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Mi esposo no me ama por Kekosas

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Notas del fanfic:

Estoy resubiendo esta historia... la habia empezado hace ya más de un año pero nunca la termine por razones personales 

Perdí algunos archivos y yo misma borre algunos (se arrepiente y golpea su rostro contra el escritorio) así que la historia aunque tendra las mismas bases puede cambiar...

En fin, si has decidido leer esta historia a pesar de que no soy una escritora muy confiable (pero no descansaré hasta terminarla) ... Gracias 

 

Notas del capitulo:

Esta historia va cambiando de tiempo conforme cada personaje va contando la historia o más bien su propia historia 

Tiempo Actual: Narra la historia principal y algunas otras que pasan en ese mismo tiempo 

 

Pasado: Narra historias que fueron antes de la historia principal 

Murasakibara

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Vi la hora en mi reloj de mano. Estaba a tiempo, justo a tiempo, había acordado con Muro-chin salir juntos de nuestro departamento pero no podía desperdiciar una oportunidad como la que se me presentaba ahora, era mi oportunidad para ser feliz, la única que me quedaba, así que sin importarme las consecuencias de mis actos salí corriendo del coche, casi desesperado como si estuviera participando en una carrera contra la muerte y entre a su residencia de aquella mansión.

Ahí estaba él vestido de blanco,  como un pequeño ángel caído del cielo.

-no te cases- le dije. Cuando fijo su vista en mi él se desplomo en el suelo intentando aguantar las lágrimas, afligido, dañado -no lo amas, no te cases Kuroko, tu verdadero amor te esta esperando, vete con él, te lo pido por favor- Rogué, casi estaba arrodillándome ante él.

-sabes bien que no puedo hacer eso, ya es muy tarde

-no es tarde aún, no te cases- insistí

Ese día fui egoísta, no podía creer que le estaba haciendo esto a un viejo amigo, pero necesitaba a Kagami lejos de aquí, lejos de nosotros, lejos de mi matrimonio, lejos de mi esposo y la única forma para hacer que se fuera era convenciendo a Kuroko de que no se casara con Aomine después de todo Kuroko no lo amaba, si Kuroko se iba con Kagami ellos serían felices y yo también, no me importo que Aomine sufriera con tal de conseguir mi felicidad.

-¿Dónde está?- pregunto y se levantó del piso donde se encontraba mientras intentaba secarse las lagrimas. 

-estás haciendo lo correcto Kuro-chin, nunca amaste a Mine-chin sólo estabas con él por lastima, no es justo para él ni es justo para ti, debes dejar que encuentre a alguien mejor.

-Murasakibara... no finjas que haces esto por mi- me dijo con típica cara de poker face, por un momento pensé que no me haría caso pero cuando me dijo "gracias" y salió corriendo dejando el velo y el ramo tirado supe que había logrado mi propósito, mi cruel propósito.

Ni siquiera le dije dónde estaba esperándolo pero de seguro él ya lo sabía y si no se encargaría de encontrarlo por sí mismo.

Volví a mi coche y tome todos los dulces que pude y empecé a devorarlos mientras me consumía el nerviosismo, dicen que para quitar la tristeza son buenos, pero creo que como los como siempre, no funciono, llegue a la recepción donde sería la boda con la cabeza gacha.

Busque a Muro-chin entre los invitados, cuando lo encontré tome asiento a su lado, tome su mano y no fue difícil notarlo, él estaba furioso, casi temblando, fije mi vista en Aomine y este sólo deba vueltas de un lado a otro.

-no llegara- dijo Muro-chin apretando mi mano

-no lo sé.

-no llegara, huyeron juntos.

-¿te molesta?- pregunte y él no dijo nada, pero es obvio que le molestaba, toda su vida estuvo enamorado de Kagami pero al estar comprometido conmigo desde que nació jamás pudo haber algo entre ellos, más que una hermosa hermandad que él no sentía, Kagami es idiota y por eso nunca se dio cuenta de los sentimientos de Muro-chin pero yo sé, a pesar de eso como un idiota pensé que podría llegar a ganarme su amor, su cariño... corazón. 

El tiempo paso y poco a poco los invitados se fueron uno por uno mientras Mine-chin intentaba no romper todo lo que se le ponía enfrente.

-Bien tal parece que Kuroko no vendrá  vamonos.

No tuve el valor para consolar a Aomine. No tuve el valor ni para verlo a la cara.

 

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Cuando llegamos a casa Himuro entro rápidamente y lo busco, a Kagami quien se estuvo quedando un tiempo con nosotros mientras firmaba los papeles de la sociedad de Telecomunicaciones con Kiyoshi, Hyuga y algunos otros socios entre ellos Akashi, y como él y mi esposo crecieron juntos desde niños en Estados Unidos Himuro le ofreció nuestro hogar para que se alojara.

Himuro y yo no nos conocimos hasta el día de nuestra boda, todo fue planeado por nuestros padres yo no me negué por que no perdía ni ganaba nada con él matrimonio, ¿Por qué él no se negó? No tengo idea, debió haber hecho lo mismo que Kuroko e irse si no quería casarse conmigo.

Trate de hacer lo mejor por él, lo trate bien y él también lo hizo conmigo, pero me di cuenta que no me amaba cuando Kagami apareció por la puerta principal. 

Pero tuvo la desgracia de atar su vida a mi. 

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Notas finales:

Abran dos prólogos antes de ir a la pareja principal...


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