¿Que clase de hijo de puta había sido capaz de creer que podía pasarlos como una pareja casada y estafarles 40500.193 euros. Quien lo había hecho probablemente estaba ya muy lejos de Londres en ese preciso momento, de no ser así seguro lo buscaría para asesinarlo de la forma más lenta y terrible posible. Lo habían hecho quedar como el mayor idiota del mundo.
“¿Matrimonio Black-Snape? ¡La peor y más jodidamente estúpida broma de mal gusto que un malparido se le había ocurrido hacer!” o al menos eso pensó Sirius mientras daba vueltas en el departamento y golpeaba con insistencia la pared.
Lo primero que habían hecho...
Ok, siendo realistas lo segundo que habían hecho después de la llamada fue comunicarse directamente con el dueño de los departamentos, que terminó siendo una señora muggle de aproximadamente unos 60 años, era una mujer amable. Si, pero cuando le habían explicado el problema de la venta ella afirmó que no había error alguno, que un hombre fue y pagó el lugar a nombre de un matrimonio dejándole en efectivo los 80,000 euros que costaba el lugar.
Sin poder negociar con ella decidieron darse por vencidos. Al tratar de localizar al hombre sus resultados eran más infructuosos que el convencer a James de dejar de perseguir a Evans. O que alejar a Remus del chocolate.
-¿Qué haremos?-preguntó Sirius más despeinado que de costumbre, todo ese alboroto le había causado una pérdida de al menos 5 años de vida. Seguro ahora pasaría menos tiempo con los hijos de su hermano del alma, y ¿porque pensaba en eso? Una respuesta verdaderamente sencilla, él no quería tener cachorros que alimentar y mantener. Quería ser toda la vida un alfa libre y si Dios se lo permitía quería morir de un orgasmo. Quizá lo último era pedir demasiado…
-No se tú Black. Pero esta es mi casa así que viviré aquí-Snape había pasado mucho tiempo meditando la situación, aunque estaba igual o más desesperado que el león no se lo iba a demostrar. Ese sitio era ahora lo único que tenía, el empleo que recién había conseguido no iba a dar frutos de inmediato, de hecho tenía la esperanza de poder ascender con facilidad debido a su destreza para luego convertirse en medimago, ¿quién sabe? Quizá se haría famosos, pero ese no era el punto.
Necesitaba vivir en algún lado y bien o mal ese era el único sitio donde podía y quería quedarse, si el pulgoso se retractaba y decidía irse era mucho mejor, ahora que eran un “matrimonio” tenía total derecho sobre el lugar, en caso de separarse podía pelear por el departamento e incluso las probabilidades de ganar el juicio eran altas, siempre que se metiera en el papel del Omega maltratado al que nadie quiere.
Sin pensarlo demasiado Severus tenía ya lista una historia desgarradora para quedarse de aquel lugar, lo único que necesitaría serían pruebas contundentes. Cosa realmente sencilla debido a lo promiscuo que eran Sirius.
-Bien, pero me quedaré aquí contigo amor mío no quisiera que otro alfa metiera sus narices donde no le incumbe-estaba decidido, si el karma le había contestado con Snivellus de pareja no quería ni imaginar qué le sucedería si sacaba a Snape del lugar. Además no le haría daño tenerlo cerca una temporada, al menos así se libraría de los intentos de su madre por comprometerlo.
-¿así van a ser las cosas?¿fingiremos ser un matrimonio? Debes estar jugando Black, la razón por la que yo me quedo no es por ti, de hecho si fuera solo por ti me hubiera tirado de un acantilado esperando mi gloriosa muerte.
Antes de que pudiera continuar se vio interrumpido por el alfa que se le acercó peligrosamente, no sabía porque pero estaba completamente nervioso. El aroma que expedía era sensualidad pura, sus movimientos totalmente hipnotizantes, al menos ahora entendía porque caían tantos a sus pies, pero eso no quitaba que fuera un maldito cínico narcisista que sólo sabía usar a los demás.
-Ni creas que esto me hace más feliz que a ti, lo sabemos, nos odiamos pero eso no importa en este momento. Solo necesito que me hagas un favor y después puedes quedarte con el lugar toda la vida si es necesario-aquello llamó la atención de Snape, no cualquiera le ofrecía un departamento por “un favor” ahora la curiosidad lo invadía poco a poco.
-Conociéndote será de esa clase de favores que harán que me arrepienta de haber aceptado-y aún así lo acaba de hacer. Si quería que su vida cambiará necesitaba tomar todas las oportunidades que se le presentaran y si necesitaba fingir ser la pareja del Black por una noche seguro lo lograría, en cuanto aprendiera a controlar las ganas de vomitar cada que pensaba en ello.
-¿Entonces estás listo para ser el señor Severus Black?-la pregunta estaba impregnada con malicia pura y leve tono de diversión. Esa sería la mejor actuación que vería en toda su vida si lograban convencer a su madre de que ahora estaban juntos.
-¿Estás listo para decir que te acostaste conmigo?-la pregunta salió con tal veneno que casi se ahoga Sirius con su propia saliva, al menos eso no se la esperaba. Al parecer se divertiría más de lo que tenía planeado.
Ninguno desaprovecharía esa perfecta oportunidad para humillar al otro, o al menos eso estaba en los planes de Snape quien pensaba muy seriamente en pedir un auto por tener que soportarlo.
Cuando la tensión había bajado lo suficiente como para que ambos tratarán de relajarse en presencia del otro llego el correo. La carta estaba dirigida al señor Severus Black, cosa rara. Snape le arrancó el sobre a Sirius examinándola por cuidado, claramente había sido enviada desde el mundo mágico, pues había aparecido en el mueble a un lado de la puerta. Con mucho cuidado prosiguió a abrirla, rompió el sello de cera para que después se diera cuenta de su grave error.
La carta se leyó sola, dejándolos a ambos en estado de shock por el contenido.
Sr. Black.
Se solicita su presencia en el número 12 de Grimmauld Place, será el sábado a las 18:00 horas. Eviteme la pena de enviarle un vociferador cada hora en caso de no estar presente.
Atte: Walburga Black.
Psd: Sirius, se que estás allí, más te vale acompañarlo si no quieres que te mande a castrar de una vez por todas, con cariño tu madre.
Ambos se miraron sin estar muy seguros de lo que estaba pasando, pero una cosa era clara. Tenían que averiguar cómo es que se había enterado tan rápido la matriarca de los Black. Si fue una estafa en el mundo muggle ¿como es que lo sabían tan rápido en el mundo mágico?