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365 DÍAS A TU LADO por NesumiChan

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Notas del capitulo:

Espero que les guste, tenia tiempo con esta idea pero no la habia podido escribir, me gustaria saber que opinan de la historia. 

Sera la segunda vez que escriba sobre esta pareja y volvera a ser un fan fic de mas de un capitulo, dare mi mayor esfuerzo. 

Ojala les guste :3 

La vida puede llegar a ser cruel, no siempre pasan las cosas como queremos que sucedan, en ocasiones las personas pueden llegar a sufrir demasiado sin ningún motivo aparente, lo cual puede llegar a provocar que odien su propia vida.

Perder a la única persona que siempre había estado a tu lado es algo difícil de superar, más si estás completamente solo y le tenías un profundo amor.

Mi nombre es Kuroko Tetsuya, tengo 24 años, y puedo decir con toda seguridad que odio mi vida, la detesto, por esa razón he decidido acabar con ella.

Hablando honestamente, no es la primera vez que trato de hacerlo, recuerdo claramente cuando trate de hacerlo por primera vez, ese recuerdo me lastima demasiado, ¿la razón?, él.

Hace cuatro años sucedió algo que cambió drásticamente mi vida.
Mi familia y yo salimos de viaje, mientras mi padre conducía y mi madre iba de copiloto yo simplemente revisaba mi celular, mientras indagaba en la web encontré un parque cercano a donde nos dirigíamos, llamo mucho mi atención, puesto que podría visitarlo y pasar un rato en familia, podríamos hasta jugar básquetbol, me emocione y les comente a mis padres mi idea, ambos voltearon a verme, era raro que me entusiasmara tanto por algo, por esa razón estaban tan sorprendidos, ¿Cuántos segundos voltearon?, tal vez solo 5, no lo sé con claridad, todo sucedió demasiado rápido.

Puedo jurar que no se distrajeron por tanto tiempo, solo segundos, ¿Por qué paso eso?

Ellos estaban volteados viéndome, cuando volvieron a ver al frente del camino ya era tarde, no pudimos reaccionar. Un carro que iba a exceso de velocidad cambio de carril para tratar de rebasar a otro, lo hizo sin precaución, de tal manera que no vio nuestro carro, ambos carros impactaron, fue un choque demasiado fuerte, en ese momento mi visión se nublo y perdí la conciencia.

Cuando desperté lo primero que pude notar fue que me encontraba acostado en una cama blanca y mis brazos estaban conectados a ciertos aparatos, la mayor parte de mi cuerpo tenía vendas, fue entonces que recordé lo que había pasado, un accidente automovilístico, gire mi cabeza buscando a alguien familiar, pero no había nadie, ¿dónde estaban mis padres?

Estaba a punto de levantarme de la cama pero la puerta de abrió, pensé que eran ellos, pero en su lugar entró un joven enfermero alto de tez morena, con cabello rojizo al igual que sus ojos, a mi parecer era atractivo, ese era él.

-¿Cómo te encuentras?
-Supongo que mejor.-Le conteste un poco ansioso.
-Me presento, me llamo Kagami Taiga, soy el enfermero que te cuidara.-Me sonrió.
-Un gusto, Kuroko Tetsuya.-Trate de relajarme un poco, no me molestaba su presencia pero quería saber acerca de mis padres.
-¿Pasa algo?.-Me pregunto al observar mi comportamiento.
-Yo... ¿Dónde están mis padres?

 

Cuando termine de formular la pregunta volteé a mirar a aquel pelirrojo, en el momento en el que lo hice, pude notar que su expresión cambió drásticamente, su rostro me dijo la respuesta a mi pregunta.

-Kuroko, tus padres...-hizo una pequeña pausa- fallecieron en el accidente.

Conocía la respuesta desde antes, aún así cuando escuche esas palabras todo se empezó a desmoronar, recuerdo que me altere, empecé a gritar y llorar, maldiciéndome a mí mismo por ser el causante de tal accidente, me puse tan mal que me tuvieron que anestesiar, otra vez todo se volvió negro.

Pasados unas semanas me dieron de alta, mi cuerpo estaba casi recuperado por completo, simplemente algunos rasguños, físicamente está bien, pero en mi interior estaba muerto, las dos únicas personas que verdaderamente me amaban me habían dejado, yo era el culpable de eso, me sentía como una basura, yo los había matado después de todo, yo debí de haber muerto en ese momento, no ellos.

Los días transcurrieron y conforme pasaban me iba sintiendo más miserable, tenía que ir al hospital de vez en cuando a un chequeo, ¿qué caso tenia ir?, realmente me quería morir, entonces, ¿por qué iba?...

-Hola Kuroko, me alegra que estés aquí. -Me dijo Kagami con una sonrisa en su rostro.
-Hola Kagami-san.-Le llamaba por su apellido, ya no éramos completamente desconocidos, iba tantas veces al hospital que hasta nos convertimos en amigos.
-¿Cómo te encuentras?
-Igual que los demás días.-No necesitaba hablar demasiado con él, fácilmente comprendía a lo que me refería.
-Algún día me gustaría escucharte decir iMe encuentro mejor, gracias".-Me dijo con un tono de reproche.
-Dudo que eso pase.-Le contesté con desánimos.
-Algún día hare que digas esas palabras.-Me sonrió amable, ¿por qué era tan cálida su compañía?, parecía una luz, una luz que iluminaba mi oscuro camino.
-Gracias por todo.-Dije antes de entrar con el doctor y dejar a Kagami en el pasillo.
-Kuroko.-Me llamó a lo que yo lo mire.-Por favor... ¡sal conmigo!.-Me dijo en voz alta, fue casi un grito, las personas de alrededor nos miraron, lo cual hizo que me sonrojara.

Con esa extraña pero linda confesión empezamos a salir juntos, era lindo estar con él, me ayudó a salir de mi depresión, estaba conmigo en las buenas y en las malas, habían transcurrido un poco más de tres años desde el accidente de mis padres, llevaba casi tres años siendo novio de Kagami, el dolor había disminuido, todo estaba mejorando, entonces, ¿qué paso?

Un día ese dolor regreso a mí, los recuerdos de aquel accidente que ya estaban casi estaban olvidados se volvieron a hacer nítidos, volví a caer en depresión, esta vez también me porte mal con Kagami, no dejaba que ni se me acercara, pero aun así estuvo siempre al pendiente de mí, cada vez mi condición estaba peor, hasta que en una ocasión decidí acabar con eso, sin tomar en cuenta que si había una razón para seguir viviendo.

 

Tomé un frasco de pastillas, una forma cobarde de suicidarse, pero aun así funcionaría, agarre unas cuantas tabletas, había llegado el momento de dejar este dolor atrás, las introduje en mi boca, estaba a punto de tratarlas cuando alguien me detuvo, él.

-¡Que crees que estás haciendo!.-No era una pregunta, más bien era un reclamo.

Me obligó a escupir las pastillas, mire su rostro por un segundo, estaba enfadado, realmente lo estaba.

-Yo...
-¡Eres un idiota Kuroko!.-Me gritó.
-Lo siento... -Fue lo único que dije y es de lo que más me arrepiento.
-¿Lo sientes? ¡No digas estupideces! Lo estabas haciendo conscientemente.-Cada vez su tono de voz aumentaba.
-Kagami...
-¿A caso no te he ayudado todo este tiempo? Sé que no puedo reemplazar a tus padres, pero pensé que al menos lograría ser alguien importante para ti, convertirme en una razón por la cual quisieras vivir, pero creo que fallé.-Dijo con la voz entrecortada.
-No, eso no es cierto... -Pequeñas lágrimas empezaron a recorrer mis mejillas.
-En este momento necesito relajarme un poco, vuelvo más tarde.

Dijo eso aun con un poco de molestia y tristeza, ¿que había hecho?, lo había arruinado, Kagami estaba mal por mi culpa, en ese momento cometí mi segundo error, dejarlo ir mientras estaba molesto.

Cuando una persona no se encuentra del todo bien no presta completamente atención a su entorno, él no era la excepción.

Era madrugada y aún no regresaba, ¿dónde estaba?, estaba a punto de marcarle a su celular cuando el teléfono sonó, creí que era él, por esa razón me pare enseguida y conteste.

-¿Kagami?.-Pregunte sin pensar.
-¿Es usted Kuroko Tetsuya?
-Si, ¿Quién habla?
-Soy del departamento de emergencias, hablamos para informarle que el joven Kagami Taiga ha sufrido un accidente y se encuentra muy grave.

Nuevamente lo arruiné, estaba volviendo a perder todo, mi corazón se detuvo en ese instante, enseguida salí del departamento y me dirigí al hospital, solo podía pensar en Kagami y las cosas horribles que le había hecho pasar, no quiero que se vaya, lo necesito.

Llegué al hospital, pregunte inmediatamente por Kagami, me dijeron en que habitación se encontraba, fui a verlo, realmente estaba grave, al parecer estaba cruzando una calle, no se fijó que venía un carro y fue arrollado, su situación era crítica.

-Kuroko Tetsuya, ¿cierto?
-Si, soy yo.
-Soy el doctor Tanaka, lamento decirle que las esperanzas de que el joven sobreviva son nulas, sus heridas son demasiado graves, tuvo una gran pérdida de sangre y algunos grandes daños en sus órganos, lo siento, pero no creemos que sobreviva esta noche.

Tal vez fueran sus últimos momentos, estaría ahí junto a él hasta que esto se terminara, fue inevitable no llorar, nuevamente era el causante de las desgracias que le sucedían a mis seres queridos, pasar varias horas llorando a su lado hasta que el sueño me venció, no sé cuántas horas pasaron, pero cuando desperté vi a Kagami consciente.

-¡Kagami!
-K-kuroko.-Dijo con dificultad.
-No te esfuerces, trata de estar calmado.
-T-tengo...mucho s-sueño.-Cada vez hablaba con mayor trabajo, y su voz se volvía más baja.
-Por favor no me dejes, ¡por favor!
-Lo siento...-Dijo en casi un susurro
-Perdóname a mí, fue mi culpa.-Nuevamente las lágrimas empezaban a salir de mis ojos.
-¿Cómo te encuentras?.-Una leve sonrisa apareció en su rostro.
-¿Qué quieres decir con eso? Claramente me encuentro mal, te necesito, por favor quédate.
-Kuroko, ¿recuerdas lo que te pedí hace tiempo?
-¿Que era?.-Dije aun llorando.
-Quería que me dijeras que estabas bien, ¿ya recuerdas?.-Me mostró una leve sonrisa, esa sonrisa me lastimó
-Kagami, no puedo hacer eso...
-Por favor, solo quiero escuchar esas palabras que prometí que algún día me dirías.-Lagrimas también comenzaban a salir de sus ojos.
-Lo hare.-Dije mientras trataba de controlar mi voz.
-Kuroko, ¿Cómo te encuentras?
-Me encuentro mejor, gracias.-Trate de sonreír- me encuentro mejor desde que estas a mi lado...-termine la frase y en seguida volví a llorar, no podía evitarlo.
-Logre que lo dijeras.-hizo una corta pausa.- Quiero que sepas que te amo, y que nada de esto fue tu culpa.-sonrió y luego me dijo que me acercara.
-Quiero que sepas que también te amo.-dije contra sus labios antes de besarlo.

Ese beso fue el último, al terminar el beso pude notar como los signos vitales que antes estaban registrando los aparatos desaparecían, mi Kagami estaba desapareciendo, ya nunca más lo iba a volver a ver sonreír, sentir aquellas cálidas caricias, escuchar su voz, besar sus suaves labios, jamás podría volver a decirle te amo, me sentí mal, jamás pude contestar su pregunta correctamente y dudo que algún día lo llegara a hacer, lo siento mucho, todo lo arruiné.

Esa noche lloré, lloré tanto como cuando murieron mis padres o incluso más, nuevamente había perdido todo, estaba solo, sin nadie con quien poder hablar, los necesito, por favor regresen...

Lo de Kagami paso hace unos meses, aproximadamente unos 6 meses, en este tiempo he ido a parar en diversas ocasiones al hospital, ¿las razones?, me he enfermado gravemente, deje de comer y dormir apropiadamente, mi aspecto es un asco, pero eso que importa, después de todo así es como debe lucir la basura.

 

Hoy, por segunda ocasión volveré a tratar de acabar con mi vida, pero esta vez sé que funcionará, ya nadie me detendrá, ya no tengo a nadie, si no tengo a nadie, prácticamente soy libre, ¿no?, las cosas hoy acabaran, esta vez definitivamente dejaré de sufrir.

Me encuentro en la azotea, es el punto más alto del edificio donde vivo, ¿cuantos metros serán?, mínimo consideró que como unos 50 metros, altura suficiente para morir, aunque sobreviviera a la caída, cosa prácticamente imposible, es una avenida transitada, así que sería arrollado por un carro, curiosamente como a él le paso, pero en mi caso sería por voluntad propia.

El viento sopla y despeina mis cabellos celestes, tampoco es que estuvieran muy ordenados, se siente tan fresco y acogedor, es un buen día, coloco mis manos en la barandilla que servía de apoyo para no caer, esta fría, hay bastante ruido y carros pasando, no hay mucha gente caminando por las calles, parece ser el escenario perfecto, con un poco de impulso logro sentarme en aquella barandilla, desde este ángulo se logra tener una gran vista, será la última vez que la vea, cierro mis ojos y me preparo para soltarme, esto será el final.

O al menos eso pensé. 

Notas finales:

Me gustaria que dejaran sus reviews con lo que opinan, muchas gracias por leer <3 


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