Scott y Summer por Aikarysaur

Estaba muy cansado, se podía notar solo con verme la cara. Tenía unas ojeras demasiado grandes y mi cabello estaba más alborotado de lo normal, ¿la razón? Había faltado al instituto varios días porque me puse enfermo y claro, me puse enfermo en el momento ideal, justo cuando teníamos que hacer un trabajo muy importante.
 
Summer, mi mejor amiga, me avisó ayer de que tenía que hacer el trabajo, me puse ha hacerlo enseguida pero aun así terminé tarde. Muy tarde.
 
Pero mereció la pena, lo conseguí terminar a tiempo y a lo mejor con esta cara de cansancio le daba pena a Rebecca y me cuidaría un poco en clase. Era lo único que necesitaba para estar tranquilo y en paz, ella es la luz de mi vida, llevábamos saliendo ya 1 año y medio y ella era todo lo que necesitaba para ser feliz.
 
El caso es que ya casi había llegado al instituto cuando por el camino me encontré con Summer. No sabéis lo mucho que la aprecio, siempre me apoya, en lo bueno y en lo malo, por eso desde pequeños somos mejores amigos:
 
-Scotty, con esos pelos que llevas te pareces más a un León -dijo ella entre una pequeña risa-.
 
Ella, a parte de llamarme Scotty, me solía llamar León por mi "melena" y porque así me apodaban en el equipo de Baloncesto en el que jugaba:
 
-¿No te estarás convirtiendo en uno verdad? ¡Cuentame tu secreto Scotty!
 
-No tengo ningún secreto, aunque si quieres tener este pelo te aconsejo que te quedes hasta las 6 de la mañana haciendo un trabajo de Historia.
 
-¿Tanto te costó?
 
-Eh, no todos somos alumnos que sacan calificaciones tan buenas como tú -Summer, a pesar de parecer tan despista, desde pequeña sacaba notas muy altas, aunque no se esfuerce demasiado creo que cuando terminemos el ultimo curso seguramente consiga entrar a una universidad prestigiosa- y pensar que solo estudias un día antes de los exámenes...
 
Summer no pudo evitar reírse de mi comentario:
 
-Bueno, se podría decir que soy genial.
 
Decidí no responder a eso porque en una discusión contra ella no ganaría nunca a pesar de darle buenos argumentos, era muy cabezota:
 
-Por cierto, ¿estás mejor del resfriado?
 
-Sí, menos mal que me recuperé antes de que empezasen los exámenes.
 
-¡Perfecto! Entonces estás recuperado para jugar conmigo esta tarde, ¿vendrás verdad? ¡Di que sí!
 
¿Como decir que no a esa oferta?
 
-Pues claro que iré Summer.
 
-¡Bien! Hoy no está mi hermano, podremos jugar con sus videojuegos.
 
Me daba cierta envidia en ese sentido de tener un hermano, yo soy hijo único y la única familia que tengo es mi madre, soy muy feliz así aunque siempre he querido un hermano o hermana. Por suerte tengo a Summer que es como una hermana para mi.
 
No pasó mucho tiempo hasta que llegamos al recinto escolar, en la puerta nos estaba esperando Rebecca, nos dimos un pequeño beso a modo de "saludo" y nos fuimos los tres a nuestra clase como siempre. Había tenido mucha suerte de poder estar con ellas en la misma clase este año, años atrás nunca pude estar con Summer ni con Rebecca en el mismo aula. Se notaba que este año había tenido mucha suerte. Poco después de sentarnos, yo al lado de mi novia, entró la profesora de Literatura como todos los viernes a primera hora, antes de sentarse en su silla se puso a escribir algo en la pizarra, yo pensaba que escribiría algo relacionado con la materia, que equivocado estaba.
 
Conforme fue terminando de escribir yo murmuré lo que había escrito:
 
-Jacob...Bull.
 
-¿Jacob Bull? ¿Ese no es el hijo de Brad Bull?
 
Me sorprendió un poco que Rebecca me hubiese escuchado pero de todos modos no tenía ni idea de lo que me hablaba:
 
-¿Brad Bull?
 
-¿No sabes quien es? Ese hombre es multimillonario, dicen que hizo su fortuna...no muy limpiamente
 
¿No muy limpiamente? ¿Es que acaso ese hombre es un mafioso o algo así?
 
No pudimos hablar más del tema porque la profesora había comenzado con la explicación de porqué ese nombre en el encerado:
 
-Me complace anunciar que hoy llega a nuestra institución Jacob Bull, concretamente se quedará en esta aula el resto del curso, espero que lo traten bien.
 
Nada más decir esto la puerta se abrió y entró un chico bastante alto de nuestra edad, no le presté mucha atención, era como cualquier chico de mi edad:
 
-Hola, soy Jacob, espero llevarme bien con todos
 
Miré a mi al rededor y parecía que todas las chicas no dejaban de mirarle, incluso Summer. No entendía porqué, decidí mirarle más detenidamente y entonces entendí el motivo.
 
Él a primera vista podría parecerse a cualquiera pero cada rasgo de su rostro era más bello que el anterior, su pelo era un poco largo pero era de un color castaño casi pelirrojo, sus cejas tenían la forma perfecta para su cara, sus ojos eran azules como un par de zafiros y sus labios parecían suaves.
 
Es decir, es todo lo contrario a mi, ni siquiera me había afeitado como es debido esta mañana y él tenía una piel que parecía de porcelana.
 
Pasaron rápidas todas las horas de clase, no volví a fijarme en Jacob, cuando por fin se terminaron Rebecca se acercó un poco, me abrazó y yo le devolví el abrazo:
 
-¿Tienes algo que hacer este fin de semana?
 
Me dijo ella casi entre susurros:
 
-Bueno...mañana tengo entrenamiento pero el domingo lo tengo entero para la cosita más bonita de este mundo.
 
Rebecca no pudo evitar sonreír por mi comentario y me dio un beso en la mejilla antes de decirme que el domingo le venía bien para estar juntos.
 
Ella y yo recogimos nuestras cosas y nos fuimos de la mano hasta la entrado donde nos esperaba Summer, como ella iba al conservatorio las ultimas horas iba al aula de Música a practicar. Los tres nos fuimos cada uno a casa, primero se fue Summer, que era la que vivía más cerca del instituto y luego acompañé a Rebecca a casa aunque tuviese que dar un gran rodeo para ir me daba igual, haría cualquier cosa por ella. 
 
Como siempre llegué un poco tarde a casa pero por suerte mi madre me dejaba la comida en el microondas para que no se enfriase y la calentase un poco antes de comérmela, en lo que termina de hacerse fui a mi cuarto a dejar la mochila y de paso ver si tenía muchos deberes que hacer, no era demasiado y lo terminaría pronto. 
 
Se terminó de hacer la comida y mientras comía hice poco a poco los ejercicios, no sé como no manche nada pero en fin, nada más terminar ambas cosas me quedé tumbado en mi cama mirando al techo, se podía notar mi aburrimiento a kilómetros. Decidí mirar un poco mi teléfono para ver si había algo interesante que ver en YouTube o si en Instagram había alguna foto bonita, no sé porqué se me ocurrió buscar al chico del instituto en Instagram:
 
-Ja...cob...Bull
 
Iba diciendo el nombre conforme lo tecleaba en la pantalla, tuve mucha suerte creo yo, nada más buscarlo el único perfil que había ahí era precisamente del Jacob Bull de mi instituto. Como no tenía nada que hacer me puse a ver sus fotos, tenía muchos followers y con mucha razón, algunas de sus fotos con más likes eran de él sin camiseta, seguramente la mayoría serían mujeres. Era el típico perfil de un chico de mi edad, pero una foto me llamó la atención, era una foto de él de espaldas a la cámara y se veía como tenía tatuado algo en un brazo, no supe reconocer que era en ese momento.
 
Con la tontería de "espiarle" el Instagram ya había pasado 1 hora y ya era por la tarde, como necesitaba moverme un poco decidí salir un rato de casa. No es que fuese a un lugar en especial, solo quería pasear un poco pero instantáneamente me dirigí al parque donde normalmente juego al baloncesto en mis ratos libres y, claro, no me pareció malo jugar un poco.
 
Simplemente empecé a encestar una tras otra hasta que empecé a jugar un poco más en serio y cada vez encestar se hacía más difícil, al final acabé sudando del ejercicio que estaba haciendo, no quería forzarme tanto para mañana estar al 100% en el entrenamiento. Encesté un par de tiros más y ahí terminé mi "pequeño entrenamiento", nada más terminar me sorprendió un sonido de no muy lejos, un poco extrañado me giré para ver que era y resulta que el chico nuevo estaba ahí, de pie, aplaudiéndome.
 
Me quedé de piedra.
 
No sabía que me estaba mirando:
 
-¡Juegas muy bien! ¡Ha sido increíble!
 
Definitivamente me quedé de piedra. Y más cuando se fue acercando a mi mientras me hablaba:
 
-¿Tú eres de mi clase verdad? ¿Como te llamas? Yo me llamo Jacob, pero bueno eso seguro que ya lo sabes de esta mañana -dijo con una sonrisa muy amable de su parte- ¿Juegas en algún equipo? Yo jugaba en uno en mi antiguo colegio, pero no era muy bueno -terminó de decir riéndose un poco-.
 
Yo no sabía que contestar a tantas preguntas, todavía seguía un poco en shock por esta situación:
 
-Me llamo...Scott, Scott Leok.
 
Conseguí decir eso por fin, fue a lo único que le respondí pero él parecía satisfecho:
 
-Pues encantado de conocerte Scott.
 
-Igualmente.
 
Mi tono era un poco seco pero Jacob no dejó de sonreírme en ningún momento:
 
-Bueno Scott no tengo mucho tiempo ahora mismo porque tengo que volver a casa, pero ya hablaremos en clase, si te parece bien claro.
 
-Eh si me parece bien
 
-¡Estupendo! Nos vemos en clase Scotty.
 
Scotty...así solo me llamaba Summer, pero dicho por él me sonaba mucho más... Dulce por decirlo así.
 
Mientras yo me quedaba perdido en mis pensamientos Jacob ya se había ido.
 
Lo único que me sacó de mis pensamientos fue que miré la hora un momento en mi teléfono:
 
-¡Mierda! ¡Son las 7 y había quedado con Summer! Me va a matar...
 
Nada más entrar en Whatsapp vi que en el chat de Summer tenía como 30 mensajes todos preguntando donde estaba. 
 
Espero que se me ocurra alguna excusa creíble para mañana...