Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

En ausencia de ángeles. por ReedVIII

[Reviews - 19]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

Nos vemos al final.

Septiembre, 2O16

Se preguntó por qué había sido citado con tanta urgencia, su próximo chequeo no sería hasta después de tres semanas. Y Jonghyun le había dejado en claro al doctor Jinki que no le interesaban las pastillas o algunos de ésos tratamientos costosos.
Jugaba con sus dedos; hacía frío. Miraba el reloj; era tarde. Suspiró; le costó. Fue llamado al fin, bufó; le dolió.
No sabía por qué, pero estaba nervioso. Entró al consultorio del doctor Lee, ´éste lo miraba con bastante lástima, y le extrañaba, porque la verdad era que el doctor Lee Jinki era seriedad y dureza pura, en el único momento en que le había visto un ápice de sentimiento, o preocupación había sido cuando llevaron a su hijo a urgencias, porque si bien recordaba había sido víctima de un ataque de abejas.

— Jonghyun. . —Llamó el doctor, el aludido asintió con répele. — Ya tengo tus exámenes.

— ¿Me ha llamado para ésta tontería? — Dijo, incrédulo.

— Necesito que accedas a operarte. Tus defensas están mucho más bajas que la última vez, y éso fue solo hace un mes, Jonghyun. Si siguen bajando así de rápido será mucho más grave controlar tu enfermedad.

— Si para ésto me ha llamado ha perdido su tiempo. — Bufó el rubio más que dispuesto a ponerse en pie e irse, pero un llamado más le hizo sentarse con molestia. Sin embargo, cuando notó más que incómodo y preocupado al de hebras casi canosas decidió sentarse. Era extraño, el doctor Lee lo trataba desde que tenía memoria, y era la primera vez que le veía así, lo juraría.

—En realidad espero que accedas a ésto. Nunca te he pedido algo, y como tu médico de cabecera debí hacerlo hace mucho. Pero ésta vez necesito con urgencia que te operes.

— Mire, no estoy interesado en ninguna operación, tratamiento, pastillas, ni nada. Y agradezco profundamente que se preocupe, pero le he dejado mi posición en claro.

— Tus defensas están muy bajas, Jong.

— Siempre lo están. — Respondió, seco. Aunque se notaba en su voz que intentaba apaciguar sus palabras, el rostro del mayor era un enigma.

— No me estás entendiendo, no es una opción, necesitas operarte.

— No lo haré, entiéndame. No quiero hacerlo.

— Jong. .

—Supongo que ya no tiene más nada que decirme, así que puedo irme.

—Por favor, JoJong.

Jonghyun paró en seco. Ese era el nombre que usó el doctor Lee cuando Jonghyun a sus cinco años se estaba sometiendo a su segunda operación después de tantos tratamientos. Jonghyun estaba asustado, lloraba, y no quería hablar con nadie, ni con sus propios padres. Y el doctor Jinki de alguna manera logró calmarlo, reconfortarlo, y hacerle saber que en sus manos todo iría bien, se aseguraría de ello. Que sólo necesitaba confiar en él. Y JoJong accedió.
Se decepcionó inmensamente cuando titubeó antes de hablar.

—D-Debe darme tiempo para pensarlo.

—Bien. — Pareció dudar un tanto, pero aún había gran esperanza en sus pequeños ojos brillosos. —¿Cuánto necesitas?

— Pues.. Después de diciembre.

— No. —Negó inmediatamente, con sus típicos aires de superioridad. — Debe ser antes, mucho antes.

— Vamos, he accedido a pensarlo, ¿por qué usted no puede darme tres meses para pensarlo?

—No, Jonghyun. Antes.— Ya no sabía de qué otra manera declinarle su deseo; era imposible.

— ¡Tres meses, doctor Lee, solo pido tres meses! Quiero ir a ver los cohetes a fin de año, y luego lo pensaré.

—Jonghyun. . no.

—¿Es demasiado acaso tres malditos meses? — Casi imploró el rubio, con su cabeza a punto de estallar; le dolía, bastante. Estaba mareado, y quería vomitar. Se sentía débil.

—No sé si tengas tres meses. — Dijo finalmente, resignándose a que ya no tendría sentido continuar dándole vueltas al asunto.

Jonghyun quedó estático. ¿Le estaban diciendo que moriría? Después de tantos años escuchar que lo haría, al fin se haría realidad. ¿Cómo se sentiría? ¿Dolería? Ahora mismo tenía demasiadas preguntas en su cabeza. Desde pequeño Jjong sabía que moriría, nunca le fue un secreto. Siempre deseó morir, incluso siendo un crío se sentada en su cama contemplando a la nada, esperando su muerte. En todas sus edades se había visualizado en un atáud; lo quería con almohadillas; apun muerto no perdería el estilo. Y quería un peinado casual, con una cmiseta y una chaqueta; ya lo había planeado todo. Pero no sabía por qué ahora que lo sabía con la certificación de un doctor como lo era Jinki estaba tan asustado. . ¿No era lo que tanto deseaba?

— Jonghyun, por como vas tus defensas seguirán bajando, captarás cualquier enfermedad y tu sistema no podrá batallarla. Acelerará todo ésto y morirás en cualquier momento. Si sigues como vas; antes de diciembre. Medicación y tratamiento te ayudarán, y la operación retrasarán el proceso; sólo necesito que accedas.

Los labios del doctor seguían moviéndose, pero no escuchaba nada, ¿Por qué no se oía nada? Comenzó a sentir vértigo, ¿Por qué sentía vértigo? Sudó y tenía escaofríos, se sentía más débil que nunca. El dolor en su cabeza incrementó notoriamente. Le dolió cuando cayó de la silla y se estampó contra el suelo. . ¿Por qué cayó?

Agosto 19, 14:O8.

Despertó, pero sin ánimos. Estaba en una camilla de hospital; nunca le gustaron los hospitales, pero sin embargo eran como su segunda casa. Estaba solo y conectado a una infinidad de aparatos.
Desde siempre supo que cuando algo empezaba mal sin excepción no acababa bien, y la vida de Kim Jonghyun no era la diferencia; Al cumplir sus dos años lo pasó en el hospital, como invitados su padre, madre, el Doctor Jinki y una enfermera. ¿Razón? Tenía problemas del corazón, horas antes de su cumpleaños su corazón se aceleró de la nada, le colocaron un marcapasos, no podía hacer literalmente ninguna actividad, y estudió infantería en casa; primer strike. Meses después descubrió que era asmático, y de la peor manera. Cuando tenía cinco años sus padres le habían permitido estudiar en una escuela de verdad, semanas después de una de sus infinitas operaciones tenía que empezar con pastillas; tomaba trece al día; en la escuela le decían enfermito, y un buen día después de tantas burlas Jonghyun tuvo un ataque de pánico. Su corazón se había acelerado, estaba sudando y se sentía débil, tenía alergia, le dolía el pecho y sentía nauseas. Estaba perdiendo el control; le gritó a todos y golpeó a unos cuantos, pero poco le duró la emoción, ya que víctima de un ataque desmayó. Sus padres lo sacaron de primaria y volvió a estudiar en casa; segundo strike. Hasta la fecha después de tantas cosas malas que le habían pasado ninguna parecía ser digna del tercer lugar, ni siquiera tener cáncer cerebral. Esa parecía ser la mejor de las cosas que le podían pasar en su existencia, porque a su vida no se le podía llamar así, sólo existencia. Pero ya el tercer strike había llegado hace apenas unos días. Moriría; tercer strike, estás fuera.
Rió amargamente, pero fue obligado a parar cuando su pecho dolió. ¿Por qué era tan débil? ¿Qué mierdas estaba mal con él? Comenzó a llorar, pero parecía inútilmente querer contener sus lágrimas. Siempre Jonghyun a pesar de ser tan débil como una hoja de papel quizo dar la impresión de ser una pared, una pared vieja y descuidada que no podía ser derrumbada; pero ahora todo se reducía a escombros. Él era ahora escombros.
Al cumplir dieciocho años ya era mayor de edad, sus padres le rogaron que no se fuera de casa; pero Jonghyun quería salir de allí, la presión de sus padres respecto a su salud lo desesperaba. Fue bien recibido por su hermano mayor; Sunbohyung, o como le apodó Jonghyun al colocarlo en un altar, 'Sumbbie'. Este a su vez le permitió estudiar en una universidad; Jonghyun era feliz. Por primera vez lo era. Aunque en la misma era como un miembro fantasma por sus constantes faltas.
Claro estaba que si Jonghyun lucía como un fantasma no le importaba saberlo.


* * *
Marzo 13, 2O12.

Un rubio de apenas 19 años se miraba al espejo como si en él estuviese reflejado lo más terible del mundo. Su piel tenía un color cadavérico. Lucía cansado, esquelético, ojeroso, muerto. Golpeó el vidrio y su puño sangraba, no le importaba, golpeó el espejo lo suficiente como para acabar rompiéndolo. Se dejó caer al suelo y lloró.
Lloró porque extrañaba a sus pa dres, porque Sunbohyung estaba de viaje, porque estaba solo, porque quería morir. Desde pequeño Jonghyun nunca creyó en la existencia de algún dios. Todo el mundo necesita crer en algo, aferrarse y pedirle a algo cuando las cosas fuesen mal. Pero de existirlo, se olvidó de Jonghyun.
Desde entonces ya no había espejos en casa.
* * *

 

— Jonghyun. — El doctor Jinki sacó al menor de su encimismamiento. El aludido sin ánimos asintió. — ¿Qué tal te sientes? — Por parte del rubio no hubo respuesta.— Jonghyun..

— Genial; el sol brilla, las aves cantan, moriré, ya sabe, nada fuera de lo normal.

— Ya sabías ésto, desde hace mucho. No sé qué es lo que te sorprende, sinceramente. — Los ojos del menor comenzaron a llenarse de lágrima. Odiaba llorar frente a otros, se sentía expuesto, débil, idiota.

— Lo sé, no esperaba que.. fuera todo tan rápido, tan, ah.. Creí que ya había asimilado la idea, pero, mierda. — Jonghyun jadeó en un intento por controlarse, y volvió a evitar la mirada del doctor.

— Tendremos que volver con las pastillas, ¿vale? Intentaré darte tan pocas como pueda. Y, Jonghyun, la operación la haremos, ¿No?

— Dijo que me dejaría pensarlo. — Contraatacó.

—¿Qué pensarás? Tiene todo un listado de enfermedades; asma, taquicardia, neumonía, anemía, cáncer, alergias, problemas de vista, articulaciones, y sin contar tu historial psicológico. Eres todo un caso que debe ser tratado cuanto antes. Y problemas con tu sangre.

— Lo pensaré.

— Siempre fuiste tan terco, dios.

— Doctor.. no le diga nada de ésto a Sunbohyung.

— Eres mayor de edad, no me está permitido, pero deberías de decirle a él y a tus padres.

— Si lo pienso y accedo la operación volverá todo a su normalidad, ¿no? no es necesario que lo sepan.

— ¿Cuanto necesitas? — Concedió finalmente.

— Deme dos semanas.

Jinki asintió con répele, y anotó algo en su libreta.— Te daremos de alta el jueves por la mañana, sé amable con las enfermeras de guardia en la noche. Cualquier cosa siempre estaré.
Jonghyun asintió.


* * *

 

Lunes, septiembre, 2O16. Universidad de Seúl.

Cuando Sunbohyung le preguntó a Jonghyun dónde había estado le dijo que en casa de un amigo, pero se dió cuenta de que era una mentira cuando le restregó en cara que él no enía amigos. No sabía de dónde había sacado fuerzas para ir a la universidad, pero ahi estaba, atravesando el campus, y dirigiéndose a su facultad.
Clase tras clase.
Hora tras hora.
Profesor tras profesor.
Era estresante.
Jonghyun odiaba cuando había trabajos grupales, porque él era según su apodo el 'asocial'. Pero había logrado congeniar con unos chicos que eran algo estudiosos, y no se burlaban de él, al menos frente sí.
En el transcurso del día ya había ido doce veces a la enfermería, por problemas de respiración y bajas de tensión. Le habían pedido que por favor fuese a casa, pero él no quería, decía que estaba bien, que pasaría.
Por alguna razón los trazos de Jonghyun sobre su cuaderno eran menos firmes como lo eran antes. Se moría por dentro. El doctor Jinki le había sado 17 pastillas. Además tres protectores gástricos. Cuando ya iba a mitad de día su botella de agua estaba vacía, y debia ir y comprar otra.
Después de comprar una jodidamente costosa botella de agua se fue hasta una terraza. Estaba cansado. Sacó su respirador y lo inhaló. Debía caminar menos si quería llevar ésto a un mejor paso. Era hora de empezar a pensar. Se recostó de la barandilla y empezó a analizar la situación; moriría, estaba claro. Siempre quiso eso, odiaba la vida. No se había suicidado por pereza. Si tanto lo quería, ¿por qué estab pensando en operarse? ¿Por qué ahora estaba poniendo en su boca tres pastillas? Las escupió lejos, y bufó. Ya pensó suficiente. No se operaría. Al fin y al cabo la vida en sí era una enfermedad terminal. Pero si quería morir ya, ¿Por qué estaba tan asustado? Sus ojos se humedecieron.

 

— Saben de la mierda, ¿Eh?

 

¿Eh? Jonghyun observó a su lado , y había un chico. Juraba que no estaba ahí antes. Estaba fumando. Jonghyun siempre quiso probarlo, pero la primera vez que lo intentó terminó en un ataque de asma. El chico era alto, bastante alto. Moreno, ojos grandes, algo corpulento, cabello negro azabache. Y tenía una chaqueta que le llegaba un poco más allá de la cintura. Jonghyun asintió. Cabizbajo.

 

— ¿Qué haces aquí? — Preguntó el chico, intentando hacer conversación. El rubio no quería hablar, se le quebraría la voz. Sólo lo evitaba. Al no recibir respuesta chasqueó su lengua.— Eres uno de esos chicos que se quieren hacer el interesante al no hablarle a nadie, ¿no?

 

No hubo respuesta. Sólo una amarga risa por parte del más bajo de ambos.

 

— Qué imbécil has de ser. — Refunfuñó el azabache.

 

— No mucho más que tú de seguro. — Dijo el otro, alzando su rostro sólo para inhalar una vez más del respirador.Con ello pudo darse cuenta del rojo y empapado en leves lágrimas rostro que poseía a su vez, el más alto rió a carcajadas.

 

— Te piensas el último trozo del mundo, y un comentario te hace llorar. Qué me dices.

 

Jonghyun se sintió algo débil, pero éso no le impedía reír sin ganas una vez más. Se le hacía cada vez un poco más difícil respirar. Había un problema, y parecia ser que el trasto se había gastado. Se giró, dispuesto a irse, pero su pecho dolió. ¿Por qué carajos el corazón le iba tan rápido? No podía respirar bien, mierda, no era buena señal. Cayó de rodillas, y sus labios se aferraban inútilmente a el vacío respirador, inhalando y exhalando desesperadamente. Su respiración era agitada, su pecho le dolía horrendamente.

 

— ¿Qué coño? ¿Estás bien? — El chico se situó frente él, pero Jonghyun lo empujó. Él se era suficiente a sí mismo, podía con éso. No queria ayuda.

 

Su visión era borrosa.

 

— ¡Hombre, responde!

 

Y Jonghyun perdió el conocimiento.

Notas finales:

Bueno, me ha venido esta idea de repente, y decidí escribirla, pero estoy corta de tiempo, así que si les gustaría que la siga sería agradable que me digan, ah. Nos vemos.


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).