tiene la agenda ocupada, pero fue programado para tener una audiencia con la asistente del mismo, con ella podrá discutir todo con más rapidez, la reunión será mañana en las instalaciones de Industrias Stark, aquí recibirá las instrucciones que sean necesarias- tal como si se tratara de un robot colgó, sin algún estilo de despedida o parecidos, por un momento sintió su alma irse, pero ahora que no lo vería directamente pudo respirar
Al día siguiente Pepper llegaba a la ciudad, estaba contenta y emocionada, pero al entrar a Industrias Stark fue detenida rápidamente por un asistente indicándole que tenía una reunión importante con un capitán de las fuerzas armadas programada, aunque no estaba al tanto de eso ya estaba acostumbrada, sería lo más rápida posible para buscar a ese jodido infeliz que la abandono, fue hasta una de las mejores salas de reunión y allí espero pacientemente hasta que aquel personaje llegara.
Steve por su parte con una puntualidad casi impecable llegando a la hora perfecta en la que fue citado, camino por la entrada principal y fue hasta la recepción en la cual indico el motivo de su visita, y fue llevado hasta una habitación especial en la que todos y cada uno de los que ingresarían dentro de complejo, debían de pasar por un reconocimiento de ADN, más aun si se trataban de algún alto mando nacional o internacional, al pasar con éxito aquella prueba fue guiado por un asistente hasta la sala de reuniones, abrió las puertas y pudo ver una enorme mesa con sillas de lujo, todo estaba decorado a la perfección, y pudo ver que una de estas estaba girada al revés, quizá allí estaría la persona que estaba buscando
-Muy buenos días, disculpe mi atrevimiento pero no sabía que ya se encontraría en la sala de reunión, soy el capitán Steven Grant Rogers yo…-
-Rogers…Steven…STEVE!!!!- claramente se escuchó un deje de sorpresa e incredulidad del otro lado de la silla, al girarse dejo a la vista del rubio, otra cabellera rubia larga, una figura femenina totalmente hermosa y aunque por un momento no pudo reconocerla al 100% al llegar a su rostro y ver esos hermosos verde agua marina una sorpresa enorme inundo su corazón, en verdad todo estos hechos parecían generados como un efecto domino, aunque esta vez era diferente, verla a ella era una alegría inimaginable
-Pepper? En realidad eres tú?- pregunto algo aturdido pero rápidamente pinto una sonrisa en su rostro para acercarse a la chica, al ver que aquel alto rubio se le acercaba se levantó de la silla para ser recibida por un enorme abrazo, aun si habían pasado años, al sentir ese abrazo era como si se remontaran de nuevo a la universidad
-No lo puedo creer, primero vine por…cierto, dime que por favor todo está bien, te encuentras aquí, me dieron datos pero realmente no entendí nada, pero tu estando aquí, esto debe de ser más que perfecto!!- estaba emocionada, se separó del capitán pero al momento de su separación pudo ver en su dedo anular un hermoso anillo de compromiso por lo que comenzó a caer en cuenta más y más –Se…se comprometieron, EN REALIDAD SE COPRIMETIERON Y YO NO SUPE NADA, maldito infeliz me las pagara caro- seguía sonriendo, como si todo comenzara a encajar en su fantástico rompecabezas imaginario
-Yo, en realidad, estoy aquí porque tengo ordenes de carácter nacional sobre el nuevo armamento que será creado, por lo que debo de tener todo el papeleo y cosas de burocracia en orden, además de saber de qué se trata todo para el entrenamiento de los actuales y futuros soldados, respecto al anillo sí, estoy comprometido, ella me hace muy feliz- como si quisiera auto engañarse, eso último que dijo le había calado hasta la medula, era idiota, pero si así lo fuese porque le importaría tanto, al fin ya estaba al lado de una persona que le correspondía, porque preocuparse o porque inmutarse al menos
-Ella…- Pepper repitió con un tono sombrío, el brillar de sus ojos que parecían esmeraldas ahora se habían convertido en cobras color jade a punto de atacar a su presa –no voy a preguntar más yo…- antes de terminar de hablar pudo ver un destellar colgando en el pecho de quien tenía frente a ella, era clara la diferencia de estaturas, y al bajar su mirada colgando de su nuca se encontraban las placas que siempre llevaba con él en la universidad, placas que ella recordaba a la perfección Tony se había llevado cuando había desaparecido y ahora las tenía el de regreso, Tony ya lo sabía, ya sabía lo que estaba o lo que había pasado y él se aparecía aquí por unos jodidos asuntos de burocracia, regreso su mirada enfurecida directamente a los azules ojos de Steve quien comenzaron a denotar vergüenza y sin más con una furia impregnada desde lo más profundo de su ser le dio una bofetada al capitán, fue tan fuerte que pudo hacer eco en la propia habitación, mientras que su cólera y adrenalina corrían por sus venas tomo los archivos que llevaba con ella y camino hasta la salida principal no sin antes detenerse en seco –La próxima vez, por el honor a tu uniforme, no vuelvas a poner un pie en estas instalaciones, si requieres una maldita firma, yo me encargar personal mente con el ministro de defensa nacional, que traiga su malnacido y anciano trasero aquí y el mismo discuta de lo que sea necesario, mientras tanto hasta el maldito favor de no volver a aparecerte frente a mi- y con una elegancia y porte único salió del lugar, debía de buscar a Tony, debía de encontrarlo a toda cosa, ya no eran críos, y ella sabía que Tony había pasado por la metamorfosis que necesitaba, ahora solo debía asegurarse de que se encontraba bien
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Habían pasado ya 3 malditos días desde que había regresado a Estados Unidos, definitivamente su regreso había sido peor que la vez que decidió irse por auto protección, ahora esa misma auto protección se habían roto, dejando a su alrededor una desolación única, y en su pecho solo estaba un tic toc, tal como si un reloj automático, un mecanismo de cuerda se encontrara en el…
---Flashback---
-Señor Stark, está el plan de transporte y rutas disponibles para la misma, agenda lista y notificada hacia Industrias Stark sobre su próxima visita para su primer reunión oficial, la invitación que acabo de recibir es un festejo del compromiso de uno de un capitán, también se pretende usar la fiesta para mejorar negociaciones y tratados políticos como recomendación asistir ya que al ser el fabricante principal del armamento del país es requerida su presencia- termino de hablar el IA mientras aquel moreno entraba en un automóvil de lujo para ir a las oficinas de Industrias Stark
-Confirma mi asistencia, y por favor localiza a Pepper Pots, no me interesa en donde este, si ya está muerta consígueme un tablero ouija para poder hablar con ella, confió en ti Jarvis, es todo- sentencio mientras aceleraba usando las rutas que el IA le había proporcionado, ahora debía de prepararse para una fiesta de gala con trasfondo político
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La noche cayo serena en la ciudad, vistiendo un smoking que había sido hecho especialmente para él, de color negro con brillos azulados, puso un pie fuera de su auto y mientras que caminaba por la amplia alfombra roja, en su muñeca se encontraban destellando las placas militares que lo habían acompañado durante mucho tiempo en su soledad, como un recordatorio, la promesa que no había roto después años de casi perder la cordura, era su ancla a la realidad.
Entro y fue recibido por varias figuras importantes de la nación, secretarios de seguridad, ministros, había una concentración de importantes personalidades allí, y aunque el tema principal de la fiesta era el celebrar un compromiso, quizá solo era más que una excusa para tener a todos estos peces gordos aquí, era buena estrategia, debía de admitirlo, fue llamado hasta el podio para poder dar un discurso sobre el futuro de la defensa nacional y para felicitar a lo que era la pareja militar del año
-Me es un placer el estar aquí presente y que me permitiesen estar reunido ante tantas personas de un cargo tan importante, no tanto como el mío está claro, pero no vamos a desacreditar a nadie por ello, después de que mi padre falleciera…-
Podía escuchar claramente la voz que sonaba en los parlantes, se encontraba en ese momento hablando con un vice-ministro de España al lado de su esposa agradeciéndole el asistir a aquella hermosa fiesta cuando todo se volvió estática, solo podía escuchar esa voz hablar y dar ese discurso, mientras su fuerte cuerpo lucía un traje militar color café obscuro insignias que había ganado en su camino militar, se disculpó con aquel hombre español mientras comenzó a caminar entre la multitud, se encontraba lejos del escenario donde estaba el podio y aquella persona que seguía hablando.
-…Siendo el nuevo presidente del legado que mi padre dejo, y agradeciendo a la magnífica compañía que tenemos esta noche, no hay que olvidar el motivo principal de la velada, brindemos por el…- no termino de decir ya que desconocía el nombre del capitán quien celebraba su compromiso, después de tantas reuniones que había tenido en su larga vida dio un vistazo rápido a las notas que le dieron antes de dar el discurso y leyó el nombre de forma fugaz y con una copa de vino tinto del más fino la alzo frente a todos y de forma automática continuo -…Brindemos por el compromiso del Capitán Steven Grant Rogers-
Termino de decir para dar un profundo trago a la hermosa copa de cristal mientras todos hicieron lo mismo para después aplaudir, mientras que entre los aplausos el sonido se hacía más y más lejano hasta que en su mente se plasmó la oración “Brindemos por el compromiso del Capitan Steven Grant Rogers”
Sin nada más que decir se bajó del podio con una mueca relajada y normal, aún tenía la copa en su mano con un poco de vino mientras caminaba por el pasillo principal, había muchos de los invitados que querían conversar con él pero amablemente les decía que debía de abandonar la celebración y continuaran disfrutando.
-Quien es el…QUIEN ES LA PERSONA QUE ACABA DE DAR ESE DISCURSO!!!!??- Rugió el anfitrión de la fiesta mientras que los que se encontraban a su alrededor voltearon a verlo de forma asombrada, nadie tenía el valor de responderle hasta que un ministro de economía le indico
“Es Anthony Stark, el presidente de Industrias Stark, es una pena que se marchara tan pronto”
Al escuchar eso un impulso de fuerza titánica emano de su cuerpo para salir corriendo hacia la puerta principal y encontrarse con aquel hombre esperando, deseando, rogándole a todos los dioses que no fuera cierto, que él no regresara, que no fuera en este momento de su vida, al llegar a las enormes puertas del lugar encontró la copa de vino tirada y a un lado las placas de reconocimiento militar, se veían deterioradas por el paso del tiempo pero aun así brillaban como si fuesen hechas de polvo estelar, parecía que habían sido bañadas en la plata más pura del mundo, y con ellas una cadena de oro así irrompible, pareció que había sido mandada hacer especialmente para que ninguna fuerza en el mundo pudiera romperla, después de levantar ambos objetos pudo ver por la reja al final del hermoso jardín que adornaba la entrada de ese lujoso salón un auto alejarse…
---Flashback---
-Yo me convertí en alguien inquebrantable, en alguien que después de tantos jodidos y malditos tragos amargos, no voy a dejar que nadie me pisotee, nadie en su jodida y malnacida existencia le será permitido si quiera burlarse de mi ahora, aun si es la única persona que ame, no llore al saber que mi padre había muerto por un maldito accidente que está más que claro fue un asesinato y estoy dispuesto a averiguar todo y hacer que el hijo de puta culpable de eso desee estar muerto antes de si quiera comenzar con lo que mi imaginación me permita hacerle, menos voy a llorar por alguien a quien no le importo dejar un sentimiento verdadero y seguir su camino aun sin saber las consecuencias…
…Ahora soy imparable, y ni mil perdones ni lágrimas de sangre conseguirán mi perdón- se dijo todo eso mientras por más que quisiera disfrazarlo, un nudo en la garganta y un corazón pisoteado eran bañados con la sensación de un delicioso vino blanco mientras observaba por el hermoso ventanal de su pent-house.