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Una bella experiencia de amor por Haru Di Vongola

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Notas del fanfic:

Hola -w-/

Aqui yo con este One-shot de una de mis parejas favoritas de Pokemon. Este One-shot lo estuve preparando desde hace una semana.

Quiero aprovechar para agradecer a una buena amiga autora que me motivo a seguir escrbiendo este Shot y no dejarlo a la mitad, si estas leyendo esto solo puedo decir que eres la mejor y gracias :D.

Advertencias:

-Lemon

-Mpreg

 

Notas del capitulo:

Pokemon y sus personajes les pertenecen a sus respectivos creadores, la historia fumada si es mía xd. Hay algunas estupideces y trolleadas en el fic, no me culpen :'c.

Disfrutenlo.

¿Nunca se han puesto a pensar en cómo la vida cambia al conocer al amor de tu vida? Bueno, acompáñenme a ver esta linda historia (Que pensaron ¿Que iba a ser triste?):v

***

En un departamento cualquiera de los suburbios, un joven rubio de ojos azulados se encontraba caminando en la sala de aquí para allá mientras tenía una hoja de papel en sus manos. ¿Por qué estaba nervioso? Eso era algo sencillo de responder si se tiene en cuenta lo siguiente: él no sabía que era ese “tipo” de persona y para empeorar las cosas, él ya había tenido intimidad con su pareja de lo cual el rubio no se arrepentía en lo absoluto, aunque pensándolo ahora… ¿Cómo rayos le explicaría a su pareja que él era un Doncel y estaba en espera?

Para más detalles, volvamos unos meses atrás…

***

Todo esto había comenzado cuando Spark trabajaba en su turno como repartidor de pizzas durante la noche…

-Bien Spark, este pedido es para la residencia Willow, confió en que lleguen a salvo al lugar y a tiempo- Explico el gerente de la tienda al rubio.

-Esto, pero siempre soy puntual con mis entregas jefe, ¿Qué tiene de especial esta?- Pregunto inocentemente asombrando al gerente y los demás.

-¡¿Qué tiene de importante?! ¡Esta entrega es para la familia Willow, una de las familias más pudientes y de alta alcurnia del país! ¡Es un gran privilegio que se atrevieran a pedir comida en una de nuestras tiendas!- Volvió a explicar aquel hombre mientras ajustaba sus gafas.

-El matrimonio Willow tiene una cadena de hoteles alrededor del mundo con un ingreso extremadamente bueno cada mes- Explico uno de los empleados del lugar.

-Dicen que muchas celebridades y otros buenos magnates se quedan en sus hoteles. La supermodelo Camila es una residente común- Explico otro de los chicos con un ligero sonrojo al recordar a la pelinegra.

-Y oí que el hijo del matrimonio es todo un encanto, ¿Crees que tendrá novia?- Cuchichearon las chicas de la sala.

-Oh… Pero si son tan famosos, ¿Por qué ordenarían pizza de este lugar?- Volvió a preguntar el oji azul.

-¡¡¡Solo has la maldita entrega ya!!!- Grito el gerente ya harto.

Spark no lo dudo y fue con rumbo a su moto de entregas, puso las órdenes en el contenedor especial de la parte trasera, se colocó su casco y subió a la moto.

-Veamos, si tomo esta ruta llegare con 10 minutos de sobra. Bien, ¡vamos!- Dijo emocionado el rubio encendiendo la moto y dirigiéndose a la residencia donde se solicitó la comida.

*Un buen viaje después…*

Spark llego a la dirección donde se había solicitado la comida y grande fue su sorpresa al darse cuenta que el lugar era un lujosa mansión bien cuidada y con una entrada con comunicador. El rubio se acercó a la entrada y presiono el botón para comunicarse con los guardias.

-¿Qué desea?- Se escuchó desde el otro lado del comunicador.

-Soy el repartidor, vengo a dejarles su orden- Explico el rubio.

-¡Oh! ¡Pase, adelante!-

De forma veloz la entrada se abrió de par en par y Spark ingreso siendo recibido por los guardias de seguridad.

-¿Ustedes son los que ordenaron las pizzas?- Pregunto el oji azul.

-En parte, dos de las tres son para nosotros- Explico uno de los guardias vestido de traje negro y gafas oscuras.

-Exactamente la Hawaiana y la de carne son para nosotros- Explico otro de los guaridas, un poco más rechoncho que el resto.

-Bien, tengan. Seria $/36.54- Pidió Spark a lo que uno de los guardias le entrego el dinero.

-Vaya de frente y llegara a la mansión, ahí es donde pidieron la última pizza- Menciono el tercer guardia abriendo la caja y tomando una rebanada al igual que sus compañeros.

-Gracias por su preferencia-

Spark continuo hasta que llego a la entrada a la mansión, la cual era aún más bonita de cerca, el rubio noto que transmitía un sentimiento de cabaña del bosque debido a las botinas flores y el extravagante color marrón de esta.

El rubio se dejó de divagar y toco el timbre de la entrada y casi de inmediato un chico moreno de cabellos negros y ojos oscuros, un poco más bajo que el, abrió la puerta. Al ver al chico, Spark pensó que se veía muy atractivo a simple vista, ahora entendía porque las chicas hablaban tanto del hijo esa familia, este era alto, fornido pero no exageradamente, una piel morena muy hermosa, facciones bien marcadas, ahora todo lo tenía claro.

-Disculpa, ¿Estas bien?-  Pregunto el pelinegro sacando de sus pensamiento al rubio.

-¡Ah sí, sí! Lo siento, jajaja- Dijo nervioso el oji azul. –Aquí está su pedido: una pizza Alemana con extra queso- Explico orgulloso el repartidor.

-¿Cuánto debo pagarte?- Pregunto el pelinegro sacando su billetera.

-Es $/17.89- Pidió amablemente Spark.

-Toma- El moreno le extendió el dinero al rubio pero ultimo este se quedó de piedra al ver que le había entregado dinero de más.

 -E-Esto, creo que me dio dinero de mas- Dijo Spark tratando de no sonar ofensivo.

-Ah eso, quédate con el resto, considéralo una propina por tu linda apariencia- Soltó el pelinegro de forma algo cómica haciendo ruborizar al repartidor.

-G-Gracias por su compra- Menciono el rubio antes de irse hasta su moto.

Spark subió a su vehículo y fue de regreso a su local de trabajo, pero este no era consciente que el oji negro al que le entrego la pizza aún seguía en la puerta. El moreno saco su celular y se comunicó rápidamente con los guardias de la entrada.

-¿Qué se le ofrece, joven?- Dijo la voz de uno de los guardias.

-Quiero que sigan al repartidor hasta su centro de trabajo- Fue lo simple que dijo el pelinegro.

Esto hizo que todos los guaridas (Ya que estaba en altavoz) se atoraran o bien cayeran de sus sillas. Rápidamente el que era propietario del móvil hablo por este.

-Joven ¿No me diga que…?-

-Creo que encontré al indicado. No pierdan tiempo y síganlo- Ordeno el oji negro.

Los guardias dieron un grito digno de un grupo Fujoshi y sin perder tiempo dos de ellos alistaron uno de los autos. Los otros le abrieron la reja a Spark para salir y ni bien este estuvo prudentemente lejos, los guardias que estaban en el auto le siguieron hasta la pizzería.

Durante todo el camino, los guardias procuraron no llamar la atención y seguirle el paso al repartidor hasta que llegara a su local de trabajo, afortunadamente no le perdieron de vista o sabrían de las consecuencias que su joven amo les daría si se atrevían a perder de vista a su objetivo.

Finalmente Spark llego a la pizzería y estaciono la moto procurando que estuviera en buena posición y lugar. Después de revisar que todo estuviera bien, el rubio ingreso al local y fue ahí que los guardias tomaron una foto del local y apuntaron la dirección. Uno de ellos tomo su teléfono y marco el número del joven de la mansión.

*Esperando que conteste*

-¿Diga?-

-Señorito, tenemos la dirección del trabajo del chico- Dijo uno de los hombres vestidos de negro.

-Bien, vuelvan de inmediato o puede que los descubran. Si eso pasa… créanme que será lo último que hagan- Menciono el pelinegro cortando la llamada y asustando a los mayores.

Estos arrancaron el vehículo y volvieron a su trabajo…

*Al día siguiente*

Todo iba como de costumbre en el local, o al menos hasta que un chico seguido de tres hombres de negro ingreso a este.

-Buenas noc…- La chica que era la recepcionista no pudo terminar su frase ya que reconoció al chico de inmediato. –U-U-U-Ust-t-ed es…- Dijo la chica con las mejillas rojas.

-Te agradecería que guardaras el secreto por favor- Menciono el moreno tomando las manos a la chica, la cual parecía querer desmayarse en cualquier segundo.

-Queremos una mesa si no fuera mucha molestia, nuestro joven amo tiene hambre- Pidió uno de los hombre que conformaban la seguridad del pelinegro.

-C-Claro, p-por aquí p-por favor- Comento la muchacha guiando al grupo hasta una de las mesas.

Algunos de los clientes vieron la escena y empezaron a cuchichear, especialmente las clientas, sobre aquel chico que estaba con los otros de negro, al parecer ya lo habían reconocido.

-E-En un momento viene alguien para tomar su pedido- Dijo la chica retirándose.

Justo en ese momento ingreso Spark por la puerta.

-Siento la tardanza- Dijo el rubio con dirección a la sala de empleados.

Para mala suerte del oji azul, él era la única razón por la que el pelinegro había venido al restaurante.

-Quiero que me atienda el- Dijo señalando a Spark cuando este se fue con dirección a la sala.

-¿Eh? L-Lo siento, pero él es uno de los repartidores y…-

En ese momento los guardias le extendieron un pequeño sobre marrón, la chica dudo en tomarlo pero ni bien los de negro sacaron lo que parecía una pistola esta tomo el paquete y al abrirlo casi se cae de la impresión al ver que había dinero en él.

-Dale eso a tu jefe, solo te pido que ese chico sea mi mesero- Fue lo simple que dijo el oji negro.

-E-Enseguida viene su mesero- Dijo la joven mientras iba corriendo a la cocina.

-Bien pensado con lo del soborno- Agradeció el moreno a uno de los guardias.

-Todo sea por su felicidad, joven amo- Contesto el hombre de negro.

*En la oficina del gerente*

-¡Jefe!- Dijo la chica ingresando veloz y sin tocar.

-¿Se puede saber porque entras de esa forma?- Contesto el mayor desde su escritorio.

-¡El hijo de la familia Willow está aquí!- Dijo nuevamente alterada.

-¡¿No me digas que el idiota de Spark no hizo bien su trabajo?!- Pregunto asustado el mayor.

-¡No! ¡Él quiere que Spark sea su mesero de inmediato y me entrego esto para usted!- La chica le dio el sobre marrón al gerente y ni bien este lo abrió casi le da un paro cardiaco.

-¡¡Todos tendrán aumento si ese chico sale satisfecho de aquí!! ¡¡Dile a Spark que lo atienda de inmediato!!-

Tras la orden del mayor, la chica salió rápidamente de la oficina y fue con dirección a la sala de empleados donde supuso Spark ya estaría listo para realizar sus entregas. Y efectivamente, este ya estaba con su uniforme y listo para hacer su trabajo pero…

-¡¡Spark, hoy no harás entregas!! ¡Ven un momento conmigo!-

-¿Eh?-

*Un cambio de ropa después*

Ahora el rubio estaba con el uniforme de mesero del restaurante, debía admitir que era lindo pero prefería su anterior uniforme.

-¡Te queda genial!- Halago la chica dando un brinco infantil.

-Esto, ¿Se puede saber porque tengo que hacer de camarero hoy?- Pregunto el oji azul algo confundido.

-Solo hazlo y punto, tenemos a un importante cliente esta noche, y parece que le agradaste o llamaste su atención al instante- Especifico la joven mientras salía de la sala de empleadas acompañada del más alto.

-¿Solo eso? ¡Vaya! Yo pensé que era por un castigo o algo así- Comento sin preocupación el rubio pero fue reprendido por un golpe en el brazo de su compañera.

-Escucha, esto es muy importante para el gerente. Por ningún motivo enojes o hagas alguna tontería, ¿Dudas?- El oji azul negó con la cabeza. –Bien, ese es el cliente a quien debes atender- Señalo la contraria con el dedo a la mesa donde se encontraba el curioso grupo.

Spark dirigió su vista al lugar y fue ahí cuando reconoció al moreno, era el chico al que ayer le había entregado a domicilio.

-Ese es el chico de ayer ¿Qué hace aquí?- Comento Spark algo confundido cuando recordó que ese pelinegro le había llamado lindo. Esto hizo que sin querer se pusiera algo rojo.

-¿Lo conoces?- Pregunto curiosa la chica.

-S-Si… déjalo en mis manos- Dijo con seguridad el rubio dirigiéndose a la mesa donde estaba el oji negro y sus guardaespaldas.

-Jefe, ahí viene- Susurro uno de los hombres de negro.

-¡Bienvenidos! Mi nombre es Spark y seré su camarero esta noche- Dijo el rubio tratando de no sonar ansioso mientras entregaba las cartas con el menú.

-Tienes un bonito y curioso nombre- Soltó el moreno tomando el menú y avergonzado de vuelta al oji azul.

-G-Gracias por el halago… creo- Susurro esto último. - ¿Ya saben que es lo que ordenaran?- Pregunto Spark mientras sacaba su libreta para anotar los pedidos.

-Queremos la pizza familiar Alemana acompañada con pan al ajo y su mejor bebida- Dijo uno de los guardias a lo que el oji azul empezó a tomar nota.

-¿Eso es todo por el momento?- Pregunto el rubio a lo que los ocupantes de la mesa asintieron. –Volveré luego  con sus órdenes-

Al retirarse, los guardias vieron a su joven amo atento a los movimientos del rubio y sin querer este último término soltando una sonrisa que les hizo saber que las cosas iban por buen camino.

-Señorito ¿Enserio le gusta ese chico, no?- Susurro uno de los guardaespaldas.

El pelinegro solo asintió, lo cual hizo que los guardias contuvieran sus ganas de soltar un grito digno de cuando apruebas la materia que creíste perdida en el semestre.

-Nos alegra que al fin encontrara al indicado señorito, pero ¿Cómo piensa conquistarlo? No sabemos nada de él y solo hemos venido a verlo porque usted lo deseo- Comento otros de los guaridas ganando un golpe en la cabeza por parte de sus compañeros.

-Eso déjenlo en mis manos. Ya encontré a esa persona y no pienso dejarla ir sin luchar- Dijo decidido el oji negro tras lo cual los guardias contuvieron las ganas de llorar y abrazar a su joven amo por tan lindas palabras.

El resto de clientes no pudieron evitar ver la reacción de los hombres y empezaron a reír levemente sin que estos pudieran notarlo.

Después de un rato llego Spark con los pedidos y este los dejo en la mesa. Mientras aquel grupo de clientes comía, tanto el rubio como el gerente y algunos de los otros camareros observaban atentos a ver si estos deseaban algo más.

Al acabar de comer, los guardias y el moreno fueron con rumbo a la caja para pagar pero no sin antes dejar una nota en la mesa dirigida para el rubio que los atendió. Cuando estos se fueron, todos felicitaron a Spark por su labor pero en eso una de las chicas llego con una hoja de papel.

-Spark, creo que dejaron esto para ti- Comento aquella chica dándole la hoja al oji azul.

-¿Qué es lo que dice?- Pregunto otro de los camareros.

-Esto… en primera dice que debo leerlo en privado- Menciono el rubio señalando la nota, en la parte delantera decía: “Para Spark, léela en privado”

-Bueno, ¿Qué esperas? Ve a leer la nota de una buena vez- Dijo el gerente a lo que el rubio asintió y fue a la sala de empleados.

*En la sala*

-Veamos…- Soltó al aire el oji azul mientras comenzaba a leer la nota. –“Querido Spark: Estas invitado el día de mañana a la mansión Willow a horas de la tarde, cualquiera que tu desees. Espero aceptes”- Termino de leer el rubio con cara de asombro.

Spark se puso a pensar que esa era la carta más rara que había leído en toda su vida, ¿Para qué ese chico lo invitaría? Sí que era sospechoso…

*Al día siguiente*

No sabía porque, pero este ya estaba afuera de la residencia Willow y estaba dudando en si tocar el timbre o no. Cuando llego los guardias lo hicieron pasar rápidamente, parecían realmente emocionados por su sola presencia.

Mientras el rubio divagaba en sus pensamientos, la puerta se abrió y dejo ver al pelinegro.

-Me alegro que aceptaras la invitación. Adelante, pasa- Dijo amablemente el oji negro.

-G-Gracias- Contesto Spark pasando a la mansión y llevándose una gran sorpresa.

Si veías desde afuera parecía estar llena de lujos y otras cosas, pero la verdad es que era de lo más sencilla y cómoda. El moreno fue con Spark a la sala de estar y ambos tomaron asiento en uno de los sofás.

-Esto, gracias por la invitación, aunque no tengo idea de porque me invitaste- Dijo algo nervioso el rubio sin querer sonar ofensivo.

-Creo que debo disculparme en primer lugar, fui yo el que te invito de manera apresurada- Comento el oji negro rascándose la nuca.

-La verdad es que me sorprendió verte ayer en el restaurante y todo eso, ¿Cómo le hiciste para dar con la dirección?- Pregunto el oji azul.

-Tengo mis métodos, eso es todo- Ni de coña el moreno le iba a decir que mando a sus guardias de seguridad a seguirlo, de seguro pensaría que era un acosador y no quería este lo odiase sin haberse conocido bien.

*(Autor: Para mí lo es xd) *

-Ya veo…- El rubio estaba indeciso de preguntar esto pero era mejor hacerlo ahora o nunca. – ¿Me podrías decir tu nombre?- Pregunto esperando que el otro no se tomara por ofendido.

-¡Ah cierto! Mi error. Mi nombre es Gou, mucho gusto Spark- Dijo el pelinegro extendiendo su mano.

-El gusto es mío- Dijo el rubio aceptando aquel gesto.

Ambos chicos empezaron a hablar de cosas triviales y alguna que otra cosa que les gustaba hacer. No muy lejos de ahí, algunas sirvientas y guardias de seguridad veían a ambos chicos a escondidas.

-¿Ese es el chico del que el joven Gou está interesado?- Pregunto una de las sirvientas.

-Así es. Parece un chico sencillo y muy dulce- Dijo otra de las empleadas con un plumero en mano.

-Es la pareja ideal para el señorito- Dijo otra sirvienta con una escoba.

-Sera mejor dispersarnos o el joven amo se dará cuenta y terminaremos en mala posición- Propuso uno de los guardias a lo cual todos se fueron a realizar sus labores.

*Después de unas buenas horas de platica*

-Gracias por venir hoy, Spark- Dijo Gou feliz de que su plan saliera a la perfección.

-Yo debería darte las gracias, nunca antes me habían invitado a una mansión- Comento divertido el rubio.

-Bueno, te veo mañana-

Ambos chicos se despidieron pero se verían más seguidos a partir de ahora, ambos habían intercambiado números de teléfono para poder comunicarse, pero lo que no sospechaba Spark era que el oji negro tenía en mente algo más allá que una amistad con su persona.

Y así fue como pasaron varios meses en los que tanto Gou como Spark tenían una relación amistosa muy buena. Usualmente el pelinegro iba a la pizzería por el simple hecho de poder hablar con el rubio, aunque este último no parecía irritarse ni nada ya que le gustaba la compañía del oji negro. El resto de integrantes del local de comida no eran ajenos a la amistad que sostenían ambos jóvenes, pero las chicas empezaron a sospechar que aquel moreno tenía otro tipo de intenciones con el oji azul ¿Cómo llegaron a esa hipótesis? Todo eso sucedió en una de las visitas de Gou al local…

-Bienvenido, Gou-kun- Dijo la recepcionista sorprendiéndose por la bolsa que llevaba el pelinegro.

-Hola, ¿Sabes dónde está Spark?- Pregunto amablemente el moreno a la joven.

-Acaba de hacer una entrega y ya estará regresando en cualquier momento. Puedes esperarlo en la sala de al fondo- Dijo la chica guiando al oji negro hasta la sala de empleados.

Tras llegar a esta, la curiosidad pudo más y la chica termino preguntando…

-¿Qué eso que tienes esa bolsa?- Pregunto intentando no sonar grosera.

-Lo sabrás en su momento, puede que termines asombrada- Fue lo simple que dijo el pelinegro.

La joven se retiró y Gou se quedó en la sala por aproximadamente 15 minutos hasta que la puerta se abrió, dejando ver a Spark.

-¡Gou, que sorpresa!- Dijo feliz el rubio al ver a su amigo en la sala de empleados. -¿Cómo le hiciste para entrar aquí?-

-Tengo mis métodos- Comento divertido el moreno.

-¿A qué se debe tu visita?- Pregunto el oji azul intrigado.

-Pues, quiero conversar de algo contigo, y creo que es el momento indicado- Soltó serio Gou. –Veras Spark, ¿Recuerdas la primera vez que nos vimos?- Pregunto el pelinegro.

-Como si fuera ayer, fui a entregarte una pizza y termine siendo seguido por tus guardaespaldas- Dijo riendo el rubio al recordar que Gou le había explicado como había dado con su lugar de trabajo.

-Jeje, cierto, sabes no me arrepiento de eso porque termine encontrando a un gran amigo en ti- Dijo con una sonrisa el moreno. –Pero la verdad es que… había otra cosa también-

-¿A qué te refieres, Gou?-

-*Suspiro* Lo que yo quiero decirte es que… desde la primera vez que te vi, tú me gustaste de inmediato-

Aquellas palabras resonaron fuerte en la mente de Spark, ¿Lo que acababa de oír era cierto? ¿Gou estaba enamorado de él?

-¿Q-Que acabas de decir, Gou?- Dijo el rubio con voz nerviosa y las mejillas coloradas.

-Que tú me gustaste de inmediato cuando te vi. Spark, tu inmediatamente me llamaste la atención, todo de ti me pareció increíble, conforme fui conociéndote más fui enamorándome más de ti. Eso es lo que tengo en claro-

En eso Gou tomo de las manos a Spark y lo vio firmemente.

-Spark ¿Quieres ser mi novio?-

El rubio estaba totalmente rojo, aquellas lindas palabras que salieron de boca del pelinegro lo tenían totalmente confundido, el apreciaba a Gou como un amigo pero que este se declarara de esa forma lo tomo por sorpresa. Aunque lo intentara negar, Spark también sentía algo por Gou durante todo ese tiempo juntos pero el callaba para no arruinar su relación con el oji negro.

-G-Gou, y-yo…- El rubio estaba nervioso, lo diría si o si, ya no había marcha atrás. –Y-Yo… también desarrolle sentimientos por ti, pero… me mantuve en silencio porque pensé que eso dañaría nuestra amistad y…-

Todo fue tan repentino, el rubio quedo en shock al sentir los labios contrarios besarle. Era suave y tierno, ese sentimiento le hizo sentir un leve cosquilleo en el estómago que no sabía apaciguar. Después de unos segundos ambos chicos se separaron.

-G-G-Gou ¿Tu porque…?- Dijo tartamudeando el oji azul.

-¿Cómo que porque? Estoy feliz, feliz de saber que tenemos el mismo sentimiento, tonto- Dijo el pelinegro abrazando al contrario.

-Yo acepto ser tu novio, Gou- Dijo Spark correspondiendo al abrazo y posteriormente volviendo a ser besado por su ahora pelinegro.

Afuera de la puerta, se encontraban los empleados e inclusive el gerente, los cuales tras escuchar la conversación de ambos muchachos, solo atinaron a celebrar y casi parecía que fuego estaba saliendo a sus alrededores.

(Nota: ¡¡A huevo, triunfo el mal!! >:v/)

Así pasaron los días y la nueva parejita del momento solo era conocida por las amigas de Spark, Candela y Blanche, los trabajadores de la pizzería y los empleados de Gou.

Ambos chicos pasaban muy lindos momentos, siempre era Gou el que iba a recoger a Spark de su trabajo y lo acompañaba a su casa. La primera vez que lo acompaño, Spark le explico que vivía con Candela y Blanche en un departamento, claro que el rubio tuvo que presentarles a su ahora novio y estas los felicitaron, claro que pusieron la condición de que no querían ver llorar a su amigo y que el oji negro perdonara cualquier estupidez que este pudiera decir.

Ya había pasado un mes y medio, era la hora de que Gou presentara a su novio a sus padres, bueno en realidad solo a su padre ya que su madre ya lo conocía por un video chat y estuvo más que encantada con la noticia. Solo faltaba presentarlo al dueño de la mansión…

*Toc Toc Toc*

-Pase- Dijo el hombre de cabello blanco mientras seguía viendo algunas cosas en su computadora.

Tras oír la voz del mayor, Gou fue el primero en ingresar seguido de Spark.

-Papá- Dio serio el moreno llamándola la atención el peli blanco.

-¿Qué ocurre hijo?... ¿Es un amigo?- Pregunto el hombre al ver al rubio.

-M-Mucho gusto señor Willow. Mi nombre es Spark- Dijo el rubio intentado no sonar nervioso.

-¿Ocurre algo Gou? ¿Tienes algo que decirme?- Dijo el hombre viendo detenidamente a los muchachos.

-Papá, te presento a Spark, mi…-

-¿Novio?- Termino la oración el hombre con sonrisa burlona, sorprendiendo también de paso al moreno y al rubio.

-¿Cómo lo supiste?- Pregunto su hijo algo asombrado.

-Tu madre me lo dijo desde hace una semana. Estuve esperando hasta que tú me presentaras oficialmente a tu pareja- Explico el hombre canoso mientras se levantaba de la silla y se acercaba a los dos jóvenes. –Gou, yo respeto tu decisión y lo sabes muy bien, tu felicidad es mi felicidad hijo mío. Y en cuanto a ti, espero que hagas feliz a mi hijo y se bienvenido a la familia Spark-

Si, ya tenían la aprobación del mayor y fue ahí cuando se hizo una pequeña celebración privada en la residencia de los Willow. Tantos los amigos de la pareja como personas cercanas se encontraban en un ambiente muy feliz y todo, el único inconveniente era que la madre del pelinegro solo podía estar presente por video chat debido a los negocios.

 

Así pasaron algunos meses más en los que la dulce pareja tenían lindos momentos, todos los fines de semana salían a pasear a diferentes lugares, aunque el lugar que más le gustaba a ambos era la playa ya que estaban en pleno verano y darse un chapuzón venia al pelo. Aunque llego un tiempo en el cual sucedió lo que usualmente pasa si son jóvenes con las hormonas revueltas.

Todo eso ocurrió la noche en la que Spark se quedó en casa de Gou, ambos estaban viendo una película en la habitación del pelinegro, echados en la cama, hasta que…

-Oye Gou… ¿Puedo preguntarte algo?- Dijo un poco avergonzado el rubio apoyado en el hombro de su pareja.

-Claro, ¿Qué es lo quieres preguntarme?-

-Bueno, llevamos saliendo ya casi un año y… tu siempre sueles besarme y todo eso…-

-¿Qué es lo que insinúas?- Pregunto intrigado el oji negro.

-Y-Yo… ¡Q-Quiero hacerlo!- Dijo el oji azul viendo directamente a su novio.

Eso sí que tomo por sorpresa a Gou, no es que él no hubiera pensado en hacerlo con Spark, solo que tal vez si le llegase a preguntarle, su novio llegase a incomodarse y no le hablara por un buen tiempo.

-Spark ¿Estás seguro de eso?-  Pregunto el moreno.

-Yo estoy decidido a hacerlo. Siempre que nos besamos… bueno… suelo imaginar que tomaremos el siguiente paso- Comento algo avergonzado el rubio jugando con sus dedos.

Gou suspiro debido a lo que dijo su pareja y de un momento a otro este tumbo a Spark teniéndolo sujeto de las manos.

-Creí que no pensabas en ese tipo de cosas, pero ahora veo que eres un pervertido en secreto-

-¡Que rudo! Solo lo hago porque eres tú con quien quiero hacerlo- Dijo algo ofendido el oji azul desviando la mirada.

-Más vale que solo muestres ese lado pervertido conmigo-

El pelinegro tomo la iniciativa y beso al rubio de forma apasionada, mientras lo hacían la mano de Gou se deslizo dentro de la chaqueta que tenía Spark y comenzó a recorrer la piel del oji azul indiscriminadamente. Así fue un buen rato hasta que ambos chicos comenzaron a desvestirse pero quedando en ropa interior, Gou tenía un bóxer negro y Spark uno amarillo.

-Es una linda vista la que tengo- Dijo con sonrisa zorruna el oji negro volviendo a besar a su rubio.

El pelinegro dejo los labios contrarios y descendió hasta los botones rosados del rubio, ahí comenzó a lamer uno y pellizcar suavemente el otro tomando por sorpresa al oji azul quien comenzaba a soltar ligeros jadeos por la sensación placentera. El oji negro dejo ese lugar y paso su atención al miembro de su pareja, retiro con cuidado la ropa interior y dejo ver el miembro semi erecto de su novio.

Gou lo tomo y comenzó a masturbarlo mientras volvía a besar a Spark, el rubio tenía las mejillas de un ligero carmín que lo hacían ver adorable, fue después de un rato que Gou fijo su atención al miembro de Spark y lo introdujo a su boca comenzando a chuparlo. El rubio no podía evitar soltar gemidos al sentir la lengua de su novio recorrer su falo, sentía un cosquilleo inexplicable dentro de él.

-Veo que te gusta lo que hago- Comento Gou sacando el miembro de Spark de su boca y quitándose su ropa interior. -¿Quieres intentarlo?- Pregunto mientras dejaba su miembro expuesto frente a su novio.

-¿P-Puedo enserio?- Comento algo avergonzado el rubio.

-Mientras seas tú, puedes hacer lo que quieras- Comento el oji negro divertido.

Spark no se lo pensó y tomo con cuidado el miembro del moreno, primero le dio unas cuantas lamidas a la punta y luego se metió el miembro completo a su boca. El rubio comenzó a chuparlo de forma lenta y tortuosa para el pelinegro, este último no podía evitar excitarse al ver como su pareja se tomaba su tiempo para degustar su falo. De un momento a otro Gou separo rápidamente a Spark de su miembro mientras se cubría su boca.

-E-Es suficiente- Dijo el oji negro algo agitado. –Por poco y casi me vengo si él seguía así- Pensó para sí mismo.

-¿Lo hice mal?- Pregunto al rubio

-Lo hiciste bien Spark, y es por eso que hare sentirte igual de bien-

El moreno tumbo al contrario de nuevo y usando un poco de su saliva humedeció dos de sus dedos. Este los llevo hasta la entrada del rubio y con cuidado metió uno, Spark sintió la intromisión algo dolorosa pero luego paso a sentir el mismo cosquilleo que sintió cuando Gou chupo su miembro. El pelinegro metió el segundo dedo y comenzó a simular pequeñas embestidas sacando gemidos de su pareja. Después de un rato y al notar que ya era suficiente, el oji negro retiro sus dedos y acerco su miembro a la entrada del oji azul.

-¿Estás preparado?- Pregunto antes de comenzar.

-Lo estoy, hazlo-

(Nota del autor: Para aclarar, Spark está en 4)

Gou comenzó a introducir su miembro dentro de su pareja, el cual soltó un ligero chillido cuando el falo ajeno entro por completo. Las embestidas comenzaron lentas pero placenteras pero de un momento a otro la velocidad aumento y gemidos de ambos comenzaron a llenar la habitación. Gou decidió hacer sentir mejor a su novio y tomo el miembro de este para masturbarlo, lo cual hizo que Spark apretara fuertemente la sabana y tuviera que hundir su cabeza en la almohada para evitar que sus gemidos salieran fuertemente.

-S-Spark… ¿Te duele?-

-N-No, pero… se siente… muy bien… es como si, no pudiera sentir las piernas-

Aquellas palabras fueron el contador que encendió aún más al pelinegro, sin pudor alguno comenzó a embestir frenético, los gemidos de ambos eran la prueba de que aquel acto de unión era correspondido por ambos. Todo esto finalizo cuando ambos chicos expulsaron sus semillas y quedaron rendidos en los brazos de Morfeo.

*Volviendo al presente*

-Ahora, ¿Cómo es que se lo diré?- Dijo el rubio rascándose la nuca mientras continuaba leyendo aquel papel.

-¡Volvimos, Spark!- Se escuchó la voz de Candela.

Ambas chicas entraron a casa con bolsas en mano, rápidamente el rubio tuvo que guardar los resultados para que no lo descubrieran.

-¿Q-Que tal les fue?- Pregunto inocentemente el chico.

-Candela peleo con el cajero porque no acepto sus cupones de descuento- Dijo Blanche dejando unas bolsas en la mesa.

-¡Ese idiota se lo busco! No me puse a juntarlos para que al final no los acepte- Dijo la morena haciendo berrinche y cruzando de brazos.

-¿Ya te sientes mejor, Spark? ¿Ya no tienes nauseas?- Pregunto la de coleta al oji azul.

-Algo, pero ahora me siento mejor-

-Por cierto, trajimos helado ¿Quieren un poco?- Propuso Candela a los otros dos.

-¡Yo quiero!- Dijo infantilmente Spark, pero al mismo tiempo la hoja con los análisis termino en el piso.

-¿Qué es esto?- Dijo Blanche tomando la hoja y leyéndola.

Candela también se acercó curiosa y una vez que terminaron de leer estas se quedaron boquiabiertas mirando fijamente a su compañero.

-¡¿Por qué mantenías esto en secreto?!- Dijo emocionada Candela abrazando a Spark.

-Recién me entere hoy- Dijo algo apenado el rubio.

-Eso explica porque los chicos se te acercaban…- Opino Blanche dejando la hoja en la mesa. –Spark, será mejor que le comuniques esto a Gou cuanto antes. Mis felicitaciones- Dijo la de coleta abrazando también al oji azul.

-¡Esto lo tenemos que celebrar! ¡Helado para todos!- Dijo divertida la morena empezando a servir helado de chocolate para los tres, aunque un poco más para Spark.

*Ya de noche*

*Ring* Fue el sonido que se escuchó del timbre de la entrada.

-Ya va- Dijo Candela dirigiéndose a la entrada y abriéndola.

-Buenas noches- Quien había tocado la puerta era Gou, el cual venia de visita como siempre.

-¡Bienvenido Gou! Le diré a Spark que acabas de llegar- Dijo la morena retirándose y dejando pasar al pelinegro.

Después de un rato, el rubio apareció y parecía realmente nervioso. Como era costumbre, su novio ni bien verlo le dio un tierno beso que el contrario acepto gustoso.

-¿Ocurre algo?- Pregunto el oji negro viendo a su novio algo nervioso.

-G-Gou- Dijo el oji azul tomando las manos del contrario. –Veras, hoy me sentí mal y fui a un chequeo al hospital-

-No tienes nada grave ¿No?- Pregunto el moreno.

-No, al contrario. El doctor me dijo que estaba bien de salud y que… ¡Estoy esperando un hijo tuyo!- Dijo esto último con las mejillas rojas.

-¡¿Un hijo?!... Espera, ¿Tu eres un Doncel?- Dijo intrigado y a la vez feliz el pelinegro.

-Al parecer lo soy pero no era consciente de eso, tengo exactamente dos meses- Dijo el oji azul siendo abrazado repentinamente por el oji negro.

-Es una gran noticia para mí, Spark. Estaré encantado de ser padre de esa o ese bebé- Comento Gou pasando su mano por la pancita plana de su pareja.

Ambos chicos continuaron abrazándose mientras Candela y Blanche tomaban fotos de aquel lindo momento.

***

Al día siguiente, la pareja fue a casa del pelinegro y le dijeron de la noticia al padre de Gou, este casi se desmaya al saber la grandiosa la noticia y por supuesto felicito a los chicos. La madre de Gou, la cual estaba por video chat, grito un sonoro: “¡¡Triunfo el mal!!” mientras tenia los brazos apuntando hacia arriba y dijo que regresaría para el nacimiento del bebé. Los sirvientes de la mansión celebraron como locos tras la noticia de su joven amo y algunos que otros no pudieron evitar el llanto por la emoción.

 

Así comenzaron a pasar los días, Gou estaba siempre pendiente de su novio, a tal grado que hizo que este junto a sus amigas se mudaran a la mansión solo para tener bien cuidado y vigilado al rubio. El vientre de Spark se hizo más notorio al cuarto mes y medio, aunque tanto Candela como Blanche supusieron que era debido a las cantidades de comida que ingería Spark, y no era un chiste: El oji azul siempre tenía antojo de frutas, helado, pastel, incluso de nata.

Los cambios de humor en el rubio eran divertidos, podía estar de lo más feliz de la vida en un momento y cuando no conseguía algo pasaba a tener el mismo carácter que Madara Uchiha cuando escucha el nombre de Hashirama, así de malo. Aunque si lo pensaban bien, lo que más sorprendía era lo emotivo que se ponía el rubio con los detalles que le traía su pareja, lloro como loco cuando Gou le mostro la habitación que sería para el bebé.

Y así fue cuando llegaron al tan esperado día. Durante el camino al hospital Spark termino golpeando a tres de los guardaespaldas de la familia debido al dolor y gritaba que llegaran rápido o le arrancaría la cabeza a alguien.

Ni bien llegaron al hospital, unas enfermeras llevaron al rubio a la sala de parto mientras Gou, las chicas y los padres del pelinegro esperaban ansiosos y rezaban para que no hubiera ninguna complicación. Pasaron dos horas cuando al fin salieron las enfermeras y el doctor responsable de la operación.

-¿Quién de ustedes es el padre?- Pregunto el hombre de bata blanca mientras se limpiaba el sudor con un pañuelo.

-Soy yo, ¿Fue todo bien?- Pregunto el moreno.

-Todo fue muy bien. Permítame felicitarlo, es padre de un par de mellizos perfectamente saludables- Dijo el adulto.

-¡¿Mellizos?!- Gritaron todos atónitos por la noticia…

Paso una hora cuando al fin pudieron ver a Spark y a los bebes, estos habían sido llevados a una recamara. Todos ingresaron al lugar y ahí vieron al rubio viendo las cunitas donde estaban sus bebés.

-Gou- Fue lo primero que dijo al ver a su novio.

-¿Estás cansado?- Pregunto el pelinegro dándole un beso en la mejilla al rubio.

-Un poco, pero valió la pena-

Todos fueron a ver a los bebés y ahí pudieron notar que eran tanto un niño como una niña, el pequeño tenía unos cuantos cabellos rubios mientras la pequeña tenía unos cuantos de color negro.

-Son hermosos-  halagaron las amigas de Spark viendo como ambos bebés seguían durmiendo.

-Felicidades chicos- Dijeron los señores Willow a su hijo y pareja.

Así estuvieron compartiendo un buen rato hasta que se tuvieron que retirar, pero sabían que un millón de nuevas experiencias llegarían a la mansión Willow. Gou se quedó esa noche junto a Spark, ambos platicaron de como seria ahora sus vidas con dos pequeños luceros que iluminarían cada uno de sus días.

*Fin*

Notas finales:

Que puedo decir, estoy satisfecho de como quedo.

Algunas cosas que me gustaria dejar en claro es que:

1) No iba a poner Mpreg, pero una imagen de Spark con pancita hizo de las suyas.

2) Le puse "Gou" porque "Go" me parecia algo realmente extraño :S

¿Alguien aqui lee el manga de Shokugeki no soma? ¿Les gustaria un one-shot de esta serie?

Pasen bonito día :D


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