Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Bad Things - Chenmin (Two-Shot) por Valu

[Reviews - 1]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

Mi segundo fanfic Chenmin <3 espero que le den una pequeña oportunidad, de verdad me gusto mucho hacerlo, lamento si hay faltas de ortografía y/o redaccion, aun soy nueva en esto :c

Tambien lo publicare en Wattpad, mi usario es: valu_yehet

*La historia me la he invetado yo, solo saque ideas del video de la canción (me guie)*

¡Ojala les guste!^^

-¡Xiumin, apresúrate!- cogió la mano de su novio y siguieron corriendo atreves de aquel callejón para poder llegar al auto que los esperaba.- ¡Joder! ¡Entra rápido!- prácticamente empujo al chico a los asientos traseros para luego subirse él y por fin ordenar que avanzaran.- ¿¡Cuál es tu maldito problema!? ¡Casi nos atrapan por tu culpa!

-Lo siento, yo me distraje.- el chico se encontraba con la cabeza baja y los ojos llorosos mientras apretaba con fuerza la tela de sus pantalones.

-¡Eso pudo costarnos caro!- tomo el rostro del chico para que lo mirara a los ojos, dándose cuenta de la pequeña pizca de temor en ellos.

-Jongdae, es suficiente, deja de gritarle a Minseok.- el castaño soltó el rostro del contrario para dirigir su molesta mirada a su amigo, quien conducía.- sabes perfectamente que nunca debiste haberlo metido en esto

-No te metas en nuestras discusiones, esto no te incumbe

Llegaron a una especie de bodega un poco alejada y escondida de la cuidad. El primero en bajar del auto fue Minseok, quien fue rápidamente detenido por Jongdae al sostenerlo del brazo.

-Déjalo tranquilo, ha tenido suficiente por una noche.- deshizo el agarre mirando al pelinaranja.- puedes irte.- el chico no tardo ni un segundo en entrar a la bodega y dirigirse a la habitación que compartía con su novio.

-Deja de interponerte, Sehun. Él es mi pareja, no la tuya, tú tienes a Luhan.

-¿Estas escuchando la estupidez que dices? ¡Acaba de cumplir 18 años, Jongdae! ¡Cómo no ves que está asustado!

-¡Eso no te da el derecho a meterte! ¡Él debe acostumbrarse a esta vida!

-Puedes perderlo si lo tratas así, y el único que sufrirá serás tú.- el rubio paso por el lado chocándole el hombro y se dirigió a su habitación.

Jongdae, aun molesto con toda la situación, se adentró en la bodega con la bolsa del dinero robado para dejarla donde correspondía.

Toda molestia se esfumo cuando ingreso a la habitación y vio a la persona que más amaba llorar mientras abrazaba sus piernas. Fue en ese momento cuando tomo el peso de las palabras de Sehun, había sido un imbécil con el amor de su vida.

Cerró la puerta con sutileza para dirigirse hacia el chico, llamando su atención al acariciarles sus anaranjados cabellos.

-Lo lamento, fui un idiota, no debí gritarte. Estaba asustado de que te pudieran atrapar, y dije cosas hirientes. Te amo… Eres lo más preciado que me queda, espero puedas perdonarme

 

El chico se lanzó a los brazos del castaño mientras a su vez, sostenía la camisa de este con fuerza.

-Estaba tan asustado, y tú te veías tan molesto… Pensé que ibas a terminar conmigo

-Jamás, tú eres mi Baozi y yo soy tu Dae, ¿Verdad? Estaremos juntos pase lo que pase.- acaricio la espalda a su pequeño novio en un intento de tranquilizarlo.- deja de llorar Minnie, no fue mi intención herir tus sentimientos

-Eres el único que ha estado conmigo en todo momento desde siempre, temo que un día ya no sea así

-Eres mío, no permitiré que nos separen

-Gracias, Dae.- se abrazó al cuello de este, posicionando la cabeza sobre su hombro.- ¿Sabes? Me da miedo esta vida que llevamos, pero donde tú vayas ahí estaré yo. Hoy cometí un error y de verdad lo siento, intentare que no se vuelva a repetir para no ser una carga para ti

-No eres una carga, jamás lo serás, no quiero que vuelvas a decir aquello.

-Está bien, lo lamento.- rozo su nariz en el cuello del castaño provocándole leves escalofríos. Al notarlo, sonrió débilmente para luego pasar de aquellos roces a besos. Era consciente de que a su novio le encantaba cuando tomaba la iniciativa, por lo que no dudo combinar sus besos con lamidas, dejando unas cuantas marcas de recuerdo.

-…Min…- bajo sus manos directamente al trasero de Minseok para apretarlo con fuerza, causándole un pequeño gemido.- déjame corregir mis errores, haré que solo pienses en mi nombre

.

.

A la mañana siguiente el pelinaranja despertó sintiendo unas pequeñas clavadas en su espalda baja, era soportable, pero se sentía incómodo.

Cuando estaba dispuesto a levantarse de la cama, la puerta se abrió revelando a Luhan, el novio chino de Sehun.

-Me alegra que hayas despertado, creo que tuviste buena noche con Jongdae.- le comento con una sonrisa pícara mientras le entregaba unas pastillas junto a un vaso de agua. El chico de abultadas mejillas al escuchar aquello se sonrojo completamente y tapo su torso descubierto.

-¿Nos escuchaste?

-Todos los escuchamos, no son para nada silenciosos o disimulados que digamos

-Y-Yo, lo siento, no quise incomodarlos… Dios, que vergüenza

-No te apenes, yo también lo hice con Sehun, y creo que Suho y Lay también lo hicieron.- volvió a sonrojarse, era un tema muy incómodo e íntimo para Minseok, por lo que decidió cambiarlo.

-Lu, ¿Dónde está Dae?

-Oh, él junto a Sehun y Suho tuvieron que salir a tu sabes, eso… Fue de improvisto, pero dijo que lo esperaras listo, te quiere llevar a una cita.

A pesar que se sentía un poco triste cuando noto su ausencia, su corazón se alegró al saber que su Dae quería tener una cita con él. Habían pasado un tiempo desde su última cita como pareja.

-Gracias, Lu

Fue en minutos que se encontraba listo. Salió rumbo a la improvisada cocina de la bodega y se sentó mientras tomaba un vaso de leche. Luhan entro junto a Yixing, la pareja de Suho, que también era chino.

Los escucho hablar en su idioma y se sintió fuera de lugar, la mayoría de las veces se quedaba con ellos y se sentía excluido cuando ambos hablaban en su idioma natal. Sabía que no lo hacían adrede, y que era porque se les hacía más cómodo, pero no podía evitar sentirse como un extraño.

-Minnie, ¿Qué sucedió ayer? Escuche a Jongdae y Sehun discutir

-Dae estaba molesto porque por mi culpa casi nos atrapa la seguridad de la tienda

-¿Cómo es eso?

-Ya habíamos robado la tienda y estábamos corriendo para llegar donde Sehun, pero me distraje con algo que vi y disminuí mi velocidad. Si no fuera porque Dae tomo mi mano para seguir corriendo, quizás no hubiéramos llegado aquí…

-Y… ¿Qué viste?

-No estoy muy seguro, pero creo que era mi madre. Ella vio todo lo que hice

-Pero ya han pasado dos años desde que huiste de tu casa por culpa de ella, ¿Estas arrepentido?- Yixing pregunto preocupado.

-No, no me arrepiento. Si me fui de allí fue para estar con Jongdae, yo acepte esta nueva vida, solo debo acostumbrarme

-Eres tan adorable.- el pelirosa tomo ambas mejillas del chico para jalarlas un poco y lo abrazo como a un peluche, restregando su mejilla con la mejilla del pelinaranja.

-Sera mejor que lo sueltes, cierva con complejo de macho

-Ya llego el amargado, ¿No estabas ocupado, Chen?

-Estaba, tú lo has dicho, ahora suelta a mi pareja

-No quiero, él está conmigo ahora.- lo abrazo más fuerte, logrando que Jongdae frunciera el ceño.

-Sehun… O lo alejas tú de Minseok, o lo alejo yo de Minseok

-Lu, amor, ya suéltalo, lo estas asfixiando

-Pero él quiere estar conmigo, ¿Verdad, Baozi?- eso fue suficiente para que Jongdae se acercara, solo él tenía permitido llamar Baozi a Minseok.

Antes de que el castaño pudiera hacer algo en contra del testarudo Luhan, Minseok se soltó de su agarre y se lanzó sobre su novio enredando sus piernas en las caderas del otro.

-Te extrañe.- sólo eso basto para que Jongdae sonriera y lo besara, olvidándose del resto.

-Tengo algo que mostrarte.- lo llevo a lo que sería la “sala” de aquella bodega y lo sentó en el viejo sofá.- cierra los ojos.- confirmando que su travieso novio no hiciera trampa puso el obsequio delante de él.- ya puedes abrirlos

Una enorme caja blanca estaba frente a él.

-¿Qué es?

-Ábrela y lo sabrás.- Minseok quito con delicadeza la tapa de aquella caja llevándose la sorpresa de que esta estaba llenas de rosas azules, su color favorito.- ¿Te gusta?

-Dios mío… ¡Me encanta! Son hermosas, muchas Dae.- lo beso de una manera dulce para luego juntar sus frentes.- soy afortunado de tenerte a mi lado

-Haré lo que sea para mantener esa bella sonrisa en tu hermoso rostro

Ambos estaban tan perdidos en su mundo que no notaron que estaban siendo observados por las otras parejas.

-Junmyeonnie, yo también quiero rosas.- le reclamo mientras lo tiraba de la camiseta.

-De acuerdo, si eso quieres, te las comprare

-¿De verdad? ¡Gracias! Eres el mejor novio del mundo

Todo eso no paso desapercibido por Luhan, quien moría de celos por ver como los novios de sus amigos los consentían, y su novio estaba desinteresado viendo su celular.

-Sehun, ¿Por qué yo no tengo rosas? Pudiste al menos comprarme una

-¿Para qué quieres rosas? es un desperdicio de dinero

-Pero yo quiero que me compres rosas

-No gastare dinero en algo tan inútil como una rosa, lo siento.- le dijo para luego salir de la sala siendo seguido por Suho.

El chino estaba herido, su novio se había negado a consentirlo frente a todos y luego se fue dejándolo solo. Unas fuertes ganas de llorar se hicieron presentes, notándose en sus ojos que estaban más brillosos de lo normal. 

-Lu…

-Es-Estoy bien.- interrumpió a Lay con la cabeza baja. Escuchaba ruidos en el pasillo, y supuso que Sehun y Suho estaban discutiendo.

-Dije que no gastaría dinero en algo tan inútil como una rosa… Por eso te compre un ramo.- decir que Luhan se sorprendió, era poco. Definitivamente el chino no esperaba que su novio volviera con una caja llena de sus rosas favoritas, blancas.

-Eres un imbécil.- se le acercó para golpearlo en el pecho y luego abrazarlo no pudiendo retener más sus lágrimas.

-Sabes que te consentiré en todo, Lu. Obvio siempre y cuando este dentro de mi alcance

Por otro lado, Suho también apareció con una caja blanca, pero esta estaba destapada por contener más rosas que las otras dos. Además, eran de dos colores, rosadas y moradas.

-Lo mejor para mi pequeña ovejita

-¡Son hermosas! ¡Gracias, gracias, gracias!- al igual que un niño pequeño dio saltitos en su lugar emocionado.

.

.

-¿Dónde iremos?

-Gracias al robo de hoy, he conseguido lo suficiente como para invitarte a los mejores lugares de la cuidad. Tú dime que prefieres y allí iremos.

-¿Lo dices en serio? ¿Puedo escoger cualquier lugar?

-El que desees

Eso lo emociono muchísimo, quería ir a tantos lugares, pero no se aprovecharía del dinero de su novio aunque fuera robado. Quería algo significativo, hermoso, que pudieran recordarlo como uno de sus mejores días.

-¿Podemos hacer un picnic?

-¿Un picnic?

-Sí, quiero algo sencillo, pero me gustaría hacerlo en aquel bellísimo parque que solo puede entrar la gente con dinero. Sería muy significativo para mí

-Si eso te hace feliz, pues vamos

Compraron todo lo necesario y fueron al lugar deseado del pelinaranja. Jongdae, al escuchar el precio de la entrada a dicho parque estuvo a punto de negarse, encontraba una exageración pagar s61;65 won por persona. Pero ver esa mirada ilusionada de su novio lo hizo entregar el dinero correspondiente, su Baozi valía cada won.

Debía admitir que el parque era hermoso, sin duda era un buen ambiente para la cita. Al ser un lugar extremadamente caro, la cantidad de personas no superaba los veintes, así que eso les daba más privacidad a la pareja.

Fueron al fondo del parque, donde casi nadie pasaba y los arboles creaban una sombra perfecta.

-Este parece un buen lugar, por lo que veo las personas no llegan hasta aquí, y tenemos una excelente vista de la cuidad.- era cierto, el parque al estar situado en un cerro dejaba una bella vista a sus visitantes.

Pusieron la manta en el pasto junto a la canasta de comida y acomodaron el cojín para poder acostarse cómodamente.

-Han pasado mucho tiempo desde la última vez que salimos a una cita

-Lo sé, no hemos tenido tiempo para nosotros desde que estoy en esto…

-Está bien, no te estoy reclamando nada. Estoy feliz de que tengamos una cita normal, sin tener que huir de nadie

-Yo también estoy feliz, pero de tenerte aquí a mi lado.- se acercó dándole un beso lento, mientras le acariciaba el rostro con delicadeza, como si tuviera miedo de lastimarlo con su toque.- eres perfecto, Kim Minseok

-No lo soy, tengo muchos defectos

-Hasta tus defectos son hermosos

-Eres un cursi.- se sonrojo brindándole una bella sonrisa.

-Tú me vuelves así… Pronto cumpliremos un año más de relación

-Lo sé… Dae, siempre quise preguntarte, ¿Qué se siente conocerme desde que nací?

-Es asombroso, te vi por primera vez cuando tenías dos semanas de vida, eras un bebé de grandes y rosadas mejillas, muy lindo. Te he visto crecer y he estado en cada momento de tu vida, me siento muy afortunado

-Recuerdo que la primera vez que me besaste yo tenía cinco años y tú diez

-También lo recuerdo… Pero no todo ha sido lindo entre nosotros… Jamás me olvidare cuando tu madre me trato de pedófilo por besarte y tocarte el trasero cuando tenías trece

-Legalmente hablando, si eras un pedófilo ya que tú tenías dieciocho y yo era menor de edad… Pero ella sabía que nos gustábamos y aun así se opuso a nosotros

-Porque sabía que vida llevarías si te quedabas conmigo…

-¿A qué te refieres?

-Me dijo que me alejara de ti, que yo estaba arruinando tu futuro. Una vez me amenazo con meterme preso por acosar a un menor de edad… Ella sabía que yo robaba para mantenerme, no quería lo mismo para ti

-Reconozco que robar es un delito, pero tú jamás has lastimado a alguien. No te justifico, pero robas para pagar los gastos comunes, tu alimentación y vestimenta. No lo haces por gusto como otras personas

-Lamentablemente la sociedad no lo ve como tú. Sé que estoy mal, pero me acostumbre a robar para mantenerme… Fue mi única alternativa cuando mi madre se fue y no me dejo nada. Las personas no quisieron ayudarme, y no pude conseguir trabajo porque en ningún lugar me aceptaban con trece años

-Está bien, sabes que yo no te juzgo por las decisiones que tomaste. Siempre tuviste y siempre tendrás mi apoyo

-Por cosas como estas me siento afortunado de tenerte, eres el único que no juzgo mi actuar y estuvo apoyándome aun sabiendo que lo que hago está mal… De lo único que me arrepiento es tener que hacerte vivir como yo

-No me estas obligando, yo escogí huir de casa, yo escogí seguirte, yo acepte robar junto a ti, y todo porque te amo.- entrelazo su mano con la del castaño y beso su mejilla.- juntos hasta el final, ¿Lo recuerdas?

-Todos los días. Si tú caes, caeré contigo

-Exacto

Se quedaron en silencio, únicamente mirando el hermoso cielo despejado. Un día tranquilo, sin robos, ni huidas; como una pareja normal. Disfrutando de aquella calma que les hacía falta.

Pasaban los segundos, los minutos, las horas, y ellos seguían abrazados bajo aquella sombra que el árbol les proporcionaba.

-Dae, ¿Quieres comer?- el castaño simplemente asintió, viendo como su novio sacaba cosas de la canasta para entregárselas. Le molestaba saber que fue él quien corrompió al pequeño, porque él lo incentivo a seguirlo y él lo incentivo a robar… Sólo él estaba arruinando al pelinaranja.- ¿Estas bien?

-Sabes que te amo, ¿Verdad?- pero muy a pesar que le molestara, no podía alejarlo de su lado. Lo necesitaba como el aire, Minseok era su realidad en el mundo de delincuencia en el que vivía.

-Por supuesto que lo sé, yo también te amo.- esa frase junto a su sonrisa era todo lo que Jongdae necesitaba para seguir viviendo contento y tranquilo.

Comieron entre risas y bromas, ayudándose mutuamente si es que el otro se ensuciaba. Nadie quien los viera pensaría que ambos eran ladrones.

.

.

Estaban satisfechos, viendo el sol esconderse creando un bello atardecer de tonalidades naranjas, rojas y moradas. No dudaban que la noche sería igual de hermosa ya que no había ni una sola nube y el clima era perfecto.

-¿Te ha gustado nuestra cita, Baozi?

-Me ha encantado, sería genial si pudiéramos repetirlo más seguido

-Haré todo lo posible para que así sea

-No sé qué hice para tener un novio tan maravilloso como tú

-¿Ahora quién es el cursi?- se burló apretándole la nariz, obteniendo como resultado que el menor inflara sus mejilla como reproche.

-¡Mataste el momento!- se cruzó de brazos aun con las mejillas infladas

-Te ves tan adorable cuando haces eso.- lo atrajo hacia él para llenarle la cara de besos hasta que consiguiera una sonrisa.

Una relación como cualquiera, con altos y bajos. Pero era una relación fuerte, con comunicación, llena de cariño y respeto; un amor envidiable.

Notas finales:

Nos leemos el domingo~ ojala puedan dejar algun review^^

Bye!


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).