Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

En tus sentidos ciegos por Eliann

[Reviews - 2]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del fanfic:

Bueno este fic de hecho es viejo lo hice en el 2015 pero quise publicarlo por aquí jeje...

como siempre espero les guste

Notas del capitulo:

La historia está redactada desde el punto de vista de Gakupo

Cuando fui entregado a él era para ayudar me di de cuenta de que mi dueño no podía ver, desde cachorro había sido adiestrado para este trabajo. Pero ahora que lo veo frente a mí, él es feliz aun si poder ver.

-Gakupo –Le escuche decir mi nombre para llegar a su lado –

Le ayude como siempre guiándolo, aunque no podía decirle donde estaban las cosas. . . o mostrarle a veces no tenía mucho cuidado y se daba tropezones, ojala pudiera hablarte para decirte donde están las cosas pero no puedo, al final solo soy un perro. Me quede sentado a un lado de él en la mesa recogiendo lo que se le caía y escuchados las mofa que le hacían sus hermanos.

-Salgamos a pasear –Me dijo, eso significaba que estaba cansado de estar allí con sus hermanos, yo solo me levante de donde estaba, para tomar la correa y que su padre me la colocara para ir con él a pasear –

Y de vez en cuando me molestaba, como las personas lo miraban como sus hermanos se burlaban de él, solo por ser ciego, en el transcurso de nuestra caminata a un parque cercano nos topamos con dos de sus amigos un par de gemelos. Pero yo odiaba como lo miraban con lastima aunque él no lo notara, al llegar le ayude a sentarse en un banco mientras yo quedaba a un lao de él.

-Sabes Gakupo –Profirió haciendo que yo le mirara –Yo me imagino este lugar lleno de frondosos árboles puedo escucharlos ¿sabes? El crujir de las hojas el caminar de las personas, el cantar de las aves, siempre me pregunto ¿serán cómo me los imagino? –Musitó –Bueno no es como si me fueras a responder –Soltó una leve risa las personas al verlo pasar le mirara como si estuviera loco al darse cuenta de que era ciego parecían compadecerse eso me molestaba, que bueno que tú no percibieras eso – Pero escuche sobre esos perros especiales ¿Híbridos? Que se transforman en semi-humanos, sabes me encantaría que tú te transformaras, poder hablar contigo, tenerte a mi lado, aunque claro eso ya lo haces, pero sentirte más cerca, me pregunto… si pudieras hablarme ¿Qué me dirías Gakupo? ¿Sería como mis hermanos? ¿O como mis padres? ¿Te compadeces de mí? ¿Qué es lo que piensas de mí? Hay tantas cosas que quiero preguntarte pero no puedo obtener respuestas…, siento que tú me entiendes ¿no? –yo solo coloque la cabeza en su regazo como diciendo un mudo si – eso pensé… haber… si entiendes cada una de mis palabras. . . quiero… ah… no sé –Me levante de donde estaba para sentarme a un lado de él en la banca, coloque mis dos patas sobre sus hombros y con mi nariz en su mejilla hice un asentimiento –Eres muy inteligente Gakupo, bueno… volvamos a casa ¿te parece? –Nuevamente hice lo mismo observando tu sonrisa en respuesta –

Comenzamos a caminar de regreso a casa escuchando todo lo que tenías que decir para mí, mientras observaba tu cálida sonrisa yo solo escuchaba en silencio sin poder responder, pero atento a todo lo que tenías que decirme. Y sabes… uno de mis deseos es ser esa clase de perro para decirte muchas cosas también y muchas cosas que me encantan de ti. Al regresar a casa estaba uno de tus hermanos, que te empujo.

-Quítate estorbo –Pronunció él, eso me hizo gruñir, por su culpa habías chocado con la pared te habías golpeado la frente con ella hasta el golpe se hizo bastante sonoro solo aumentando mi impotencia de no poder hacer nada –

Pero sabía que eso a ti te lastimaba te hacía llorar por las noches yo era el único que escuchaba que estaba a tu lado sin decir nada pero atento de limpiar cada lágrima que mancillara tus níveas y suaves mejillas no merecían recorrerlas, alguien tan bondadoso como tú no merecía tal cosa, me quede acostado a tu lado hasta que tus lágrimas cesaron y un suave respirar me dijo que estabas dormido. Me levante un poco quedando sentado y observe la gran luna que atravesaba la ventana, mirándome a lo alto de éter que era cubierto por un manto negro estrellado bridando su luz platinada.

-Por favor, por favor –Suplique a la Luna –Déjame ser esa especie de perro para cuidar y proteger a mi amo, de todo aquel que se atreva a lastimarlo, de todo aquel que quiera dañarlo, de todo aquel que quiera humillarlo, por favor te lo suplico a ti o gran Luna cuyos hermanos míos acuden a ti en las noches. . . por favor te suplico poder transformarme en semi-humano como mi dueño desea, para permanecer siempre a su lado, para estar a su lado, para que no se sienta solo, para que nadie pueda dañarlo…

Y comencé a suplicarle a la Luna todas las noches que me escucharas aquellas plegarias que no entendían los humanos, solo para protegerte, para cuidarte, para permanecer a tu lado para que nadie pueda lastimarte. Con el paso de los días tu madre fue enfermando estaba muy agotada… pero no era por ti, yo lo sabía, el comportamiento de tus hermanos le causaba tanto estrés, hasta que no pudo con tanto su delicado cuerpo cedió ante tanto. Ahora estábamos en el hospital la mirada de tus hermanos estaban sobre ti, una de completo odio y rencor como si te culparan a ti de tal cosa cuando la culpa solamente la tenían ellos. Pues yo la escuchaba a ella decirme cuanto sufría por su comportamiento. Tu padre se encontraba hablando con él medico sobre el delicado estado de tu madre.

-Tengo sed –Pronunció, pero todos ignoraron tus llamados –Tengo sed –Repetiste nuevamente –

-Ve por agua si tienes sed inútil –Dijo tu hermano serio solté un gruñido para levantarme de donde estaba, momentos antes había visto una dispensadora de sodas –

Al encontrarla busque un billete para poder meterlo en la máquina, hasta que debajo de esta encontré uno, con mi pata logre tomarlo hasta agarrarlo delicadamente con los dientes y colocarlo en la entrada de la maquina como tantas veces le había visto hacer a tu padre. El sonido me dijo que ya podía tomar una mire entre todos los sabores hasta elegir el de uva y llevártelo con cuidado entre mis dientes.

-Gakupo volviste –Pronunciaste, yo solo deje la soda en tu regazo – ¿Te fuiste a buscarla por mí? Gracias –Acariciaste mi cabeza mientras escuchaba el bufido de tu hermano, como pudo la abrió para tomarla –

Él estaba feliz y si él era feliz yo era feliz, me acosté en el suelo esperando a que me necesitaras, me quede mirando los gestos de sus hermanos mientras tomaba la soda con tranquilidad de repente una de tus hermanas se fue, decidí ignorarla, hasta que regreso, me habías dado la lata, para depositarla en la basura, la tome nuevamente con cuidado entre mis dientes, mi cola se agitaba de un lado al otro pues tú eras feliz y yo era feliz. La coloque en el seto y me fui a tu lado nuevamente, pero al encontrarte estabas lleno de soda, tu expresión era de querer llorar. Eso me hizo enojar. Su hermana allí sonreía triunfante.

-¿no es refrescante inútil? De seguro ya se te fue la sed –Pronunció tu hermano –Perro tonto por que no la llevas al seto también ¿eh?

Yo simplemente enfurecí de tal manera que sentía que mi sangre hervía, verte allí intentado contener las lágrimas que querían mancillar tus mejillas, que las personas allí lo presenciaran y no hicieran nada, no lo soporte más y me abalance contra tu hermano, pero algo había cambiado cuando caí al suelo con él, observe que tenía manos humanas y que mi negrizco pelaje se había ido.

-¡Quítate perro loco! –Me dijo pero yo solo el di un puñetazo en la cara me lo iba a devolver pero detuve sus manos, golpeándole una y otra vez allí –

-Gakupo detente –Escuche tu voz y me detuve en seco observante, fruncí el ceño pues él se lo tenía merecido pero tu expresión me decía detenerme me acerque a ti, colocando mi cabeza en tu regazo –Todo está bien, cálmate, yo estoy bien –Eso no era cierto, aun podía sentir en ti que estabas triste y al borde del llanto –

Sus manos comenzaron a acariciar mis orejas, aun no entendía bien lo que ocurría en este momento, las personas ayudaban a tu hermano y yo solo sentía tus caricias por mi cabeza, sentía que el collar que llevaba me apretaba bastante el cuello. El pecho abdomen y espalda. Las mujeres de allí estaban sonrojadas. . . tal vez se había cumplido mi deseo.

-Te sientes diferente Gakupo –Pronunció sus tome sus manos entres las mías y la bese para luego colocarlas en mi rostro –

-. . .T. . . tu deseo. . .Se. . . cumplió –Dije entre cortado me dolía hablar no sé si por lo apretado del collar o por que la jerga humana era distinta a la mía –

-Sí –Me sonrió mientras tocaba mi rostro, sintiendo como sus dedos pasaban por mi nariz, ojos, labios, frente y cabello –. . .

Realmente no le puse mucho cuidado al revuelto que yo había causado, él se ve feliz y si él es feliz yo soy feliz nada más importa, su padre salió de la habitación al ver a mi amo mojado, se alteró y lo llevo a casa, intento obligarme a volver a mi forma canina pero yo no sabía cómo volver a esa forma apenas había logrado tomar este aspecto semi-humano y no sabía ni como volver a como era o regresar a este aspecto.

-Ten –Me dijo una de las enfermeras, dándome una ropa humana, su padre me ayudo a ponérmela, además me acomodo el collar de mi cuello y me quito el otro pues al parecer ya no lo necesitaba, al salir de allí tomaba la mano de mi dueño, sus mejillas estaban teñidas de un hermoso rojo haciéndole ver maravilloso ante mis ojos –

-Bueno Kaito, tenemos que bañarte –Pronuncio su padre al haber llegado a la casa –

-Si quiere yo lo hago… siempre he visto y mi deber es ayudarlo –Dije –Sé que está preocupado por su señora yo me encargare de cuidarlo como siempre he hecho

-Está bien Gakupo, sé que tu cuidaras muy bien de él –Me dijo me acaricio las orejas a pesar de que yo era ahora más alto que él –

Lleve a mi amo al baño, comenzado a alistar primero la bañera, al estar el agua a una temperatura que considere la correcta, me le acerque a él pidieron que se levantara a lo que lo hizo comencé a quitarle su ropa.

-Es extraño me siento muy nervioso –Me dijo sus mejillas aún seguían rojas ante mis ojos solo se veía maravilloso –

-¿Por qué? –Le pregunte él solo me sonrió –

-No lo sé –Contestó dejándome confundido –

Aunque el agua realmente no era algo de mi agrado, me había acostumbrado a sentir mi piel mojada además tenía que bañar a mi amo así que yo me bañe con él ayudándole a enjabonarse enjabonando su espalda y haciendo lo mismo que hacían sus padres. Aunque soltó un quejido repentino por esto yo pensé que le había hecho daño pero él solo estaba rojo a más no poder y negaba constantemente que yo había hecho tal cosa. Al finalizar de bañarnos, le ayude a salir y a vestirse, intente buscar un poco de ropa para mí pues por lo visto ahora ya no tenía mi pelaje por lo tanto era impropio que yo anduviera así. Al encontrar ropa apropiada, me fui a su lado acostándome con él por primera vez la cama era demasiado pequeña para los dos.

-Aun no puedo creer que te hayas transformado tus genes no eran de esos –Musitó, coloco su cabeza en mi pecho, y su mano igual mientras mi mano pasaba a rodear su cintura intentado buscar una posición cómoda, pero le sentía tan cerca y esta me parecía más que buena –

-Todas las noches rogaba a la luna transformarme para cumplir su deseo, para que fueras feliz, para poder protegerte, para permanecer a tu lado, para que jamás te sientas solo… yo siempre estoy contigo escuchándote, cuidándote apoyándote… amo… usted es lo más importante para mí… mi mundo gira alrededor de usted –Pronuncié, él solo me sonrió parecía muy feliz –

-Muchas gracias Gakupo no sabes cuan feliz soy de escuchar esas palabras –Contestó, mi cola se movía de un lado al otro sabiendo que te hacía feliz y eso me hacía feliz a mí también y como de costumbre deje una lamida en tu cara pero solo te sonrojaste – ¡Gakupo!

-¿Si? –Respondí él solo se quedó callado y rojo mientras yo reía, se veía hermoso –

Al cabo de un rato él se durmió deje un beso en su frente. Y me acomode muy feliz. . . al día siguiente me desperté escuchando la voz de su padre, mi amo estaba acomodado en mi pecho abrazándome, me restregué un poco los ojos para bostezar.

-Despierta a Kaito por favor –Me dijo yo solo asentí para comenzar a despertarlo aunque se veía demasiado hermoso era la hora de que despertara –

Desayunamos y allí estaban tus hermanos yo solo le envíe una mirada de total molestia, no me agradaban en lo más mínimo. Al terminar el desayuno me pediste que te llevara al parque lo cual hice, te sentaste en la banca y yo me senté a tu lado apoyaste tu cabeza en mi regazo.

-Me siento muy preocupado por mi madre Gakupo –Me dijo – ¿realmente es mi culpa como dicen mis hermanos?

-No es tu culpa –Contesté –

-¿por qué? Es que… soy un inútil siempre le causo problemas a mi madre, trabaja doble por mí… tal vez si yo no fuera nacido –Profirió –

-¡No digas eso! –Vocifere, tu cuerpo tembló un poco –Perdóname… no era mi intención gritar, pero… amo, usted es lo más importante para mí en este mundo –Contesté –No diga eso de no haber nacido, amo sin usted yo no soy nada, si usted es feliz yo soy feliz, si usted está triste yo estoy triste, si usted es lastimado yo quiero matar al imbécil que lo lastimo –Dije él solo sonrió –

-Gracias Gakupo, siempre tienes algo correcto que decir que me haga completamente feliz –Expresó extendió su mano para intentar tocar mi mejilla y yo solo la coloque para que la alcanzara, tome su mano y la bese –

-su madre no está enferma por usted amo, está enferma por culpa de sus hermanos –Contesté –Ella me decía cuan estresada estaba por culpa del comportamiento de sus hermanos, su hermana Akaiko ha estado saliendo con muchos chicos a la vez está mancillando su nombre, dice que se comporta como una zorra y que al final eso la vendrá perjudicando pues para los hombres es muy distinto que para las mujeres pero su hermana no le hace caso y solo le causa dolores de cabeza a su madre, su hermano Akaito se está metiendo en muchas peleas y le complican a su madre pues tiene que ir a buscarlo al instituto me confeso que si se pelea nuevamente su hermano será expulsado, su otro hermano Zeito dice que se está metiendo con quien no debe que está tomando malas ajuntas y que esta lleno por el camino de las drogas los únicos que no le han complicado la vida son su hermano Taito su hermano Nigaito y usted

-entonces… ¿no es por mí? –Murmuro –

-No amo… no es por usted no se sienta culpable por algo de terceros usted no tiene la culpa de nada… alguien tan bondadoso y hermoso como usted no puede hacer tal daño –Respondí –

-¿Piensas que soy hermoso? –Me pregunto –

-Para mí, no hay nadie más hermoso que usted –Exclame con sinceridad él solo me sonrió –

-Te quiero Gakupo –Me dijo –

-Yo le quiero demasiado amo –Contesté –

Regresamos a su casa él parecía muy feliz, aunque su madre no salía del hospital, al parecer su estado se complicaba realmente no quería decirle esto a mi amo, lo lastimaría demasiado. Un día su padre llego con una expresión de congoja y desolación.

-hijo –Pronunció llamando la atención de mi amo –Sabes que hace un tiempo dijimos que podías tener la cirugía en los ojos para poder ver, pero que no encontrábamos un donante

-Si –Contestó –

-Pues… hemos encontrando un donante hijo –Respondió su padre, él se encontraba llorando cada vez más y más lágrimas caían por sus ojos pero tú no notabas eso ¿qué está pasando? –

-¡Enserio! ¡Padre eso es maravilloso! ¡Podré verte a ti! ¡Podré ver a mi madre! Podre verlos a todos –él se encontraba en un estado de completa felicidad –

-Si hijo, si podrás –Expresó su padre en su rostro se mostró una expresión de tristeza, al cabo de un momento de hablar contigo se fue –

-¿no es maravilloso eso Gakupo? –Me dijiste –

-Si amo, es maravilloso –Contesté –

-No me digas amo, dime Kaito por favor –Me sonreíste –

-está bien… Kaito –Respondí volviste a sonreí –Amo… que digo Kaito… en un momento vuelvo ¿sí?

-Si, por favor no te tardes –Me dijiste –

-No se preocupe no lo are –Exclame, me fui hacia donde estaba su padre quien se encobraba llorando –Señor… ¿Qué ocurre? ¿Algo le pasa a su señora? ¿No es así? Ese donante

-Realmente eres muy perspicaz Gakupo, ese instinto tuyo no falla –Contestó –mi amada, está al borde de la muerte su estado es muy débil, me dieron la mala noticia de que… pronto morirá, ella pidió que… le dieran sus ojos a Kaito para que él al fin pudiera ver, para que se llevara una parte de ella consigo… para que pudiera verla a ella cuando viera a mi hijo, para que siempre estuviera a nuestro lado –Sus lágrimas se hicieron más –

-Señor –Pronuncie, me acerque a él para abrazarlo, él simplemente a había aferrado a mí comenzando a sollozar fuerte –

-No hay que decirle esto a Kaito entiendes Gakupo… sé que no querrá hacerlo y sé que se le partirá el alma si se entera –Me dijo separándose de mí y limpiándose las lágrimas –

-No se preocupe señor no lo hare –Respondí él solo asintió –

-Eres muy bueno Gakupo, me alegro de haberte obtenido –Me expresó yo le sonreí aunque no podía calmar su dolor –

-Perdóname señor por no poder calmar su dolor, perder a un ser querido debe ser realmente fuerte… yo no me imagino perdiendo a mi amo… que digo a mi Kaito… mh... eso sonó extraño –Dije realmente confundido él solo sonrió –

-Aun no te acostumbras al lenguaje humano –Me dijo suspirando –

-Realmente no, mi amo… a… Kaito dijo que ya no le llamara amo si no por su nombre y se me es confuso ¿puedo decir que es mío?... pero mío significa que me pertenece cuando yo le pertenezco a él porque es mí dueño, entonces ¿yo soy su Gakupo? –Dije ladeando la cabeza él solo se carcajeo –

-Gakupo, mío es algo que se utiliza en posesión por lo menos ese tazón es tuyo, ese collar es tuyo te pertenece, pero cuando dices que una persona te perteneces es como estar diciendo que es tu pareja –Me dijo –

-¡¿Ah?! –Contesté me sonroje al solo pensamiento de ello ¿Mi amo? ¿Mi pareja? –

-Dime Gakupo, seme realmente sincero –Profirió – ¿tu gustas de mi hijo?

-¿Gustar? ¿Sentir algo romántico hacia él? –Pregunte él asintió –Yo… no lo sé… pues él para mi es todo mi mundo, quiero protegerle y que nada le dañe, me disgusta cuando alguien le daña… y solo quiero verle feliz… si él es feliz yo soy feliz… y nada más en el mundo me importa que no sea él… y permanecer a su lado… es lo que más deseo…

-Entonces si gustas de mi hijo –Contestó él bajando la mirada –Me siento muy feliz, de que alguien le haya podido amar… a pesar de ser ciego

-pero señor, la incapacidad de Kaito para ver no hace que nadie lo pueda amar, porque él es alguien hermoso y bondadoso, alguien maravilloso yo creo que cualquiera que pueda conocerlo y pasar mucho tiempo con él es capaz de enamorarse –Respondí –

-Sinceramente Gakupo tu vez en mi hijo lo que nadie puede ver, solo nosotros que somos sus padres, estaré muy feliz de que puedas amarlo –Me dijo –Y que él te corresponda

-mh…si –Baje la mirada sonrojado mi orejas se echaron hacia atrás en la vergüenza él solo se volvió a carcajear –

Al regresar a su cuarto me espero, me acosté a su lado, pronto caería la noche, se quedó conversando conmigo con normalidad, pero yo no podía sacarme la conversación de su padre de la cabeza, aunque la puerta estaba abierta, pues su padre pronto vendría a echarle la bendición. Veía a sus hermanos pasar aunque Nigaito me pidió su ayuda yo no quise irme de su lado, podía ver las intenciones de sus otros hermanos como Kaiko, Zeito y Akaito, pues a Taito le desinteresaba completamente la vida de Kaito o lo que él hiciera y dejara de hacer. Después de que el padre de Kaito le echo la bendición y nos acostamos, no pude evitar preguntarle.

-Kaito… ¿tú me amas? –Le pregunte –

-¿Eh? –Aun en la oscuridad pude ver sus mejillas enrojecer – ¿Qué clase de pregunta es esa?

-Es solo pregunta cuya respuestas quiero saber… dime… ¿me amas? En el término gustar como una pareja –Le volví a preguntar él solo suspiro –

-Si Gakupo, te amo de esa manera… como una pareja –Me dijo completamente nervioso –

-Entonces soy el perro más feliz del mundo… porque yo de igual manera le amo –Contesté –

-¿Enserio? –Me pregunto –

-Yo nunca bromeo, siempre le digo la verdad, ¿por qué mentiría de algo tan serio? –Expresé, él me sonrió me acerque a él dejando un suave beso en sus labios como lo hacían sus padres todas las mañanas –Buenas noches Kaito

-Buenas noches Gakupo –Me dijo, yo sonreí dejando un beso en su frente para acomodarme a su lado, él también se acomodó hasta que ambos nos quedamos dormidos –

Al cabo de unos días el aumento del enojo de tus hermanos hacia ti era mayor, pero yo no permitía que te lastimaran o dejaba que salieras después de que ello pasaran o yo me interponía en su objetivo el cual era tu… ellos ya sabían la noticia.

-Muy bien –Dijo el médico –Me parece que estas en buen estado y condición para tu cirugía

Ese mismo día en que tus ojos podía ver por primera vez. . . fue el mismo día que perdiste a tu madre para siempre. Mis orejas permanecían agachadas. Mientras esperaba sentado en la sala de espera yo ya sabía el final de aquella maravillosa persona e incluso me había ido a despedir… aunque la despedida de un ser que aprecias… siempre termina siendo dolorosa ¿cuán dolorosa será para ti amado mío? Cuando abriste aquellos hermosos ojos azules mar me sonreíste.

-Gakupo –Pronunciaste yo solo te sonreía acariciando tu mejilla nuestras narices se juntaron haciendo un leve movimiento un beso esquimal –

Pero al enterarse de tal noticia se te borro completamente la sonrisa… tus ojos comenzaron a derramar lágrima tras lágrima de dolor mientras sollozabas tu desgracia yo solo me quede abrazándote intentado apoyarte… tus hermanos te culpaban a ti, yo solo le gruñías hasta que me harte y le grite todas sus verdades en la cara, cada una de ellas, toda la que me decía su madre. Estaba cansado de que te culparan por algo que no tenías culpa.

-Gakupo –Escuche mi nombre se pronunciado por tus hermosos labios y solo te sonreí – ¿realmente merezco vivir? –Tu expresión era de tristeza, tus ojos estaban cristalinos y acuoso, al borde del mismo llanto, yo te abrace tan fuerte no queriendo dejarte ir –

-Sí, lo mereces ¿Cuántas veces tendré que decirte que eres lo más importante para mí? ¿Cuántas veces tendré que profesarte que te amo? ¿Qué mi mundo gira alrededor de ti? Dímelo, y lo haré las veces que sean necesarias con tal de que seas feliz, porque son verdades…. Eres lo más importante para mí eres mi mundo entero, ere lo más hermoso y lo más valioso que tengo, el simple hecho que digas esas palabras, me lastima, me lastimas como no tienes idea –Exclamé, te aférrate a mí abrazándome de igual manera –


-Perdóname Gakupo nunca he querido lastimarte con mis palabras… a quien menos deseo lastimar es a ti –Murmuro –

-Entonces por favor no lo dudes más, tu madre te entrego sus ojos para que pudieras ver, para que pudieras experimentar lo que ella experimento, quería que tu llevaras una parte de ella contigo… no es lo que tus hermanos dicen… esa es la verdad, tu madre está en ti… siempre lo va estar no te puedo pedir que no sufras por ello, porque la perdida de una madre es muy fuerte… pero no te sientas culpable por algo que culpa no tienes –Susurre en tu oído acariciando tu cabello –

-Está bien, te creeré Gakupo, pues tú eres el único que siempre ha sido sincero conmigo –Me dijiste yo solo bese aquellos dulces y suaves labios que tanto me encantaban que me intoxicaban, adoraba aquel dulce sabor, lamí tu labio inferior y por instinto poco a poco lo fuiste abriendo dándome el permiso a explorar esa deliciosa caverna y jugar con mi compañera hasta que el aire se nos hizo faltante y nos separamos con un hilo de saliva –

-Te amo… es algo que nunca debes de dudar ¿sí? –Respondí feliz solo asentiste –

-Si –Contestaste –

Yo sabía que en el momento en que tu vieras el mundo por primera vez, yo podría ser transferido a otro dueño que me necesitara, pero yo ya no era un perro común y corriente que había sido adiestrado para seguir a un dueño para ayudarle… mi corazón le pertenecía a mi primer amo. Y no podría estar con alguien más que no fuera él, sería como morirme de la misma tristeza y agonía de no verme más estando a tu lado.

Ese día que tú estabas en clases, desempeñando un papel normal en tu adolescencia fue el día trágico en el que me dijeron eso. O mejor dicho a tu padre, yo por fin podía controlar mis dos formas. Y estaba echado en tu cama esperándote, pues tu ausencia me hacía infeliz en estos instantes pero ya yo no podía acompañarte.

Tu padre intento detenerlos no lo niego, renegó mucho pues para ti yo era tu perro apreciado, pero aun así llegaron hasta tu cuarto de repente quien fue uno de mis entrenadores me tomo del collar y me llevo lejos. A pesar de todo yo debía obedecer órdenes. Aunque no quisiera hacerlo, para eso había sido enseñado desde cachorro.

Me quede echado en el suelo, yo no quería trabajar a pesar de que intentaban que yo hiciera algo con premios con recompensas ¿Qué podías darme? ¿Qué calmara este dolor de verte lejos?

-Vamos Gakupo tú fuiste entrenado para esto ¿Por qué no lo haces? Si fuiste el mejor entrenado –Me dijo él quien me adiestro por tantos años –

-Creo que deberíamos devolverlo con su dueño, es que de seguro se encariño demasiado con él –Esa era tu esposa yo me había criado con ambos –

-Pero querida Gakupo fue uno de los mejores perros adiestrado, su dueño ya puede ver no lo necesita todos son enseñados a separarse de sus dueños –Dijo él –

-Por favor –Dije tomando mi forma humana, causando un gran sonrojo en las mejillas de tu esposa aún seguía sin saber por qué causaba esa reacción en las mujeres humanas –Te lo suplico, ya no soy el mismo perro que adiestraste, yo no puedo estar sin mí Kaito mi ser agoniza si no está conmigo, me siento infeliz de no estar a su lado… sé que debo ayudar a las personas que para eso fui entrenado… pero por favor… no puedo estar con nadie más que no sea él me siento morir de la tristeza –Baje la mirada con mis orejas gachas –No puedo

-Gakupo –Murmuraste mirándome –Tu no eras un perro de esa clase

-lo sé, pero logre transformarme para ser feliz a mi Kaito, para poder cuidarlo protegerlo y ayudarlo mejor para que nada le lastimara… ahora que estoy sin él siento que ni vale la pena tomar esta forma –Susurre – yo solo lo necesito a él… a mi dueño y él me necesita a mí… ustedes no han visto lo que sucede en esa casa… su padre trabaja y yo soy su único apoyo constante de los constantes acosos y agresiones de sus hermanos… temo que esté sufriendo por no tenerme estos días a su lado tanto como yo sufro al saber que puedo perderlo para siempre.

-Creo que en eso ya no puedo hacer nada –Respondió él –Cuando aprendiste a tomar forma humana, aprendiste a pensar por ti mismo… o siempre lo has sabido pero nunca lo demostraste… ahora que puedes comunicarte… tienes tu propio derecho a elegir con quien estar.

-¡Muchas gracias! ¡Regresare a su lado! ¡Verdad! –Dije emocionado él solo asintió –

Aunque era muy de noche yo quería volver a tu lado, pero me llevaría mañana lo cual yo no quería, tenía deseos de verte, más tarde en la noche.

-Querida yo pienso que esos es zoofilia –Le escuche decir con mi agudo oído haciendo detenerme de mi ansiosa caminata pues no podía conciliar el sueño –

-¿Por qué lo dices? –Contestó ella –

-pues a mis ojos me parece muy fácil ver que Gakupo se enamoró de ese chico –Dijo él – ¿eso no sería zoofilia? Después de todo no deja de ser un animal

-Querido Gakupo sabe tomar una forma humana, aun si siente amor por aquel chico y el chico le corresponde es muy normal, recuerda que no es el primero en este tiempo que se enamoró de su mascota semi-humana –Respondió ella –

-Pues si tienes razón, aun se me hace raro ver los casos, pero imagino que ya así ellos crean su propia conciencia –Murmuro él –

-Claro querido –Contestó, yo solamente me fui a echar a un cojín esperando la mañana siguiente –

Al regresar a tu casa sabía que no estarías que era día de colegio, pero aun así quería ir a por ti aunque no me fue permitido pues no querían que me interpusiera entre tus clases, ingrese a tu habitación, iba a subirme en la cama intentado obtener tu aroma y que inundara mis fosas, pero encontré la bufanda que siempre llevabas tirada en el suelo del otro lado de tu cama, como pude me la acomode echándome allí. Sentía tu olor, pero también el salino de las lágrimas. Por fin me había podido quedar dormido. Pues no había conciliado el sueño en toda la noche. Al cabo de un rato sentí unas caricias en mi negro pelaje levante una de mis orejas, estas caricias las reconocía.

-Gakupo –Murmuraste, esa hermosa voz que llego a mis oídos y que me hizo despertar me pare de golpe y me lance a ti dejándote tendido en la cama –Yo también estoy feliz de verte –Me dijiste tome mi forma semi-humana para responderte pero en vez de eso te bese, tan apasionadamente tus manos fueron a pesar a mi cuello y la mía a tu cintura –

-Chicos –De repente tu padre nos vio en esa posición – ¡Gakupo! ¡Todavía no! –Me grito, me le quede mirando sorprendido sin entender de que me hablaba –

-¿eh? ¿Todavía no qué? –Pregunte –

-Padre apenas se acaba de despertar solo me besaba –Murmuro Kaito sonrojado –

-¿ah?...solo eso…. Bueno…ya es la hora del almuerzo –Contestó yo asentí para que él se fuera murmurando cosas –

-¿Qué estaba pensando? –Le pregunte a Kaito él solo negó –

-No sé –Me contestó –pero deberías de vestirte

-Si –Respondí –

Me vestí y nos fuimos a cenar, yo ahora tenía mi felicidad, aunque me molestaban tus hermanos al alcanzar tu edad adulta te fuiste de la casa, pues tus hermanos aun no planeaban irse para nada, tu hermana tenía tres muchachos encima y sin esposo tu hermano, no tenía trabajo no quería saber lo que hacía Zeito para llegar con tanto dinero a veces, quienes se había ido eras Taito, Nigaito y tú. Pues tenías un empleo como diseñador en el cual eras bueno, con un hermoso departamento. Y yo que vivía contigo… realmente era feliz a tu lado… ¿será realmente el amor normal que tiene un perro hacia su amo? ¿O será mis verdaderos sentimientos que crecieron hacia ti con forme tenías uno de tus sentidos ciegos? Eso no importaba lo importante era que tú estabas a mi lado… amándome y yo que te devolvía mi entero amor.

Fin…

Notas finales:

Cómo siempre espero les haya gustado y por favor comenten.


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).