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Venganza por Naruto25Uchiha

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Notas del fanfic:

Los personajes pertenecen a un hombre que odio y amo Masashi Kishimoto.  

Notas del capitulo:

Después de años desaparecida e regresado con un propósito y es el de finalizar mis viejas historias, además de que traigo nuevos proyectos. Esta historia tendrá un giro inesperado.  

¿Cómo término encerrado y amarrado en aquel lugar? no lo sabía, lo único que recordaba era haber salido como siempre de su casa en la mañana para ir a la universidad, después de que terminaron las clases debía ir a la empresa de su padre. Justo después de eso nada más llegaba a su mente. 

 

Sentía su cuerpo túmido estaba amarrado de manos y pies en una posición no muy cómoda, sus ojos negros no enfocaban nada solo se veía oscuridad en aquella habitación su boca estaba fuertemente amarrada imposibilitándole que de ella algún sonido se escapara, a pesar de estar en esa situación sus ojos no mostraban miedo solo confusión. 

 

El sonido de pasos acercándose lo alerto, su cuerpo se tenso mientras la puerta se abría lentamente, sus ojos se cerraron por instinto ya tenía más de cuatro horas en aquel cuarto oscuro consecuencia le dolían, sentía que aquella persona se acercaba lentamente, la puerta fue cerrada dejándolos de nuevo sumidos en la oscuridad.

 

—Debes de tener hambre...— una voz varonil pero con un toque infantil resonó en sus oídos, sintió que conocía esa voz pero en ese momento estaba tan aturdido que no la identifico de inmediato, unas manos cálidas acariciaron su rostro deteniéndose en su cabello comenzando a soltar la mordaza que cubría su boca –Siempre has tenido una piel muy suave— abrió y cerró varias veces su boca hasta que la sensación de cosquilleo desapareció solo entonces se atrevió hablar. 

 

—¿Por qué estoy aquí?— su voz si era totalmente varonil pero sonaba fría sin un ápice de miedo. 

 

—¿Tienes hambre?— ignoró la pregunta. 

 

—Te estoy preguntando que ¿Por qué demonios me tienes encerrado?— sintió una fuerte bofetada que le voltio el rostro. 

 

—Aquí tu no preguntas solo obedeces— su tono de voz cambió a uno totalmente autoritario –Si no quieres sufrir mejor mantén la boca cerrada y limítate a contestar lo que yo te pregunte—

 

—¡Tú! no eres nadie para decirme que hac…— otra bofetada pero con mas fuerza tanto así que le reventó el labio. 

 

—Cual es la parte que no entiendes— sintió como algo filoso y frío recorría su mejilla derecha, trago saliva con dificultad, como estaba oscuro no podía ver la sonrisa del que tenía enfrente. Sintió un aliento cálido en su oído –No me gustaría tener que marcar ese lindo rostro de porcelana Sasu-chan— los ojos del azabache se abrieron con fuerza pues reconoció aquella voz además de que solo una persona se atrevería a llamarlo así. 

 

—Na… ¿Naruto?— preguntó totalmente confundido. 

 

—Bingo...— contesto –Me reconociste— sonrío con amargura, claro que el otro no lo veía, se quito los lentes que cubrían sus ojos dejando ver a través de aquella oscuridad unos ojos tan azules como el mismo cielo –¿Sasu-chan tienes hambre?—

 

 

 

—Maldito dobe suelta…— un puño directo a su estomago lo hizo callar, fue tan fuerte el golpe que Sasuke tosió un poco de sangre. 

 

—¡Sigues siendo un maldito arrogante!— hablo con amargura —Pero te aseguro que yo te lo voy a quitar vas a pagar caro el daño que tu asqueroso padre le hizo a mi familia— con esas palabras se alejo abrió la puerta con fuerza y así la cerró, dejando solo de nuevo al ojinegro que no se recuperaba del golpe. 

 

~

 

Al salir de aquella habitación se dirigió a su cuarto, el cual no tenía mucha decoración, pero si estaba bastante desordenado, marco un número de su móvil y espero a que le contestaran. 

—El plan a comenzado ya esta todo listo— una sonrisa prepotente se dibujo en su rostro –El va a pagar todo el daño que nos han hecho ¿tu como vas?— preguntaba un tanto interesado –me alegro… bien te dejo estaremos en contacto te mantendré al tanto de lo que suceda— corto la llamada. 

 

Miro a su alredor lo mejor era dormir ya era tarde camino hasta una mesita que estaba en una de las esquinas, comenzó a desvestirse primero por el pantalón, al quitarse la camiseta noto que tenia una mancha roja recordó el golpe que le dio a Sasuke “maldito pero yo te voy a bajar los humos vamos haber cuanto te dura ese orgullo” pensaba mientras se recostaba en su cama lo mejor era dormir. 

 

~

 

Por otra parte el pelinegro no podía dormir en aquella posición estaba de pie pero amarrado no sentía sus brazos, le dolían los golpes recibidos, más no lograba entender el porque de la reacción del rubio sin proponérselo recordó la última vez que hablaron. 

 

"—Sasu-chan tengo que decirte algo— un niño de unos doce años de rubios cabellos se acercaba a uno de cabellos azabaches que era un año menor que el. 

 

—¿Qué quieres dobe?— hablo osco nunca le había hablado así. 

 

—¿Qué te pasa Sasuke?— pregunto confundido el ojiazul.

 

—No quiero que en tu vida te me vuelvas acercar tu y yo somos diferentes tu eres un pobretón y yo no me junto con personas como tú— hablaba pero sin mirarlo. 

 

—Pero si llevamos dos años siendo amigos— su voz sonaba triste trato de agarrarlo de la camisa pero el menor le dio un fuerte empujón que lo mando directamente al piso, los niños que se encontraba a su lado miraban divertidos la escena. 

 

—Solo fingía jamás sería amigo de alguien como tú— sonrío con prepotencia

 

-Sa… suke- aquel rubio se levanto del piso y sin decir palabras salió corriendo, el azabache alcanzo a ver como de los zafiros unas cuantas lágrimas caían."

 

Si el rubio supiera la verdadera razón de su desprecio, pero jamás se enteraría, nunca primero muerto, cerró sus ojos. Un fuerte dolor se apoderó de su cabeza. Movió sus manos tratando de soltar los amarres, más su intento fue en vano. Estaba agotado y su cuerpo dolía. 

 

~

 

“¿Por qué no puedo dormir?” pensaba el rubio dando vueltas en su cama, ya era pasada de media noche y no lograba conciliar el sueño, con pereza se levanto respiro hondo antes de salir del cuarto.  

 

Camino unos pasos y llego a la habitación donde estaba su “invitado” abrió con lentitud y se acercó estaba dormido, con cuidado comenzó a desatar lo, el pelinegro abrió sus ojos y lo empujo por inercia el rubio lo agarro del brazo ambos cayeron en el piso el ojinegro encima del rubio. 

 

Lo iba a golpear pero en un movimiento rápido el ojiazul lo tomo por las muñecas y le dio la vuelta ahora era quien estaba encima, azabache comenzó a forcejear para quitárselo. 

 

—¡¡¡Quítate maldito dobe!!!— gritaba tratando de patearlo pero el rubio lo tenía totalmente inmovilizado, entre tanto forcejeo juntaron sin querer sus labios ambos abrieron sus ojos al máximo el azabache termino sonrojándose, más el rubio estaba inmóvil nunca había besado un hombre y estaba sorprendido de sentir una pequeña corriente recorrerlo, además de que asco no sentía era una sensación diferente pero que no le desagradaba en lo absoluto.

 

No tardo demasiado en apartar sus labios del pelinegro lo miró y vio que estaba ligeramente sonrojado “se ve lindo” pensó “pero que demonios estoy pensando me estoy volviendo loco” se recrimino mentalmente “esto es asqueroso” pero su cerebro no concordaba con sus sentidos. 

 

—Quítate de encima…— logro articular pues sentía su corazón latir de manera frenética. 

 

—Vaya...— sonrío con cierta maldad –no sabía que eras uno de esos tipos raros teme— el azabache no contesto, se sorprendió nunca se imagino que Naruto le dijera así y no entendía la razón del ¿Por qué le dolía?, hace mucho que dejo de sentir atracción por aquel ojiazul o tal vez no lo había olvidado del todo –Entonces resultaste ser un tipo raro vaya noticia si tus admiradoras se enteraran que pensarían— su sonrisa no desaparecía por el contrario parecía que disfrutaba de humillar al azabache. 

 

—No es tu problema— hablo por fin el azabache pero desvío su mirada –Y muévete que pesas— hablo pero ya no hacia el intento de quitárselo y aunque le costara admitirlo el calor del rubio era muy agradable. 

 

—Así que admites que te gustan los hombres— bueno que tan malo sería jugar con ese azabache engreído, total él estaba claro en sus gustos movió un poco su cadera. 

 

—¡Ah!— gimió levemente por el movimiento, por su parte el rubio cerró sus ojos con ese movimiento echo por él mismo, sintió un pinchazo de placer que lo sorprendió definitivamente era una buena idea jugar con Sasuke —Qué crees que estas haciendo?- preguntó un tanto molesto. 

 

—¿No te gusta?— comenzó un con unos movimientos lentos pero precisos los dos comenzaron a jadear con fuerza —Se nota… que te gusta solo hace falta mirarte la cara eres un verdadero puto...— sin poderlo evitar su respiración se agitó su cuerpo parecía tener vida propia pues se estaba moviendo solo

 

No contestaba su orgullo se estaba reduciendo a nada, le dolían aquella palabras pues a pesar de que no se sentía atraído por el sexo femenino nunca había estado con ningún chico, y mas le dolía el echo de que fuera Naruto el que lo tratara así, sentía el miembro endurecido del ojiazul chocar con el suyo propio las corrientes eléctricas viajaban por toda su espina dorsal el también movía las caderas, Naruto sabiendo que se le estaba haciendo imposible silenciar sus gemidos unió sus labios con los de su compañero, se abrió paso en aquella cálida boca y jugo con la lengua de su compañero, que sensación tan placentera sentía, después de un corto tiempo el aire les hizo falta.

 

—¡Ah! Sasu-chan— unos cuantos movimientos más y sintió que llegaba al cielo con tan poco, ese había sido el mejor orgasmo que había tenido aunque jamás lo admitiría, jamas admitiria que disfruto con un chico y menos si era Sasuke Uchiha, los dos respiraban agitadamente. 

 

—Por…— trago saliva con dificultad- ¿Por qué?- pregunto con los ojos cerrados. 

 

—Quería saber que se sentía estar con un marica como tú — respondió con crueldad. 

 

—¿Qué te hice?— preguntó sin abrir sus ojos no quería verse vulnerable ante Naruto, sus puños comenzaron apretarse con fuerza. 

 

—Tú maldito padre destruyó a mi familia, que mejor que sus hijos para que paguen el daño ocasionado, le daremos a Fugaku Uchiha donde más le duele— se levanto mirando con odio al azabache. 

 

—¿Y que fue lo que te hizo mi padre?— también se levantó pero sus ojos mostraban furia. 

 

—Después te enteraras por ahora harás lo que yo te ordene si no la quieres pasar mal—

 

—Ami no me amena…— un fuerte puñetazo lo hizo retroceder. 

 

—Párese que te gusta que te estén golpeando bueno yo no tengo problemas— le dijo al tiempo que lo tomaba de la mano y lo conducía a su habitación. 

 

—Suéltame— trataba de liberarse pero no lograba la fuerza que ejercía el rubio sobre su mano era como si quisiera rompérsela. 

 

—¡¡¡Maldita sea deja de comportarte como una chica asustada!!!— gritó tirandolo a la cama –Se supone que tu eres un Uchiha— lo miró con despreció –Compórtate como tal—

 

—Maldito dobe…— su boca fue sellada con los labios del rubio, al parecer le gusto besarlo solo que esta vez fue mas lejos comenzó desabrochar los botones de la camisa del ojinegro y con algo de esfuerzo amarró las manos pálidas a la cabecera de la cama. 

 

—¿Qué crees que haces?— a pesar de su orgullo no podía negar que tenía miedo si era lo que estaba pensando. 

 

—Que crees voy averiguar que se siente acostarse con un puto marica como tú...—

Notas finales:

Hasta la siguiente actualización. 


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