No podía creer en un principio todo lo que había pasado, de la nada me extravié por quedarme a comprar en una estúpida máquina que ni me dio lo que pedí, sin embargo me dio la oportunidad de tener una nariz rota y conocer a ese sujeto, que de alguna extraña forma era interesante, viejo pero interesante.
Cuando al fin llegué con mis compañeros y amigos, recibí un abrazo de Jungkook que realmente pude notar era el más preocupado.
-¿qué te pasó?- preguntó.
-me extravié- respondía con simpleza, mientras los demás se acercaban.
-¿quién era ese sujeto?- preguntó con un tono bastante altivo el líder, a lo que me alcé de hombros y simplemente respondí con su nombre.
-¿Byou? Ese nombre me suena-escuché que Jin mencionaba mientras se acercaba y JH me abrazaba por los hombros, revolviendo mi cabello en un salto que dio de la nada.
-¡Jimi consiguió novio! Aunque está algo mayor para ti ¿no crees Chimchim?- ante ese inoportuno comentario, le di un fuerte codazo en el estómago haciendo que se separase y todos comenzarán a reír, la pena no faltó, haciéndose presente en mi rostro, así que me hice a un lado, tomé mi maleta de ruedas, me acomodé los audífonos que colgaban de una de sus agarraderas y caminé hacia la van que nos esperaba afuera.
El día siguiente era algo que esperábamos durante bastante tiempo, un ligar más grande de lo normal, muchas personas viéndonos y demás, estábamos alegres, emocionados, lo mejor de todo, es que nos veíamos bastante bien.
Con mi mejor ánimo, salí un instante del camerino y demás deseando respirar, tomar algo de aire y prepararme mentalmente para lo que vendría, en eso, vi un silueta conocida caminar de largo por lo que sería el pasillo de los camerinos, abrí mis ojos y sin saber por qué corrí hacia esta, viendo impresionado a Byou, riendo y hablando con algunos del staff.
-¿Byou?- apenas escuchó mi llamado, se volteó y me miró extrañado pero a la vez con una sonrisa, acercándose, poco a poco, haciendo que de una extraña manera mi cuerpo empezara a temblar y a calentarse ¿qué pasaba conmigo?
-¿eres de los que se presenta hoy?- mi mirada simplemente se quedó fija en su rostro, ahora maquillado, con sombras oscuras y su piel, aparente sin ningún defecto, era normal, yo también recibo esa clase de tratos y arreglos, aunque sin tanto detalle, vestía un atuendo despampanante y que a decir verdad, resaltaba su estatura y musculatura, atractivo la verdad-¿mocoso?-parpadee un par de veces ante ese nuevo llamado, desviando la mirada molesto por como aún me llamaba.
-ajá ¿y tú?-
-estamos grabando un pv cerca y me pidieron buscar a alguien, pero ya me voy-
-ya veo…-al parecer iba a decir algo, pero lo retuve con mis palabras- ¿quieres quedarte, anciano? Así conoces de buena música- vaya que su expresión fue una historia, me miró como si en verdad le hubiera ofendido, de arriba abajo, sintiéndome ciertamente como el inexperto y más que intimidado cuando se acercó a mi rostro.
- tienes demasiada confianza, enano. Está bien, volveré en media hora- un guiño fue la despedida, volviendo a darse la vuelta y salir de allí como si nada, sintiendo que ya por fin podía respirar y mi cuerpo lentamente se calmaba ¿qué tenía él? No lo sabía, no me interesaba pero me gustaba.
-Jimiiiin- ese canturreo, era el típico llamado de J-hope que con su siempre buen sentido del humor, se acercó a empujarme de los hombros-deja de andar conquistando ancianos y vamos al escenario- de nuevo con ese juego… Me estaban hartando, así que con mi mayor amabilidad, golpee su brazo con fuerza y caminé a su lado, bebiendo mi botella de agua, pensando en que cara pondría ese anciano, al verme bailar en el escenario y vaya que tal vez le provocaría un infarto, aún más con el baile destinado para hoy.