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El perdón por dark kirito

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Notas del fanfic:

Magi pertenece a Shinobu Ohtaka-sama.Escrito en el móvil, errores son sin querer.


Muchas gracias a Yayoi y todos los que leen :)

Notas del capitulo:

Magi pertenece a Shinobu Ohtaka-sama.Escrito en el móvil, errores son sin querer.


Muchas gracias a Yayoi y todos los que leen :)

En un pequeño pueblo  casi desconocido para el resto del mundo se cuenta la leyenda de Sinbad: el aventurero domador de hombres y conquistador de naciones. Un hombre tan cruel con sus enemigos y bondadoso con sus subordinados que todos se cuestionaban su verdadera naturaleza. Se hizo de poder y territorio rápidamente impresionando a todos por igual. Edificó su fortaleza sobre un gran cerro para que nadie pudiese acercarse con facilidad. Días y noches sin importar la hora siempre estaba al pendiente de todo cuanto ocurría en el pequeño pueblo situado a los pies de su enorme palacio. El vigilar y verlar tanto por el bien del prójimo puede hacerte perder la razón; fue justo lo que ocurrió a ese hombre. Provocó que se obsesionara e incluso puso normas absurdas que solo tenían sentido para el. Llegó al grado que incluso se consideró a si mismo un dios. Solo el tiene la razón, es el único con capacidad para leer el flujo de la vida y el destino del universo. Se ha vuelto completamente loco. Aún así las personas más cercanas y que le consideraban parte de su familia no le abandonaron. No lo hicieron cuando el mismo pueblo les calificó de traidores, ni cuando les consideraron dictadores, mucho menos cuando los apodaron monstruos. Menos aún cuando fueron rodeados por los aldeanos que cegaron sus vidas de la manera más tortuosa y lenta posible. Sinbad vio morir a cada uno de los seres que amó y solo en ese instante se dio cuenta de lo mucho que se equivocó. Implorar perdón no servía de nada, tampoco estaba dispuesto a hacerlo. El lo merecía, pero no Masrur, Jafar, Hinahoho, Drakon, Sharkan, Yamuraiha ni Pisti que lo único que hicieron fue tratar de convencerle una y otra vez que de que estaba en un error. Sentía su piel arder y escocer, perdía el sentido y poco a poco comenzaban a mostrarse solo los huesos en su cuerpo. Sus ojos brillaron con furia cuando un hacha se elevó para descender en dirección a su cuello.


-¡No los perdonaré jamás!


Emitió con voz de ultratumba, de tal manera que heló la sangre de todos los presentes. Mismo líquido que cubría a un pueblo lleno de asesinos.


~_~_~_~_~_~_~_~_~_~


Durante décadas la historia fue olvidada y tomada como poco menos que un mito. El palacio cayó en el abandono pues a pesar de ser enorme y estar bellamente decorado estaba considerado como maldito. Nadie en su sano juicio tomaría siquiera una cuchara. De ese fatídico día al presente han pasado exactamente cien años, y un joven que admira la leyenda de Sinbad se ha decidido a visitar el castillo, su nombre Alibaba Saluja. Un chico rubio de hermosos y sinceros ojos dorados, ha ido en compañía de su mejor amigo y hermano Kassim.


-No creo que sea conveniente, ¿qué harás si la leyenda resulta ser real?


-Eso lo haría más interesante-sonríe radiante.


-No me culpes si las cosas salen mal.


-No lo harán, no seas negativo.


El de cabello rojizo suspiró y se adentraron al sitio. Caminaron sigilosamente iluminandose con unas antorchas, el viento que lograba colarse producía sonidos extraños y ciertamente perturbadores que atemorizaban al rubio que se aferraba con fuerza al ropaje ajeno.


-Si te ibas a asustar desde un principio debiste evitarlo.


-Pero ya sabes que soy un gran admirador de...


-No lo repitas, a veces me pregunto como es posible que puedas hablar de el durante horas y...


Se giró al sentir un peso menos, seguro su amigo se había desmayado del susto. Se giró lentamente...


-¡Alibaba!!


El rubio era sujetado del cuello por una mano huesuda, mientras otra cubría su boca para evitar que gritase, las lágrimas se hicieron presentes víctimas del más puro terror. Kassim empuñó un palo que llevaba por si las dudas y golpeó con el a la entidad que dejó caer a su presa perdiéndose en la oscuridad. El mayor fue a prestarle auxilio, pero nada pudo hacer, su hermano había dejado este mundo de manera inexplicable pues de algo está seguro y es que el susto no le mató.


~_~_~_~_~_~_~_~_~_~_


El castillo permaneció cerrado e incluso se colocaron advertencias a los alrededores. Todos creyeron la historia de Kassim, pues volvió con el cuerpo de su amigo, prueba irrefutable de ello. Algunas semanas después el peli rojizo perdió la razón.


Con el pasar del tiempo los habitantes  notaron con horror que no podían escapar,  estaban atrapados. Sin embargo los visitantes de otros lugares podían entrar y salir sin problema alguno lo que provocó que el sitio se convirtiera en un lugar turístico para morbosos. A pesar de ser libres para retirarse en el momento en que lo quisieran eran también víctimas del ente que moraba el palacio. Todos los días desaparecía alguien. Hasta que de manera valiente un chico peli rosa decidió ir a investigar, a el se sumaron sus hermanos Kouen y Koumei. Los dos mayores volvieron con vida, no así el valiente joven que solo quería detener la masacre. Sin embargo su sacrificio no fue en vano pues las muertes se detuvieron un año entero aunque nadie se explicaba la razón. Luego de ese día las desapariciones continuaron a diario. Por más que buscaron métodos distintos para detenerle no pudieron hacerlo. Llegaban a una única conclusión. Cada vez que un joven se acercaba al sitio maldito por voluntad propia y desaparecía los asesinatos se detenían todo un año. Así pasaron a la siguiente fase: el sacrificio.


El primero en ofrecerse fue un apuesto joven de nombre Judal que decidió cambiar lugar con su novio Hakuryuu pues a este le habían amenazado con enviar a su hermana, no estaban seguros de que las mujeres sirvieran de igual manera pues nunca ha desaparecido una pero era su oportunidad para experimentar.


El oji celeste fue retenido por sus hermanos mayores y solo pudo mirar impotente como la única persona que amó le sonreía de manera traviesa como si fuera una de sus tantas bromas. Al menos funcionó, pero era algo que no hizo feliz al novio que aún vivía. Reclamó durante meses el hecho de que se llevara a cabo semejante barbaridad pero sus palabras se toparon con oídos sordos. Quería detener los sacrificios pero al no encontrar apoyo el próximo año visito el palacio por su cuenta. Sabía que estaba siendo injusto con Judal que se sacrifico por el, pero le extrañaba demasiado; tampoco volvió.


Algunas semanas antes de que se cumpliera un año del fallecimiento de Hakuryuu, llegó al pueblo un joven historiador, y vaya que lo era con tan solo quince años. Viajó desde una cuidad muy lejana interesado en la leyenda pero de manera diferente al resto de personas que ahí habitan. El no es movido por el miedo o la curiosidad, lo hace algo más importante.


-Buenos días onesan-saluda amablemente a una joven.


-B-buenos días, ¿Estas interesado en Sinbad?


-Si.


-No hay mucho que pueda contarte salvo por lo que se dice que es un espíritu maldito que...


El peli azul negó con la cabeza.


-No es esa historia lo que deseo saber. Me interesa más la vida de ojisan.


-Ah...pues...creo que nadie la sabe.


-Ya veo, muchas gracias.


-¡Pero cerca de ese lugar hay una cueva donde se enterraron algunos documentos concernientes a él! Quizá si vas y los encuentras puedas descubrir algo.


-¡Muchas gracias!


No hay tiempo que perder. Caminó o más bien corrió hasta encontrar el sitio, y luego de terminar lleno de lodo y agotado por todo el trabajo físico que le supuso encontrar los documentos dio con ellos y se puso a leer hasta terminarlos. No durmió dos días enteros y cuando al fin acabó la labor no pudo contener las lágrimas.


-Nadie logra entender tu dolor ojisan.


~_~_~_~_~_~_~_~_~_~


La fecha del siguiente sacrificio llegó.


Se convocó una asamblea con todos los moradores del pueblo.


-¿Quién se ofrece esta vez?


Naturalmente nadie lo hizo. Todos tienen miedo de morir.


-¡¿Y por qué siempre somos los jóvenes? ¿Por qué no se ofrece alguien de edad avanzada?!-gritó uno de ellos.


-No sabemos si funcione.


-Al igual que no sabían si lo harían las mujeres, pero estaban dispuestos a ofrecer a Hakuei, ¡¿Qué lo hace diferente?!


Comenzaron a discutir entre ellos sin llegar a un acuerdo.


-Si me lo permiten quisiera ir yo-se acercaba al tumulto el peli azul.


-¿Estas seguro? Tu no perteneces al pueblo. ¿Por qué tomarías tal responsabilidad?


-Porque quiero ayudar-sonrió.


Su buena actitud les hizo sentir basura por no oponerse al sacrificio de tan buen muchacho, pero el deseo de conservar sus vidas pudo más en ellos.


Y de esa manera le dejaron marchar. Aladdin caminaba lentamente por los corredores del palacio, miraba todo con tristeza. Podía hacerlo a la perfección porque aún no era tan tarde. Quizo hacerlo de esta manera para investigar un poco y porque en realidad nadie esta seguro de que las ofrendas solo puedan hacerse en la noche aunque todas hayan sido en ese horario. Se quedó de pie ante un enorme y viejo cuadro que mostraba la figura de un apuesto hombre de sonrisa radiante. Debajo de este se leía:


-Sinbad.


La mirada del joven se oscureció por completo, pero estaba consiente. Se debía más bien a que algo le obstruye. Luego de pasar las manos frente a el, pudo observar lo que nadie ha visto a plena luz del día. Un cuerpo que no tiene descripción, es parte esqueleto y parte...¿humano? ¿Lo que cuelga de el puede ser considerado carne? No tuvo tiempo de reaccionar porque pronto un par de manos huesudas comenzaron a asfixiarlo provocandole daño. No pudo contener un gemido de dolor y las lágrimas comenzaron a salir de sus ojos.


-Si claro, muy amable vas y te ofreces y ahora seguro vas a suplicar por tu miserable vida.


Con la poca fuerza que le quedaba Aladdin alzó la mano hasta tocar la mejilla o la porción de una sustancia desagradable que en tiempos mejores podría ser piel. ¿Cómo aún tenía después de más de cien años? Quizá el rencor le conservaba hasta cierto punto, pero es evidente que su condición comienza a decaer...a menos que...los demás jóvenes a excepción de Alibaba no volvieron es posible que sea...¡¿de ellos?! Casi sintió a su corazón detenerse, pero luego entendió que ha pasado un año desde el último sacrificio, la piel no dura tanto. Tuvo la impresion de que Sinbad tembló ante el roce.


-Esta bien-dijo con esfuerzo-si asesinarme alivia un poco tu dolor no tengo problemas, pero por favor...deja de llorar.


-¿Yo...estoy llorando?


Luego de ello el menor se desmayó.


~_~_~_~_~_~_~_~_~_~_


El antes peli morado miraba atónito al chico inconsciente en sus brazos, le recostó en el piso y se sentó a su lado. Algo en el le impidió el asesinarle como a todos los demás. Un sentimiento de calidez se hizo presente en su pecho luego de tantos años, ese pequeño le agrada. Hace uso de su magia y recobra la apariencia de cuando aún vivía. Después de morir es algo que no le preocupaba pero ahora no quiere que ese muchacho le mire con tan terrible apariencia. Es algo que con ayuda de la energía que le confiere el rencor puede hacer sin problemas.


El peli azul abre los ojos de a poco y toca su adolorida garganta.


-¿Estas bien?-el oji miel.


-Si.-sonrió en el suelo sin poder levantarse.


-Lo siento.


-No pasa nada.


-¿Por qué piensas que estoy llorando?


-Te vez triste.


-No es verdad.


-No es mi intención molestarte ojisan, solo quiero que seas feliz.


-Ni siquiera me conoces.


-Claro que si, eres Sinbad-ojisan, yo soy Aladdin.


-Eres demasiado confiado.


-¿Es algo malo?


-Ya no recuerdo que lo es y que no. No estoy del mejor humor posible en cuanto te sientas mejor quiero que te vayas.


-¿Puedo volver?


-No garantizo que la próxima vez puedas huir con vida.


~_~_~_~_~_~_~_~_~_~_


Aladdin bajó al pueblo una vez recuperó la fuerza a la mañana siguiente. Todos quedaron impresionados de verle volver, ha sido la primera vez. Le preguntaron cómo se había salvado y siempre respondía: "No hice nada especial, ojisan es muy amable", sonreía y se iba.


~_~_~_~_~_~_~_~_~_~_


El espíritu se lamento de dejarle marchar. Podía materializar su cuerpo con magia pero no podía abandonar el lugar. Jamás volverá a verle. Ha pasado más de cien años maldito y atado al rencor. Pero es ahora cuando al fin se siente solo. Sin embargo decide conservar su apariencia por la esperanza de que el joven regrese. Ríe ligeramente, tendría que ser muy tonto si lo hace.


-No, el idiota soy yo por decirle que no le dejaría marchar.


-Ojisan.


La voz deseada sonó a su espalda. Se giró rápidamente, no lo podía creer.


-¿Aladdin?


-Recordaste mi nombre-sonrió.


-Pensé que no volverías.


-¿Eh? Pero si te pedí permiso.


-No lo decía por eso.


El menor ladeó la cabeza.


-Eres muy curioso-dijo el hombre sonriendo por primera vez en casi un siglo.


~_~_~_~_~_~_~_~_~_~_


Luego de ese día nació una amistad entre ellos, el peli azul iba y venía entre el palacio y el pueblo hasta que Sinbad le pidió vivir con el a lo que no se opuso. Eso pasó exactamente un año después de que Aladdin llegara al pueblo. A los aldeanos les era incómodo saber quien era el amigo del historiador. Pero mientras el ente demoniaco estuviese interesado en el les dejaría en paz. Así que todos le regalaban objetos. Por mera conveniencia y que era interpretado por él como símbolos de amabilidad. Varias veces el oji celeste intentó darle algo de comer a Sinbad pero este siempre se negó argumentando que un espíritu no lo necesita. Incluso hoy el más joven come animadamente una manzana.


-¿No te has aburrido de mi?-el mayor.


-¿Por qué?


-No puedo salir. Mientras te mantengas a mi lado estas atado a este lugar.


-Quién debería sentirse así eres tu. Tienes muchos años en la misma situación. Además me parecen muy interesantes las historias de tus viajes.-sonrió.


El mayor quedó embrujado con ese gesto. Hace un par de meses siente algo distinto por su invitado pero no sabe que es. Jamás le había pasado. De lo único que está seguro es de que siente curiosidad por el sabor de los labios del contrario. Ignora si su cuerpo es capaz de percibir ese tipo de cosas y aún así sujeta con fuerza al chico de la cintura y le atrae en un apasionado beso. Algo capta pero su mente no es capaz de procesar, ha pasado tanto. Sus manos acarician con desesperación la piel ajena. El otro se limita a sonrojarse, es posible que sienta lo mismo que el desde hace mucho tiempo y no imagina que vio en alguien como el pero definitivamente lo agradece. Sus manos comienzan a retirar la ropa del joven y en ese mismo instante le hace el amor.


Cuando tan bello acto se consuma se quedan mirando en completo silencio por varios minutos, el oji miel roza con la punta de sus dedos la espalda desnuda de su amante que ríe ligeramente.


-Me haces cosquillas ojisan.


-Sinbad queda mejor.


El chico se ruborizó.


-Te amo Sinbad.


-Yo también te amo Aladdin. Ahora que hicimos esto, quiero contarte de mi pasado. Necesito que sepas la clase de persona que soy.


El peli azul asintío y así le dijo que era hijo único de un matrimonio joven. Era humilde pero vivía feliz. Nunca supo la razón pero su padre un día desapareció. Así que se vio en la necesidad de trabajar para mantener a su madre que un buen día enfermó y murió. Decidió emprender un viaje para conocer el mundo, se hizo de amigos y dinero, el resto de la historia era algo de dominio público.


-Luego de ello me convertí en el monstruo que todos temen.


Su amado no pudo evitar llorar y aunque fue prontamente consolado no podía dejar de hacerlo. Y no por la historia que le ha contado su pareja. Sino porque jamás imaginó que este no sabía la verdad. Si, el padre de Sinbad "desapareció", Baldor era en realidad el dueño de todas las tierras donde se asienta el pueblo, el palacio y los alrededores, eso con el tiempo despertó la codicia y envidia de la gente que lo quería todo para si. Le obligaron a firmar un documento en el que cedía todo a pesar de que el mismo se ofreció a regalar la mayoría. Pero a ellos no les bastaba, lo querían todo. Una vez consiguieron su objetivo se deshicieron de el. Sin embargo hubo una cláusula que hacia todo menos sospechoso y por lo tanto más legal. En esta decía que Esra la madre de Sinbad tenía derecho a la mitad de las tierras siempre y cuando las reclamase dentro de los diez años posteriores. Claro esta nunca le informaron de ello y con el pasar de las semanas comenzó a tener problemas económicos por lo que buscó trabajos que desmejoraron su salud aguantó algunos años hasta que cayó enferma y su hijo tuvo que mantener el hogar siendo un pequeño niño. Y sin poder evitarlo su progenitora murió. Pero no a causa de una enfermedad sino que fue envenenada para quitarle del camino. Desde el primer empleo que encontró, cada que trabajaba le eran ofrecidas dos porciones de comida; una para ella misma la que había sido previamente "condimentada" y otra para el pequeño para así no levantar sospechas. ¿Cómo fue que Aladdin se enteró? Por los documentos que encontró en la cueva. Se topó con en diario de una mujer arrepentida por lo que habían hecho, y luego todo lo ocurrido cuando Sinbad volvió, compró el terreno nuevamente de la nada amazó una gran riqueza y así despertó nuevamente la envidia.


El oji miel sostuvo entre sus brazos el menudo cuerpo desnudo de su amante que continuaba sollozando, aunque no precisamente por lo que le dijo. Le tomo del mentón y beso con dulzura sus labios para que así dejara de llorar.


-Sin importar lo que ha pasado ahora soy feliz, te tengo a ti mi amado Aladdin.


-Te amo Sinbad. ¡Te amo tanto!


Siempre ha sido un joven fuerte pero no logra dar alivio a su alma. ¿Cómo han podido hacerle algo así a una familia? Si su pareja enriqueció en parte fue responsabilidad de las personas que solo sacrificaron vidas inocentes, después de todo el hombre del cabello morado jamás ha podido salir de ahí; todas las víctimas llegaron por cuenta propia. Ya sea por curiosidad, proteger a alguien, solucionar el problema o encontrarse con el ser amado nuevamente. En el caso de Aladdin salvar el alma de un hombre maldito aunque claro no contaba con que la convivencia le hiciera enamorarse de el.


~_~_~_~_~_~_~_~_~_~_


El tiempo transcurrió, todo un año se fue volando nuevamente y no hubo una sola muerte más. El pueblo estaba en total calma e incluso muchos habían terminado por aprobar la relación entre Sinbad y Aladdin porque este último jamás lo escondió. Incluso les hizo cambiar la opinión que tenían de el. Pero uno de los moradores más jóvenes y que ha encontrado de casualidad los documentos que leyó el historiador ha ideado un plan perverso.


El peli azul ha salido del palacio para ir a comparar comida, momento que el otro sujeto aprovechó para ir en busca del espectro que mora ese lugar.


-¡Ey Sinbad!-dice el azabache.


Pronto se encuentra con un hombre de apariencia normal.


-¿Qué quieres?-con tono nada amigable.


-Vaya, eres como Aladdin te escribió.


-¿Lo conoces? ¿Quién eres?


-Me llamo Olba-sonrió-y el es mi prometido y amante.


-Eso no es verdad.


-¿Por qué es el tuyo? Despierta, solo te está utilizando.


-No haría algo así.


-No lo conoces como crees. Si tu alma encuentra el descanso eterno dejará este lugar y podrá quedarse con este palacio, vale mucho.


-¡Largate no quiero que continués manchando su nombre!


El menor aventó el diario a sus pies.


-¿Qué es eso?


-Lo que no sabes. Pobre hombre has vivido engañado toda la vida. Tu familia era dueña de todo y por ello los engañaron y asesinaron, y sin importar cuanto te esforzaste te hicieron lo mismo e incluso te quitaron de nueva cuenta a tu familia. Aladdin no te ama, solo pretende que dejes este lugar para siempre. Bueno, yo me voy.


El joven se retiró sin que el mayor pudiera siquiera tocarlo, y no porque no quisiera sino que el enorme rencor que volvió a Sinbad le mantenía cautivo literalmente. Cuando miró a su alrededor las almas de todas sus víctimas le rodearon para arrastrarlo al infierno. Y es que hay dos maneras de hacerle dejar el lugar; la primera darle el descanso eterno. La segunda que cayera tanto en los sentimientos negativos que fuese obligado a entrar al averno. Esto es algo que cualquiera sabe pero nadie encontraba el método para lograrlo. La puerta principal se abrió.


-¡Ya volví Sinbad-ojisan!


Una voz amorosa y alegre que no hizo sino causarle más dolor. El oji celeste llegó a donde su amado y quedó en shock ante lo que vio.


-¡¿Qué sucedió?!-se acercó a el llorando y trató de tocarlo pero el otro le desvió de un manotazo.


-No quiero saber nada de ti. Me engañaste ungh...


Los espíritus le provocaban cada vez más daño, el joven se puso de pie y salió corriendo de ahí.


-Así que era verdad que solo me utilizaste, pero ¿sabes? En realidad te amo. No me importaba si todo es una mentira, me bastaba con que dijeras que no lo es.


El menor volvió agitado y con una gran espada en la mano, se veía nueva.


-Así que trataras de acabar conmigo-el ente-¿desde cuando la tienes?


-Hace un mes. No tenía planeado usarla, creí que todo estaba bien, era solo por si acaso.


El oji miel sonrió, no importa si todo es falso, el sentimiento que tiene en su corazón es lo más hermoso que ha sentido jamás. No desvía la mirada porque quiere ver esos hermosos ojos en sus últimos momentos.


-Te amo Sinbad-ojisan, jamás lo olvides.


<<-Nunca, ¿cómo podría? Gracias por la última mentira.>>


El menor alzó la espada y...


-¡No lo hagas!!-el hombre trató de detenerle.


Pero fue demasiado tarde. Aladdin se atacó a si mismo cerca del corazón y cayó al piso causando que la sangre se esparciera rápidamente alrededor de su amado provocando que las almas de sus víctimas encontraran el descanso eterno y le liberaran. Una vez lo hicieron se acercó al chico que respiraba dificultosamente y aún así le sonreía con dulzura, por primera vez Sinbad lloró, el menor empleó las pocas energías que le quedaban para alzar la mano y secar sus lágrimas.


-¿Por qué?


-Cof cof...soy un historiador...ah...me pareció que tu leyenda era muy...triste. Por eso quería rescatarte, encontré...varios métodos...para ayudarte...a encontrar...la paz...pero me enamoré de ti...yo no...quería ungh...perderte...este es...el ritual...más...poderoso.


Guardo silencio por varios segundos. Cada vez entendía menos en donde estaba, ni siquiera era capaz de ver el rostro del hombre que ama.


-...lo siento ojisan...pero ahora eres libre.


-¿El sacrificar a alguien me convertiría en alguien así? Pero si yo lo...


-No...alguien...que te ama...tenía que dar...su...vida por voluntad propia.


-Yo también te amo Aladdin ¡perdóname!


El peli azul cerró los ojos para siempre con la más bella sonrisa que haya visto jamás.


-¡Aaaaaaa!!!!!!


Le tomó entre sus brazos llamandole infinidad de veces, pero la única luz en su existencia no era capaz de responderle.


~_~_~_~_~_~_~_~_~_~_


Olba fue lo suficientemente estúpido como para contar lo ocurrido al pueblo que le ofreció como sacrificio a Sinbad, le ataron a un árbol pero este nunca le puso atención, le dejaron a su suerte hasta que al fin murió y fue devorado por los lobos. El dueño de tan magnífico palacio se dio cuenta de que tal como lo dijera su amado era capaz de ir a donde quisiera, incluso al más allá. Pero no quería, ese lugar tiene fuertes recuerdos de su persona especial.


<<-Te amo Sinbad-ojisan.>>


La hermosa voz resonaba miles de veces en su cabeza.


-Te extraño tanto Aladdin.


~_~_~_~_~_~_~_~_~_~_


En el estrés del mundo moderno se ha perdido la leyenda de Sinbad. El pueblo se ha convertido en una gran ciudad, rodeada del bullicio cotidiano. Pero una zona importante ha sido declarada reserva natural, en ella se encuentran las ruinas de un antiguo palacio que nadie se atreve a visitar por respeto. El nombre de este parque es "El perdón" aunque ya nadie recuerda el por qué de este. En apariencia no tiene nada de especial pero si uno agudiza el oído puede escuchar voces:


-Ja ja ja ojisan ya no seas tan pervertido.


-No puedo evitarlo, te amo y ahora eres todo mío.


-Por toda la eternidad.


Seguro es el lugar embrujado más divertido y sensual del mundo, de esos sitios en los que te espantan todo el tiempo y donde se escuchan gemidos pero no por las razones que uno creería. Y es que a pesar de que se pueda pensar en su historia como una desgracia, lo cierto es que ahora están más felices y unidos que nunca.

Notas finales:

Gracias por leer!!!!!!!!!!!!!!! >/////<


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