Al día siguiente en cuanto desperté ya estaba Luka esperándome, no tenia buena cara, me levante despacio en la cama y en cuanto abri los ojos ahí estaba el parado en el marco viéndome con mala cara
-Cámbiate y vámonos
-Voy a tomar un baño
-No tengo tu tiempo
-No me voy a ir asi, así que espera!
-No me des ordenes maldito mocoso-se acercó y me jalo del cabello con fuerza
-Suéltame cabron!!!!-le apreté los huevos con mi mano hasta que me soltó, me sobe la cabeza
-Qué te pasa!!!!!!?-giro la cabeza-tienes 5 minutos-me levante y me metí al baño, me bañe y cambie lo más rápido que pude y baje, me seguía mirando con odio, iba a ir a la cocina a ver si encontraba algo para desayunar, pero Luka me detuvo jalándome de la ropa.
-Vámonos ya!
-Tengo hambre
-Me vale madres, yo tengo cosas que hacer-volvió a jalarme
-Que te pasa?!....ah sigues molesto por el cabello de ese chico!, el fue el que me ataco a mi, yo no me iba a dejar!
-no es mi problema
-Tanto te afecto?!
-A el lo hizo y es lo que me importa
-Pues a mí no vengas a maltratarme idiota el se lo busco! Y si estas de malas porque no te ha atendido tu puta Asiática no te desquites conmigo
-El no es como tú!-me dio una cachetada
-No me molesta lo que digan de mi ni que me comparen, llévame a donde tengas que hacerlo y lárgate, pero deja de golpearme-me sobe el rostro –desquítate con la pared
-Oh qué?, le dirás a Eric?
-Crees que lo necesito a el para resolver mis problemas?! Me cuide solo 14 años, no le tengo miedo a un perro de Eric-esta vez un puño cerrado, no traía nada de armas encima, salte y le devolví el golpe, me tomo con fuerza del cabello y sonrió con cinismo
-Vamos a pelear?! Perfecto, pelearemos –me dio una patada en el estomago sacándome el aire, me cabree pero tampoco soy estupido
-Llévame a la puta clínica y, muérete-me levante despacio, tosí, se veía molesto porque no le seguí el juego, subí al auto con el en silencio, enserio si tuviera el tamaño y los músculos lo mataría
-ya quita esa cara suficiente tengo con ser tu niñera
-Yo comencé?-me gire, solo has tu trabajo y no hables con las putas
-Ey….lo lamento vale-lo decía de dientes para afuera-estoy molesto por lo de Takumi ok
-Si quieres hacer las paces para que no le diga a Eric ni te molestes, no lo hare, no le importa, no es su asunto, solo déjame en paz, no voy a permitir que tu estúpido novio o lo que quiera que sea me humille, si tuviera yo tu tamaño podríamos pelear parejo, pero como es asi limítate a hacer tu trabajo, ya te desquitaste ahora cállate-acerco su mano libre a mi boca.
-Tienes cara de ángel Chris-acaricio mis labios, sonrió de medio lado sin despegar la mirada del frente, no hice nada-porque no seguimos como amigos ah?
-Vete al diablo-gire la cara
-Vamos, no te divertiste conmigo?-no respondí, estúpido bipolar primero me golpea y luego coquetea conmigo?, guarde silencio el resto del camino que fue como de una hora, en cierto punto me quede dormido.
-Llegamos mocoso-me movió con brusquedad para despertarme-Eric dijo que el traería tu ropa luego-Se bajó del auto y yo tras el, me moría de hambre, me rugían las tripas pero ahora tenia que esperar.
-Vale-entramos, arreglo el resto de mis papeles
-Nos vemos luego mocoso
-Púdrete-me gire, solo se burló, y bueno, de nuevo fui encerrado en ese miserable lugar, lleno de gente como yo solo que algunos más estúpidos, más dañados, algunos menos, éramos puros adolecentes, no había adultos, no me gustaba para nada, pero que se le iba a hacer.
Esta vez fui más obediente, comía, intentaba distraerme, pero seguía sin hablarle a nadie, hacia oídos sordos a lo que me decían y no participaba con los demás, un par de días ahí metido y comenzaron a quitarme las drogas de Atsushi, la ansiedad volvió, ansiedad y lágrimas, ya me había acostumbrado a esa nueva droga, que si bien me mantenía lucido y pensando me controlaba la ansiedad, ahora todo regresaba y de nuevo pensaba en escapar, pero esta vez aguante los dos primeros meces, y fue demasiado duro, solitario, me sentía demasiado triste, solo aunque los que intentaban rehabilitarnos querían integrarnos no todos cooperábamos, yo era uno de esos, tan desgraciados, la primera visita que me hizo Eric fue casi como si dios viniera, claro si yo esperara que dios me bendijera, pero asi fue, estaba en la habitación que me fue asignada consentrandome en no caer en un ataque de ansiedad cuando fui llamado.
-Christopher Sammet, tienes una visita-me levante casi como si hubiera sido disparado de la cama y corrí con toda mi energía pasando del sonriente cuidador, escaleras abajo y en la entrada del dormitorio estaba el desgraciado, apenas y había oscurecido, me lanace a abrazarlo
-Viniste!!!!, enserio lo hiciste
-Lo prometí no?, y te has estado portando bien cierto?
-SI!, ves! Estoy comiendo Eric estoy bien, ya sácame de aquí-brinque para unir mis labios con los suyos, lo extrañaba, no solo su presencia si no también su cuerpo estaba necesitado
-Chris calma
-No puedo, te extraño, házmelo
-Shhhh-llamamos la atención de los de los alrededores
-Chris no te puedo sacar, vas muy bien, pero te falta mucho
-Me voy a volver loco aquí! Los odio a todos, te extraño……necesito salir-jale mi propio cabello
-Chris, yo estoy sintiéndome orgulloso de tus avances-me beso-tienes que seguir esforzándote, entonces seras mi amante-lo abrace
-Si, tu amante
-Eso es….seguiras portándote bien?
-Vale…pero no me hables como a un niño, no sabes que trabajo me esta costando esto….Eric pasa la noche conmigo, te necesito
-No puedo y lo sabes
-Por favor, extraño tu cuerpo, me quitas las dos cosas que me hacen feliz
-Chris baja la voz
-Quedate-me aferre a el aspirando su aroma-dos meces limpio y dos meces sin sexo, dios, tenia estrés, ansiedad, frustración de todo tipo, la rehabilitación apestaba.
-Vale, vale hare lo que pueda, espera aquí-por supuesto fue a sobornar al director de la clínica esta para que nadie abriera la boca de que el pasaría la noche aquí, irónico no creen? El mayor distribuidor de drogas revolcándose con un drogadicto que intenta rehabilitarse en una clinica para esto.