Era una de las fiestas q hacían para celebrar el éxito de las películas de los vengadores y de las de Thor.
Y habría sido otra aburrida fiesta más (por lo menos para Chris) si es q, él, en especial no hubiera asistido.
Tom reconocía, q en lo personal realmente era tímido y algo asocial. Disfrutaba más de los eventos privados con contados amigos cercanos. No la clase de fiestas q solían dar el elenco de actores y sobre todo los productores; según Tom (“el recatado”) mandaban la casa por la ventana al más puro estilo, “fiesta de hermandad americana”. Y no es q fuera un quisquilloso del control; es solo q se sentía fuera de lugar entre toda esa multitud.
No lo criticaba, pero no era lo suyo.
Por eso, de manera cortes, había rechazado todas las invitaciones a las fiestas q le habían hecho. Pero…pero, esta última no la pudo rechazar tan fácil; uno de los motivos era porque, precisamente, esta sería una de las últimas fiestas q tendrían juntos como elenco; y otro de los motivos era porque, en esta fiesta, había demasiada gente reclamando su presencia…
Ahora parecía q la producción y el elenco habían conspirado en su contra, presionándolo a coro, para q fuera, eso sin mencionar la presión de los medios, otras productoras y muchos y muy reconocidos directores y/o actores (que creído >_>). Incluso su agente, lo estaba presionando también, le había dicho…
Flash back
*-me tienes hasta los cojones con tu actitud, de “princesita encerrada en la torre”. Desde ya te digo q no hay ningún dragón impidiéndote el paso y q para colmo, el caballero q venía a rescatarte, resulto ser un insufrible pelotón de fans llorones, q solo saben corear tu nombre entre suplicas, mientras se vienen con solo decir las palabras, Tom y braga, en la misma oración. Deja de ser engreído y se más considerado conmigo. Todos quieren verte en esta fiesta. YO. Quiero verte en esta fiesta, asique vas a ir. Así sea lo último q hagas. ¿Capichi diva?. Eso o te aseguro q para ti no llegara el nuevo sol...
Fin del flash back
Su agente era bastante educad* pero cuando perdía los estribos, todos sus modales se iban por el caño.
Por eso mismo, estaba en un rincón en el estacionamiento de la enorme casona en la q se realizaba la fiesta, sintiéndose más incómodo de lo q podría describir con solo palabras.
Aun q aquella “paz y soledad” no duro demasiado. Ya q apenas y entro por la puerta principal de la casa, un monto de flashes lo dejaron ciego, literalmente. Los medios le rodeaban asiéndole preguntas de todo tipo…
Robándole el aliento al pobre Tom, precisamente, porque lo rodeaban en un tan estrecho círculo asía su persona, q el aire empezaba a faltar, para todos. De ahí q se decía q estar cerca del actor británico, cortaba el aliento. Literalmente, así era.
-¿está casado?-por qué preguntaban eso si ya sabían la respuesta. Obvio. No.
-es cierto q ¿tiene un amante colombiano y candente?-que tipo de rumor era ese, si nunca había ido a Colombia, ni había conocido a nadie de ese lugar. ¿Cómo podría tener una relación sentimental?
-es cierto q ¿será nominado a los 10 hombres más hermosos del siglo 21 y del año 2015?-eso, no lo sabía, tal vez su agente si lo supiera.
-¿cuáles son sus medidas?-amenos q fueran de vestuario, ¿cuál era el sentido de preguntar esas cosas?, le daba algo de vergüenza la verdad (que inocente >.<)
Ante todas esas preguntas, no era buena idea responder ninguna. Los medios siempre escuchaban lo q querían escuchar, eh incluso, eran capaces de distorsionar la información, con tal alimentar sus alucinaciones auditivas y sus perversas elucubraciones.
La mejor idea, siempre era, guardar silencio, uno sepulcral, mientras presumía una pequeña sonrisa, calmada y encantadora. Con la frase “Yo tengo la absoluta razón” tatuada en toda la cara.
Cuando los medios, estuvieran al pico de su excitación, conteniendo hasta el aire en la espera de oír su voz, solo diría. Que:
T-Daremos una conferencia de prensa, para responder a todas sus preguntas con el debido respeto y atención q se merecen. Pero por el momento, esta fantástica noche. Los invito a disfrutarla conmigo, dejando de lado, el trabajo para dejar todo esto, salir a esta noche y arriesgarnos a lo q pueda pasar. Solo lo impredecible y misterioso, es lo seductor. Lo q todos quieren-debía trasmitir seguridad en sus palabras. Ordenarles, imponerles aquello q debía sentir aquello. Que quiera q sintiera. Todo dependía de la autoridad con la q se hablara al resto para implantar una idea, q solo se podría nutrir con más de sus palabras, creando una línea de perfectos dependientes. Y para rematar, su breve discurso hipnótico, debía sonreír más grande, mostrando sus perfectos dientes, a continuación, batiría las pestañas, y con eso se despediría.
Un actor debía ser seguro. Un actor debía ser dominante. Porque sus fanáticos no esperaban otra cosa de ellos. Más q sus órdenes. Esperaban escuchar aquello q el actor diga q es bueno, para seguirlo a ojos serrados. Un fan era un devoto y entregado admirado, q convertía a un actor en su dios.
Aun q la “faena” no terminaba ahí. Después de q se deshizo de las vergonzosas preguntas de los reporteros, otras personas lo rodearon. Empezaba a volverse claustrofóbico, en medio de tanta multitud invadiendo su espacio personal. Eso, sin mencionar, toda la cantidad de veces q le metían mano. Después de los concurridos eventos, a los q literalmente era obligado a ir, al retornar a casa, tenía los muslos inflamados, la espalda baja, acalambrada y…las nalgas rojas de tantos, apretones, pellizcos y nalgadas, q recibía “disimuladamente” de reporteros, actores, directores eh incluso camareros y uno q otro guardia de seguridad, se sentía. !Tan avergonzado!. Aun q no hubiera mucho q pudiera hacer para impedirlo. Después de todo a lo largo de su vida, había recibido ese tipo de toques, tantas veces como había pestañeado. Por un tiempo tubo la ilusa idea de q cuando se convirtiera en un actor profesional, la gente lo respetaría y el acoso, se detendría. Pero, oh q equivocado había estado. Porque el acoso solo se había intensificado, al punto de ser casi descarado; pasaba largo rato cuidando esa piel dañaba, y gastaba un montón de pasta comprando cremas y ungüentos q le cuidaran un poco esa piel tan sensible q tenia; era horrible porque dolía y no podía sentarse en, por lo menos, esa noche entera (dormía boca abajo *U*).
Antes de q perdiera la compostura completamente, sintió como una ruda mano, lo jalaba. Iba a quejarse, por lo brusco del agarre, hasta q se topó, con la boba sonrisa de Chris…
T-¡Chris!...-grito muy emocionado Tom. Chris le caía, muy bien porque era muy amable con él, además…era lindo... (>//<)
C-Tom, no espere a q vinieras a esta fiesta, la verdad. Pero estoy contento.- la bola de moscas q lo perseguían cual miel, parecieron “dispersarse” discretamente, mientras los observaban a él y a Chris, conversar, de trivialidades. Y Tom agradecía a todos los dioses nórdicos por la presencia del rubio, porque siempre q estaba con él, nadie se le acercaba para hacer nada. Era como si el australiano desprendiera un aura tan imponente q intimidaba a cualquiera y en cambio a Tom solo lo resguardaba.
Y la noche casi pudo seguir así de amena, entre las tiernas miradas q le daba su compañero de trabajo, de no ser por la sugerencia. De no se q pobre diablo, q literalmente, exigió, q Tom bailara. Nuevamente la presión social se hiso insoportable y tubo q ceder. Iba por la mano de Scarlett. Cuando la gente volvió a exigir q lo hiciera, solo él. De inmediato le pasaron un tema de Britney, Gimme more.
Tom sintió los colores subirse, sin q pudiera controlarlo. Es que…era tan tímido
Se sentía apabullando.
Pero una vez más recordó. Que él era actor, y no por nada uno de los mejores (¡creído! Lo sabe y lo presume) naturalmente, sabría cómo actuar como el alma de la fiesta.
Querían un host. Tendrían un host.
La música fue sonando más alto a cada paso q daba, al centro de la sala. Las miradas se clavaban en él. Disfrutando de su actuación, disfrutando de él.
Su caminar, era impecable, perfecto, era uno de pasarela, al más puro estilo de las modelos. Sus caderas, se bamboleaban rosando sus brazos a los costados, su espalda, totalmente recta y su cuello erguido, los hombros así atrás, tensando su firme y plano abdomen y alzando el trasero, para menearlo, coqueto y con estilo, como el rabo de un felino, el mentón levantado, y el ritmo con el q dirigiría cada paso. Y lo mejor era esa sonrisa más coqueta y seductora q tenia. Esa q promedia la mar de placeres desconocidos y excitantes solo de la mano de esa perfecta y blanca hilera de dientes. Tan sexy.
Rio junto con la canción, viéndose, perversamente sugerente. Empezó a chasquear los dedos, y amover las caderas rítmicamente. De un lado para el otro. Al rimo de la maldita y sexy canción de Britney.
Movió, los brazos, levantándolos un poco, y sacudió la cabeza, cantando la canción. Mientras sus caderas iban en círculos casi saltando de arriba abajo. Sus piernas le ayudaron, cuando se movieron dando pequeños círculos junto con su trasero alzado. Sus manos se unieron a su cuerpo, recorriendo desde su pecho, hasta sus muslos, doblo un poco las rodillas volviendo a levantarse, levantando primero el trasero y estilando muy bien las piernas largas, como ofreciéndose, un paso, q mataba a muchos. Ahora movía la cabeza con algo más de violencia, consiguiendo q sus castaños y rebeldes risos salpicaran su frente y mejillas, pronto empezó a sentir, el calor del ejercicio, un afina capa de sudor, le dio un incandescente único a su pálida piel.
En algunos puntos de la canción, arañaba con saña su vientre, o se entre “jalaba” su cabello despeinándose más. Entonces.
Sus rodadillas se levantaron rítmicamente como si subiera gradas, solo q sin despegar la punta de sus pies del suelo. Sus caderas iban de izquierda a derecha, en el movimiento de sube y baja, sus manos no paraban de frotar sus caderas, y cuando Britney comenzó a cantar ese “Gimme Gimme” el canto también, llamando a nadie en especial con sus dedos, de la manera más provocativa q se ocurrió.
Hubiera seguido bailando de lo más “feliz” hasta q sintió un duro cuerpo detrás de él, se dio la vuelta, sin perder ritmo o detener su baile; descubrió a Chris frente a él, con una mirada q oscilaba entre la preocupación, la vergüenza y algo más, Chris se veía simplemente adoraba, totalmente sonrojado. No pudo contener una risilla traviesa, y luego Chris le sonrió a él, una manera tontamente rendida.
Chris le extendió una mano, como invitándolo a bailar con él, cosa q gustoso acepto Tom.
Al pobre Chris, lo agarro de tubo, agarrándose de él para balancearse con libertad, centrándose en bailar entre las piernas de su compañero,(no lo malpienses, aun no es lemo >.>) ahora era algo más como bailar porque tenía de donde sujetarse, agarro los hombros de Chris y los apretó, mientras subía y bajaba su cuerpo entero, restregándose un poco, con los muslos ajenos, deslizando su cuerpo desde abajo hasta arriba cual serpiente, hasta q su mentón terminara entre los pectorales de Chris. Se dio la vuelta dándole la espalda, mientras pega su cuerpo todo lo q podía al de Chris, y comenzaba a mover las caderas una y otra vez, con la espalda pecada al pecho de su compañero.
Chris debía confesar q se sentía perdido.
Pero eso no impidió q Tom, tomara sus enormes manos, y las pusiera, una en su cintura y la otra en su cadera, adúndele un mejor soporte a sus pasos, y a sus caderas q se ondulaban en un en un hipnótico movimiento, contra el cuerpo del australiano. Tom, boto la cabeza asía atrás, apoyándola en Chris, moviéndose al ritmo del final de la canción mientras se restregaba casi descaradamente.
Tom tenía los ojos serrados y los labios abiertos. Estaba cansado por el ejercicio, falto de aire y jadeante, con las mejillas arremolinadas en un rojo pasión.
Y hubiera seguido en esa pose, si no hubiera sentido a Chris moverse detrás de él. Sintió como esas enormes manos del rubio, trepaban y bajaban, la de su cintura, ahora aprisionaba su cuello, y la de su cadera ahora agarraba un muslo, lo perciba fuerte, pero aquello, no pareció molestar a Tom. Era Chris también, q se movía al compás de las caderas de Loki. Pego su barbuda mejilla a la mejilla derecha de Tom.
Y en ese momento, Tom no pensó y esto era acoso descarado, o en lo mucho q le dolería después ese muslo q apretaba como si quisiera exprimirlo. Solo pensó en lo bien q se sentía, el cuerpo masculino de un hombre q lo trataba con tanta ternura.
Entonces en algún punto. Sincronizaron.
Tom se movía de izquierda a derecha y Chris igual, como en retorno. De arriba abajo y Chris lo imitaba. Tom quería darse la vuelta y ver la cara de su compañero pero este selo impidió, apretando fuerte su espalda contra su pecho. Haciendo una jaula con esos poderosos brazos.
Tom, gimió bajito, mientras mal intentaba zafarse de ese “forzoso” agarre. Sintiéndose divino y entusiasmado entre una prisión de carne q le encantaba. En el fondo, amaba q lo domara, así de brusco eh imperioso.
Después de un rato. Termino la canción y solo quedaron suaves ecos de música en la sala.
Tom, solo entonces presto atención a los demás, para darse q cuenta de q todos, le observaban atónitos, si bien unos con un rostro sonrojado, también había otros, con una mirada, algo pervertida y algunos…con los pantalones abultados, a la altura de la entrepierna…se sintió muy avergonzado y ridículo; pero volvió al papel, cuando sintió la. ¿Posesiva? mano de Chris, aferrar su cintura y pegarlo a su pecho de nuevo. Entonces esbozo una sínica y tentadora sonrisa. Tan descarada como lo habrían sido las del dios Loki, no por nada lo interpreto tan bien.
Sus ojos destilaban ese despótico y orgulloso control, q imperaba el “me vas a adorar” en cada esquina del cuerpo del actor británico
Y después de mostrar la travesura en su sonrisa, de gato de Alicia en el país de las Maravillas.
Una ovación entera resonó, en toda la casa, después de q los comensales salieran del shock q les provoco ver a Tom bailando así de sexy. Nuevamente los flashs invadieron la sala, y muchos más comentarios, entre preguntas, halagos y piropos. Solo siguió sonriendo; giro un poco el rostro para poder ver a Chris y la verdad es q la mirada q le mostro no le gusto demasiado.
Se veía tenso, enojado, tenía el ceño fruncido, y la vista clavada en la multitud q le aplaudía. Otra mano se sumó a la q ya tenía en su cintura, esta termino de rodearlo, en un abrazo. Acaparador, mientras, incluso el mentón de Chris se apoyaba en su testa. Y sentía como q el actor australiano quería sepultarlo en su cuerpo.
Todo cuanto puedo hacer es mirar a nada en específico, totalmente sorprendido. Y extrañamente, ¿encantado?. Chris siempre conseguía sorprenderlo…
Sumo también sus manos más pequeñas a las más grandes de Chris sobre su cuerpo.
La gente se dispersó un poco, cunado ellos dos se movieron, aun en ese abrazo, asía algún lugar desconocido, después de todo, la noche era joven y la idea era someterse a lo q pudiera pasar, sin planes y sin restricciones, simplemente algo espontaneo y desconocido…
C-creo q no quiero q volver a bailar así.
Le dijo algo enfadado Chris, mientras ese abrazo, se volvía algo, triturador en torno a él…
T-¿Por qué?, ¿lo hago tan mal?-le respondió en tono divertido Tom, jugando con un carácter entre inocente y travieso, q podría volver loco a cualquiera…
C-no, demasiado bien diría yo. Tienes locos a todos y eso…no me gusta.-le respondió en un tono ronco mientras volvía a restregar esa barba contra la piel liza de su cuello, provocándole ligeros escalofríos y unas cuantas cosquillas
Tom no entendió los raros comentarios de su amigo, ni su actitud. Y no terminaría de entender. Hasta más después de esa misma noche. Ya más entrada el alba. Cuando ocurrieran esas cosas. Que cambiarían por completo el curso de sus vidas.