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La Serpiente Negra por cristalita

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Notas del fanfic:

Lo hice con mucho cariño :3 espero les guste.

Esta basado en la película "serpiente te blanca"

Notas del capitulo:

Espero les guste y no me maten :P, soy pésima para el lemon o el Hard así que espero que tengan compasión por mí ;c si es que no les gusta a85; y espero no haberme olvidado de algún asento :’( lo hice muy rápido y sin revisión así que solo espero haberlo hecho bien.

LA SERPIENTE NEGRA

Los Demonios son seres que viven en la oscuridad, gente muy peligrosa para los humanos pues ellos engañan y manipulan la mente de cualquier ser vivo. Eran engendros que se podían convertir y engañarnos en lo que quisieran, lo peor era que podían vivir siglos.

Pero no todos los demonios eran así, había muy pocos que no hacían daño pero sufrían la discriminación que tenían y gracias a eso vivían alejados de todo.

Aquí es donde comienza la historia de un demonio muy diferente de cabellos azabaches y ojos negros al igual que toda su familia, todos del clan Uchiha eran demonios amigables y no tenían intención de herir a ningún humano como tampoco hablar con alguno.

En el pasado hubo varias guerras por esta causa, y leyes se promulgaron para todo el mundo sobre todo a los humanos y demonios.

“NINGUN HUMANO Y DEMONIO DEBEN ESTAR JUNTOS”

Esas fueron las palabras explicitas creadas en la tercera y última guerra por los monjes de la iglesia quienes gracias a sus leyes por fin pudo haber paz entre los humanos.

Claro estaba que algunos se negaron a tales leyes y las infringían de una manera violenta cosa que hacía que los humanos temieran más a los demonios.

Un tiempo después de la primer victima los monjes decidieron advertir a la población por los peligros que había cuando uno está cerca de los demonios, el odio fue creciendo por parte de esta misma y decidieron crear una organización de cazadores de demonios.

Los Años fueron pasando y los demonios tuvieron que vivir entre las sombras. Alejados de la población para siempre.

En una cascada muy alejada del pueblo se encontraban dos demonios que parecían tener entre los 16 a 20 años pero que en realidad tenían más de dos décadas de vida. Estaban contemplando el cielo.

--Sasuke hoy el cielo está muy azul ¿no lo crees?—pregunto el mayor a su hermano menor.
--mh…--

El mayor observó cómo su hermanito estaba tan pensativo, cosa que no era muy común en él.

--¿Te pasa algo?—
--No es nada—
--Dímelo—
--Que no es nada—

Lo conocía mejor que nadie, además su instinto de hermano le decía que estaba pensando en algo muy importante. No podía rendirse así que insistiría.

--Vamos…--
--Sé que te reirás de mi—
--No lo haré—

El menor sabía las intenciones de su hermano así que dio un gran suspiro.

--¿Nunca te preguntaste cómo es el Amor?—

--No lo he ni pensado—dijo igual de pensativo.

¿Cómo era enamorarse? Nunca lo había sentido en su vida ni siquiera lo había pensado, pero ahora que recordaba un poco de su pasado ya que era mayor que el otro, recordaba como muchos demonios que había conocido morían sin siquiera preguntarse eso.

--Pues… creo que yo sí— Itachi vio como este sonreía.
--¡¿Cómo sabes?!—
--mph… pues…--

Itachi vio como este volvía a sonreír mientras veía a un lado, siguiendo la vista de su hermano menor pudo ver a un chico rubio de ojos azules escalando una la montaña del frente junto a un grupo de chicos. Al ver eso tuvo una idea.

--Mira bien—dijo riendo un poco mientras me convertía en un águila y empezaba a volar hasta donde se encontraba el rubio.

--Pero que…-- Sasuke salió de su ensoñación y se sorprendió por la loca manera de actuar de su hermano mayor.

El chico rubio con miedo empezaba a subir la montaña cuidadosamente, sus locos amigos lo insistieron a que vaya a practicar el escalamiento de una montaña, pero no sabía que sería muy difícil.

De pronto escuchó el ruido de un águila acercarse, asustado miró hacia la supuesta águila quien se acercaba lista con sus dos patas para atrapar al rubio, logrando su objetivo lo atrapo pero como no podía alzarlo solo lo arrastro.

El rubio atónico y con mucho miedo empieza a pedir ayuda a sus compañeros quienes tenían el paso adelante.

Un chico de cabello rojo al ver lo que sucedía fue rápido a espantar al águila y así dejara en paz a su compañero, los demás lo siguieron después.

--Chicos ayud…--El Águila lo arrastro y este calló desde lo alto asustando a sus compañeros.
El rubio con el corazón muy asustado cerró los ojos muy fuerte esperando lo peor.

El Águila desde lo alto solo reía de diversión hasta que vio cómo su hermano menor también se había convertido pero No en un Águila, si no en una serpiente gigante.

Volando fue cubriendo el cuerpo del rubio mientras caía y gracias a un lago que había en el lugar, cayeron sobre el agua fría y Sasuke se convirtió toda la parte de arriba en humano sin soltar al rubio quien al sentir el agua por todo su cuerpo abrió los ojos encontrándose con los ojos negros del chico que tenía enfrente.

Bajo el agua con los rayos solares que lo iluminaban, Sasuke al ver los ojos azules del rubio sonrió, se sonrojo al ver lo guapo que era de cerca y sin poderlo evitar se acercó al rubio para poder besarlo.

Apenas con un pequeño roce sintió una sensación muy agradable, al mover sus labios sintió como el otro correspondía y tomaba el control siendo él ahora el que correspondiera.

El beso se hizo intenso y cada vez con más ansias de probar sigue los labios del otro, jugando con sus lenguas sentían como su respiración se iba a cada momento.

Al separarse se vieron y sonrieron hasta que el aire se fue completamente del rubio.
Sasuke riendo salía del agua para dejar al rubio en la orilla.

--¡¡NARUTO!!—
Escuchó como voces gritaban el nombre del rubio, presuroso se convirtió en un cuervo mientras volaba al árbol más cercano y se escondía de la vista de los demás.

Vio como Tres chicos llegaban a auxiliar al rubio y se lo llevaban lejos de ahí. Enseguida sintió la presencia de su hermano.
--¡¿Por qué lo salvaste?!— le preguntó sorprendido mientras se convertía en la versión humana.
--¿Por qué lo lanzaste?—preguntó molesto el azabache.
--Tú sabes que nosotros y los humanos no tenemos una relación muy buena y más aún por los Monjes, además se me hizo divertido—
--¡No lo vuelvas a hacer!—advirtió Sasuke a su hermano mayor, el otro sorprendido recordó las palabras del menor hace un momentos atrás.
¿¡Acaso su hermano menor se había enamorado!?
Sin ninguna palabra los dos hermanos volvieron al bosque, su único hogar, habían muchos demonios viviendo en un lugar en específico pero ellos preferían vivir alejados de toda esa discusión de los Demonios y Humanos.
Vivian solos gracias a que en un siglo muy joven sus padres fueron matados por los humanos en la segunda guerra, dejando a Sasuke al cuidado de Itachi.
Por otro lado el rubio había despertado con la mirada nublada que poco a poco se estaba aclarando.
--¡Naruto despierta!—vio que le gritaba su compañero Gaara.
--¿G-Gaara?—susurró muy débil.
--No te preocupes Naruto los médicos dijeron que te encontrabas bien, que solo te ahogaste y perdiste aire—dijo tranquilizando al rubio.
--Yo recuerdo…-- trató de recordar algo muy importante hasta que –Recuerdo que alguien me salvó—
--Puede ser tu imaginación, todos te encontramos en la orilla inconsciente—

El rubio frotándose con una mano la cabeza se sentó y trato de recordar de cómo era esa persona que lo había salvado. Porque si de algo estaba seguro era que recordaba que alguien lo había salvado.

--Bien Naruto, vámonos de este lugar—le pasó su ropa en la cama ya que se lo habían quitado para ponerle una bata de hospital –Los doctores dijeron que ya te daban de alta— abrió la puerta y salió del lugar.

Naruto seguía sentado pensando en lo que había ocurrido cuando fue bruscamente lanzado al precipicio por el Águila, la imagen de lo que pasó después era muy confusa.

Sentía que era importante.

Más tarde Sasuke seguía pensando en el rubio pues desde que lo besó no ha dejado de pensar en las condiciones que pudiera estar en ese momento. Quería verlo más que a nadie.

Su corazón se lo pedía a gritos.

Itachi quien se dio cuenta del estado en que se sentía su hermano menor luego de ver a ese chico, se sentía mal de no poderlo ayudar. ¿Qué podría hacer?

En otro lado se encontraban un monje y su aprendiz atravesando el lago para poder llegar a la ciudad, tenían que estar presentes en la fiesta más grande de toda el lugar porque era posible encontrar a varios demonios entre la multitud.

Su deber era capturarlos y su misión encontrarlos.

--Ya sabes que hacer—
--Sí, no me lo repita—dijo aburrido el rubio—
--Te lo repito para que se te quede grabado en la cabeza—
--Llevo 10 años escuchando las mismas palabras—lo miró –No se me lo va a olvidar—
--eso espero—cerró los ojos –Solo trata de concentrarte en la nueva técnica que te enseñé—

Por alguna razón el Monje sentía que algo muy importante acaba de ocurrir y que sabría muy pronto lo que había pasado. Por lo menos hasta que llegue a la ciudad.

La noche se hizo presente para todos, las estrellas comenzaban a brillar y la luna demostraba lo hermosa que se había puesto.

Pero había un pelinegro que estaba dando vueltas de un lugar a otro pensando en el chico rubio que había conocido.

--No te molestes…-- dijo sin más su hermano mayor –Los humanos y los demonios estamos prohibidos acercarnos y lo sabes—
--Tsk… eso lo sé--
--Entonces… por qué sigues pensando en ese chiquillo—
--No lo se—
--¿No lo sabes?—

No estaba seguro de lo que sentía, siempre quiso saber lo que era el Amor pero nunca pensó en cuales serían los síntomas de enamoramiento.

--Ototo…-- le dolía ver a su hermano tan intrigado –Quiero contarte algo—

--¿Qué sucede?—
--Quiero hablarte de lo que supuestamente sé de lo que se trata el Amor—
--¡Así que lo sabes!—
--Solo te diré lo poco que aprendí en mi larga vida…-- se sentó, lo miró y dando un gran suspiro empezó a hablar.

La causa de la segunda guerra de los humanos contra los demonios, no fue a causada por sus diferencias, todo fue causado por un crimen, un crimen que hizo un demonio al enamorarse de un humano, todos se opusieron a tal relación, los demonios “Los Humanos no pueden estar juntos ni con un sentimiento mutuo” eran las palabras de un moje muy poderoso llamado y aclamado por todos como el “Sabio de los 6 caminos”.

La pareja no podía estar junta, pero hicieron todo para poderlo estar, a espaldas de su propio pueblo estos dejaron su clan y desaparecieron para vivir su Amor juntos o eso era lo que había pensado la mujer humana.

Poco más tarde el demonio se convirtió en un mordaz asesino y mató a la supuesta amada.

Descubierto por los Monjes estos iniciaron la guerra para que lo demonios se alejen de todos los seres humanos que existen en la tierra.

Terminando de relatar Itachi vio con preocupación a su hermano.

--Por eso es que nunca hemos aprendido ni sentido ese sentimiento ninguno de los demonios—miro el suelo triste –Hasta nuestros padres se odiaban—

--Entonces tienes miedo de que me enamore de ese chico?—
--Claro que si, después de todo soy tu hermano mayor—se acercó y le tocó la frente con dos dedos –y tengo el deber de cuidarte—

--Pero… no puedo sacarlo de mi cabeza—
--Entonces vamos a verlo y comprobar que él igual siente lo mismo por ti—dijo sonriendo
--¡¿Qué?!—
--Como oíste— lo miró decidido –Yo nunca me enamoré pero si esto es Amor, no dejaré que lo pierdas ¡No dejaremos que tu Amor padezca!—dijo firme.
Sasuke sin comprender mucho a su hermano, sonrió.

¡Volvería a ver a Naruto!

Los dos se levantaron y se convirtieron en serpientes (su verdadera forma) y fueron directo hacia la ciudad.

Naruto estaba caminando por las calles muy pensativo, no se podía acordar de esa persona sin embargo al recordar un poco de la forma de esa persona su corazón latía rápido.

--Naruto vamos no pongas la cara larga—se estaba burlando su compañero
--¡No estoy con la cara larga Kiba!—dijo enojado por la provocación.
--Tsk… que problemáticos—al otro lado se encontraba otro de sus amigos.
--Shikamaru… para ti todo es problemático—le decía otro chico al lado de este.
--Neji, tú no estas atrás— dijo Gaara con pesadez.

Naruto estaba feliz de tener unos buenos amigos, le hacían olvidar las cosas por un momento y era demasiado confortable.

En otro lado se encontraba el Monje y su aprendiz caminando por el otro lado de la calle.

--Deidara, vigila muy bien el perímetro—ordenó el peliblanco
--No tiene que decírmelo, maestro Jiraiya—

Deidara se alejó de Jiraiya y se fue a contemplar cerca de unas barras la luna y de paso detectar a los demonios. No era muy especialista como su maestro pero era necesario para poder ser un monje sabio como él.

Jiraiya se dispuso a ir a beber y hablar con el encargado de la bebida milagrosa llamada “Sake” una bebida que parece vino pero que tiene el poder de quitar años de vida de un demonio. Un elixir perfecto para atrapar a los demonios.

Sasuke e Itachi llegaron a la ciudad, se convirtieron en su versión humana y buscaron por los alrededores al rubio.

Itachi al poder detectarlo se acercó al rubio y lo jalo sin más del grupo de sus amigos.

--¡¡Oiga… usted, ¿qué cree que está haciendo?!!—

--Mi hermano tiene que hablar contigo—dijo sin dejar de jalarlo.

--¿De quién me habla? Yo no conozco a nadie más que a esas personas que vio con las que estaba—
--Eso no me incumbe—

Sasuke quien seguía buscando vio a su hermano mayor arrastrando al rubio.

--Pero que…--
Enojado se acercó a su hermano y le reclamo, este sonrió y soltó al rubio luego con un susurró de “buena suerte” se alejó del espacio personal de su hermanito.

Sasuke sin entender aún, se dispuso a disculparse con el rubio.

--Lo siento por la brusca manera de tratarte por parte de mi hermano—se disculpó mirando al rubio esperando a que lo reconozca.

--No tienes que disculparte—dijo sacudiendo su ropa por la suciedad de la tierra. Hasta que alzó la mirada y miró muy sorprendido al azabache –Perdón pero… ¿No te conozco?—preguntó.
--¡¿No me recuerda?!—
--Jejeje es que acabo de tener un accidente y estoy muy perdido, pero creo que no te conozco ya que te recordaría sin lugar a duda si lo hubiera hecho— Naruto miro como este no decía nada –Además estoy buscando a otra persona—dijo mirando el cielo –No sé si la conoces—

Sasuke sentía una sensación de dolor. ¿Por qué no lo recordaba?

--Pero era el día de mi accidente, de pronto sentí que iba a morir pero algo suave cubrió todo mi cuerpo—sonrió –Era como estar en una cama hasta que de pronto sentía caer en el agua y al abrir mis ojos ahí estaba, mirándome con sus ojos negros y hermosos, abrazándome hasta que nos besamos y aunque era mi primer beso sentí que era maravilloso—rió mientras miraba las estrellas hasta que su cara se entristeció un poco – Luego perdí la conciencia por la falta de aire y no volví a verla—

Sasuke sonrió y se acercó a Naruto.

--Bien… creo que la conozco dobe—
--¡¿Enserio?!—

Como estaban en la orilla de la laguna, Sasuke sin previo aviso empujó a Naruto al agua haciendo que este se ahogara así que él también se metió en el agua y sujetando a Naruto como la primera vez lo miró a los ojos y lo beso.

El beso fue el mismo que la anterior solo que esta vez Sasuke lo cortó antes, para salir del agua y así que ese chico rubio no volviera a olvidar su rostro.

Mientras Naruto salía del agua junto a Sasuke se quedó impactado por lo que hizo bajo el agua.

“Era él”

Los dos se sentaron en la orilla luego Naruto miró al azabache.

--¿Eras tú verdad?—
--Eso depende de ti—dijo sin querer demostrar sus nervios hasta que sintió como el rubio con la mano lo obligaba a mirarlo hasta que lo volvió a besar.

Sasuke sorprendido por el beso al principio no correspondió pero poco a poco se dejó llevar por los labios del rubio hasta que se separaron por la falta de respiración.

--Jejeje si eres tú—sonrió Naruto
--Mh…-- Sasuke solo se sentía avergonzado

Por otro lado Itachi caminaba aburrido por el festival mirando las tiendas y a las personas hasta que vio a un chico rubio de cabello largo con una coleta mirando hacia la nada. Sin preámbulos se acercó al rubio.

--Las estrellas esta noche brillan como nunca ¿No lo crees?—

Deidara vio a la persona que lo interrumpió con seriedad.

--Si eso creo—dijo sin más volviendo a su investigación.
--¿Qué haces?—pregunto curioso el mayor –Porque no creo que estés mirando solo el cielo—dijo riendo mientras se sentaba encima del barandal.

--Bueno… solo estoy tratando de encontrar a un demonio— Itachi lo miró curioso.
--Entonces era eso…—
--Si, para que lo sepas estoy por convertirme en un gran Monje— dijo orgulloso
--Entonces eres un moje—
--No es por presumir pero con ser moje encontré mi arte—

Itachi estaba muy interesado en ese rubio tan particular.

--Bueno, para empezar…-- vio hacia el frente una casa –en la casa amarilla se encuentra un demonio—
--¡¿Qué?! ¿Cómo lo sabes?—
--Bueno, no solo se encuentra un demonio sino que también están varios de ellos bebiendo sangre de las personas que entran—dijo sin más
--¡¡¿Pero qué…?!!—Deidara observó la casa y activo sus ojos para detectar a los demonios, impactado vio a Itachi enojado–Cómo es posible que no lo dijeras antes--

Deidara empezó a correr a ese lugar muy apresurado, si quería descubrir su arte siendo monje tendría que eliminar a esos demonios y salvar a esas personas.

Era su oportunidad de demostrarlo a su maestro.

Itachi quedándose en el mismo lugar vio divertido como el chico rubio iba corriendo a tomar un bote y atravesaba la laguna para llegar al frente muy rápido.

--Interesante…-- Vio como Deidara sacaba de sus mangas unas dagas y empezaba a interrumpir en la casa.

Deidara vio a un chico pelirrojo chupando la sangre de una mujer quien ahora se encontraba muerta.

--¡Soy el moje Deidara y eh venido aquí para atrapar a los repugnantes demonios!—habló apenas entró.

--Pero que tenemos aquí—dijo el pelirrojo dejando a la chica y relamiéndose la sangre manchada alrededor de sus labios.

--¡Calla! ¡¡Pagaras por todos tus crímenes!!— gritó empezando a atacar.

La pelea duro mucho tiempo, Itachi estaba a punto de ir a ayudar al rubio pero se detuvo al detectar a un Moje muy poderoso, entonces decidió solo mirar con atención desde el lugar que estaba.

Jiraiya consiguió información de ese lugar, hasta que sintió la presencia de un demonio muy cerca, así que fue corriendo a ese lugar. Grande fue su sorpresa al encontrar a Deidara peleando con ese demonio.

Pero sabía que tenía mucha desventaja así que fue a ayudarlo.

Deidara no quería ayuda y trató de alejar a su maestro de ese lugar para demostrarle que él podía arreglárselas a solas así que el pelirrojo aprovechando que el rubio estaba distraído alejando a su propio maestro, lo jaló a su cuerpo y dándole vuelta le mordió el cuello.

--Maldito…-- susurró hasta que sintió como su vista se nublaba y cada vez iba perdiendo la conciencia.

Llegaron más monjes y llevaron a Deidara para que lo revisaran por órdenes de Jiraiya, Jiraiya acabo con ese demonio encerrándolo en un pergamino.

En otro lado se encontraba Naruto riendo mientras jalaba la mano de Sasuke.

--¿A dónde me llevas?— preguntó.
--Jejeje ya lo verás—
Naruto se encontraba feliz de haber encontrado a la persona que lo había salvado, se sentía aún más feliz al saber que se había enamorado de él.

Pasaron por varias calles hasta alejarse de la ciudad, entrando a una casa Naruto tapo los ojos de Sasuke contento.

--No los abras por ningún motivo hasta que te lo diga—
--Bien…--

Entraron a más al fondo y Naruto destapo los ojos de Sasuke.

--Ahora sí—

Sasuke al abrir los ojos se sorprendió por encontrar una habitación llena de decoraciones e imágenes de Gatos negros.

--¿Te gusta los Gatos negros?—preguntó preocupado el rubio.
--Me gusta—dijo sonriendo.
--Quería mostrarte esto porque me recordaste a ellos—

Naruto se dirigió y se sentó en la cama asiendo señas para que Sasuke se acerque. Sasuke se acercó y se sentó a su lado.

--Me alegra el caerme de ese lugar—
--¿Por qué?—
--Porque esa era la única manera en la que pude conocerte—rió
--Yo te conocía desde más antes—
--¡¿Qué?!— preguntó sorprendido.
--Siempre te veía intentar escalar esa montaña—se hecho para mirar el techo –Al principio me llamaste la atención—sonrió –Y me di cuenta que me había enamorado de ti—

Naruto al escucharlo no pudo evitar sonreír aún más, su corazón latía por ese chico misterioso y a la vez hermoso.

--Te Amo—dijo sin pensar.

Sasuke al escuchar esas palabras se quiso levantar para mirar al rubio pero este lo había vuelto a la misma posición que se encontraba antes, pero esta vez Naruto estaba arriba.

--Naruto…-- susurró
--Así que conoces mi nombre- sonrió mientras se acercaba –Veo que me vigilaste mucho tiempo –se acercaba cada vez más a su rostro.

Sasuke sentía que su cuerpo no reaccionaba, solo podía mirar los penetrantes ojos del rubio acercarse más y más perdiéndose en el color intenso que emanaba de su vista.
Naruto no pudo resistirse a tocar esos labios, sentía como lo llamaban, como lo invitaban a pasar por ellas. Sin más preámbulos lo beso.
Sasuke sentía como esos labios lo dominaban, esta vez no era un beso como los que había dado antes, esta vez era con más tensión, y más amor.
Naruto mordió el labio inferior de Sasuke para que este abriera la boca y así poder explorar y sentir más de él. Sasuke al ver la señal abrió la boca dando paso a la lengua de su amado.
El beso cada vez se hacía más intenso y más apasionado hasta que el aire les hizo falta.
Aun así Naruto siguió besándolo hasta bajar a su cuello mientras empezaba a lamerlo, morderlo, marcarlo como suyo.
--Te Amo—repetía el rubio con cada beso que le daba y Sasuke sintió con cada una de sus palabras su corazón latir con mucha fuerza-
--Yo…-- decía agitado –También te Amo—dijo abrazándolo.
Naruto empezó a desvestirlo con rapidez, estaba ansioso de probar cada parte de él. Sasuke no quería quedarse atrás así que también iba sacándole su ropa.
Al quedar completamente desnudos a excepción de los calzoncillos Sasuke se posiciono mejor en la cama y Naruto subió encima de él poniendo cada uno de sus brazos a cada costado de Sasuke.
Lo empezó a besar cada centímetro sin perderse de nada mientras Sasuke solo podía sentir la increíble sensación que le daba su Naruto.
--Ah…-- gimió al sentir como este rosaba su cuerpo con su entrepierna.
--No tengas miedo—le susurraba Naruto dirigiéndose a esta parte para luego quitar el calzoncillo y contemplar unos segundos la parte intima del otro.
Sasuke estaba muy avergonzado por tal acción hasta que vio y sintió como su parte baja estaba siendo atendida por el rubio.
Naruto solo quería que Sasuke disfrutara así que empezó a subir y bajar, con su mano empezaba a jugar con los testículos del azabache haciendo que este gimiera aún más.
--Ah…. Ah… Naru… to…-- Sasuke se sentía en el cielo, estaba sintiendo su parte muy encendida y su corazón latiendo frenéticamente hasta ya no poder.
--Me…--- sintió una sensación reunirse en un punto –ve…-- pero no logró terminar y se vino en la boca del rubio.
Naruto trago y relamió el resto de semen que tenía alrededor de su boca. Luego se acercó a besar al pelinegro y mientras daba besos se acercó a la oreja de Sasuke
--Dime… -- susurró –si es tu primera vez—preguntó mientras mordía la parte inferior de la oreja dándole mayor placer a Sasuke.
Sasuke cegado por el placer asintió. Naruto estaba a punto de pasarle los tres dedos a Sasuke para que este los relamiera y pudiera lubricarlo pero el azabache lo detuvo.
--No –se negó --yo quiero sentirte ya—dijo sonrojado sorprendiendo al rubio.
--Pero… no quiero last…-- pero no pudo terminar porque Sasuke lo abrazó y lo besó.
--No importa – le dijo apenas estar separados –Yo lo soportaré –
Naruto al ver los ojos decididos del pelinegro lo volvió a besar, la verdad era que él ya no podía soportarlo pero necesitaba tenerlo, hacerlo suyo lo antes posible.
Posicionándose en medio de Sasuke se sacó el calzoncillo que aún llevaba haciendo muestra de su parte intima toda dura. Se notaba que pedía tención.
Se posicionó en el ano y con calma fue metiendo su miembro poco a poco tratando de no lastimar al pelinegro.
--Du..—Sasuke se mordió el labio para que Naruto no notara lo mucho que le dolía su parte interna.
Naruto se sentía bien dentro de Sasuke pero tampoco era un tonto y sabía que al otro le dolía así que se acercó y lo besó tratando de concentrarse en los labios del otro, agarró con una mano el miembro del otro y empezó a subir y bajar para que este se distraiga con el placer.
El método le funciono porque el dolor que Sasuke estaba sintiendo desaparecía con el placer que le estaba proporcionando.
Naruto ya no podía más así que empezó a moverse suavemente haciendo que Sasuke sienta placer en su interior, luego de acostumbrarse al vaivén lento, Sasuke pidió que Naruto se moviera más y así lo hizo.
Moviéndose uno junto al otro se besaban en momento y se decían que se amaban con todo el corazón, Sasuke no dudaba del gran amor que sentía Naruto por él y tampoco dudaba del amor que sentía él.
La noche fue pasando y los dos demostraron su amor con ella. Naruto era de Sasuke y Sasuke de Naruto.
Un Gran lazo se formó el primer día que formaron su amor eterno.
Al día siguiente los dos se levantaron con risas, Naruto jugueteaba con Sasuke y este le demostraba que no era arrogante cuando se trataba de demostrar sus sentimientos.
Rieron y caminaron por las calles demostrando el amor que se sentían, algunas parejas susurraban mal ante tal acción pero a ellos no les importaba, sobretodo a Sasuke.
Los amigos del rubio le preguntaron a dónde lo había llevado el tipo de cabellera negra de la noche anterior, Naruto respondió todo lo sucedido a excepción de lo personal.
Sasuke se mantenía serio y callado, no quería molestar al rubio y mucho menos enfrente de sus amigos así que no dijo nada de nada en todo momento.
--¿Te sucede algo?—preguntó preocupado Naruto cuando se habían alejado del grupo.
--No, nada Naru mejor vámonos a casa—dijo incómodo.
--Bien…-- dijo dudoso Naruto.

Sasuke quiso quedarse pero vio a un monje que emanaba mucho poder y tenía miedo que lo viera con Naruto.
Pero ya era tarde pues el monje apareció frente a ellos.

--Hola, soy el legendario monje Jiraiya—dijo presentándose.
--Jejeje hola amable señor—saludo Naruto sonriente –Yo me llamo Naruto Uzumaki y este de aquí es mi novio—dijo mostrándole a Sasuke.
--Con que novio eh…-- dijo mirando fijamente al pelinegro.
--Sí, y creo que muy pronto será mi pareja eterna—rió contento.
--¡¡Naruto!!—escuchó que alguien gritaba y el rubio se dio la vuelta para ver quién podría ser.
--Eh? Kiba?—
--¡¡Naruto ven, olvidamos darte algo!!—gritó el pelicafé.
--¡¡Ya voy!!—gritó también luego vio a Sasuke –Ahora vuelvo—lo beso y luego miró al peliblanco—Un gusto conocerlo señor Monje—se inclinó como reverencia y fue corriendo hacia donde sus compañeros lo llamaban dejando solos al Monje y a Sasuke.

--Tienes que irte de una vez ¡Demonio!—lo miró fijamente
--No tengo porque hacerle caso señor Monje—dijo Sasuke fastidiado.
--¿Cuál es tu plan?, ¿Por qué lo hechizaste y enamoraste?—le preguntó
--No sé de qué está hablando—dijo molesto y confundido.
--No permitiré que manipules la mente de un Humano—dijo mirándolo de la misma manera que ahora lo miraba Sasuke –Te advierto, vete de esta ciudad a donde perteneces—

Después de eso se dio media vuelta y desapareció.

--Tsk—Sasuke no entendía muy bien lo que trataba de decirle y la verdad era muy molesto, ya que sentía un mal presentimiento.


--Ya llegué—dijo agitado Naruto mientras abrazaba a Sasuke –Ese Kiba solo me estaba jugando una broma—dijo haciendo un puchero --¡ah! Y ¿Dónde está ese señor?—preguntó mientras lo buscaba con la mirada.
--No importa, mejor volvamos a casa Naru—dijo agarrando la mano del rubio.

En otro lado se encontraba Deidara despertando.
--¿Qué paso..?—se preguntó a él mismo mientras se sujetaba la parte que le dolía. La cabeza.
--Te desmayaste, eso pasó—dijo un sonriente Itachi.
--¡¿Pero tú qué haces aquí!—preguntó sorprendido.
--¿Qué? No agradeces de que te haya salvado—dijo fingiendo estar triste
--¡¡Que me salvaste tú! Vamos no bromees—dijo enojado mientras se levantaba.
--Para que vieras que tengo buen corazón—dijo riendo –Además estaban a punto de enterrarte—
--¿Qué? ¿Por qué?—
--Pues te mordió un Demonio y parecías muerto—lo miró – según los Monjes que te atendieron—

Deidara recordó de la mordida y rápidamente vio su cuello.

--¡¡¡Ah…!!!—gritó con miedo.
--¡Cálmate de una buena vez!—dijo un poco molesto el pelinegro.
--Cómo quieres que me calme ¡si acabo de ser mordido por un maldito Demonio!—dijo mirándolo enojado.
--Eso no es nada malo—cerró los ojos demostrando tranquilidad –Solo te convertirás en uno—dijo sin más y rápidamente tapo sus dos oídos con su mano.

Deidara empezó a gritar aún más fuerte mientras se paraba y caminaba de un lugar a otro. Itachi trató de calmarse y aprovechando que el rubio se movía eufórico, lo agarró de la cintura y lo encerró en sus brazos.

--Oye… Maldito ¡suéltame!—ordenó Deidara –No eres tú quien se convertirá en un maldito Demonio—dijo enojado.
--Pues… yo no pensaría lo mismo—dijo sonriendo y acercándose al rubio.

Cuando estuvo lo suficientemente cerca del rubio abrió la boca mostrando sus colmillos y empezando a convertirse en serpiente para sujetar todo su cuerpo con su cola.

Deidara quedó muy sorprendido y arrugo su entreceño aún más –No me digas que tú…--

Itachi convirtió la parte de arriba en humano –Sí—sonrió –Soy un “maldito demonio”—rió divertido dejando libre al rubio y convirtiéndose en Humano completamente.

--¡No te me acerques!—dijo enojado

--No tengas miedo, además tú también serás uno de nosotros—dijo riendo aún más pero luego se calmó –Así que necesitaras mi ayuda—sonrió
--¡¿Qué….?!—
--Tú no sabes nada de cómo ser un demonio—dijo explicándole –Pero yo te voy a ayudar porque desde el momento que te vi me caíste bien— lo miró sin dejar de sonreír.

--Bien… pero luego me largo de aquí—dijo mirando hacia otro lado
--Trato—

Así Paso el día y Deidara fue aprendiendo cosas nuevas de cómo ser un demonio, también aprendió el significado de vida eterna en los demonios y la energía vital que poseían.

--Y pues… es muy peligroso ya que te quita los años de vida —
--¿y Cómo se te las quita?—
--Es muy simple—dijo mirándolo –es cuando entregas todo tu corazón a algo muy importante, un lazo que transfieres hacia algo y ese algo lo acepta… es por esa razón que….— en ese momento recordó lo que su madre le dijo.

“El demonio mató a la mujer que amaba al entregar toda su energía vital hasta el punto de olvidarse de ella”

“Creo que me eh enamorado”

Al recordar las palabras de su hermano menor supo que cometió un grave error al acercarlo al rubio.

--oh no…--
--¿Qué sucede?—preguntó Deidara confundido.
--¡La clase terminó! Tengo que irme—dijo convirtiéndose en serpiente y volando hasta la ciudad para encontrar a su hermanito.
--Pero que…--Deidara solo se quedó confundido.

Sasuke y Naruto se la estaban pasando de maravilla hasta que Naruto sintió una opresión en su pecho.

--¿Sucede algo Naru?—preguntó preocupado Sasuke.
--No, tranquilo ¡yo me siento de maravilla!—sonrió para no preocuparlo, aun así Sasuke sabía que mentía pero le siguió la corriente.
--Agh…-- el dolor volvió a su pecho y se empezó a remover, Sasuke se veía muy preocupado. Algo estaba pasando con su Naruto.
--Llamaré al médico—dijo tratando de salir pero en la puerta se encontraba el Monje de esta tarde.
--Yo lo atenderé—
--No, solo lo empeoraras—
--Te dije que te fueras y te di la oportunidad—lo miró serio --¡¡Por qué no lo hiciste!! –
--¡No pienso hacerle caso a un Monje!—
--¡Pagaras las consecuencias!—

Sasuke y Jiraiya empezaron a pelear, Naruto al escuchar el ruido trato de ir a ayudar a Sasuke pero el dolor en su pecho era insoportable y sin más se dejó caer en el suelo, por otro lado Sasuke tuvo que convertirse en su forma verdadera, una serpiente negra gigante, con escamas finas y unos colmillos venenosos, haciendo que el peliblanco quede sorprendido.

--La serpiente Negra…-- susurró recordando lo que ese animal significaba, sin duda alguna era un demonio muy peligroso –¡Tú no deberías de acercarte más a ese muchacho!—dijo mencionando al rubio.
--¿Por qué lo dices?—preguntó enojado mientras atacaba, Jiraiya esquivaba los ataques sin mucho esfuerzo.
--Eres un gran peligro para él—dijo, mientras recordaba lo que su abuelo le había contado cuando era niño.

En esos tiempos el demonio que mató a su amada era un demonio muy especial, un demonio que en esos tiempos era llamado Madara Uchiha “La Serpiente Negra” la misma serpiente que ahora estaba presenciando.

--Tienes que irte, por tu bien y el bien de él—dijo sin hacer ningún movimiento.
--No puedo…-- susurró Sasuke.
--¿Por qué no puedes?—preguntó mirándolo de frente, Sasuke solo agachó la cabeza.
--Porque… yo…. En verdad lo Amo—
--Tú solo te obsesionaste…-- lo miró –Esto… ¡No es Amor!—
--¡Yo sé lo que siento!—

Los dos empezaron a pelear como nunca pero quien llevaba más ventaja era Jiraiya, Naruto sentía su vista borrosa así que no pudo ver ni oír nada, con mucho cansancio y dolor se desmayó.

Jiraiya dejó a Sasuke mal herido y alzo a Naruto en sus hombros para llevárselo al templo.

--Q-Qué… le vas a hacer…-- preguntó a duras penas el pelinegro.
--Le borraré todo recuerdo que tenga hacia ti—dijo Jiraiya cerca de la puerta – No permitiré que hagas daño a un ser Humano—
--No puedes….—dijo mientras empezaba a llorar en el suelo –No puedes hacer que se olvide de mi Amor—dijo mirándolo con los ojos rojos y muchas heridas en todo su cuerpo mientras cada vez le salían lágrimas.
--Lo siento, pero es mejor que vuelvas a donde perteneces y nunca regreses—dijo sin más y desapareció junto con el rubio.
--¡¡Naruto…!!-- gritó tratando de ir a por él pero este ya no estaba.
--¡¡Sasuke!!—Itachi llegó y vio a Sasuke en el suelo y malherido --¡¿Quién se atrevió a hacerte esto!?—dijo apretando los dientes mientras lloraba por su hermanito y lo sostenía con cuidado.
--Itachi…-- susurró al ver el semblante de su hermano y se desmayó.

Abrió los ojos lentamente mientras trataba de recuperar la vista.

¿Dónde estaba?

Al poder aclarar sus ojos vio que estaba rodeado de muchos hombres con túnicas, no sabía por qué estaba en ese lugar y sentía un poco de miedo tras pensar lo peor.

--Ya despertaste—sonrió un monje que apareció frente a él –No te haremos nada, solo siéntate y deja que nosotros nos encarguemos de todo—Habló con calma.
--No puedo quedarme—respondió Naruto de repente –Sasuke debe estar preocupado –dijo mientras se paraba con mucho esfuerzo pues se sentía muy pesado.
--No puedes irte hasta que terminemos de curarte—
Naruto sin hacer caso a ese monje, caminó hasta la salida pero algo como una especie de barrera lo detuvo.
--¡Pero que…!—estaba sorprendido, acaso no lo dejarían salir por nada en el mundo.--No me pueden obligar a quedarme—gritó mientras intentaba pasar la barrera trasparente.
--Se irá cuando terminemos—y sin previo aviso el monje sujeto a Naruto y lo obligo a sentarse como si de un títere se tratara.
--¡¡Yo me tengo que ir!!—dijo molesto hasta que de repente apareció el mismo monje que había visto en la ciudad.
--No puedes irte—de repente este se acercó al rubio, algo extraño apareció en sus cinco dedos y con impulso las choco con el estómago del rubio.
--Agh…-- Naruto sentía como su estómago estaba ardiendo y de repente volvió a sentirse inmune. Sentía como todo su cuerpo se paralizaba.

Los ojos del rubio se volvieron blancos y su cuerpo se quedaba quieto en un mismo lugar. Como si no tuviera vida.

Jiraiya se sentó frente al rubio y empezó a concentrarse. Esta manera era la única forma para que ese muchacho inocente no sufra como lo hicieron bastantes personas en el pasado.

La noche se hizo presente, Sasuke e Itachi se encontraban en la misma montaña a la que siempre iban, Itachi había cuidado a su hermano todo ese tiempo, Sasuke se sentía un poco triste por lo que había dicho ese Monje y por todo lo que le había contado Itachi.

--Hermano…-- lo llamó –tengo que ir a por él—
--No, Sasuke eso es peligroso—
--No puedo dejar que ese hombre destruya el Amor que sentimos—
--Sasuke no puedo permitir que hagas tal tontería- lo agarró de los hombros –Ya te dije que es lo que sucede con nuestra energía vital, ese monje tomó la más sabia decisión—dijo mirándolo a los ojos.

--No me pidas que borre todo este sentimiento que tengo hacia él—
--Sasuke yo solo…--
--¡No! Si no quieres ayudarme está bien pero yo no puedo permitirme borrar todo lo que siento—se quitó las manos que tenía encima y se volteó –Además estoy seguro que ya le di la mitad de mi energía—

De pronto se convirtió en la serpiente negra y se fue dejando a su hermano mayor solo.

Al llegar al templo quiso entrar lo más antes posible para salvar a su amado pero apareció un pelinegro de cabello corto y piel blanca.

--No puedo dejarte pasar—dijo mirándolo
--Entonces entraré por la fuerza—dijo Sasuke enojado.

Mientras que en adentro todos los mojes seguían meditando alrededor del rubio mientras que un aura azul los rodeaba.

En afuera el pelinegro había atacado con una técnicas extrañas a y este fue decayendo cada vez más.

--No puedes…--
--Ya lo hice…-

El otro estaba por atacar con una técnica contra demonios hasta que otra serpiente aprecio y lo enredo de sorpresa para que no escapara. Sasuke se quedó sorprendido al encontrarse a su hermano.

--¡¡Itachi!!—
--Ototo baka sabes bien que no te dejaré hacerlo solo—dijo sonriendo –Apúrate y ve a salvar a mi cuñado—rió.
--Gracias…-- susurró y se convirtió en serpiente.

Itachi vio cómo su hermanito corría para salvar a la persona que amaba, bajó la cabeza y se preguntó si en verdad el Amor era tan poderoso. Pero no lo sabía.

--No lo permitiré—gritó el ahora liberado pelinegro de antes.

Itachi sorprendido vio su cola y resulto que en verdad había escapado y estaba persiguiendo a Sasuke así que con un rápido movimiento volvió a atraparlo.

--Yo no permitiré que le hagas daño a mi hermanito—lo miró enojado.

Sasuke había entrado pero se encontró con muchos monjes así que muy a su pesar peleó con cada uno de ellos sin embargo nada funcionaba ya que llegaban más y más.

¿Qué podía hacer?

Recordó que el templo se encontraba en un lugar rodeado de agua, así que como era un demonio atrajo el agua como una ola e inundó el templo.

Todos escapaban para no morir ahogados dando paso para que Sasuke fuera por el rubio, pero al llegar la puerta estaba sellada.

Empujó y empujó para poder salvar a su Naruto pero el sello no se rompía.

En adentro Jiraiya seguía concentrado, el agua subía y sabía quién era el causante de ese desastre, pero no dejó de concentrarse en el rubio.

Cuando el Agua inundó todo, todos los monjes que se encontraban se mantenían concentrados como su mentor, pero debilitaron el poder del sello haciendo que el azabache tuviera acceso a la habitación.

Sasuke cuando por fin pudo entrar vio a Naruto quieto enfrente del Monje peliblanco, con rapidez se fue acercando pero los monjes que se encontraban alrededor no dejaban que pasara.

Con mucho esfuerzo empujo y aparto a los monjes haciendo que se desconcentraran y quisieran salirse a tomar aire. Sasuke se acercó cada vez a su Amado y cuando lo alcanzó algo apareció a su alrededor. Un Aura roja.

Aun así lo tomó y lo sacó de ahí para que no se ahogara.

En afuera Itachi y el otro estaban empatando, cuando vieron el agua acercarse Itachi se distrajo, el otro aprovechó para apuñalarle en su cola y para escapar en ese momento.

Itachi resistió el dolor y trató de salir lo antes posible de ese lugar pero estaba sangrando demasiado y eso lo debilitaba más de lo que había imaginado.

--¡¡Itachi!!—Gritó Deidara quien recién había llegado.
--¡¿Deidara?!—
--No te preocupes yo te ayudaré—y de pronto con lo poco que aprendió se convirtió en un ave blanca gigante y agarrándolo con sus garras lo llevó a la orilla.

En el otro lado de la orilla estaba Sasuke agitado mientras trataba de hacer que el rubio reaccionara.

--Naruto…-- empezó a darle primeros auxilios pero no despertaba –¡Naruto por favor!—estaba demasiado preocupado.

Tuvo que darle respiración boca a boca y así logro que el otro despertara encontrándose con los ojos del azabache, Sasuke alegre loa abrazó.

--Me asustaste—empezó a sollozar –Dobe…--
--¿Eh?—Naruto lo miró confundido --¿Quién eres?—preguntó

Sasuke dejó de abrazarlo y lo miró sorprendido.

--Te dije que te alejaras— Escuchó una tercera voz atrás de él, se dio vuelta y miró al causante de aquello.
--¿Por qué se empeñó en separar nuestro amor?—pregunto mientras las lágrimas amenazaban con salir.
--Eso no es Amor ¡ya te lo dije! Es solo una obsesión—
--Claro que era amor—

Sasuke cegado por la rabia empezó a querer a atacar al monje pero este hizo una posición extraña con sus manos.

--Te advertí y te di la oportunidad de escapar—
De repente del cielo cayeron unas murallas alrededor de Sasuke encerrándolo en ellas.

Un poco cerca de Ahí se encontraban acercando Itachi y Deidara.

--¡¡Sasuke!!—gritó Itachi al ver esa escena y quiso ir a salvar a su hermanito pero Deidara se lo impidió.
--Lo siento Itachi—lo miró a los ojos –esa técnica que hizo mi maestro es una técnica de encarcelamiento—se entristeció –Tu hermano será encerrado por 1000 años en ese lugar—

--Pero yo tengo que ir—dijo triste
--No puedes hacer nada más que esperar esos mil años, si mi maestro te ve te encerrará a ti también—dijo tratando de hacerle entender.

--No me importa – Itachi estaba dispuesto a ir y tratar de salvar a su hermano pero se detuvo al sentir como Deidara lo abrazaba por detrás.
–Pero a mi si me importa—dijo ocultando sus ojos en la espalada del mayor.
--Deidara…-- Itachi se quedó sorprendido y algo empezó a brotar en su pecho.

Mientras tanto Naruto quedaba quieto y sorprendido por lo que acaba de presenciar, No recordaba nada de cómo había llegado a ese lugar pero algo le decía que ese chico de cabello azabache era muy importante. Así que no pudo evitar ver esas murallas.

Sasuke estando adentro se convirtió en serpiente y trato de derrumbar las paredes que lo encarcelaban, pero no lo lograba. Estaba muy débil, su corazón le dolía.

“¿Quién eres?”

Esas palabras no dejaban de aparecer en su cabeza, Naruto ya no lo recordaba, ya no recordaba todo lo que habían hecho juntos, Ya no lo Amaba.

No pudo evitar llorar, llorar como nunca, el dolor era tan inmenso que no lo soportaba. Solo quería una cosa.

--Por favor… solo quiero verlo una última vez—dijo sin dejar de llorar. –POR FAVOR--

Sentía como su corazón se rompía en mil pedazos y las esperanzas se iban.

Hasta que una luz apareció acercándose a su oreja.

--Una última vez…-- susurró la luz sorprendiendo a Sasuke y de pronto vio como una pared se abría.

Sasuke salió de ese lugar y se dirigió al rubio.

--Naruto….—dijo abrazándolo, Jiraiya se quedó sorprendido de que pudiera salir y cuando quiso volver a encerrarlo entendió cuál era la razón por la cual había salido, Kami-sama estaba ayudándolo.

--L-Lo siento… pero ¿cómo sabe mi nombre?—preguntó curioso

Sasuke solo se separó y sonrió mientras miles de lágrimas salían de sus ojos, Naruto al ver eso se asustó.

--No, No tienes que responderme si no quieres—se disculpó, pero Sasuke seguía llorando.
--Naruto yo en verdad…—Sasuke se acercó y logró darle un beso.

Un beso como la primera vez, un beso lleno de Amor y sentimientos, un beso que significaba todo para él en esos momentos.
Naruto sorprendido no pudo evitar seguir el beso y con cada rose que daba sentía que lo conocía que lo había tocado antes, hasta que de pronto llegaron todos los recuerdos perdidos.

--Te Amo…-- susurró Sasuke.

Un fuerte viento se acercó y fuertemente jalaban a Sasuke hasta las murallas, Sasuke soltó lentamente a Naruto y llorando dijo –Nunca dejaré de amarte…--

Naruto sintió como su corazón dolía al ver a su amado de esa manera, al ver como se lo llevaban y alejaban de su lado. No quiso soltarlo, No podía dejar que ese Amor se alejase de esa manera.

Sus ojos se inundaron de la misma manera que la del azabache y al querer agarrarlo no pudo alcanzarlo.

--¡¡Sasuke!! Yo también…-- grito con mucho dolor –Yo también Nunca dejaré de Amarte—empezó a llorar.

Sasuke sonrió y la muralla se cerró en frente de ellos encarcelando a Sasuke por mil años.

Naruto se dejó caer y susurrando varios te amos lloró sin parar.

Itachi no fue a salvar a su hermano pero si vio esa escena y resistiéndose las ganas de ir a consolar a su cuñado y salvar a su hermanito se dio la vuelta y con la mirada en frente decidió quedarse a esperar por su hermano mil años en su lugar favorito.

Deidara quien también vio la escena, sonrió de tristeza y caminando por el otro lado en la que Itachi se había ido se alejó.

Los dos sabían que el Amor era algo muy doloroso y también sabían que nunca podrían enamorarse de la misma manera en que se enamoraron Sasuke y Naruto.

Jiraiya dejó la muralla al cuidado de Monjes y decidió viajar por el mundo para averiguar el significado del Amor.
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Pasaron los Años y Naruto se quedaba a cuidar la muralla junto con los monjes para estar siempre cerca de su Amado. Había veces en la que se hablaban a través de la muralla por las noches.

La primera noche:

--Lo siento por no recordarte—dijo Triste Naruto apoyado en la pared de la muralla.
--No, perdón por no decirte la verdad—dijo Sasuke apoyado dentro dela muralla.

Todas las noches era lo mismo y siempre repetían esas palabras y para despedirse terminaban con un Te Amo y que duermas bien.

Pues a pesar de que Naruto iba envejeciendo, Sasuke nunca dejaba de amarlo, y cuando cada año la voz se escuchaba más vieja y desgastada a Sasuke le seguía gustando escucharla.

Hasta que después de 80 años Sasuke ya no escuchó la voz de su Amado, pues este había fallecido de vejes.

--Te Amo Naru—

Repetía cada noche y lloraba al darse cuenta que aunque salga de esa maldita prisión ya no escucharía la voz de su Amor.

Pero el viento siempre soplaba y le respondía mientras este dormía.

--“Te Amo Sasuke”--

FIN

 

Notas finales:

Feliz Navidad pasada Patty Ramos xD lo siento por la tardanza de tu regalo. Y pues este es un fic que siempre quise hacer pero nunca había oportunidad, ahora me arrepiento pues… son más de ocho mil palabras y pues tuve que resumirlo y dividirlo en dos partes :’v solo espero que les haya gustado :3

Nos vemos con otra historia bye… :3
Cabe la posibildad que haga la segunda parte :) pero solo si les ah gustado.


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