Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

RELACIONES COMPLICADAS por SandraBel00

[Reviews - 75]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

Bueno, aquí está el siguiente capítulo. ¡Madre mía, ya 10 capítulos, que feliz que estoy!. Muchas gracias por leer y muchas gracias por sus comentarios que voy a ir ahora a responderlos. Espero que les guste, que conste que estoy intentando hacerlos más largos, jejejejeje.

Ya iban a ser las 8 de la mañana y Midorima se estaba dirigiendo hacia la enfermería del instituto. Hoy, al ser ya un día normal, empezaban ya con el horario correspondiente, de 8 de la mañana a 2 del mediodía. Por la tarde había tanto prácticas de los clubes de deportes como reuniones de los demás clubes como el de lectura, el de dibujo, el de teatro, el de música, etc. Al entrar a su consulta se encontró con Takao sentado en su silla.

-Bakao, esa es mi silla, levántate.

-Shin-chan, no empieces ya de buena mañana a mandarme cosas, que aún no soy persona.

-Pues tómate un café o algo para despejarte.

-Es que te estaba esperando.

-¿Para qué?

-¿Cómo te gusta el café?

Midorima al principio se mostró sorprendido por la pregunta, ya que era como un ofrecimiento, pero pronto recompuso su cara y se dio cuenta de que, aunque no quisiera, eran amigos. Ayer, después de mucha insistencia por parte de Takao, fueron a comer juntos. Para sorpresa de Midorima, Takao se comportó bien, menos cuando empezó a jugar con la comida como si de un niño pequeño se tratase, pero al final, se puede decir que congeniaron. Takao también jugaba al baloncesto en el instituto, no era mal estudiante, aunque su personalidad dijera lo contrario y era bastante trabajador, el problema fue que era demasiado hablador, sonreía a todo el mundo, algo que a Midorima se le hacía raro, y parecía impasible ante todos sus comentarios fríos y poco amigables. No entendía muy bien a ese chico, eran completamente opuestos, sin embargo, allí estuvo él manteniendo una charla con el pelinegro mientras comían juntos.

-Solo y con una cucharada de azúcar.

-Okey, aunque sepas que ese café va a saber un poco amargo.

-Ya lo sé, por eso me gusta así.

-Eso explica muchas cosas…-dijo Takao susurrando.

-¿Qué has dicho?- dijo Midorima con cara de enfado.

-Nada, nada, que ahora mismo te traigo tu café- dijo sonriendo de forma nerviosa mientras salía a por los cafés.

Ahí es cuando Midorima recapacitó y pensó que lo de ser amigos sería bastante difícil.

*******************************************************

Hasta la hora del almuerzo la situación se dividió en un pelinegro con ganas de que llegue el descanso para ir a la cafetería a hablar con cierto cocinero, un castaño con la mente en dios sabe donde, un moreno intentando conectar la mirada todo el rato con un rubio, el cual intentaba dar su clase sin distraerse, un pelirrojo pensando en si le gustaría su regalo hacho por él mismo a un peliceleste, un azabache molestando a un peliverde, un pelimorado esperando la hora del almuerzo impacientemente y un pelirrojo encerrado en su despacho.

Cuando llegó la hora del almuerzo Himuro se dirigió rápidamente a la cafetería pero no pudo hablar con el misterioso cocinero porque la cafetería ya estaba llena, así que se esperaría a que se vaciara un poco. Al lado suyo pasaron Kise y Kuroko hablando animadamente mientras buscaban una mesa, al encontrarla se dirigieron a ella, pero estaba ocupada por lo que parecía un estudiante.

-Perdona, no es por ser maleducado, pero esta mesa es para profesores, los alumnos tienen otras, lo digo porque deberías intentar relacionarte con tus compañeros.

El azabache empezó a reír, le habían confundido ya dos veces en dos días con un estudiante, al ver la cara de sorpresa de los dos supuestos profesores, que para nada lo parecían, decidió aclarar la situación.

-No soy un alumno, soy Takao Kazunari, ayudante de Shin-chan.

-¿Shin-chan?

-Ahh no, perdón, de Midorima-sensei.

-¿De Midorimacchi?

-¿Lo conoce?

-Claro, estudiamos en la misma secundaria, jugábamos en el mismo equipo de baloncesto.

-Vaya, un amigo de Shin-chan.

-Sí, bueno, lamento mucho la confusión, pero es que pareces un estudiante.

-Lo mismo digo, sino fuera porque no llevan el uniforme creería que eran estudiantes.

-Espera un momento, ¿me estás viendo a mí también?- preguntó un muy sorprendido Kuroko, ya que nunca se daban cuenta de su presencia.

-Sí claro, ¿por qué no iba a verte? ¡¿Acaso eres un fantasma que sólo se puede comunicar con el rubio?!

-No, no, lo que pasa es que de normal nadie nota mi presencia hasta que pasa cierto tiempo.

-Sí, a mí aún me pasa y somos amigos desde secundaria.

-Bueno, pues yo puedo verte, jejejeje. La verdad es que lo del fantasma hubiera sido muy divertido. Le hubiéramos podido gastar unas cuantas bromas a Shin-chan para ver si se le iba un poco la cara de amargado.

-Parece que ya conoces bien a Midorimacchi.

-Claro, somos amigos.

-¡¿Amigos?! ¡Midorimacchi?! ¡No puede ser! ¡¿Se acerca el apocalipsis?!

-No, jajajajajajajajaja, más bien lo obligo yo a que sea mi amigo.

-Estás siendo coaccionado (amenazado), ¿verdad?

-No, que va, que va, jajajajajajajaja, sería a la inversa, lo estoy obligando a que sea mi amigo porque es muy divertido.

-¿Perdón? ¿Midorima-kun divertido? Eso es imposible, no creo que haya cambiado tanto desde que nos vimos por última vez.

-No, seguramente será igual que como lo conocísteis, lo que pasa es que es muy divertido hacerlo enfadar. Sentaos y os cuento la pequeña broma que le gasté ayer par romper un poco con la tensión inicial.

Al momento, Kise y Kuroko se sentaron para escuchar la divertida historia de Takao, para después reírse y comenzar a hablar de todo un poco. Y así es como comenzó una relación de amistad entre los tres que era como una bomba de relojería, no sabes por donde te van a salir, pero las ocurrencias de ese grupo no serán para nada normales, ni buenas.

*********************************************

Por otro lado, en la azotea, estaban hablando Aomine y Kagami, bueno, más bien, Aomine hablaba y Kagami flipaba en colores.

-¡¿Pero qué?! ¡Es tu profesor!- gritó de forma alarmante Kagami.

-Eso ya lo sé, es lo que lo hace más divertido todo.

-Madre mía, madre mía, madre mía, y ahora ¿qué vas a hacer?

-¿Cómo que qué voy a hacer? Eso está más que claro.

-Eso es verdad- dijo Kagami un poco más calmado.-Si él no te dice nada de romper, que seguramente lo haga, lo harás tú.

-¡¿Qué dices?! ¡Yo no voy a hacer eso!

-¡¿Acaso estás mal de la cabeza?! ¡¿Es tu profesor?!-dijo Kagami que se volvía a alterar.-Bueno, no pasa nada, como adulto responsable que parece que es lo hará él.

-Ya lo ha intentado, pero no le ha salido bien.

-¿No le habrás hecho algo? ¿Ni lo habrás amenazado con joderle la vida?

-¡¿Qué?! ¡Sabes que yo no soy ese tipo de persona!

-¡¿Entonces qué has hecho?!

-Le dije que le dejaría en paz si me ganaba en un uno contra uno de baloncesto, pero que si le ganaba yo seguiríamos esta relación pero de estranjis.

-Dios…

-Y como gané no le quedó otra, es un hombre de palabra. Además de que es muy bueno jugando al baloncesto y tenemos mucha química, tú ya me entiendes -dijo sonriendo de forma pícara.

-Bufff, ¿no te das cuenta de que si se descubre vuestra relación su vida entera se irá a la mierda y tú tendrás problemas con tus padres?

-Ehh, tranquilo, dos cosas, primera: nadie se va a dar cuenta de esto y si se dan cuenta diré que lo he obligado y así no le joderé la vida, ¿vale?, y segunda: a mis padres les da exactamente igual lo que haga, ¿cuándo me lo van a decir? ¿Cuándo estén en un avión rumbo a no sé donde? Sabes que pasan de mí, y yo soy feliz así, hago lo que quiero con mi vida y no tengo que darle explicaciones a nadie.-dijo Aomine enfadado.

La discusión se había vuelto un tanto triste por culpa del tema de los padres de Aomine. Kagami sabía que ese tema era tabú para su amigo, porque aunque Aomine se mostrara despreocupado sabía que le dolía mucho el tener esos padres, porque era como no tenerlos.

-Yo… lo siento Aomine, no quería sacar ese tema.

-No es tu culpa Kagami, es la suya, si nunca han sabido ser padres no me pueden reñir ahora de no ser buen hijo.

-Yo no creo que seas mal hijo ni mala persona, pero debes pensar un poco en las consecuencias que tienen tus acciones.

-He pensado en eso, pero con Kise las cosas son diferentes, por un momento no me acuerdo ni de mis padres, ni de nada, sólo me centro en él, por eso no quiero dejar esta relación.

-Tío, creo que te has enamorado.

-¡Qué va! y hablando de enamorados.-dijo Aomine sonriendo.-Enséñame el pastelito que le has hecho a tu Kuroko-sensei, jajajajajajajaja.

-¡N-no pienso decirte nada la próxima vez! ¡Y no lo digas así que haces que suene pervertido cuando sólo es de agradecimiento!-dijo Kagami intentando defenderse como podía.

-Sí, sí, lo que tú digas.-dio Aomine irónicamente.

Kagami suspiró, por lo menos ya había desaparecido la tensión de antes, aunque fuera a costa de que Aomine se riera de él. Lo que le preocupaba era la relación que tenían Aomine y Kise, para él era como una bomba de relojería, nunca sabes cuando va a estallar, pero no era buena idea, o eso pensaba por ahora.

 


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).