Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

RELACIONES COMPLICADAS por SandraBel00

[Reviews - 75]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

Aquí está el otro acpítulo, espero que lo difrutéis!!

Kise se despertó en una cama que no era la suya y en una habitación que tampoco lo era. Por un momento se asustó y pensó en lo peor pero luego recordó lo que había pasado ayer y que al final había decidido dormir en casa de Kuroko. Al analizar un poco más la situación se dió cuenta de que había mucha luz en la habitación con respecto a la hora a la que debería levantarse a ir a trabajar, que aunque no quería ir debía hacerlo. Buscó por la habitación hasta que encontró su móvil cargando en la mesita de noche, al lado de la cama, seguramente Kuroko lo había puesto a cargar y le agradecía internamente por ello, ya que ayer no se preocupó para nada del móvil y seguro que se había quedado sin  batería. Cogió el móvil, lo encendió y vio que eran las 12 de la mañana. Rápidamente buscó su ropa, se vistió, fue a la cocina para coger unas galletas y cuando ya estaba frente a la puerta se encontró una nota en la manivela.

“Kise-kun, no hace falta que hoy vayas a trabajar, descansa por hoy, yo te cubro. Ya hablaremos cuando llegue a casa.”

Mente de Kise:

Ayy…, ¿y ahora qué hago? Si voy al instituto voy a ver a Aomine quiera o no quiera, no voy a poder evitarlo como la otra vez, pero si no voy estoy incumpliendo con mi trabajo, además de que enfadar a Akashicchi no es algo que me ilusione, más bien es algo que me aterroriza. Pero aunque ahora fuera ya iba a tener problemas con él, porque estaría llegando tarde, ¡4 horas tarde! Madre mía...sé que Kurokocchi no me ha despertado para protegerme pero...bufff, no sé que hacer…¡Ya sé, voy a llamar a Kurokocchi para ver como están las cosas por allí! Además, en la nota pone que él me cubría a lo mejor se ha hecho cargo de algunas de mis clases, y recuerdo bien que ha primera hora tenía con el grupo de Aomine, seguro que se ha quedado con esa hora…¡voy a llamarlo!

Después de su reflexión, cogió el móvil y marcó el número de Kuroko.

-¿Kise-kun?¿Ya te has despertado?

-Sí, Kurokocchi, estaba pensando en ir al instit…

-¡No! Kise-kun no te he despertado para que vengas hoy al instituto, ya le he dicho a Akashi-kun que te encontrabas mal y que no podías venir hoy.

-Gracias Kurokocchi…, pero no deberías haber hecho eso, yo estoy bien, puedo enfrentar a un adolescente cabreado.

-No. No puedes. ¿Sabes por qué no puedes Kise-kun?

-...

-Porque realmente te gusta.

-¡Eso no es así!-dijo Kise un poco alterado.

-Sí, sí que lo es, y te voy a explicar por qué es verdad.-dijo Kuroko intentando apaciguar un poco los nervios del otro.

-¡No es verdad!

-Lo es porque si no te gustara hubieras roto la relación con él desde el principio y más al saber que era menor y alumno tuyo, pero no lo hiciste. Desde el instituto has estado saliendo con otras personas, pero tus relaciones no duraban nada, en cuanto encontrabas algo que no te gustaba o que simplemente te complicaba un poco las cosas rompías la relación y seguías con tu vida tranquilamente. Sin embargo, esta vez ha sido muy diferente, a ti te gusta llevar el control en las relaciones, no me refiero a lo de ser activo o pasivo, sino a tomar las decisiones, por eso valoras tanto tu espacio personal y tu independencia, pero en esta relación era Aomine-kun el que decidía hacer las cosas y donde hacerlas, sabía como llevarte de un sitio a otro, y que además te gustara. Él tenía el control de la relación, y aún así tú no lo dejaste. A parte de que la situación de Aomine-kun te complicaba mucho la vida, tanto que si alguien os descubría podrías acabar en la cárcel, pero aún así seguiste con él, rompiste todas las reglas que te habías establecido tú mismo para romper con anteriores parejas por él.

-Pero al final rompí con él…-Kise intentó aún defenderse, pero hasta él mismo sabía que no había obrado bien, y que por Aomine había pasado muchas cosas que antes no pasaba por alto.

-Sólo hasta que nosotros te insistimos, hasta que viste a lo que podía llegar eso, antes no tardabas ni dos segundo en romper una relación cuando veías algunas de estas cosas, no te lo pensabas por días, pero ahora sí, y eso es porque sientes algo por Aomine-kun, algo más allá de atracción física, por mucho que quieras negarlo.

Cuando Kuroko terminó de hablar un silencio se instauró entre los dos, Kuroko ya había dicho todo lo que tenía que decir, y Kise no sabía que decir. Después de unos segundos se volvió a escuchar una voz.

-Tienes razón…-dijo Kise tristemente.

-No te preocupes Kise-kun, nos tienes a Takao-kun y a mí, hagas lo que hagas te apoyaremos.

-Gracias Kurokocchi…-Kise intentaba hablar normal pero tenía los ojos llenos de lágrimas, nunca se había sentido así, se sentía derrotado.

-Kise-kun, tranquilo, en cuanto llegue a casa hablamos todo esto más tranquilamente, siéntate en el sofá, enciende la tele y tómate tu desayuno, que conociéndote has salido corriendo hacia la puerta sin pensar si quiera en desayunar.

-He cogido unas galletas…

-Bueno entonces has madurado, porque antes no cogías nada y ahora por lo menos ya coges unas galletas, jejejeje.-dijo Kuroko intentando evadir un poco del tema a Kise.

-La verdad es que sí, jejeje…-dijo Kise riendo suavemente.-Muchas gracias por ser mi amigo Kurokocchi.

-Es un placer Kise-kun.-dijo Kuroko feliz.-Vengaaaa, vete a comer tus galletas, que es la prueba de que has madurado, jajajajajaja.

-¡Oye, que tengo muchas más y mejores pruebas de que he madurado!¡No te quedes sólo con las galletas que es la más triste!-dijo Kise más animado.

-Vale, vale, jajajajajaja-dijo Kuroko mientras se reía.

-Luego nos vemos Kurokocchi.

-Sí, hasta luego.

***********************************************************************

Pasó la mañana y un pelirrojo se dirigía a la sala de profesores. Había estado sufriendo todo el rato las quejas y los enfados de su muy tonto amigo, y estaba ya harto. Tenía que hablar con Kuroko para que le aclarara que había pasado con Kise. Llegó a la sala de profesores y miró por el pequeño cristal de la puerta. Parece que después de tanto sufrir los dioses se habían puesto de su parte. El peliceleste se encontraba allí, y además solo, no había otros profesores, ni siquiera alrededor, era su única oportunidad de hablar con él solos, ya que si no se tendría que esperar a la semana que viene para poder hablar con él a solas en las tutorías que tenían, y no podía esperar tanto. Tocó la puerta, y después de recibir una invitación abrió para luego dirigirse al profesor. Kuroko al verlo se sorprendió, se notaba que no sabía que era él el que había tocado, ya que por el pequeño cristal no se podía ver demasiado, y menos si Kagami se había escondido lo suficiente para que no se le viera la cara. Sabía que si veía quien era no le iba a atender e iba a decirle que no podía pasar. Se sentía mal por engañar así al profesor pero Aomine estaba fatal, tenía que conseguir que Kise hablara con él, aunque no volvieran a salir que solamente hablaran, sólo necesitaba eso.

-Kagami-kun deberías estar ya de camino a tu casa no aquí, en la sala de los profesores.-dijo Kuroko remarcando la última palabra como una invitación indirecta para irse.

-Lo sé, y lo siento mucho Kuroko-sensei, pero necesito hablar con usted urgentemente.-dijo Kagami intentando hacerle entender a Kuroko que no se iba a ir sin hablar con él.

-Kagami-kun, tenemos una tutoría el Martes que viene ahí podemos hablar tanto como quieras.-dijo Kuroko que quería retrasar esa conversación lo más posible.

-Ya, ya, entiendo, pero necesito hablar contigo ahora, no puedo esperar hasta el Martes, por favor.-dijo Kagami sin darse por vencido a pesar de las negativas del profesor.

-Ayy...mira Kagami-kun, sé de lo que quieres hablar pero debes entender que la decisión no es mía y que yo no puedo controlar la vida de otra persona, ni tomar decisiones por ella, por eso es tontería que quieras hablar conmigo sobre ese tema.

Kuroko ya había recogido y había emprendido su marcha hacia la puerta pero una mano cogió su muñeca suavemente, sin aplicar demasiada fuerza, sólo la suficiente para detenerlo. Kuroko se dio la vuelta y vio a Kagami cogiéndole la mano.

-Por favor Kuroko, sé que eres amigo de Kise y que puedes hablar con él, sólo necesito que se vea con Aomine unos minutos para que hablen, no digo que vuelvan a salir, por supuesto que no, yo fui el primero en decirle que era mala idea, solamente quiero que hablen. Aomine está destrozado, quiere que Kise lo perdone a toda costa, no era él en ese momento, se había ido de sus cabales, por favor ayúdame.-dijo Kagami rogándole, ahora le tenía la mano cogida con sus dos grandes manos.

Kuroko pareció reflexionar un poco y dio varios suspiros de derrota.

-Kagami-kun, entiendo por lo que estás pasando porque yo estoy igual con Kise, quiero lo mejor para él, y sobretodo, quiero que no sufra, por eso mismo te digo que por ahora Kise no va a hablar con Aomine-kun, y te pido yo a ti por favor que le digas a Aomine-kun que no insista, porque solamente se llevará negativas y que si lo fuerza a hablar va a ser incluso peor. Te lo digo porque conozco a Kise-kun desde hace mucho tiempo y sé como es, no trates de obligarlo a hacer algo que no quiere porque sino todo empeorará más.

-Entiendo Kuroko-sensei..., pero al menos podría hacerle saber a Kise-sensei que Aomine está muy arrepentido y que solamente quiere su perdón.

-Claro, Kagami-kun, pero no esperes que Kise-kun vaya a hablar con Aomine-kun de buenas a primeras, tendrá que esperar un poco a que se calmen las cosas y a que Kise-kun esté listo y quiera hablar con él.

-Lo sé, Kuroko-sensei, ¿tú sabrías más o menos cuanto tardaría? A ver no me malentiendas no quiero presionarle es sólo por tener una aproximación.

-No lo sé, Kagami-kun, eso es cosa de Kise-kun.

-Vale, de todas formas muchas gracias por atenderme.-dijo Kagami mientras le soltaba la mano con una sonrisa abatida mientras se dirigía a la puerta.

-Siento no poder ser de más ayuda, Kagami-kun.

-No se preocupe, a mí me ha ayudado mucho. Hasta la semana que viene y que pase un buen fin de semana.

-Gracias Kagami-kun e igualmente.

Kagami salió de la sala y fue hacia la entrada para decirle a su amigo lo que había hablado con Kuroko. Dudaba mucho que le sentara bien, pero era lo único que podía hacer, esperar.

 


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).