Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Carta por Eliann

[Reviews - 1]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del fanfic:

Gakupo le escribe una carta a Luka su ex esposa con la que tuvo muchos problemas durante tanto tiempo explicándole lo que él sintió y lo que siente al estar ya con alguien más.

Notas del capitulo:

Sinceramente esta historia se me ocurrió hace muy poco de hecho comencé a hacerlas a las 1 de la madrugada y la finalice a las 2:22 así que está fresca ¿aun? Supongo que fue algo loco que me llego a la cabeza espero lo disfruten.

 

No sé cómo iniciar estas palabras ciertamente, pero han pasado ya siete años ¿Cómo has estado? ¿Has mejorado? ¿Te sientes mejor? ¿Ha habido un nuevo cambio en tu vida? ¿Te han ocurrido cosas buenas? Ciertamente en mi vida han pasado muchas cosas pero hay algo que no me deja avanzar como yo deseara, no me da la tranquilidad que necesito que de seguro ambos necesitamos.

 

Por lo que hiciste en el pasado no te odio en estos siete años he obtenido la compresión necesaria para decir que te perdono.

 

Sabes muy bien que ninguno tuvo la culpa o tal vez si, tal vez fue de los dos, llegamos a una monotonía, una rutina que podía hasta matarnos ¿pero qué podíamos esperar si nunca nos amamos como tal? solo éramos un par de mocosos con el destino ya sellado, no eran nuestras decisiones siempre las tomaron por nosotros ¿no es así?

 

Y si lo sé, por un momento yo también creí que podía amarte, habíamos crecido juntos, conocíamos todo del otro, éramos los mejores amigos, pero el matrimonio ya era un nuevo avance, ambos lo sabíamos pero en realidad, tanto tú como yo percibíamos que jamás nos amamos.

 

Fue bonito mientras duro al menos los primeros años cuando intentábamos sobrellevarlo y adaptarnos a ello, a que ya no éramos niños, a que ahora éramos marido y mujer, que por todo lo que pasábamos se estaba llevando a otro nivel.

 

No lo niego, en algún momento te vi como a una mujer en vez de una amiga o hermana, hermosa, como una bella flor abriendo sus pétalos y me otorgaste alegrías y placeres, estuviste para ser mi apoyo y yo para ser tu soporte, me sentí dichoso de ser tu marido, los primeros años estuvieron bien, no tengo nada de que quejarme.

 

Pero todo se fue cuando no logramos tener un hijo ¿no es así? primero me culpaste a mí, pero ambos observamos que yo no era el culpable, eras tú, tú no podías quedar embarazada y eso te mato en vida lo sé, trate de apoyarte pero jamás lo logre, sé que te culpabas de no poder ejercer uno de tus papeles como mujer y realmente me dolía verte de esa manera admirando los rosales perdida en tus pensamientos en donde incontables noches de luna derramaste lágrimas por el hijo que no podías tener.

 

Comenzaste a distanciarte de mí y no podía surgir como tu apoyo no me lo permitiste, te adentraste más en tu trabajo, dejándome de lado y yo sin saber el motivo solo esperaba a que retornáramos a lo mismo pero se nos hizo imposible ¿verdad? supe que me traicionaste… más de una vez, con diferentes hombres, aun culpándome a mí de que yo era incapaz de entregarte un hijo… pero tu sabías la verdad tan bien como yo.

 

Cuando quise llenar tu vacío con un hijo adoptivo te negaste rotundamente, me trataste de loco, te enojaste tanto y te distanciaste más de mí, yo quería hacerte feliz porque al final, siempre habías sido mi mejor amiga.

 

Pero ya nada era lo mismo.

 

Y no me meteré a santo yo también te engañe, al fin y al cabo lo que es igual no es trampa ¿verdad? pero mientras más me encontraba en brazos de otras mujeres me sentía tan vacío.

 

Comprendí que yo mismo me estaba sumergiendo en una miseria que con nada se llenaba, me sentía, vano y desdichado ¿de qué me valía todo mi dinero si me concebía tan miserablemente infeliz? No podía con ello, no podía soportarlo, no tenía a mi amiga, no tenía soporte mi madre había muerto hace un año, no tenía consejera, no habría ayuda ni salvación para mi persona estaba navegando en un barco sin timón, viajando sin rumbo alguno.

 

Entonces le conocí y sinceramente no me atrajo al principio me parecía alguien sumamente ordinario común, pero fue eso lo que con el tiempo me hizo apreciarle, no era vacío, él estaba lleno de su propia luz, una luz tan radiante que llego a mí y en aquella tormenta me dio firmeza para encontrar tierra firme.

 

Al principio no podía admitirlo ¿yo? ¿Enamorado de otro hombre? ¿De un hombre que conocí en un bar? inconcebible, pero así era y con el tiempo ya no podía haber más que solo él, en esos momentos tu y yo estábamos tan distanciados que hasta dormíamos en habitaciones separadas no soportábamos vernos a la cara…

 

Tú notaste mi cambio, ya no te buscaba, ya no intentaba así sea entablar una amistad contigo y como sabiéndome perdido volviste a mí, pero ya era demasiado tarde ya no podría asimilar nada entre los dos, intentaste arreglar esta vez por tu propia cuenta nuestro inexistente matrimonio, queriendo salvar algo que no tenía redención.

 

Te enojaste más conmigo, te sentiste herida y humillada pero tú siempre has sabido que yo no soy hombre de dar mi brazo a torcer, te pedí el divorcio y eso lo tomaste mal, demasiado mal, pero al final… el destino ya estaba escrito ¿no?

 

Al divorciarnos y quedar en partes iguales comencé a vivir con mi pareja, compre lo que sería nuestro nuevo hogar, aunque se sentía sobrecogido por ser atendido por sirvientes con el tiempo se adaptó.

 

Era gratificante tener a alguien en tu cama bridándote calor y que cuando abriera los ojos dándose cuenta que le observabas dormir te sonriera y te dijera un; ¿buenos días como amaneciste? tener a alguien a quien abrazar, a quien amar, a quien decir tuyo, que te diera un que te vaya bien amor, suerte en el trabajo, al regresar te dijera un bienvenido de vuelta ¿Cómo te fue? ya sabes esas cosas que jamás tuvimos entre los dos.

 

Y me di de cuenta que la vida era muy distinta estando con él, algo diferente a lo que yo no conocía y es que él era tan feliz con cualquier tontería, no tenía que darle grandes obsequios para impresionarlo, para robarle una sonrisa, para que sus ojos se iluminara, para que me abrazara con tanta fuerza y me diera un gracias…

 

Y entonces me sentí feliz y pensaba que estuvieras donde estuvieras o con quien estuvieras encontraras la misma felicidad que yo estaba experimentado, porque yo no podía ser más dichoso que estando a su lado.

 

Entonces me llego aquella noticia que a ambos no tomo por sorpresa él si estaba esperando un hijo mío, jamás pensé que fuera hermafrodita o que tuviera útero pero así fue, sus padres jamás se lo dijeron pero cuando era bebé no pudieron sacarle los ovarios y el útero que había desarrollado que no le hacía completamente hombre.

 

Y la felicidad se multiplico, iba a ser un embarazo demasiado riesgoso pero él estaba tan decidido a tenerlo Santo cielos, Dios aun con todos mis pecados me daba la bendición de ser padre, era lo más maravilloso que podía pasarme.

 

Pero te enteraste y al principio pensé bueno tal vez quiera seguir nuestra amistad y se alegre por que seré padre pero no fue así y no sabes lo mucho que me dolió, el que me trataras de semejante manera me molesto pero no lo niego me lo tenía merecido tú estabas demasiado rencorosa y odiándome porque yo iba a tener el hijo que entre los dos jamás logramos.

Ahora notabas que yo no era tan infértil como tu decías a mis espaldas que yo lo era echándome la culpa completamente a mí, me enoje por que en vez de decirme que estabas feliz por que avanzaba en mi vida decidiste echarme la culpa de todo tus problemas.

 

Del hecho de que no podías dar a luz.

Del que ahora te encontraras sola.
Del que ningún hombre te amara.

De todo y cada uno de ellos hasta tu problema en la bebida me lo tiraste a mi sabiendo que eso ya era desde mucho antes, me despreciabas y yo no podía seguir soportándote.

 

En las noches cuando estabas muy borrachas me llamabas suplicando que volviera a tu lado, mi pareja se mostraba conmovida pero yo conociendo tu temperamento no te di auxilio tal vez debí hacerlo en el momento haber llamado a un psicólogo para que te ayudara pero no lo hice, fui mal amigo y de ello me arrepiento.

 

Cuando el embarazo de mi pareja estaba tan avanzado como para que su barriga fuera notable tu desapareciste, no más llamada a la media noche por suplicas de que regresáramos, no más mensajes, no más nada.

 

Me alivie pensé que podía disfrutar del embarazo de mi pareja aunque siendo sinceros no era nada bonito despertarme a las dos de la madrugada por que tenía un extraño antojo, a que a las tres de la madrugada me tirara de la cama y me mandara a dormir al sofá porque tenía calor y a las cinco me acompañara en el sofá porque estaba cachondo, que a veces hiciera berrinche o se enojara por cosas innecesarias, luego llorara y se contentara solo.

 

Temía que mi hijo naciera bipolar.

 

Pero con los chequeos constantes que teníamos que hacer con el médico, nos enteramos de que en realidad no era un niño, era una niña la que íbamos a tener ¡Bien! una princesita, nunca me importo si era niño o niña para mí lo importante es que naciera sana y así iban los diagnósticos del médico.

 

Y casi en el último mes de su embarazo volviste a aparecer e hiciste lo que hiciste, ¿Cómo pudiste? ¿Por qué lo hiciste? ¿Acaso habías alcanzado la demencia total? Por qué intentaste asesinar a mi pareja que no te había hecho nada que siempre abogaba por tu persona y no solo a mi pareja si no a mi hija de igual manera no pude tolerarlo, rebasaste los límites y no me sentí más hombre al tener que golpearte y dejarte inconsciente pero te lo merecías porque tu habías lastimada a las dos personas más importante en mi vida.

 

Te llevaron a un internado psiquiátrico si tenías severos problemas mentales que habías desarrollado por el hecho de no poder tener un hijo además de la falta de afecto un primogénito que le diera luz a tu vida.

 

Como dije con anterioridad no te odio, no puedo odiarte Luka porque comprendí un poco y yo en parte tuve la culpa de que llegaras a donde llegaste no te ayude cuando era el momento, pero ya todo está hecho ¿qué vale lamentarnos de los errores del pasado? absolutamente nada.

 

Déjame decirte que Kaito tampoco te odia complicaste de más su embarazo además de que mi pequeña princesa nació antes de tiempo, pero es una hermosa niña sana y feliz, Fuyumi es mi retoño la luz de mi ojos, tiene siete años ya va a cumplir los ocho.

 

También tengo otros dos hijos ambos varones Aoi y Murasaki ya con cuatro años ambos son demasiado imperativos y muchas veces agotadores pero los adoro de igual manera porque son mis pequeños monstruitos.

 

Luka yo solo quiero y deseo que realmente seas feliz y que logres mejorarte, quiero que encuentres la felicidad que yo encontré, porque al final tú fuiste mi primera amiga, mi compañera, casi mi hermana, mi esposa, mi apoyo y no puedo desearte algún mal.

 

Espero en estos siete años tu terapia haya avanzado, supe que saliste del psiquiátrico y te casaste nuevamente estoy feliz por ti y por esa razón me atreví a escribirte, espero en algún momento poder retomar aquella amistad que tanto nos caracterizaba, aquella que de niños teníamos.

 

Te aprecio… sinceramente no sé cómo terminarlo jajá me he quedado sin palabras.

Así que solo me queda decirte.

Qué tu casi hermano desea volver a hablarte y rememorar recuerdos de infancia.

Pequeña violenta.

 

Atte.: Gakupo Kamui

Notas finales:

Si se muy bien que no muestra mucho el Gakukai por que es Gakupo quien rinde explicaciones y más sobre la relación que ahora lleva con Kaito pero como siempre espero les haya gustado y por favor comenten.

Se podría pensar que podría ser Gakupo escribiéndole una carta a Kaito y déjeme decirle que esa idea ya está en proceso creativo. jajá.

 

Hasta pronto.

 


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).