---Sascha---
Mikael es el mejor hermano que pueda existir, es el único en la familia que me apoyo cuando se enteró de mi orientación sexual, por desgracia él hace varios años que no vive en casa ya que se casó, bueno no por desgracia, Danna, su esposa es muy agradable y cocina muy bien, además hace poco tuvieron un bebe y es muy lindo, bueno yo me quede bastante solo y tuve que afrontar también solo la paliza que me acomodo mi padre al enterarse de mi secreto, pero esta bien, ahora que ya tengo 18 años poder trabajar y seguir por mi cuenta, si estoy triste, pero siempre supe que el momento llegaría.
Miki me llevo hasta el departamento de Yina, ella es mi amiga o algo así desde que puedo recordarlo, tiene 25 años y es algo excéntrica, pero es divertida y nos entendemos muy bien, ella tiene el cabello corto teñido de rosa, mide 1.59 de altura, ojos azules llenos de maldad, bueno no, es muy linda, cuando yo era un pequeño niño de 3 años y ella una loca de 10, solía pedirle permiso a mi madre para jugar conmigo y cuidarme, mi madre accedía solo si tenía la supervisión de su madre, ella me trataba como a una muñeca, peinaba mi cabello, me ponía moños y falditas y cambio me sobornaba con dulces, Mikael cuando la descubría solía tomarme fotos en vez de defenderme cuando yo era un inocente bebe, ahora como broma le digo que ella fue la que me volvió gay, si, solemos divertirnos mucho aunque sea mayor que yo, aunque claro ya no me trata como a un bebe, ahora es una loca pervertida que quiere abusar de mi integridad como persona, por eso Miki me pregunto si iba a estar bien con ella, la verdad es que nos tenemos bastante confianza y si, solemos llevarnos muy pesado, pero cuando la necesito siempre esta ahí, se podría decir que Yina es mi mejor amiga y mujer de confianza, si yo fuera hetero sin dudarlo ya le hubiera podido ser mi novia.
Luego de un camino aproximado de 25 minutos por fin llegamos a su departamento, ella de inmediato abrió.
-Hola Mikael
-Hola, entonces está bien que él se quede contigo?, ya sabes, un macho viviendo con una señorita-reí ante el comentario
-Estaremos bien, es mas probable que el este en peligro y lo sabemos-ambos se miraron complices y luego a mi, yo sonreí.
-Vale, tengo que volver al trabajo, después regresare a verte ok?
-Si Miki, gracias-lo abrace, el me extendió la mano con una buena suma d dinero, lo mire sorprendido
-No Miki…..traje conmigo mis ahorros, serán suficiente en lo que consigo un trabajo
-Tómalos Sascha, por favor
-Gracias Miki…te los pagare
-Te los estoy regalando idiota-beso mi frente, mis ojos estaban acuosos, pero no iba a llorar, no enfrente de alguien.
-Vale…..gracias, nos vemos después
-Cuidate de Yina
-Ey!-ella le reclamo, yo rei, luego Miki se fue y Yina me ayudo a meter las cosas a su casa