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Recuerdos de lluvia por Eliann

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Notas del fanfic:

Era un día lluvioso cuando se me ocurrió esta historia de hecho termine completamente empapado

 

Notas del capitulo:

Como siempre espero les guste

  Era una mañana fría y un joven se había levantado, tenía cosas que hacer ese día se levantó como pudo desperezándose, para arreglarse y salir a penas se bajó de su autobús comenzó a caer una lluvia torrencial, al ir hacia el sitio donde iba a hacer sus diligencias estaba cerrado.

-Rayos –murmuro soltando un ligero temblor –

Comenzó a correr bajo la lluvia a cada momento sentía como se pegaba más la ropa a su cuerpo y el frío le calaba hasta los huesos, soltando ligeros soplos de aire caliente mientras su flequillo se le pegaba a la frente y gotas de agua resbalaban por su nariz.

-Rayos –Volvió a soltar, la parada del bus estaba lejana y no había ningún lugar al que pudiera refugiarse bajo aquella lluvia –Sabía que no debía salir hoy de la cama –pronunció para sí, una corneta de un auto le hizo detener su marcha, para observar que un deportivo de color morado se detenía a su lado la ventana del auto se bajó mostrando a alguien que no creyó volver a ver –

-¿te llevo? –Aquella expresión de tranquilidad, aquellos rasgos finos y marfilados, jamás pensó volver a ver ese rostro –

-Te mojare el auto –Respondió –

-No importa sube –Contestó no iba a esperar el segundo llamado cuando ya estaba subiéndose al auto –

-Gracias –Murmuro soltando un ligero temblor –

-No hay de que mi departamento está cerca ¿te parece si te llevo? Para que te bañes y no pesques un resfriado –El joven asintió –

Sin decir nada más comenzó a conducir el joven no dejaba de ver el rostro de quien le ayudo bajo su predicamento aun soltando ligeros temblores, su perfil, su rostro, sus labios, sus ojos, volteó a mirar por la ventana para soltar otro soplo de aire caliente, aun escurriendo el agua de su cuerpo, poco paso cuando estaba en el estacionamiento del edificio departamental, subieron por el ascensor hasta llegar al departamento.
-Te preparare el baño –Comentó para alejarse de él y perderse en uno de los pasillos –

-El joven se quedó mirado embobado todos los detalles que tenía el lugar y lo bien decorado que estaba –se parece tanto a él –una ligera sonrisa surco sus labios quitándose el abrigo mojado y la bufanda dejándolas en el perchero que estaba allí ni la camisa que llevaba por dentro se salvó de la lluvia –

-Ya está listo el baño –Pronuncio el dueño del lugar para solo obtener un asentimiento del joven lo llevo hasta el baño para dejarle nuevamente solo –

Comenzó a quitarse la ropa mojada para entrar en agua cálida con sales relajantes y burbujas una sonrisa se dibujó en sus labios ¿hace cuánto que no tomaba un baño así? Se dejó hundir en la bañera mojándose el cabello, para luego salir.

-No ha cambiado nada sigue siendo tan hermoso como siempre –Pronunció más para sí que para cualquiera en el lugar, comenzó a lavarse para luego salir de allí secándose el cuerpo, observo que en la cama había ropa seca –

Comenzó a vestirse pero los pantalones le quedaban tan grandes que la tela suave se resbalaba por sus piernas y era pisada, la camisa blanca de seda le quedaba tan grande que le cubría los muslos, lo único que no se le caía era la ropa interior, lo único que se salvó de la lluvia, salió solo con la camisa, para que su acompañante le mirara sorprendido para carraspearse la garganta volviendo a componerse.

-Tus pantalones me quedan muy grandes y se resbalan –Respondió –

-Entiendo… este… prepare chocolate caliente –Expreso extendiéndole una taza de humeante chocolate con dos malvaviscos flotando sobre el –

-Gracias –Su acompañante sonrió ambos se sentaron en los sofás tomando el chocolate en silencio –pensé… que no te vería de nuevo… estabas en Londres ¿no?

-Si… bueno estoy de vacaciones del trabajo, mi… jefe se enojó conmigo porque últimamente no he estado al ciento diez por ciento –Respondió –Y dijo que me fuera a un lugar que yo quisiera a tomarme un respiro, pensé que aquí sería un buen lugar.

-Ya veo –murmuro tomando otro sorbo de chocolate sumergiéndose nuevamente en un largo silencio –

-Y ¿cómo te ha ido en la vida? ¿Qué tienes para contarme? –Pregunto intentado salir de la incomodidad –

-Me ha ido bien, estoy a punto de graduarme necesitaba sacar unos papeles pero estaba cerrado y bueno ya sabes cómo termine, estoy trabajando en una tienda en el centro mientras me pago la universidad pero estoy de vacaciones también –Rio nervioso –dentro de cinco días entro a trabajar de nuevo.

-Oh que bien me alegra que pronto te gradúes –El joven asintió sonriendo –

-¿cómo te fue en Londres? –Pregunto, ambos quedaron en un profundo silencio –

-Fue bien –Murmuro –Termine la universidad antes de tiempo. . . comencé a trabajar en la empresa familiar y bueno… aquí estoy…

-Si… aquí estás –al parecer lo único que podían obtener de su encuentro era silencio, ambos callaban palabras no dichas dejo la taza en la mesa sintiendo como el calor del chocolate le envolvía el cuerpo –

-te. . . .Te extrañe –Murmuro –Te extrañe mucho –El joven suspiro soltando una risa cargada de zozobra – ¿tú no? –La mirada del joven era de profunda tristeza intentado contener lágrimas que fueron derramadas con anterioridad –

-Si. . .te extrañe –musitó apretando la manga de la camisa –pensé… que nunca te volvería a ver… yo estaba bien con eso ¿sabes?

-Si. . .me lo dijiste para ti yo solo era un tormento –Respondió bajando la mirada el joven solo derramo lágrimas –lo siento es que yo. . . –El joven negó –

-No te disculpes Gakupo, no tienes nada de que disculparte –Expresó secando sus lágrimas –Es solo que… no sé… me traes tantos recuerdos…que quería enterrar muy dentro de mí.

-Kaito. . .

-Gakupo tú. . .tú fuiste mi primer amor, mi primer beso, mi primera vez, mi primera rotura –Contestó –

-Tú me dejaste Kaito –Expreso bajando la mirada – tú me dejaste… diciéndome que no podías estar más a mi lado que para ti yo era un tormento constante ¿lo recuerdas? Yo sí, aún tengo la herida en mi pecho.

-No te estoy culpado Gakupo, nunca te e culpado –Su acompañante rio una risa lenta y dolorosa –

-Te amaba tanto Kaito… cómo un loco te amaba –Rio nuevamente, aquellos ojos zafiros intentaban ocultar su dolor y solo ahogaba su tristeza que como puñales se clavaban en su garganta –Fui a Londres solo para intentar disminuir el dolor… pero vaya que no paso.

-lo siento –Comentó bajando la mirada –

-No… no te culpo si dejaste de amarme yo… no tenía nada de que culparte, cuando ya no hay amor… es mejor acabar todo ¿no? –Respondió –

-El punto es Gakupo. . .que yo te amaba –Contestó –

-Si me amabas ¿por qué terminaste conmigo? –Pronunció –Sabías que… yo planeaba pedirte matrimonio En nuestro aniversario… yo… quería casarme contigo.

-por qué… porque diste todo por eso… porque… por que eras como el príncipe de cuentos que me llevo a su castillo, dándome felicidad y alegría, solucionándome la vida ¡pero no podía vivir así! Yo te amaba, yo era feliz a tu lado, pero… pero deseaba tanto hacer las cosas por mí mismo… tener mi propio merito, por eso me atormentaba estar contigo… siempre me preguntaba ¿Qué sería yo si él? ¿Qué podría lograr yo sin él? ¿Acaso seré más de lo que soy estando a su lado? ¿Lograre lo que me propongo si no interviene su mano? Todas esas preguntas me las hacía constantemente… por eso decidí terminar contigo… quería valer por mí mismo –Bajo la mirada –sé que fue egoísta… y cuando te fuiste… lloré bastante no lo niego… y me culpaba una y otra vez pero luego pensé, es lo mejor para ambos, porque si tú estabas lejos entonces yo podría hacer las cosas sin que mi corazón me dictara cada vez más correr a tus brazos.

-Su acompañante solo calló para soltar un hondo suspiro –Yo. . .no sabía qué hacer, quería pedirte más explicaciones y luego me decía ¿para qué? Ya todo ha quedado dicho, ya no me amabas ¿tengo que aceptarlo? Me resigne… me resigne a una vida sin ti, lancé el anillo lo más lejos que mi brazo logro, odie a todo desprecie todo. . .y luego te vi continuar tu vida… y me dije que yo debía continuar la mía, pero lejos de ti… porque si me quedaba más tiempo cometería una locura… eso era lo mejor para ti, lo mejor para mí, para arrancarte de mi pecho para disminuir el dolor que me ahogaba… que lastima que no pude hacer nada.

-Jamás quise lastimarte Gakupo tu siempre fuiste alguien maravilloso –Respondió –

-Serlo no me valió quedarme con quien amaba ¿no es así? –Su acompañante bajo la mirada –me alegro verte… aún bajo esta lluvia… me alegro tanto encontrarte pero no te amo…

-Yo tampoco te amo Gakupo –Ambas miradas se encontraron, atentos el uno al otro los ojos volvieron a brillar como cuando adolescentes –He de decir que no me gusta tu nuevo aspecto –sonrió –Te ves tan mal.

-Lo dice quien parecía pollito mojado –Ambos rieron – soy un idiota ¿verdad? Por aun ahora… aun después de tanto tiempo… aun luego de perderte… y al encontrarte de nuevo mi corazón lata tan agitado como la primera vez que supe que te amaba.

-Si es así somos los idiotas más grandes del mundo –Contestó –

-el más alto de los dos se acercó al otro tomando su mano, ambas miradas se encontraron diciéndose miles de verdades silenciosas –. . .yo –no podía decirlo, tal vez sin querer afrontarse nuevamente al dolor –

-No creo que sea prudente Gakupo –Respondió –

-¿pero qué dices? Si yo no te amo –Contestó, su frente quedo colocada en el hombro del contrarió –Yo no te amo.

-. . . –Se mordió el labio, apretando la mano que tenía libre y sintiendo la otra, tan fuerte, tan cálida envolviendo la suya acariciándola sutilmente, como la respiraba en el cuello erizándole los cabellos de la nuca –Gakupo ¿no te gustaría hacerlo sin amor? Para recordar los viejos tiempos, pero no haremos el amor, por qué no, nos amamos.

-No, no, nos amamos –lentamente sus labios se fueron encontrando y con cierto temor se besaron, un beso lento y suave como si se recordaran nuevamente, para volverlo algo apasionado con toda la necesidad que por tanto tiempo experimentaron al estar separados del otro, las manos del joven se aferraban fuerte a los hombros de su acompañante mientras él le tomaba fuerte de la cintura como si en algún momento se fuera a escapar de sus manos igual que una ilusión que se disipa al ocultarse la luna –

Sus manos se encontraron entrelazándose suavemente, solo sus miradas se decían la verdad que sus labios no profesaban, los corazones que latiendo al unísono estaban se regocijaban de volver a estar juntos.

Se entregaron como antes lo hicieron con todo el amor que sentía, con el fuego que los incendiaba, con el deseo de sus almas para entrelazarse nuevamente, hasta que el cuerpo se agotara y cayeran ambos rendidos en las sabanas de seda blanca, no se dijeron más no había nada de qué hablar, que sus labios en silencio mudo no se hubieran dicho, más de lo que sus corazones hablaron, más de los que sus almas se entregaron.

-¿cuándo te irás? –Pregunto mirando hacia el techo –

-No lo sé realmente –Contestó –A veces. . . quisiera quedarme.

-no es buena idea –Murmuro para darle la espalda –

-Si. . .eso también lo pensé yo –Suspiro bajando la mirada –“me queme. . .y la herida en mi pecho se abrió, vaya que si soy un idiota” –miro nuevamente a su acompañante para acariciar suavemente el cabello azulado –

-. . . pero. . . –Volvió a callar nuevamente –“te quiero a mi lado, pero sé que si te tengo no me esforzare” “me darás el mundo a la palma de mi mano” “yo quisiera ser tan valioso como lo eres tú” –Su acompañante estuvo expectante esperando que diría pero no salió nada, una desilusión a su corazón, comenzó a dejar besos en los hombros de su acompañante –Deja eso.

-Si esta es la última vez que puedo tenerte ¿por qué no aprovecharlo? –Respondió abrazándole –

-Nos quemas –Contestó no quería corresponderlo, al mismo tiempo no lo evitaba –

-Que importa –Murmuro – ¿qué importa si nos calcinamos? Tal vez nuestro amor pueda renacer de esas cenizas como el fénix.

-No me hagas sentir culpable de lo que ya me siento –Susurro abrazándose a sí mismo –

-Jamás te he culpado de nada –pronunció para sentarse –Nunca pensé que debía culparte de algo.

-por qué no simplemente te enojas, me odias, me gritas… algo… solo. . .solo me das más amor… más ¿por qué? Gakupo tú no eres bueno, yo conozco tus defectos se lo malo que puedes ser con otras personas…

-El problema es Kaito que contigo no puedo ser como lo soy con los demás. . . ¿nunca lo supiste? Desde un principio me tuviste rendido a tus pies, dispuesto a todo por ti. . .aun ahora me tienes así –Hizo una ligera mueca –Aun ahora no dejas de controlarme…

-Yo siempre he. . .creído que no… soy la pieza de tu rompecabezas que no encajo en tu mundo, Gakupo tu eres tan –Suspiro –Tú estás tan alto para mí, tienes tantas cosas has logrado tanto, te has propuestos diversas metas y las cumpliste

-Kaito nunca has sido la pieza de mi rompecabezas porque siempre fuiste mi mundo –El nombrado solo se mordió el labio –pero es absurdo. . .al menos para mí, que se la verdad. . .que sé que no me quieres a tu lado, pero ansió tanto estarlo, que sé que te agobio, pero deseo ser nuevamente tu felicidad, ¿de qué me vale todo el dinero que me gano? Si ni con eso puedo tenerte a mi lado. . .no es nada –Se levantó de allí –pero que tonterías digo…

-. . .Gakupo. . .

-¿nunca se hará verdad? Tantas noches fantaseando con este día, soñando que te tengo nuevamente entre mis brazos que soy feliz de nuevo. .. Vaya mentira, solo me he quemado y la herida desde hace tanto se abrió sangrando de nuevo –Suspiro –Estoy frustrado Kaito, demasiado quiero atarte, amarrarte jamás dejarte ir… pero luego está este ser –Señalo a su pecho –muy profundo dentro de mí, al cual tienes dominado, el cual no puede hacerte nada malo, si fueras alguien por el cual no siento amor alguno te hubiera destrozado, tu bien lo sabes, no soy buena persona, conoces mis defectos, mis errores, mis imperfecciones y me posaste en un pedestal tan a lo alto que no puedo ni yo mismo tomarte de la mano y alzarte a mi lado –Suspiro –No sé qué hacer, ya no puedo trabajar, ya no puedo dormir. . .estás allí constante torturándome una y otra y otra vez. ¡¿Qué quieres que haga?! No puedo estar sin ti, pero no puedo estar contigo. . . ¿quieres volverme loco acaso?

-No Gakupo yo… jamás quise eso –Volteó para mirar la lluvia que golpeaba fuerte en el balcón –

-entonces ¿qué quieres? –Contestó –

-Quiero valerme por mi mismo, quiero ser tan bueno como tú en todo lo que me propongo, quiero decir por mi propio merito que merezco estar a tu lado, sin que las personas digan, mira el tan reconocido millonario se enamoró de un pobre diablo ¿cómo logro hacerlo?

-¡Las malas lenguas siempre hablaran! ¡Siempre lo harán porque su vida es tan insuficiente que no le queda de otra que intentar amargar las demás!. . .

-¡Pero en mi corazón sabré que estoy a tu lado por lo que valgo! ¡No por como mi cuerpo pudo atraerte!

-¡Kaito maldita sea para mi vales todo mi dinero y mucho más! ¡¿Por qué jamás pudiste comprender a través de mis ojos que para mí eres más valioso que mi vida?! ¡Que eres lo único que me hace sentir entero en este miserable mundo gris e indeleble! –Exclamo – ¿no lo ves? ¿Jamás lo viste? Que contigo siempre me sentí completo ¡Toda mi vida! Estuve rodeado de personas ¡toda! Personas de alto prestigio, personas de la más gallarda sangre, en la escuela, en el instituto todos siempre querían estar conmigo, todos siempre me rodeaban porque era el niño rico y popular, el que parece modelo de revista, siempre fui eso nada más que una muñeca de porcelana para las personas hasta para mis padres, ni siquiera puedo tratar a mi padre como uno, pero cuando estaba contigo, ya no me sentía una muñeca de fría porcelana, cuando estaba contigo solo era yo… solo era Gakupo… podía respirar, podía sentirme vivo, podía ser feliz porque estaba a tu lado. . .porque tú me hacías sentir vivo, ya no estaba en automático, atendiendo a todo lo que demás decían, lo hacía por mí mismo porque así lo deseaba, porque así me hacías desearlo.

-. . . . –Se mordió el labio y derramo lágrimas amargas –el tiempo ya no volverá a atrás.

-pero nosotros podemos crear nuestro tiempo si tú me lo permitieras podría hacerme cargo de la empresa familiar que está aquí en Japón y no regresar a Londres Inglaterra solo estar contigo como quise hacer tanto tiempo. . .dejar de vivir en automático y respirar de nuevo –Se le acerco nuevamente – ¿me lo permitirás?

-Sabes algo Gakupo. . .si sabes que nos calcinaste. . .

-Dime que hemos renacido de nuestras cenizas –Suplico –

-Si… creo que si –Se abrazó fuerte a su ahora nuevamente pareja –pero quiero hacer las cosas por mí mismo sin tu apoyo ¿me lo permitirías?

-Solo te apoyare si así lo quieres, si no quieres que lo haga entonces no lo haré –Entrelazo la mano con la del joven que amaba –Espere esto por tanto tiempo.

-¿es tan bueno como en tu fantasías? –pregunto sonriendo de manera tímida –

-No… es mucho mejor contigo todo es mucho mejor –Sonrió, ambos se volvieron a besar mientras la lluvia seguía cayendo afuera ellos dos se quemaban adentró, proclamándose el amor que por tanto tiempo anhelaron –

Fin.

Notas finales:

Sinceramente esta es la pareja con la que me gusta más trabajar y con las que más trabajo, como siempre espero les haya gustado y por favor comenten. 


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