Scott llego a casa de Stiles esperando encontrarlo en su habitación, le sorprendió no verlo por ningún lado incluso reviso la cochera encontrándose con el jeep ─Que extraño su jeep está aquí─ miro dentro del vehículo buscando alguna pista de su localización cuando escucho el sonido de un auto frenando, salió abriendo la puerta del garaje, ahí estaba Derek bajando de su auto.
En un principio se sorprendió pero lo dejo pasar y trato de avisarle que el humano no se encontraba en casa ─Derek, Stiles no…─ se quedó con los ojos muy abiertos al ver que su mejor amigo baja del auto ─ ¿Qué haces en el auto de Derek?
─ ¡Tío Scott!─ pero antes de que el humano pudiera contestar, bajo del auto la pequeña y corrió hacia él.
─Hola Alexa, ¿Dónde estabas?─ pregunto dirigiéndose a Stiles
─por ahí─ sonaba algo nervioso, Scott soltó una risa y negó con la cabeza.
─si no me quieres decir que salieron a una cita por mi bien─ dijo en tono de mofa el alfa.
─ ¡NO FUE UNA CITA!─ Gritaron Stiles y Derek al mismo tiempo.
Scott no pudo evitar reír ante aquella negativa tan brusca, Alexa le pidió que la alzara y Scott no se negó ─Fue una cita─ le susurro Alex ─ shhhhh─ él hizo el ademan de no decir nada.
─ ¿Qué pasa Scott?─ Hale fue el que hablo dejando de lado el tema.
─Encontramos huellas de lobo por todo el bisque incluso cerca de la mansión─ el semblante de Scott era serio a pesar de tener a una niña demasiado distraída con el pasar de una Catarina
─ ¿ahora que está buscando?─ Stiles recordó todo el estrés que tenía y juraba que ahora le dolía todo el cuerpo.
─Eso no importa, porque encontramos algo parecían huellas humanas, estaban en el Nemeton─ dijo Scott bajando a la niña que apresuro el paso para atrapar al insecto. Tanto él como Liam habían salido a inspeccionar el bosque, Lydia estaba con Parrish y Kira cuando llegaron al viejo árbol y encontraron pisadas humanas por toda la zona de la raíces del árbol.
─Acaso... no planeara utilizarlo de nuevo- dijo Stiles al aire, tratando de rebuscar en toda la información que había obtenido si podía encontrar alguna conexión pero no había nada en su cabeza.
─Deaton cree que si, este no perdió del todo su poder la última vez.
─Puede que quiera la sangre de Alex como─ Derek no se atrevió a terminar la frase.
─como Sacrificio─ dijo Stiles con un dolor en el corazón de eso estaban seguros todos pero no querían mencionarlo en voz alta.
El alfa aparto cualquier imagen de su cabeza ─Eso no tiene ningún sentido, según entiendo, para darle poder al nemeton se necesitan varios sacrificios y no necesariamente está incluido un ángel en estos─ Scott quería creer que tal vez esa idea no fuera valida.
─Tal vez este sea diferente, tal vez no solo sea un sacrificio común y corriente─ se apresuró Stiles, la pequeña se acercó a la acera y con un gis que llevaba entre sus ropas empezó a dibujar una rayuela.
─ ¿Qué quieres decir Stiles?─ ambos lobos lo miraban atentos, este simplemente se recargo en el auto y dejo fluir su ideas.
─La sangre de ángel no tiene muchos usos, pero piensa esto, si utiliza esta el nemeton tendrá los sacrificio suficientes, un filósofo, un guerrero, un sanador, un virgen y un guardián. Un ángel puede ser muchas cosas; tal vez solo tal vez sea un sacrificio más poderoso que cualquier ser humano.
Scott y Derek no se podían creer que Stiles de verdad consideraba esa idea totalmente real.
─Existen muchos ángeles, ¿Por qué usar a Alexa?─ Cuando Stiles planeaba decir algo, inmediatamente cerro la boca, no tenía ni idea.
─Porque soy parte de uno de la manada─ dijo la pequeña, que a pesar de estar jugando escucho todas las palabras que los mayores decían.
─Alexa, explícate mejor─ dijo Scott haciendo que Derek y Stiles pusieran los ojos en blanco.
─Tío Scott, jamás has sido muy listo─ sentencio la pequeña.
─ ¿Disculpa?─ se escuchó confundido el lobo. Ella sonrió pero no repitió lo que dijo solo se acercó con el gis en las manos.
─Veras, yo soy un ángel, nosotros cuidamos de ustedes aunque hay veces que no lo parece─ trato de no ser brusca con su elección de palabras sabía que cualquier cosa se podría salir de contesto y hacer enojar a sus superiores que seguían escuchándola. Scott asintió recordando todo lo que supone que dcia la religión sobre ellos. ─Pero estoy atada a una persona que es...- dejo la oración sin terminar esperando que la terminara.
Scott lo pensó un poco ─Ammm ¿Derek?
─ ¡STILES!─ Gritaron Alexa y Derek.
─ ¿A Stiles?, pero pasas más tiempo con Derek.
─Pero tiene el aroma de Stiles, Scott, ¿No lo percibes?─ el mayor señalo a la pequeña, Scott se agacho para quedar cara a acara con esta y la olisqueo como hace un perro curioso; y era verdad, su aroma a vainilla se combinaba con el aroma de Stiles; y de nadie más ni siquiera el de Derek.
─ ¿Por qué?─ susurro Scott
─ porque soy el ángel de Stiles─ respondió está dándole al humano la mejor sonrisa que podía dar, se acercó y le entrego el gis y luego fue con Derek para que la levantara.
─Mi ángel─ aquello no sabía cómo interpretarlo así que no pregunto y dejo que la pequeña siguiera con su explicación.
─Sí, nací después de la muerte de tu ángel- dijo algo deprimida.
─ ¿los ángeles mueres?─ pegunto Scott algo confundido, la niña no quería contestar realmente eso pero debía hacerlo, Alexa solo asintió ─Si Jennifer consigue atraparte, te matara, ¿cómo?─ Alex solo se encogió de hombros dando a entender que ni ella sabía cómo.
─Basta, no me importa eso, no permitiré que Jennifer la toque─ Dijo Derek ya bastante molesto con la conversación.
─Tiene razón, yo tampoco quiero que te lastime─ apoyo Stiles.
•••
En la casa del lago, Lydia se encontraba en la habitación donde encontraron las pistas para descifrar las claves para la Deadpool, creyó que ahí encontraría una respuesta sobre la situación de la niña. ─Debe haber algo que pueda hacer para ayudar─ se decía mientras caminaba de un lado a otro.
Estaba por salir de la habitación cuando escucho las garras de un lobo rosar el suelo y un gruñido, no fue tan tonta como para salir de aquel lugar, solo respiro preguntándose por qué se escuchaba un sonido de fuera. Silencio. Se quitó los tacones y salió con sumo cuidado, las garras aún se escuchaban, venían de la cocina, tendría que correr escaleras abajo suplicando que aquello no la descubriera.
Bajo las escaleras, aquello la escucho y ya venía a toda velocidad por ella. Se dio la vuelta para encararlo. Sintió las garras rozando su espalda.
¡AAAHHH!
Y gritó, era un grito capas de destrozar los oídos, ella azoto la puerta mientras aquella criatura se retorcía del dolor a su espada, no podía verlo, no quería ver que o quien estaba ahí; tenía miedo de que aun fuera un niño y terminara sintiendo compasión y entregándose completamente por piedad.
Había conducido durante todo su trayecto, no se dio cuenta que ya estaba en medio del bosque, para ser más precisos en el Nemeton, lo cual le causo escalofríos, rodio el árbol teniendo cuidado de no tropezar con las raíces que sobre salían de este.
─ ¿Por qué he llegado aquí?- se preguntaba, tropezó con algo, cayendo de cara sobre la tierra; soltó un quejido, el golpe había sido muy fuerte, se reincorporo y volteo a ver la cusa de su caída.
─Ahora ¿qué?─ Primero solo vio ramas y hojas recargadas en el tronco para luego mirar con cuidado y notar lo que en verdad estaba ahí ─Dios... mío- lo que estaba delante de ella, dos cadáveres, estaba segura de que estaban muertos, pero ¿Cómo?
•••
En el Nemetom, los servicios de emergencia se encargaban de revisar y llevar los cuerpos que la Banshee encontró, Parrish era quien se encargaba de hablar con Lydia mientras el sheriff se encargaba de lo demás.
─ ¿por qué no llamaste a Stiles o a alguien más primero?─ pregunto este tratando de no sonar grosero y en voz baja para que algún otro oficial no lo escuchase
─No lo sé... esto fue mucho más extraño de lo normal, estaba segura de que terminaría en alguna escena del crimen pero no aquí... además, pensé que sería peligroso para ellos─ sus ideas pasaban demasiado rápida para encontrar coherencia.
─ ¿Para los hombres lobo?─ el oficial enarco una ceja, ella asintió.
─Si, como si algo les esperara aquí─ miro el tronco y las bolsas donde eran trasportados los dos cuerpos. El sheriff se acercó y con el tacto paternal que lo caracterizaba tranquilizo a la muchacha, le pidió a Parrish que la llevara a casa pero antes de que esto se cumpliera la chica se atrevió a hablar.
─ ¿Cómo murieron?─ fue lo que pregunto Lydia.
─no lo saben, no existen ninguna marca de forcejeo o algún disparo, será mejor esperar el informe del forense.
•••
En casa de Scott, Liam, Kira, Lydia, Malia, Stiles y Alexa ya se encontraban ahí, ya estaban enterados de todo lo sucedido con Lydia y más que angustiados estaban exasperados; tal vez porque no había sentido en las acciones de Jennifer. ─Dos asesinatos─ Stiles repasaba un poca la información dada.
─Y si... esa mujer está pensando en hacer el ritual de nuevo y empezar con los sacrificios─ Liam sonaba algo asustado, ya que no conocía bien lo que había pasado antes.
─Lydia ¿Qué fue lo que vistes?─ La pregunta se volvió a repetir pero en boca de Kira.
La pelirroja suspiro ─Eran dos personas, una mujer y un hombre... estaban muertos, no vi sangre ni nada... solo estaban muertos.
─ ¿Jennifer?, pero ella no mata de esa forma─ Stiles repasaba mentalmente las muertes de la vez pasada, sabía que ella había buscado maneras rebuscadas de hacer los sacrificios.
─ ¿había marcas? O ¿plumas?- pregunto Alex llamando la atención de todos.
─No, ¿por qué preguntas?─ la chica se agacho para mirarla a la cara, la niña ni se inmuto y solo bajo la mirada para volver a ver a la pelirroja con una sonrisa cargada de tristeza y tal vez un poco de miedo
─Alex, responde amor─ se le salió con mucha naturalidad a Stiles, Alexandra más que sorprenderse asintió.
─creo... que ya encontró la forma de matar ángeles─ las lágrimas caían por sus mejillas, esas lagrimas eran calmadas no había sollozos o gritos, ella se aferró a la ropa de Stiles.
─Esos dos eran…─ Scott no pudo terminar su oración cuando Alexa le interrumpió.
─Sí... ángeles, debió invocarlos─ la pequeña se mordía los labios.
─Eso quiere decir que ya no te necesita, te dejara en paz─ dijo Lydia un poco más tranquila, los demás menos Stiles se habían relajado por las expresión de la pequeña sabía que eso no era cierto, la cargo con cuidado y no necesitaba ser un loba para sentir como su pequeño corazón golpeaba su pecho, Scott y Liam se dieron cuenta de ello. Malia se acercó y le intento tranquilizar con un pequeño peluche con el que estuvo jugando minutos antes.
Los sollozos empezaron aunque intentaba aceptar el buen gesto de la coyote ─Solo consumió sus alas... pero no su sangre... ella me necesita para abrir la puerta.
─ ¿La puerta, cual puerta?─ Malia hablo asustando a la pequeña que se pegó aún más al pecho de Stiles.
─Se supone que existe una puerta que lleva al jardín del edén, en este está el fruto prohibido... si lo consume junto con mi sangre... ella, ella.
Sus palabras apenas salían de su boca y estaba temblando con las manos demasiado, Stiles pasó su mano sobre su frente, estaba ardiendo ─tiene fiebre, ¿Los ángeles enferman?
•••
Derek junto con Parrish y Braeden decidieron ir a buscar por el bosque cualquier señal de otros cuerpos y así fue.
─ ¡Derek, Oficial!─ grito Braeden ─Tienen que ver esto.
Y justo en un claro cercano al Nemetom había cuerpos cubiertos con ramas, parecían alas hechas de árboles.
─ ¿Qué paso aquí?─ llego enseguida Parrish y Derek detrás de él.
─no lo sé, pero si en verdad fue ella, deberíamos tener refuerzos.