POV. Itachi Uchiha
—Estoy muerto y aún me falta dos horas para salir del trabajo. —Suspiro por quinta vez en la noche, trabajar en un bar era agradable, en ocasiones. Era un bar reconocido y solo era visitado por personas con un índice de ingresos altos. Por motivo el cual no se formaba ningún alboroto y era tranquilo.
Personas bebiendo con amigos, familia y pareja. Ambientado con una agradable música. Sin duda este bar era muy diferente al anterior en donde trabajaba. Agradecía a Kakashi por recomendarme con el dueño.
Soy Itachi Uchiha, un joven estudiante universitario que busca pagar sus estudios y mantener su pequeño pero acogedor departamento. Claro también mantener a su adorable Kuro, su gato.
Oh y claro! Soy un omega.
Un omega que a pesar de mi edad aún no he encontrado mi pareja destinada. Los celos siempre han sido difíciles para mí, pero me tranquiliza poder controlarlos yo solo.
Desde niño me decían que cuando encontrará a mi pareja destino y me enlazara con ella sería el omega más feliz por sentirme protegido y amado por mí alfa. Cosa que no he experimentado porque no lo he encontrado.
—Debería dejar de atormentarme por ello —Murmuro para mí mismo mientras de espalda a la barra seco algunas copas. —Cuando sea el momento solo será!
—Ah disculpe. Un wisky por favor.
¿Eh?
¿Pero qué?
Esa voz. Mi cuerpo. ¿Por qué tiembla?
—¿Disculpa?
Oh no. ¿Será que?
Volteo mi cuerpo un tanto rápido y lo enfoco. Un hombre, no muy mayor que yo, rubio y ojos azules. Su aroma, es un alfa y es…
Mi pareja destinada.
Siento mis mejillas calientes y mi respiración agitada. Mi entrada comienza a mojarse. ¿Por qué? Si mi celo aún no le tocaba en venir.
—Itachi!! —Siento como alguien toma mi brazo sosteniéndome, se lo agradezco porque sentía que me caería en cualquier momento —Tienes que irte de aquí, ven vamos a los vestuarios.
—¡¡No te lo lleves!! —Escucho la fuerte voz de mi destinado, él al igual que yo había entrado en un pequeño shock al encontrar a su pareja destinada pero al ver que me llevaban a otro lado sus instintos de alfas lo atacaron. —No lo toques, es mío.
Eso hizo que perdiera un poco la compostura pero no podía dejarme llevar, debía alejarme de aquí.
—Por favor, sácame de aquí Sai —Murmuro suplicante a mi mejor amigo, lo vi asentir y pedirle a unos compañeros que eran alfa controlaran al hombre que trataba de que no me llevaran lejos de él.
Mi interior, mi omega lloraba, quería estar con el alfa pero no podía hacerlo, no estando así como estoy. Yo, estaba feliz de encontrar a mi pareja, pero quería hacer las cosas bien. Conocerlo mejor.
Estando ya en los vestidores fui rápidamente a mi casillero y tome los supresores, necesitaba tranquilizar mi cuerpo.
—Oye amigo, que alfa te toco —Escuche la jocosa voz de Sai que sin duda se divertía de mi situación.
—Cállate Sai —Digo entre jadeos mientras me siento en uno de los bancos del lugar. Me agrada sentir como de apoco mi cuerpo empezaba a tranquilizarse. —Sai, ese hombre. Es mí destinado —Susurro con una leve sonrisa.
—Sí y por lo que se ve es un alfa fuerte, ese cuerpo era de dios griego, y lo pude apreciar por bajo de este traje que llevaba, te tengo envidia Itachi —Lo escucho hacer un mohín, Sai nunca cambiaría.
—Ya llegará tu alfa también. Solo espera, yo no me imagine encontrarlo aquí, quiero hablar con él pero ahorita no.
—Lástima que Lee y Neji de seguro ya lo sacaron del bar —Suspiro, siento como mi interior duele, mi omega me reclamaba por permitir que eso pasará, que lo hayan alejado de mi —Pero tranquilo amigo, sin duda Lee le saco información o algo.
Eso espero.
[2]
El pequeño incidente que se originó en el bar, por suerte fue controlado rápido y no fue dicho a mi jefe, sé que Iruka es una buena persona pero sin duda él no le gustaría que en su bar hubiera esos tipos de conflictos.
Siendo las 12 de la noche, mi trabajo había terminado y estando ya tranquilo salgo del bar despidiéndome de los muchachos que aún les tocaba seguir ahí.
Una vez afuera me encamino a mi departamento, que agradeciendo al cielo estaba muy cerca del bar. Pero en medio de mi caminata me detuvo un reconocido aroma y antes de reaccionar tenía a alguien abrazándome por mi espalda.
Era él!!
—Yo lo siento!! No quiero asustarte ni nada por el estilo, es solo que, ¡Eres mi destino! Me llamo Minato Namikaze, soy un alfa, aunque eso ya debes saberlo. Tu aroma, es muy dulce, me gusta, te quiero!
Mi cuerpo se estremeció por completo, mi alfa, mi destino estaba ahí abrazándome, sentí algo de miedo, sé que hay alfas que pueden controlarse pero no sabía si él lo haría. Y creo que mi aroma me había delatado porque Minato se había alejado rápidamente.
—Lo siento no quise incomodarte. No tengas miedo yo no te haría nada malo —Verlo tan agitado y con un sonrojo en sus mejillas se me hizo tierno, así que confiaría en él. Es mi destinado de todas formas.
—Me asuste lo admito. Perdón por lo del bar, ¿mi aroma te hizo perder la razón verdad? —Me inclino haciendo una leve reverencia— Mi nombre es Itachi Uchiha y sí, soy tu destinado —Eso último lo digo sintiendo mis mejillas sonrojarse.
—Itachi —Que él diga mi nombre provoca que mi cuerpo se estremezca, todo lo que haga ese hombre me hará descontrolarme. Aunque en esos momentos agradecía que los supresores aún actuarán en mi cuerpo. —Permíteme cortejarte, por lo que se ve soy mayor que tú, por eso quiero hacer las cosas seriamente.
—Eso es lo mismo que deseo yo —Sonrió, me hace inmensamente feliz que Minato comparta conmigo el mismo pesar, llevar las cosas con calma.
—Entonces hay que empezar con buen pie —Murmura acercándose de nuevo a mi cuerpo y con suavidad toma mi mano para dejar un beso en ella, oh dios, moriré. —Soy Minato Namikaze y es un placer conocerte Itachi Uchiha.
Si, sin duda moriré.
—El placer es mío.